Comentarios de la autora: Este es el primer fanfic que escribo y espero que les guste.

Todo lo que está ente comillas "" son pensamientos.

Jeje disfrutenlo

Y si quieren me dejan reviews para decirme como quieren que continúe, aunque la historia ya esta hecha podría agregar los detalles que quieran.

además quisiera agregar que acabo de arreglar el primer capitulo, para aquellos que ya lo habían leido.

Prólogo

El tiempo pasa volando, quien podría decir que ya ha pasado una semana desde que me case con mi niña Kaoru. Aunque somos una pareja un poco extraña, yo un joven de 28 años pelirrojo de ojos azules, aunque soy bajito también soy bastante fuerte, aunque prefiero no usar mucho mi fuerza. Pese a que por dentro puedo llegar a tener un carácter fuerte y emociones cambiantes en el exterior me veo paciente y estable, supongo que esos rasgos se adquieren en la guerra. Mi esposa Kaoru Kamiya es una joven de 18 años de edad, de pelo negro ojos negros y figura esbelta, es realmente bastante fuerte y es la profesora del Kamiya Kashin Ryu, tiene unos ideales hermosos los cuales quiero que algún día sean reales para todos, lucha por la espada que protege la vida. Ella tiene un carácter más explosivo que el mío siempre dice lo que piensa y lucha por lo que quiere, tiene muy poca paciencia pero es muy buena. Siempre se preocupa por todos y siempre esta a mi lado para apoyarme, por eso la quiero mucho. Ella es la primera persona a la que nunca le importo mi pasado, no le importo que yo fuera un asesino y me brindo algo que llevaba más de 10 años sin tener, un hogar y una familia. Aunque somos una familia bastante extraña. Pese a que estoy muy feliz me gustaría que el resto de mi familia pudiera compartir esto conmigo, ojala supiera donde esta lo que queda de mi antigua familia.

Sueños del pasado

"Hoy una persona escribió en un papel el nombre de aquel que va a desaparecer del mundo de los vivos, es como jugar a ser Dios y los hitokiris somos los demonios que buscan a aquellos que hicieron el mal para desaparecerlos de la faz de la tierra. Así inicia la rutina, una noche oscura, un objetivo y muchos involucrados. Lo que me molesta son los involucrados, mucos de ellos sólo estaban allí por accidente, pero no puedo dejarlos vivos, no puedo dejar testigos. ¡Vamos Battousai deja de pensar en tonterías y vamos a trabajar! Está es la dirección, si aquí es. Risa fría si definitivamente es la casa con más guardias en toda la zona. Iniciemos el movimiento…" adopte la postura battou y me acerque a toda velocidad con el ítem mitsurugi en sólo 2 golpes me deshice de los guardias y me dispuse a entrar. "es ese hombre, el que tiene cara de asustado. ¡Que imbecíl tiene a su mujer aquí! Con lo poco que me gusta matar mujeres." En un fuerte destello cae una mujer de cabellos marrones y esbelta figura, brinque y aparecí justo en la cabeza de mi objetivo Shindou Seta le atravesé mi catana en la traquea, "una respiración, creí haber terminado ya con mi trabajo, viene de allá abajo" baje la vista hasta que vi un niño inmóvil, un niño realmente muy extraño, pese lo que acababa de presenciar no demostraba emoción alguna, sólo podía leer la sorpresa en su mirada. "¿Qué le pasa a este niño? si al menos hiciera algo todo sería más fácil, ¿Qué hago? ¿Lo mato o…?"

¡KENSHIN!.... KENSHIN…

-¿Kaoru qué sucede? ¿Por qué tantos gritos? Pregunte sobresaltado.

- Kenshin me preocupé por ti. Te revolvías mucho mientras dormías, parecía que tuvieras un mal sueño.

-Hay Kaoru no te preocupes estaba soñando con mi pasado. "Kaoru siempre se preocupa por mi."

Así inicio un día común en la vida de los habitantes del dojo Kamiya Kashin, Kaoru como siempre debía hacer los viernes salía a trabajar como ayudante del maestro de kendo en la escuela vecina, mientras tanto yo permanecía en casa ocupando de los quehaceres del hogar como lavar las ropas y hacer la comida. Yahico se esforzaba por entrenar un poco mientras esperaba la hora de su clase y Sano probablemente llegaría a la hora del almuerzo. Hoy yo andaba bastante pensativo y callado, "¿Por qué esos sueños? ¿Por qué soñar con algo que sucedió hace tantos años?" era lo que pasaba por mi mente una y otra vez mientras trabajaba.

Esa noche cuando Kaoru llegó al dojo yo aún mantenía la esperanza de poder pasar una noche tranquila con mi esposa, pero al parecer hoy no iba a poder. Sólo unos minutos después de la llegada de Kaoru se presentaron nuestros amigos incluso el frío Aoshi unto a todo el Oniwabanshu de Kyoto y mi maestro Hiko, trajeron mucho Sake y empezaron una ruidosa fiesta. "¿Cómo pueden tomar tanto Sake? Entiendo al maestro ¿pero los demás también son así de alcohólicos? Kaoru y yo esperamos unos minutos luego del inicio de la fiesta para disculparnos y retirarnos a nuestra habitación, donde podíamos estar en toda la paz que nos permitía la celebración afuera.

Kaoru tuvo que ir al baño así que la espere calmadamente en la habitación. Cuando volvió ya yo tenia preparados los dos futon y la esperaba de pies cerca de ala puerta. Espere pacientemente a que cerrara la puerta.

-Kaoru-dono ven acá por favor. Le susurre con un tono un poco pícaro.

-Kenshin no me llames con tanta formalidad que soy tu esposa, me dijo mientras se me acercaba.

-no puedo evitarlo Kaoru-dono dije pausadamente mientras la encerraba en mis brazos. Baje una mano a su barbilla para levantársela y besarla como no la había besado nuca, la bese con mucha insistencia pero en verdad la necesitaba, necesitaba sentirla y saber que era mía. Baje los brazos a su espalda y la pegue más a mi, poco a poco la fue moviendo a la cama donde nos sentamos a hablar, "esta un poco asustada, recuerda que para ella es su primera vez así que debo ir con calma". Mientras hablábamos de vez en cuando me acercaba a rozar sus labios hasta que puede atraparla entre mis brazos y besos. Mientras besaba su cuello, poco a poco me iba inclinando sobre ella, una vez recostada levante la cabeza para verla y acerque mi mano a su mejilla para…

¡¡¡¡¡¡BOOOOOOOOOOOMMMMM!!!!!!! ¡¡¡¡¡AAAAAAAAHHHHHHHHH!!!!!

Me senté rápido desconcertado tratando de buscar el origen del sonido. Pronto su mirada cambio de reflejar amor a preocupación.

-Ken…Kenshin que su…sucede… dijo mientras trataba de recuperar la compostura.

-no lo se, conteste –pero viene de afuera.

-Vamos hay que averiguar que sucede. Dije ya bastante preocupado.

Rápidamente salimos de la habitación, afuera nos encontramos con todo el mundo portando el arma más cercana que encontraron, solo el calculador de Aoshi portaba sus kodachis. Dirigí mi mirada al causante del estruendo, una persona encapuchada con una espada estaba en la habitación en una posición agresiva.

Un poco más a la izquierda escuche el ruido de espadas al voltearme vi a Aoshi peleando contra otro hombre encapuchado. El primer encapuchado que al parecer estaba buscando a su objetivo dijo con una voz fría;

-El que no quiera morir no interfiera en mi objetivo…

Yo no dude en esas palabras, no tenía voz de principiante. Ese hombre era un asesino, un hitokiris como lo fui yo, ese hombre no va a dudar en matarnos a ninguno.