PRÓLOGO
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Era una noche, tan pero tan oscura que no podrías ver ni tus manos aunque las pusieran frente suyo
Acompañado de unos fuertes vendavales de viento helado junto con copos de nieve, junto con las hojas de los árboles que estaban el lugar
Pero a tan solo a unos metros de hay, se podía divisar una especie de edificación, oculta entre los árboles, lo cual era casi un milagro que pudieras verla
Podemos ver una choza de madera de pino algo deteriorada, tenía un techo en forma de pirámide, estabas hecho de pequeñas ramas o troncos medianos apilados entre sí, haciendo una cobertura perfecta, además de que tenía un poco de heno en algunas aberturas, para evitar que se filtre el agua
Si forma era simple cuadrada del todo, con los troncos más gruesos como base de esta, también asomándose un poco de heno o hiervas con arcilla, tapando cualquier fisura posible
Tiene un pequeño porche, con techo y suelo hechos de la misma madera, solo que con una mecedora a un costado
Pero vemos cómo lentamente la puerta que estaba hecha de corteza y madera de algún árbol viejo de abría, dejando ver el interior
El interior en sí, se veía acogedor para uno
Del lado derecho había una cama sencilla, con una montura metálica algo oxidada por los años, el colchón de esta también se veía que ya tenía mucho tiempo hay
Sin sábanas o almohadas, eso era lo único que la hacía parecer una cama
Del lado izquierdo estaba una estantería colgando, era evidente que estaba hecha de materiales aceros, junto con las vasijas que se alcanzaban a ver, debido a que una de sus puertas estaba poco por no decir nada a caerse
Pero todo esto era iluminado por una chimenea de acero antigua, la cual tenía una tubería del mismo material, la cual guiaba hacia la pared detrás de esta para que pueda salir el humo y enseguida de esta estaba una pila de troncos cortados para ser el combustible de esta Enfrente de la chimenea, estaba una mecedora de madera vieja
Sentado en ella estaba lo que parecía ser una especie de caballo o pony, no se sabía bien por su estatura Se que parece una locura pero era cierto lo que veían, era viejo cual anciano de unos 80 años, su pile era de un tono pálido de color gris, su crin era lacia al igual que su larga barba blanca que llegaba hasta el suelo, junto con sus ojos violeta, que reflejaban nada más que aburrimiento
Estaba cobijado con lo que parecían ser sábanas y mantas que eran de la cama, y en el respaldo superior estaba su almohada, meciéndose al compás del crujido que generaba la madera al ser quemada frente suyo, con la mirada neutra mirando a aparentemente nada más que el suelo
Después de unos minutos de contemplar la nada, el anciano volteó su vista hacia ti, mirándote de reojo para volver a mirar a la nada
Pero viste como el vejete, ponía una suave sonrisa en su abrigado rostro
-Vaya, no esperaba tener visitas en estas fechas jeje-
decía divertido, su tono de vos era áspero y seco, pero se notaba que ya sabía que vendrías
-Adelante, pasa pasa- mientras hacía un gesto con uno de sus cascos delanteros invitándote a pasar
Podías ver al viejo de frente tuyo, y ahora que lo mirabas bien, pudiste observar que tenía un libro grande y grueso entre sus pesuñas
El anciano vio esto, a lo cual amplió un poco su sonrisa
-Bueno, si no es molestia preguntar, ¿a que se debe tu visita joven?, y ver si este viejo pony puede ayudarte jeje-
Tu vista solo se enfocó en el libro que tenia, tratando de poder ver siquiera el título
-Ho, ¿quieres esto he?-
El anciano movió sus pesuñas, sacando el libro de entre sus mantas mostrándolo al fin
Era un libro bastante grueso la verdad, pero parecía afectarle poco al anciano, la portada de este estaba algo deteriorada por el tiempo quizás, estaba hecha de lo que parecía piedra o obsidiana ya que es de color negro, pero se distinguían los extraños grabados en esta, los culés estaban tallados de tal forma que formaban una especie de círculo, y en el medio de este, estaba grabado la cabeza de un sabueso, con los ojos rojo brillante en forma de un relámpago
-Je verás, este no es un libro cualquiera-
El anciano lo acomodó en su regazo, dejándote contemplarlo por completo
-Este es el libro de una historia, del pony más fuerte-
Mientras él pasaba una pesuña sobre la portada, como si acariciara una especie de animal
-El más temerario, despiadado y valiente de ellos...el cual ha sido capaz de lograr grandes hazañas que ni te imaginas chico-
Después te miro fijamente a los ojos, como si leyera tu alma o algo así
-Noto curiosidad en tu mirada, me imagino que ya te estás preguntando "¿Cuáles fueron esas hazañas?, ¿Qué era lo que lo hacía especial?, ¿Este viejo dejara de hablar solo y me contara esa historia?"-
El anciano soltó una risilla por su propio comentario, pero después te miro fijamente otra ves
-Bueno, como se nota tus ansias por saber de su historia, empecemos de una buena ves, ¿si?-
El viejo acomodo el libro en su regazo, para posteriormente abrirlo lentamente, pero mientras lo hacía podías escuchar como una especie de gruñido de algún tipo de bestia, no se veía la fuente de dicho sonido, solo estaban el anciano, tu y..
El libro
-Je Je, te dije que no era cualquier libro-
Dijo divertido, para después entonar su garganta para acomodar su voz
-Bueno, antes de comenzar con esta historia, déjame decirte que esta historia no se trata del típico héroe princeso en armadura dorada que rescata a la princesa de la Torre...no mi amigo, esta historia trata de un niño al que le quitaron la inocencia...creció en un mundo en el cual ocultó todo su odio, rencor e ira hacia todos lo que lo molestaban...que después de pasar por esa mierda de vida, le dieron una segunda oportunidad de vivir otra ves, en un mundo en el que parecía no necesitarlo... pero la verdad era que lo necesitaba más que nunca-
Mientras decía eso, su voz adquiría una tonada más oscura conforme pronunciaba sus palabras
-Prepárate para escuchar la historia... Del BERSERKER DE ECUESTRIA-
FIN
