¿Quién eres?
¡Hola! Aquí Free Butterfly, después de mucho tiempo de letargo
¡Uah, mi primer fic de Bleach! ¡Nada más y nada menos que HitsuHina! Aunque sea un drabble (está decidido que no soy capaz de acabar nada sin que sea de un solo capitulo… xD), espero que os guste Es un poco triste (simplemente no acaba bien xD) y está fatal, pero al menos espero que os ayude a pasar el rato uwuU ¡Reviews, ni que sea para decir que es un asco, onegai! xD
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Había despertado.
El rumor corrió por todo el sereitei como agua que se deja fluir, aunque unos que otros no le daban la mas mínima importancia. Ése no era el caso para el capitán de la décima división, que fue uno de los primeros en enterarse gracias a la capitana Unohana. Lo único que se le ocurrió al recibir la supuesta "agradable" noticia fue correr hacia el hospital del cuarto escuadrón.
Abrió la puerta con cuidado, como si con el más mínimo suspiro fuera a salir volando. Antes de entrar echó una ojeada en el interior, y allí la vio. El cuerpo, al que parecían haberle quitado el alma durante meses, yacía en la cama del centro de la sala, como si nunca hubiera despertado.
Se acercó y se sentó en una silla a su lado. Temiendo a que no fuera verdad, a que simplemente siguiera dormida para la eternidad, la observó durante unos minutos, aunque le había parecido una vida entera.
Finalmente se decidió a cogerle la mano, e intentar despertarla con suaves palabras:
-Hinamori… Hinamori, despierta. He venido a verte…
Se asustó. No había indicios de que se despertara. ¿Acaso no despertaría jamás? ¿No podría volver a ver esos ojos que le miraban alegres y volver a escuchar su voz, llamándole Shiro-chan? Mientras todos esos pensamientos se acumulaban en su mente, notó un ligero movimiento debajo de su mano. Se había movido. Estaba abriendo los ojos una vez más.
-Hina… ¿mori? – Le llamó, intentando que le mirara.
Ésta giró la cabeza hacia él, mirándolo fijamente. El corazón de Toushiro dio un brinco, por fin la espera había valido la pena. Por fin podía volver a estar con su querida Hinamori. Le quería decir un montón de cosas, quería abrazarla, quería volver a pasar tiempo con ella, quería volver a estar junto a ella, quería… Pero antes de que pudiera decir una sola palabra, ella, por fin, habló:
-… ¿Quién eres? – Esas fueron las únicas palabras que salían de la boca de la débil chica.
Hitsugaya abrió los ojos, sorprendido y confundido a la vez. ¿Qué estaba diciendo? Debía ser una broma… ¿Cómo preguntaba quien era él?
-Momo… ¿Qué dices? Soy yo, Hitsugaya… - Decía con voz temblorosa, mientras forzaba una sonrisa, a la vez que intentaba alejar esas ideas de su mente. La chica volvió a abrir la boca, pronunciando las mismas palabras, mientras lo miraba con indiferencia:
-… ¿Quién eres? No te conozco…
No podía ser. ¿Hinamori se había olvidado… de él? Pero que diantre… ¿¡Había perdido la memoria en estos meses de estar dormida!? El chico estaba a punto de entrar en pánico… Pero al verla despierta, que le miraba, que no dormía… Lo único que le importaba es que estaba bien, aunque no tuviera ningún recuerdo acerca del capitán. Así que sin más se levanto y se dirigió a la puerta, pronunciando las últimas palabras:
-Perdona… Sigue descansando, no te molestaré más.
Y salió de la habitación, dejando a la chica sola.
-Gomen, Shiro-chan… - La voz de la chica rompió el silencio de la habitación, mientras le salían lágrimas, muchas lágrimas. – Pero no quiero que vuelvas a estar en peligro por mi culpa… Será lo mejor… para los dos…
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¿Qué, os ha gustado? Espero que si Uah, como he podido crear semejante final… TT Recuerden, reviews ;3