"Este fic participa en el Reto Especial: ¡Festival de Primavera! Del foro La Torre Stark".

ADVERTENCIA: SPOILERS DE AVENGERS ENDGAME

Género: Angustia.

Prompt: "Está bien. Lo entiendo, puedes irte. Todos lo hacen".

Número de palabras: 763

Disclamer: Fic hechos sin fines de lucro. Los personajes son propiedad de sus respectivos autores.


Una luz amarilla, quizás de un cometa, ilumina el rostro de Tony, queriendo que abra sus ojos. Parpadea, tratando de quitar la molestia. El destello se queda fijo, quizás la famosa frase "sigue la luz" significa que ya está muerto.

—Vamos Tony, que nadie diga que tienes miedo…—piensa y abre los ojos, esperando ver cualquier cosa, menos una mujer flotante, rubia, con ojos y cuerpo brillantes.

Quizás venga a matarlo o a salvarlo. Y en cuanto la nave empieza a moverse, anhela que no sea una enemiga.

Todo es irreal, el espacio pasa con tanta rapidez que se siente mareado y a punto de vomitar; la cabeza duele, como miles de agujas clavadas en su cráneo; su ser está débil, sin músculos, sólo huesos con una embarrada de piel, la boca completamente seca, y los ojos sumidos y ojerosos. El hombre que se ve ahí, es lo que queda de una lucha llena de adrenalina, esperanza, y un terrible golpe de realidad…no es suficiente para proteger a los que quieres, sin justicia.

Cuando llegan a la Tierra, al complejo, obliga a sus piernas a moverse, a levantarse, esperando salir de esa nave que solo trae recuerdos desoladores, una derrota con un exceso de peso. No puede, así que Nebula, quien lo mantuvo cuerdo, lo ayuda colocando una mano en su cintura y otra sobre sus hombros.

La escotilla se abre, el viento golpea su rostro, tan fresco y delicioso como nunca le pareció, trata de adecuarse a la oscuridad del jardín y a la luz intensa, un poco lejos, proveniente del edificio.

Trata de caminar deprisa, tiene que encontrarse con alguien; sentir su calidez, su aroma, la suavidad de su piel, recorrer con sus dedos el largo de su cabello.

—Pepper… —pronuncia lento, los ojos se le nublan.

Se aleja de Nebula, empieza a correr, lo mejor que puede; la planta de sus pies le arde por el esfuerzo, lo ignora.

Chocan en un abrazo. Lleno de ansiedad, posesividad, sus dedos se enredan en su cabello que al recorrerlo le parece corto, su figura también ha cambiado, es más pequeño y se acopla al suyo de forma diferente.

—Tony…

Escucha su voz y un calosfrió recorre todo su cuerpo, una fuerte sensación de pérdida lo embarga.

—Tony, vamos adentro…

Deja de respirar, no quiere abrir los ojos, así que sólo acierta a apretar con fiereza.

—¿Dónde está? —alcanza a cuestionar.

Steve, consternado, coloca una mano en su hombro.

—Lo lamento, la señorita Potts…

—Cállate —le ordena, sus piernas tiemblan y deja caer todo su peso en Natasha, que lo sostiene con firmeza, en sus condiciones no es pesado.

Natasha y Steve se miran, ambos con la aflicción impregnada en sus rostros.

Tony cierra sus sentidos, su gran deseo por reencontrarse con Pepper lo engañó, le dio falsas esperanzas. Una ira creciente en su pecho surge, ira en contra del destino.

Destino que le está cobrando las miles de vidas que perjudicó con la venta de sus armas; la creación de Ultrón y las muertes de inocentes; la guerra contra sus amigos y compañeros; y su fracaso contra Thanos.

Ni siquiera siente cuando Natasha y Steve lo sostienen y lo llevan dentro del complejo.

Tony sólo se suelta de ambos vengadores, cae de rodillas en las baldosas frías, despertando de su letargo, miles de imágenes se ciernen sobre él, le consumen el alma.

¡Está bien! —reclama—¡Está bien! He comprendido, pretendes castigarme, hacer de mi vida un infierno, lo único que te pedía era estar con ella, una oportunidad para amar a alguien que de verdad me aceptaba, con todo y mis errores.

Golpea tan fuerte como puede, queriendo más dolor, ver más sangre en sus nudillos.

Steve intenta detenerlo, Natasha niega y ambos dan varios pasos atrás.

¡Lo entiendo! No soy digno de ser considerado, ¡Maldito destino! ¡Bastardo! ¡Bastardo! —despotrica con todas sus fuerzas, su alma sigue incendiándose. Trata de negarle el paso a las lágrimas, parar el maldito dolor que le aplasta los pulmones y obstaculiza la respiración.

¡Puedes irte! ¡Lárgate!— todo ha salido en ese grito, su energía se drena con facilidad.

Inhala y exhala hondamente, durante minutos, mientras se recuesta y mira el techo…

Todos lo hacen…—no puede exigirle más a su humanidad.

Natasha se acerca, se arrodilla, toma su cabeza y la coloca en su regazo.

Se miran, ella limpia con el dorso de su mano sus lágrimas.

Él cierra sus ojos, quiere descansar y convencerse que sigue en la nave, que nada de esto es real, pero lo es.

—Cuando me quede dormido –repite internamente el mensaje que le dejó a Pepper—, soñaré contigo—lanza un suspiro—. Siempre eres tú…


Nota de la autora:

Espero les haya gustado y muchas gracias por leer.

Me agrada que Tony haya podido tener a su familia y al final no dudó en ser un gran héroe. Pero quise explorar la posibilidad de: ¿Qué hubiera pasado si Pepper también fuera afectada por el chasquido de Thanos? Y surgió esto: los sentimientos de Stark.