¡Hola! Pff por fin estoy un poco más liberada, espero tener tiempecito para estar activa, en esta ocasión les traigo algo que le fascinará (espero) a la legión KAIMEI.
Una serie de Drabbles exclusivamente sobre esta pareja a la que no se le hace mucha justicia que digamos. Espero disfruten estos drabbles y me despido por el momento agradeciendo que lean y los invito a pasar por mi red social en fb (ChibiCarshmenIchigo).
ADVERTENCIA: HISTORIA 100% KAIMEI (KAITO X MEIKO), SI NO ES DE SU AGRADO ESTA PAREJA ABSTENGASE DE LEER O DE DEJAR COMENTARIOS OFENSIVOS, GRACIAS.
DISCLAIMER: VOCALOID NO ME PERTENECE.
Azul y Rojo.
Kaito ama a Meiko, tal vez más que el helado de chocomenta, tal vez incluso más que el helado de chocolate, pero tiene un problema...
...A veces no logra entenderla
Esta seguro de que Meiko lo ama, tal vez menos de lo que ella ama el sake o dormir, pero está seguro de que al menos lo quiere o le tiene un poco de amor, o eso prefiere pensar...
Ama sus abrazos, sus besos, su cabello y sus ojos, ama como ella lo cuida como si necesitara protección y extrañamente, necesita ser protegido de los fantasmas, de la fría noche y de no sobrepasarse en comer tanto helado...
Pero a veces, simplemente no la entiende, no comprende su actitud, pareciera como si algunas palabras salieran forzadas de su boca, se sonroja al decirle que lo ama y a veces lo dice en voz baja como si no quisiera ser escuchada, su mano pareciera no buscar la suya y a veces lo trata como si fuera sólo un chico tonto...
Y tal vez lo era, por que no lograba entender si aquello significaba algo, si tal vez significaba un "Te amo" a la manera de Meiko o sí solo lo hacía porque él la amaba...
—Meiko... tú ¿Me amas? —preguntó a la chica que estaba frente a él.
El rostro de Meiko se enrojeció y mustió un pequeño "Claro que sí" y acto seguido agachó la cabeza.
Una vez más lo hizo... a veces le daba ternura el hecho de que Meiko hiciera eso y otras veces simplemente lo odiaba, quería que le dijera un "Te amo" mirándolo directamente a los ojos, tal y como él lo hacía, pero al parecer esos no eran los verdaderos sentimientos de Meiko...
Decepcionado bajó la mirada y susurró un "Ya veo..."
Sin esperarlo la chica le tomó la mano y lo miró a los ojos...
—Tú sabes que no suelo decir esto mucho, pero Kaito, yo te amo, te amo más de lo he amado a cualquiera, te amo más que una buena lata de sake y una noche de sueño y sin ti no sé qué haría... es solo que aveces... no sé cómo decírtelo —dijo con el rostro enrojecido.
Kaito la miró sorprendido y sin dejar pasar el tiempo le dio un beso y al separarse la miró.
—Te ves hermosa... —le dijo.
Meiko sonrió y cerró los ojos en espera de otro beso...
Kaito volvió a besarla y la abrazó fuertemente.
Meiko lo amaba, lo amaba más que el sake y dormir, tal vez lo amaba más que sus plantas y él la amaba mucho más que cualquier sabor de helado en el mundo y que cualquier barquillo con jarabe de chocolate, ahora lo entendía ella no puede expresar sus sentimientos con la misma facilidad que él, después de todo no todos son iguales, en especial ellos, pues ella era rojo y el azul...
Opuestos que inexplicablemente se amaban con todo su ser.
