DISCLAIMER: los personajes pertenecen a JK Rowling, sin embargo, la historia sí que es mía.
Este fic participa en el minireto de mayo para "La Copa de las Casas 2015-16" del foro La Noble y Ancestral Casa de los Black.
PD: he escogido a los Lupin tras comprobar que Teddy Lupin es un Hufflepuff y también que no hay constancia de a qué casa fueron los abuelos de Remus Lupin.
Me ha tocado la Guerra de Magos Global
Gracias a CrisMatsumoto26 por betear mi historia.
Corría el año 1924. Dos jóvenes, Denise y Colin Lupin, habían decidido casarse y formar una familia en un pequeño y remoto pueblo muggle situado al sur de Inglaterra.
Conscientes de la guerra mágica que había empezado hacía cuatro años, decidieron construir un búnker mágico en el sótano de su casa. Estaba totalmente acondicionado y sobre todo, ilocalizable. Incluía una alacena donde todos los alimentos permanecían frescos de forma indefinida, pero lo mejor era que estaba hechizada para que todo se fuera duplicando a medida que los productos se fueran consumiendo, consiguiendo así disponer de comida hasta que todo acabara. A modo de entretenimiento, dejaron en el búnker decenas de libros de todo tipo: desde muggles hasta mágicos -estos últimos eran sobre todo para su hijo Lyall-, para que no dejara de cultivarse como mago.
En 1944, se confirmaron sus peores temores. Grindelwald dirigió su ataque hacia el pueblo de los Lupin, y éstos, que seguían el transcurso de la guerra a través de una pequeña radio mágica, tras escuchar durante días que Grindelwald se dirigía al pueblo, el matrimonio y su hijo decidieron esconderse en el búnker.
Dos semanas después, cuando ya se encontraban acomodados en el búnker, los rumores se confirmaron. A primera hora de la mañana, se empezaron a escuchar ruidos de explosiones por todas partes. Dichas explosiones se registraron durante cuarenta y ocho horas y parecía que nunca acabarían. Hasta que veinticuatro horas después de que cesasen las explosiones, los Lupin se aventuraron a salir, pero inmediatamente se arrepintieron. El pueblo entero había sido destruido y nadie había sobrevivido.
A pesar de que Grindelwald y su séquito se habían ido del pueblo, los Lupin -tras informar de forma segura a su familia de que estaban bien-, decidieron volver al búnker y seguir allí hasta que todo terminara. No querían arriesgarse a que les pasara nada.
Tuvieron que esperar un año, hasta que la radio mágica confirmó lo que llevaban meses esperando. Grindelwald fue finalmente derrotado por Albus Dumbledore y el terror había acabado.