DISCLAIMER: Star vs. The Forces Of Evil no me pertenece. La serie y sus respectivos personajes son propiedad de Daron Nefcy y Disney.

¡ADVERTENCIA!: Este drabble contiene Lime. Aclarado, por si éste género no es de tu agrado.

.El poder de la danza.

Ni siquiera ella se explicaba, en esos momentos, cómo era que había llegado a esa situación. En su corta vida habían pasado tantas cosas… tantas ¿Quién diría que todo conduciría a ese momento? Su esposo encima de ella, con su respiración agitada golpeando su cuello desnudo y repleto del sudor de él mezclado con el de ella. Quien se hacía llamar su marido, creyó haber encontrado el mayor tesoro con ella: su flor. Eclipsa sabía que no la había encontrado, pues ella se habría mimetizado con facilidad con aquella pasión que envolvía al mewmano, quien cada vez buscaba con más desesperación su satisfacción completa en el interior de la reina. Ésta última, con gran frustración, sólo estaba esperando el momento en el que la sensación tan lacerante que le estaba inyectando él se acabara pronto.

Ni siquiera notó cuando su esposo, con unos pasos más de aquella danza tan ferviente, llegó a la cima de aquel arrobamiento en el que ella lo había envuelto y llenó su interior con aquella sustancia pasional, señal de que aquello había terminado para él. Ella ni siquiera había cambiado de expresión: había sido la misma desde que todo eso había comenzado.

Nada.

No había sentido absolutamente nada.

Con un suspiro, se preguntó si toda aquella inmunidad del disfrute se debió a la falta total de amor por él… Pero aquello, tiempo después, se respondió cuando ella se sacudía ante el monstruo situado en su interior.

Aquella sensación gloriosa que su amante expresaba en su rostro, le hizo saber, por unos segundos, de cuán equivocada estuvo antes con aquel mewmano que fue su marido: no sólo era la ausencia de amor. Fue porque el monstruo no había buscado su flor en el interior, sino en donde realmente estaba. Fue porque su enamorado entendió que no todo era ser envuelto. Fue porque él supo que una danza era más placentera si ambas partes podían expresarse por igual, si las dos se guiaban mutuamente. Fue porque aquel amante que daba pasos muy salvajes y algo torpes en su danza, se dejaba complementar por los pasos de ella, ambos insaciables, ambos sin dar tregua, y parecía que aquella sensación grata que resultaba de todo eso no culminaría más.

¿Y qué mejor que danzar, bajo la luz de la luna, con la música que ellos mismos creaban en el goce de esos momentos? Sus voces, sus cantos que no decían una palabra pero comunicaban más que suficiente el estado de delirio por el que estaban atravesando.

Más tarde, Eclipsa descansaba en el pecho de su amado. Siempre le había gustado aquel olor silvestre que portaba. Aquello le llenó la boca de un sabor dulce, tanto o más que el de los chocolates que tanto le gustaban: había sentido, por primera vez, el poder de la danza.

NA:
¡Hola! Muchas gracias por llegarse hasta aquí, espero que les haya gustado mi pequeño fic, y aproveché para escribirlo y publicarlo luego del estreno de la película...
Como a muchas personas del fandom, me llamó muchísimo la atención el personaje tan misterioso de Eclipsa... y su historia, tan corta que poco y mucho dice de ella. No sabemos lo que sucedió con exactitud, pero me animé a escribir esto reflejando su amor de manera erótica hacia aquel monstruo con el que huyó (y, hasta el día de hoy, dudo de la existencia del monstruo... pero ya que xD). Espero que les haya gustado.

¡Gracias por leer! ¡Hasta la próxima!