Hola ¿Cómo Están? Este Fic es Naruhina, espero que les guste*-*
Las invito a leer mi primer One Shot llamado "La Chica que intenta ser Invisible" el cual es Sasusaku.
Los Personajes de Naruto pertenecen a Masashi Kishimoto
El Lado Oscuro de la Luna
Capitulo 1
Si tuviera que definir lo que significa sobresalir, creo que para mí esa es una pregunta sin respuesta. En el transcurso de mi vida, ese significado ha evolucionado con el pasar de los años. Para explicarlo mejor, volvamos a unos años atrás, cuando comencé la primaria. Pero antes que nada, permítanme presentarme, mi nombre es Hyuga Hinata.
Flash back
Era el tercer día de clases en la Primaria Konoha. Frente a esta se encontraba una pequeña niña de cabello corto negro azulado. Con dos mechones más largos y un flequillo que enmarcaban su cara, en ella brillaban dos perlas blancas con toques lilas. Miraban con algo de miedo la estructura de la escuela, el cual era de 4 plantas en forma de cono truncado, pintado de color blanco, un letrero gigante con el logo y el nombre del colegio. Se preguntaran porque la pequeña peliazul tiene miedo. Pues les diré, es su primer día de clases en una escuela nueva. Ella y su familia acaban de mudarse a Konoha, anteriormente vivían en la Villa del Té.
– Hinata-chan– llamaba la anciana con la que venía la pequeña. Pero al no obtener respuesta por parte de la pequeña, la sacudió suavemente del hombro, haciendo que la niña se asustara y diera respingo por la sacudida de la anciana. Esta dirigió su mirada perlada, a los ojos cafés de su nana. La anciana al ver que tenía la atención de la peliazul, comenzó a hablar.
– Hinata-chan, debemos ir a la oficina del Director para buscar su aula de clases. Anda debemos apresurarnos, porque acaba de sonar la campana– dijo alarmada, al ver que llegarían tarde.
– S-si– respondió entre tartamudeos la pequeña. Tomo la mano que su nana le ofrecía y se encaminaron hacia la Oficina del director.
Al llegar a la oficina de la directora, la anciana toco la puerta para que les permitieran el paso. Al escuchar un "Adelante Por favor" entraron, se encontraron en una gran oficina, en medio de ella había un gran escritorio de madera. A los lados algunos estantes, repletos de libros. En el escritorio se encontraba una mujer rubia de mediana edad, con extravagantes pechos, la cual las invito a tomar asiento.
–Buenos días, mi nombre es Senju Tsunade. Soy la directora de la Primaria Konoha ¿en qué les puedo ayudar?– pregunto la rubia cortésmente.
– Buenos días, Tsunade-sama. Venimos a preguntar el aula de clases que le corresponde a esta pequeña. Ella es una nueva estudiante– respondió la anciana.
– Claro, debe ser Hyuga Hinata– afirmó la rubia.
– Si, así es– confirmo la anciana.
– Síganme, por favor– la directora las guio por un largo pasillo, hasta detenerse en frente al salón donde se leía 1-A.
– Hinata– llamo dulcemente la rubia.
– S-si– se acerco tímidamente a la mujer.
– Espera un momento afuera hasta que diga tu nombre, por favor– ordeno la directora.
– S-si- respondió ella con timidez nuevamente.
Tsunade al tener la aceptación de la pequeña, prosiguió a tocar. Tuvo que esperar hasta tener permiso del maestro para ingresar. Un "adelante" por parte de una mujer le indico que ya podía pasar al salón. Camino hasta situarse en centro, para si dirigirse con propiedad a los estudiantes. Inmediatamente, todo el mundo hizo silencio y presto atención a lo que la directora tenía que decirles.
– Buenos días, alumnos. Vengo para presentarles una nueva compañera, que acaba de integrarse recientemente a esta institución, les pido que sean amables con ella– ordeno con su característica voz autoritaria.
– Si, Tsunade-sama– respondieron todos los pequeños al mismo tiempo.
– Hinata, puedes pasar– pidió la rubia en voz alta, para que se pudiera escuchar en el pasillo. La peliazul al escuchar su nombre, entro al aula con la cabeza gacha y jugando con los dedos, una manía que siempre ha mostrado cuando sumamente nerviosa o avergonzada. Todos dirigieron la mirada a la pequeña de cabello azul. La mayoría sentía curiosidad en poder mirar su rostro, ya que esta tenía la cabeza gacha con la mirada al suelo.
– Hinata, preséntate ante tus compañeros– ordeno la profesora al ver que la pequeña, más esta no levantaba la mirada.
– Bu-bue….nos… d-di… as… mi….Mi nom…bre…es… Hi…na…ta… Hyu... Hyuga– se presento entre tartamudeos.
– Bienvenida, Hinata-chan. Mi nombre es Umiko-sensei, será un placer tener en mi clase. Puedes sentarte al lado de Sasuke-kun, está en la última fila– la profesora le indico el puesto, donde se encontraba un niño de cabello negro. La pequeña camino con la cabeza gacha hasta el puesto que le indico la profesora. Se sentó y no miro a su compañero, por supuesto él tampoco puso mucho empeño en presentarse.
Luego de la presentación, casi todos los niños parecieron olvidarse de la peliazul. Pero ella tampoco se empeñó mucho en tratar de hacer amigos, ya que era demasiado tímida como para poder iniciar una conversación. La única persona que no se olvidó de ella, fue su compañero de lugar. Este estaba algo impresionado de que no lo tomara en cuenta. Para él era algo raro, ya que todas las niñas no paraban de perseguirlo. Aunque el simple hecho de que no pudiera siquiera respirar en paz, también le resultaba extremadamente molesto.
El pequeño pelinegro sentía curiosidad por esa niña que siempre estaba sola. El siguiente lunes, la siguió en el descanso hasta el árbol más alejado del jardín. Al ver que la pequeña no se daba cuenta de su presencia, dejo a un lado su orgullo y le habló.
– Oye, niña– hablo animado el pelinegro. La pequeña levanto la mirada y se consiguió con un niño de cabello negro y ojos negros, que la miraban con curiosidad.
– Ho-ho-la– respondió sonrojada, bajando la cabeza.
–¿Cómo te llamas? Yo soy Uchiha Sasuke. Me voy a sentar contigo a partir de ahora, y vas hacer mi amiga ¿entendiste?– ordeno el pelinegro, tomando asiento al lado de la peliazul. Haciendo que la pequeña se sonrojara más fuerte.
– S-si– respondió ella con miedo. Nunca pensó que alguien quiera ser su amigo– Hyu…ga Hi...na...ta– Después de decirle su nombre, ambos guardaron silencio.
Fin flash back
Después de esa extraña presentación, nos volvimos casi inseparables. Claro, guardando las apariencias. A Sasuke siempre lo perseguían las niñas locas del colegio y eso a mí, me incomodaba. Por eso, llegamos a un acuerdo de nos mostramos en público. Él era como la luna y yo su lado oscuro. Irónico no creen, ya que Hinata significa "lugar soleado". Es una extraña metáfora considerando el significado de mi nombre, pero para mí funciona a la perfección. No me mal entiendan, que yo literalmente sea el lado oscuro de la luna, no significa que este enamorada de mi mejor amigo. Somos amigos y eso jamás cambiara.
En esos años de primaria, descubrí lo que significaba sobresalir. Lo que significa ser el centro de atención, por la apariencia física. Sasuke por ejemplo, sobresalía por su belleza. Porque por su personalidad, no creo que llamaría mucho la atención. Por Dios, él es una de las personas más frías que conozco. Podría decirse que viene del planeta de los "Cubitos de hielo". Es orgulloso, arrogante y le importa una mierda lastimar a otros. Excepto a su mamá y a mí.
Bueno, en la vida no todo era color rosa. Ambos pasamos por momentos muy difíciles, como la muerte de mi madre y la muerte del padre de Sasuke. Aunque ambos nos apoyamos mutuamente, en silencio.
Al terminar la primaria, nos convertimos en hermanos del alma. Aunque él dice que eso es una maldita cursilería, pero en cierto modo acepta ese concepto. Durante la secundaria Sasuke y yo seguimos guardando las apariencias. Creo que eso, no va a cambiar. Pero en la preparatoria, cambio un poco la situación. En ese lapso de mi vida, fue cuando lo conocí. La persona que se convertiría en el sol de mi vida, a pesar de seguir siendo la sombra de la luna.
...
El Primer día de Preparatoria, era un día nublado y frío, a pesar de que dentro de poco llegara la primavera. Pero es de esos días que me gustan, porque me permite acurrucarme en el sofá. En compañía de una buena taza de té verde y unos rollos de canela, viendo una película. Pero hoy, ese no es el caso, ya que es el primer día de clases. Nunca me ha agradado mucho el primer día del nuevo año escolar. Siempre es lo mismo, ir a la cartelera para ver en que salón me toco. Después llegar a salón, que te entreguen el horario de clases y bla bla bla.
Pero hoy, no fue un primer día como cualquier otro. Cuando entre a la cafetería, lo vi. Cabello rubio, unos hermosos ojos azul cielo. Pero lo que más me atrapó, fue su sonrisa, era amplia y sincera. Estaba sentado con Gaara, Temari, Shikamaru, mi primo Neji, una chica extraña de cabello rosa y Sasuke. Me pareció raro, ya que a él no le gusta estar con otras personas y menos si son Neji o Gaara. Porque ambos vienen del mismo planeta que él.
Me senté en la misma mesa de siempre, la más alejada de todas. Saque mi cuaderno de dibujo y me dedique a dibujar al rubio. En verdad no sé porque lo hacía, apenas lo vi y ya lo estoy dibujando. En realidad, no sé qué es lo que me pasa. No sé quién es, ni como se llama.
Al poco tiempo descubrí, que su nombre era Uzumaki Naruto y que la chica de cabello rosa, era su hermana Sakura. Luego de unas semanas, me di de cuenta que Naruto no se despegaba de Sasuke y este no hacía nada por deshacerte de él. Eso se me hacia aun más extraño, a Sasuke no le gustaban las personas ruidosas.
Estábamos en la casa de Sasuke, haciendo los deberes que nos habían dejado para la semana. Si mal no recuerdo era sábado en la tarde.
– Sasuke–kun ¿puedo hacerte una pregunta?– interrogue mientras resolvía unos problemas de matemática que se me dificultaban un poco.
– ¿No la estás haciendo ya?– pregunto con sarcasmo y rodando los ojos.
– Pero, puedo hacértela ¿o no?– conteste con un poco de sarcasmo. Solo a él, podía hablarle de esa forma
– Claro, pregunta– sonrió de lado.
– ¿Porque no has alejado a Naruto-kun?– le expongo mi duda.
– Hpm– gruño– No sé porque no se ha alejado. La primera semana, él se sentaba en la cafetería conmigo. Yo lo ignoraba, pero él seguía ahí, siguiéndome como el mal olor a los pies. Hasta que me canse de alejarlo a las dos semanas– respondió soltando un bufido de frustración.
–¿Por qué tanto interés?– pregunto con la ceja arqueada, mirándome con curiosidad.
– No sé, es que se me hace extraño verte con personas ruidosas– reflexione. Después de eso seguimos haciendo la los deberes.
– Hinata, hace días vi tu cuaderno de dibujos– inquirió Sasuke. Me quede analizando sus palabras, bajo la atenta mirada de Sasuke. No dije nada, esperando que él continuara–vi muchos dibujos del dobe– clavo sus orbes negros en mi, esperando una reacción de mi parte. Su intensa mirada inquisidora es demasiado para mí, así que desvíe la mirada nerviosa.
– Hinata ¿te gusta el dobe?– pregunto. Me sonroje al escucharlo.
– N-no– respondí. Mi sonrojo se hizo más notorio. Sasuke negó divertido y entonces supe que mi mejor amigo se dio cuenta que mentía y que si me gusta ese dobe.
Sé que Sasuke no sabe lo que significa enamorarse, a pesar de ser tan popular entre las chicas. Aun así, él nunca ha tenido novia, ni siquiera por las apariencias.
Sasuke y yo dejamos a un lado las apariencias al poco tiempo, gracias a un accidente causado por mi torpeza.
Estaba en la clase de arte, todos nos encontrábamos tallando madera. Cuando de repente, me distraje al ver a Naruto que iba pasando en ese momento frente al salón de arte. El cuchillo con el que estaba tallando, resbaló de la madera. Me corto la palma de la mano, con la que sostenía el trozo de madera. Era una cortada poco profunda, pero si cubría la palma casi por completo. De ella salía abundante sangre, así que Deidara-Sensei coloco un pedazo de tela en mi mano y me llevo a la enfermería. Nadie de la clase se preocupó por mí, bueno en realidad no había nadie en ese lugar a quien yo le importara.
Al salir de enfermería, era la hora del descanso. Estaba sola como siempre, cuando de repente llego Sasuke y Naruto venía con él.
– ¿Hinata, estas bien? Me entere que te cortaste en la clase de arte– pregunto en cuanto llego, examinándome. Cuando encontró la venda, Tomo mi mano para examinarla. Removió un poco la venda, encontrándose con una cortada que cubría la palma de mi mano de lado a lado– ¿cómo te lo hiciste?– pregunto preocupado.
– Bueno… estábamos tallando madera con unos cuchillos especiales, cuando… cuando– comencé a tartamudear, un sonrojo cubrió mis mejillas– Cu…an…do vi pa…sar a Na…– estuve a punto de decir el nombre del rubio. Pero me di cuenta que este estaba a mitad del pasillo y cualquiera podía escucharme, y que el mencionado estaba presente– cuando vi pasar a una ardilla, me dis…traje y me corte– respondí desviado la mirada.
– Hinata, que voy hacer contigo. La próxima vez ten más cuidado ¿si?– dijo Sasuke aliviado– y deja de distraerte con tonterías, mientras estás en la clase de arte– exigió molesto.
Sasuke era mi mejor amigo, pero eran pocas las veces que se preocupaba por mí. Naruto solo observaba en silencio. Desde ese día en particular algunas cosas cambiaron. Una, fue que Sasuke se olvidó de las apariencias por completo. Pero lo que ninguno de los dos nos dimos cuenta, era que teníamos un observador silencioso, que casualmente no era nada silencioso.
Este es el final de Primer capítulo *-*
Ojalá sea de su agrado ¿merezco un Reviews?
El siguiente capítulo será desde la perspectiva de Naruto.
Hasta la Próxima.
EAUchiha
