Disclaimer: Los personajes de este fic le pertenecen a J.K Rowling.

"Este proyecto participa en el festival Top!Draco 2016, celebrado por las paginas We love Drarry y I love Bottom Harry"

Aquí está mi segunda participación en este festival, esperando que les guste dejo la introducción a este mundo alternativo donde Draco es un sensual pianista y Harry un rebelde sin causa.

Las musas de inspiración para el fic fueron Norwegian Wood (The Beatles) y Dark Necessities (Red Hot Chili Peppers)


Prefacio

Todo debe desaparecer

Un cuerpo pálido y delgado se abría paso por la densa neblina. Draco Malfoy iba completamente desnudo caminando por aquel suelo blanco preguntándose qué había pasado, hace tan solo unos instantes se encontraba espalda con espalda junto al auror Potter, se enzarzaron en una pelea difícil contra unos traficantes de dragones, Draco recordaba las luces rojas y verdes que eran disparadas de todos lados. Su escuadrón estaba conformado por siete aurores incluyéndolo a él y solo quedaban en pie los que se decían enemigos a muerte en la escuela de magia.

Se escuchó un sonido lejano como el de un tren accionado por vapor, el rubio sonrío, al parecer estoy a punto de tomar el tren se dijo con ironía, en momentos como esos era cuando el rubio evocaba la imagen de los ojos verdes de Harry Potter, en el último instante en que los vio las pupilas verdes transmitían preocupación y culpa, a Draco le pareció un poco retorcido alegrarse de que el auror estrella le prestara atención poco antes de su muerte y es que no podía evitar sonreír al recordar la voz grave de Potter llamándolo.

¡Malfoy, Malfoy! ¡Maldición, no te mueras!

Lo siento Potter, no es como que voy a permanecer vivo solo porque tú lo dices pensó divertido el rubio.

El ruido característico de la llegada del tren inundo la nada en la que Draco se encontraba, una hermosa máquina de vapor se materializo frente a los ojos plateados, cuando las puertas se abrieron Draco no dudo en subirse. La estancia estaba vacía y en silencio. Una fuerza desconocida impulso al auror hasta la parte trasera del tren, cuando abrió la puerta para ir al siguiente vagón se quedó de piedra por lo que vio.

El paisaje había cambiado completamente, Draco estaba desconcertado, de pronto se vio rodeado por personas que reconoció de inmediato, muggles dijo para sí mismo el rubio, la gente no lo miraba estaban distraídos con sus ajetreadas vidas.

Un cuerpo pálido y delgado se abría paso por el mar de personas que lo rodeaban, la figura llevaba un traje negro y zapatos de piel de buen gusto, elegante y sin demasiada ostentosidad. Debe ser un truco de mi mente, probablemente el rayo verde en lugar de matarme me volvió loco, pensó Draco, busco a tientas su varita pero no la encontró, suspiro de frustración y espero a llegar a la siguiente estación para ubicarse en el espacio, justo en esos momentos el rubio estaba en el London Underground.

Draco se sentía mal, podía percibir que algo había cambiado en su persona, su núcleo mágico había desaparecido ¿era este un castigo divino? Y como si el destino le respondiera un muchacho le empujo el hombro, los ojos de plateados se dilataron cuando se encontró con unos iris verdes, pero estos ojos eran diferentes y a la vez tan iguales, ¿Dónde había quedado la fiereza que los caracterizaba en cada batalla? ¿Por qué ahora esos ojos parecían los de un cachorrito apaleado?

—Disculpe señor —dijo Harry Potter.

El rubio no sabía que hacer por lo que solo asintió, observo de arriba abajo al nuevo Potter que se presentaba ante él, era un adolescente de aproximadamente quince años, iba vestido de negro, llevaba el cabello alborotado (como siempre), postura desenfadada y las gafas que lo caracterizaban habían desaparecido.

—¿Potter? —susurro Draco estirando la delicada mano en dirección al joven.

Su voz nunca llegó a oídos del moreno pues en esos momentos se abrió la puerta del subterráneo y Harry Potter se perdió en el mar de gente.

Enserio, ¿Qué está pasando? Se preguntó Draco Malfoy.