Los personajes no me pertenecen, solo la historia :)

Ok! este es mi primer fic, asi que tenganme un poco de pasiencia :)

Advertencia: Este fic no se trata precisamente de Shizuru y Natsuki pero si tiene mucho que ver n_n


Prologo

Esta es una típica historia medieval sobre la hermosa princesa y el noble caballero que trata de rescatarla del déspota, malvado o como decidan llamarlo. En lo personal esta historia es sobre las estupideces que cometí por ella, he incluso ahora, no sé por qué las hice; pero empezaré a narrar como paso.

¿Quién iba a pensar que ese día cambiarían mi vida?, por supuesto no fue de momento, pero este día es la clave de todos los problemas que pase, y del porque mi cambio abrupto de la tranquila rutina de mi vida a los diecisiete años. Sé que se escucha muy serio, ese día solo tenía siete años y no reflexioné bien las cosas, ¿Qué niño lo haría? Ahora que lo pienso también fue mi culpa lo que pase, ya que siempre he tenido la mala costumbre de proteger a los que necesitan mi ayuda y dado que estoy en un mundo en donde los caballeros de brillante armadura son precisamente hombres, como mujer, siempre me estoy metiendo en líos.

Ese día iba caminando hacia la casa de los abuelos por el bosque tranquilamente; bueno a quien engaño; la verdad que iba toda adolorida porque los niños del poblado siempre me golpean, porque ellos molestan a las niñas y yo las protegía, pero siempre los golpeo a ellos también, ¡Shi!...yo no tengo la culpa de que sean débiles estos mocosos; igual ellos terminaron peor que yo. Y para empeorar la situación visto como hombre para poder ayudar a ollisan con su trabajo.

Al aproximarme a la casa, vi a una hermosa niña de cabello castaño parada en la orilla de un acantilado mirando hacia el infinito, tenía más o menos mi edad, pero aun así su rostro reflejaba una gran tristeza, estaba peor que el mío y eso que me habían aporreado. En fin, me quede mirándola, el tiempo parecía detenerse, de pronto vi que dio un paso al vacío, en ese momento le grite que esperara y corrí hacia ella.

Al acercarme vi como desapareció de mi vista ante un parpadeo; lo único que hice como toda una niña valiente fue cerrar los ojos y estirar mi mano hacia abajo, hasta salieron algunas lágrimas. Cuando abrí mis ojos, no solo me di cuenta que había pegado toda la cara contra el suelo, sino que mi mano sostenía algo muy pesado. Al asomarme por la orilla tenía la mano de aquella niña.

En ese momento ella abrió sus grandes y hermosos ojos rubí que jamás había visto antes, pero que por alguna razón me parecían familiares; sentía que ella estaba asombrada de que alguien la salvara o eso creo, nunca lo sabré; al verla fijamente sentí un aura de tristeza en lo más profundo de su mirada. Aun así le pregunte.

– "¿qué diablos está haciendo?" – aclarando, no recuerdo que dijera eso exactamente, ya que a esa edad no creo haber tenido el vocabulario de marinero que tengo ahora; pero recuerdo que estaba asustada y de los diablos, así que eso es lo que sentía. Después de que con gran esfuerzo logre subirla, recuerden que tenía siete años y ella la misma edad, sinceramente no sé cómo logre sostenerla y un más subirla. Le volví a preguntar.

– "¿Por qué hiciste eso?... ¿No ves que podías morir?" –Soy un genio con esas preguntas.

– "A nadie le importaría"–Que seria y espeluznante lo dijo.

–"¡No digas tonterías! Todos tenemos a alguien importante en nuestras vidas, aun cuando esta sea difícil" – ¡Genial! Ahora me está viendo como si hablara en otro idioma. –"Así que si mueres esa persona estará triste".

–"Yo no tengo a nadie; mi madre ha muerto y mi padre me odia"Ya veo porque lo hizo, puedo entenderla.

–"Hace cuatro años que también perdí a mis padres"– Soy yo la que se va a deprimir si sigo contando lo de mis padres–"Pero los abuelos me encontraron y me cuidaron; a pesar de que no son mis verdaderos abuelos estoy feliz con ellos".

–"Pero yo… ya no tengo a nadie que me cuide"Moh... que niña más deprimente…YA SE!

–"ENTONCES, ¡YO TE CUIDARE!".Lo dije con una sonrisa aunque no sé lo que pasa por la mente de esta pequeña, ya que dudó un momento pero en cuanto me miro sonrió de una manera que nunca había visto, su rostro se ilumino tanto y es tan hermosa, que creo estar ante una diosa. De pronto su rostro pasó de ser feliz a estar preocupado.

–"¿Porque estas tan golpeada?" – Shi! Pensé que no lo notaria pero es muy obvio.

–"Los niños del poblado siempre me golpean porque siempre estoy protegiendo a las niñas"

–"¿Y por qué no dejas de parecer uno para que ya no te molesten?, además los hombres siempre lastimaran a las mujeres…Los odio tanto "–Eso sonó muy duro para una niña de siete años, además lo dice con tanto desprecio, ¿qué le habrá sucedido?

–"Porque los abuelos me dicen que está bien ser uno mismo y que uno debe proteger a quien lo necesite." – ¿Ahora que ve?–"¿Qué pasa?"

–"Tu mano está sangrando" – ¡Ara! No me di cuenta.

–"No es nada, la herida debió abrirse cuando te sostuve"

En ese momento vi que se metió la mano en su vestido y saco un pañuelo, se acercó hacia mí, limpio mi cara y luego tomo mi mano. Yo no sabía qué hacer, una hermosa niña estaba muy cerca y tras de eso vendando mi herida con el pañuelo. Me sentía extraña, la única que siempre curaba mis heridas en ese entonces era obaasan, jamás había tenido este sentimiento.

Luego quede como idiota viendo mi mano vendada por el elegante pañuelo, y fue en ese momento que me di cuenta de algo que aun hoy no sé cómo había ignorado todo ese tiempo. No solo el pañuelo era elegante, sino que toda su ropa también lo era; pero además se veía muy costosa; tanto que solo el conjunto podía comprar mi vida. Esa conclusión me llevo a querer preguntarle quien carajo era.

–"¡Eto!... ¿Cuál es tu nombre?"Si obaasan me escucha me reprendería porque siempre dice que yo debo decir mi nombre primero.

La niña abrió sus labios para responderme, pero en ese momento unos caballos destruyeron la tranquilidad de ese bosque. Cuando llegaron a nosotras unos hombres en armadura me empujaron lejos de ella y se la llevaron dejándome solo con su pañuelo en mi mano.

No debí sorprenderme puesto que parecía sacada de una pintura de ensueño, digo que era hermosa, elegante, educada y bien vestida. Lo que me preguntaba en ese momento era ¿Quién coño era?, si era hija de algún rey o terrateniente; ¿de quién era? ¿Qué hacía en ese lugar, aparte de querer suicidarse? o más bien ¿Cómo se escapó y llego a ese lugar? y después de quedarme sin más preguntas empecé a sentirme mal porque yo le había prometido que la protegería y yo jamás rompo una promesa. Claro que cuando la hice pensé que era una niña del poblado.

Siempre me arrepentí que por tantos años rompí esa promesa, y aún más, sabiendo que desde ese día ella siempre espero a que fuera a salvarla…