Las tantas de la noche.
"Afuera, la lluvia seguía cayendo y los relámpagos seguían aturdiéndome"
Las diez de la noche. Afuera, la lluvia seguía cayendo y los relámpagos seguían aturdiéndome. "Ding dong". Sonó el timbre. Baje las escaleras y mire la puerta ¡Estaba abierta!
-¿Quién es?- Dije pero nadie respondió. Voltee al sentir que alguien respiraba en mi cuello.- Natsu- Estaba aliviada de que solo haya sido mi juguetón amigo.
-Hola, Luce. Me acorde que tu papa no estaba y que te dan miedo las tormentas, así que decidí venir a jugar.- Suspire.
-Idiota, no me dan miedo las tormentas, solo los rayos. Además ¿Por qué entraste así?- El rio de esa forma tan suya.
-Quería darte una sorpresa. – Le pegue en la cabeza.
-Idiota.- Fuimos subiendo por las escaleras hasta llegar a mi habitación. Me senté en mi cama y el, en el piso. Las diez y veinte. Afuera, la lluvia seguía cayendo, los relámpagos seguían aturdiéndome y Natsu me miraba fijamente. Me perdí en mi pensamiento hasta que escuche un "¡Boo!" De parte de Natsu.
-No seas idiota, por favor- El seguía riendo. Volví a mirar el reloj, las diez y media. Afuera, la lluvia seguía cayendo, los relámpagos seguían aturdiéndome y Natsu solo reía.
-Lucy, no seas aburrida.- La actitud infantil de Natsu me encantaba, pero en este momento, me estaba fastidiando. Las diez y treinta y cinco. Afuera, la lluvia seguía cayendo, los relámpagos seguían aturdiéndome y Natsu bromeaba.
-No soy aburrida. Solo no soy infantil.- Dije de manera fría.
-Yo tampoco soy infantil.- Natsu hizo un puchero.- Nee, Luce. Veamos una película ¿Si?- Lo mire.
-Está bien.- Fue todo lo que dije.
-Lucy- Me llamo serio Natsu.- ¿Todavía te gusta Gray?- Lo mire un poco sorprendida. Aun no le habia contado.
-Estamos saliendo.- El me miro interrogante.- Antes de que terminen las clases me acerque a él y dije "Gray, me gustas desde primaria, pero no sabía cómo decírtelo". El sonrió y dijo "¿Quéres ser mi novia?" Yo solo asentí y desde ese momento empezamos a salir.- Natsu se mantuvo en silencio por un tiempo. El reloj marcaba las diez y cuarenta y cinco. Afuera, la lluvia seguía cayendo, los relámpagos seguían aturdiéndome y Natsu no hablaba.- ¿Qué pensas?- El me miro como si hablara en otro idioma.
-¿Qué dijiste Lucy?- Se veía confundido.
-Te pregunte ¿Qué pensas?- Las once. Afuera, la lluvia seguía cayendo, los relámpagos seguían aturdiéndome y Natsu estaba muy callado.
-Estoy pensando en Juvia.- Lo mire a los ojos.- Ella está enamorada de Gray también ¿Verdad?- Moví la cabeza de forma afirmativa.- Además de que está mal de la cabeza. Me preocupa que te haga algo.- Las once y diez. Afuera, la lluvia seguía cayendo, los relámpagos seguían aturdiéndome y Natsu se preocupaba.
-No sé. Ella es mi amiga. No creo que me haga nada.- "hmn" Escuche a decir a Natsu. "Ding dong". Las once y cuarto. Afuera, la lluvia seguía cayendo, los relámpagos seguían aturdiéndome y no habia nadie que me pudiera visitar.
Bajamos las escaleras, de nuevo. Mire la gran puerta de madera. "Ding dong". Se volvió a escuchar. Las once y veinte. Afuera, la lluvia seguía cayendo, los relámpagos seguían aturdiéndome y empecé a asustarme.
-¿Quién es?- Pregunte.
-Lucy-san, es Juvia.- Se escuchó del otro lado. Las once y veinticinco. Afuera, la lluvia seguía cayendo, los relámpagos seguían aturdiéndome y la conversación con Natsu me estaba afectando.- ¿Juvia puede pasar?- Observé a Natsu, el negó con la cabeza. Abrí la puerta lentamente. Las once y media. Afuera, la lluvia seguía cayendo, los relámpagos seguían aturdiéndome y la cara de Juvia me daba miedo.
-Hola Juvia.- Salude amistosamente.
-Juvia necesita hablar con usted, Lu-cy-san –Las once y cuarenta. Afuera, la lluvia seguía cayendo, los relámpagos seguían aturdiéndome y la forma en la que ella separaba mi nombre, me aterraba.- Gray-sama y usted ¿Están saliendo? Juvia solo quiere confirmar lo que Gray-sama le dijo.- Las once y cuarenta y cinco. Afuera, la lluvia seguía cayendo, los relámpagos seguían aturdiéndome y Juvia preguntaba.
-Sí, desde el fin de las clases.- Las once y cincuenta. Afuera, la lluvia seguía cayendo, los relámpagos seguían aturdiéndome, Juvia estaba en un silencio perturbador y Natsu miraba la escena de lejos.
-Así que, Gray-sama, se decidió por rival de amor ¿Eh?- Las once y cincuenta y dos. Afuera, la lluvia seguía cayendo, los relámpagos seguían aturdiéndome y Juvia reía de forma psicópata.- Rival de amor no puede tener a Gray-sama ¡Gray-sama solo necesita a Juvia!- Las doce en punto de la noche. Afuera, la lluvia seguía cayendo, los relámpagos seguían aturdiéndome y Juvia saco una navaja de su vestido.
-Juvia. Es suficiente.- Las doce y dos de la noche. Afuera, la lluvia seguía cayendo, los relámpagos seguían aturdiéndome y Natsu se interpuso entre Juvia y yo.
-Juvia no tiene asuntos con usted. Ella solo está interesada en acabar con rival de amor.- Las doce y tres de la noche. Afuera, la lluvia seguía cayendo, los relámpagos seguían aturdiéndome y Juvia miro de una manera gélida a Natsu.
-Si queres hacerle algo a Lucy, tenes que pasar por mi cadáver.- Juvia ladeo la cabeza. Las doce y cinco de la noche. Afuera, la lluvia seguía cayendo, los relámpagos seguían aturdiéndome y yo, veía petrificada como Juvia incrustaba la navaja en Natsu.
-¡Bastaaa!- Grite eufórica.- Natsu no tiene nada que ver. Me estás buscando a mí.- Las doce y siete de la noche. Afuera, la lluvia seguía cayendo, los relámpagos seguían aturdiéndome y Juvia sonrió mientras pateaba a un inmóvil Natsu.- Solo déjame decirte algo. Antes que me hagas algo quiero contarte todo.- Ella volvió a ladear su cabeza mientras una sonrisa espeluznante se mostraba en su rostro.
-¿Qué necesita decirme? Lucy-san- Se sentó en un sillón. Las doce y diez de la noche. Afuera, la lluvia seguía cayendo, los relámpagos seguían aturdiéndome y Juvia se veía serena, como si no hubiera lastimado a nadie y yo, me acerque a Natsu.
-Natsu, no te duermas. Reacciona por favor.- Las doce y doce de la noche. Afuera, la lluvia seguía cayendo, los relámpagos seguían aturdiéndome y mis ojos se cristalizaron.
-No se preocupe, Lucy-san. Juvia no le dio en ningún lugar importante. Natsu-san está vivo y va a seguir así por mucho tiempo.-Las doce y cuarto de la noche. Afuera, la lluvia seguía cayendo, los relámpagos seguían aturdiéndome y en el suelo veía las manchas de la sangre de mi mejor amigo, de mi primer y único amor, horrorizada.
-Está bien. Te voy a contar exactamente que paso.
Flash Back.
-Me gustas desde primaria, pero no sabía cómo decírtelo.- Me incline y lo mire de reojo.
-Es una declaración bastante pobre ¿No te parece?- Suspire.
-No sé cómo decirle.- Gray me dio unas palmada en la cabeza.
-Te propongo algo ¿Está bien?- Lo mire.- Vamos a darle celos.
-¿Qué? Eso no va a funcionar con Natsu.- Dije descartando la idea inmediatamente
-Aunque no lo parezca Natsu es muy celoso y posesivo. Vamos a decir que estas enamorada de mí y en el final de año te confesas y yo te correspondo ¿Te parece?- Me pareció una idea estúpida pero estaba desesperada.
-Está bien.
Fin del Flash back.
Juvia me miro de forma retorcida.
-Lucy-san. Juvia no es tan estúpida para creerse eso.- Se levantó del sillón y se acercó a mí. Las doce y media de la noche. Afuera, la lluvia seguía cayendo, los relámpagos seguían aturdiéndome y Juvia se abalanzo sobre mí. Sentí como enterraba su navaja en mi cabeza. Las doce y treinta y cinco de la noche. Afuera, la lluvia seguía cayendo, los relámpagos seguían aturdiéndome y di mi último suspiro antes de cerrar los ojos y dormir para siempre.
Fin.
