Anteojos
Ya estaba anocheciendo en la preparatoria de Karakura y algunos clubs seguían funcionando, como por ejemplo el club de artes manuales y costura. Aun habían cosas por hacer, se le había encargado de realizar los trajes de una gran obra de teatro que la escuela iba a presentar en un festival literario del distrito, en la sede sólo estaban dos integrantes que aún seguían en sus labores, Inoue Orihime e Ishida Uryuu.
De vez en cuando la chica hablaba de las cosas de la vida o tonterías para hacer más llevadero el paso de las horas, a lo que el joven esbozaba una tenue sonrisa, aunque estaba más ocupado uniendo las telas de un hermoso vestido
-Supongo que estás cansado, Ishida-kun
-Sí…-en un suspiro, sin quitar la vista de su labor-pero tenemos que terminarlo antes de mañana, sabes que tenemos otras cosas que hacer
-¿Quieres algo de comer? Traje comida
Famosa era la chica con su desastrosa dieta que llevaba, era mejor no aventurarse
-No gracias… ya nos falta poco y podremos irnos a casa, tengo algo guardado en el refrigerador
Le había dicho eso para no preocuparla, pero en realidad ya estaba en sus límites, el colegio y la tarea encomendada ya era mucho, y si además se le incluye la protección de la ciudad frente a los hollows, ya lo habían agotado en demasiada. Eso se ve reflejado cuando se saca sus anteojos, colocándolos sobre la mesa para restregarse sus ojos
-Ishida-kun ¿Me puedes pasar el hilo rojo?-le menciona Orihime sin mirarlo
-Espera… ya te lo paso-tanteando su cofre de hilos y acercando cada carrete para ver su color, demorándose poco en encontrarlo-aquí tienes
-Gracias…-levantando sus ojos para recibirlo y la actitud que había tenido con él hasta ese momento se había ido.
No recordaba cuando lo había visto sin sus anteojos, lo más probable era que nunca lo había visto de esa manera, con el extra de que estaba cerca de la ventana, sintiendo como el viento le pegaba a la cara a ambos y movía sus cabellos, permitiéndole ver a un joven con una gran confianza y resolución, con una inexplicable calidez que se translucía en sus ojos, sin ese aire frío, orgulloso y soberbio que trataba de mantener siempre con las personas alrededor
-¿Te pasa algo Inoue-san?-sintiendo como la mirada de la chica escudriñaba de cierta manera su verdadero yo
-No nada…-responde con algo de nerviosismo, sin darse cuenta que se pincha un dedo con la aguja-Auchh
-Está sangrando-algo preocupado-recuerdo que tengo unas banditas en mi caja de hilos-volviendo a tantear el objeto. Al encontrarla, vuelve a colocarse sus anteojos para hacer mejor la curación, tomando su mano. Uryuu tenía que controlar su corazón que latía a mil por hora, la acción no la había pensando demasiado y ahora, tenía que mantener su seriedad, pero aunque no se diera cuenta, Orihime sentía que la calidez estaba en los ojos del joven había ido a parar a sus manos, con el simple hecho de colocarle una endeble bandita para que parara de sangrar de su dedo
-Gracias…-tratando de ser la misma de antes
-No me agradezcas-ajustándose los anteojos para poder ocultar el encarnizado calor que sentía en sus mejillas
-No digas eso, siempre estás preparado para todo Ishida-kun, además lo hiciste bien, ya no me sangra nada ¿ves?-mostrándole el dedo
Y nuevamente esa calidez aparece en la sonrisa de Ishida, esa sonrisa que a Orihime siempre le había gustado ver en su cara
-Nos queda poco… apresurémonos Inoue-san-volviendo a la costura
-Si… tenemos que terminar-con cara seria, regresando de ese momento en que por primera vez pudo ver algo más allá de su compañero
Fin
Este one-shot se me ocurrió escuchando un tema del OST de Romeo x Juliet llamado Unmei, dura menos de dos minutos pero es un gran tema instrumental, además siempre me preguntado como se vería Ishida sin sus anteojos y si Orihime lo vería diferente desde ese momento. Lamento mucho si los personajes me resultaron algo OOC , ya que soy una novata leyendo Bleach y necesito más tiempo para analizar los personajes
Abuelitnt