Ojos de Plata
Aviso: esta historia es algo rara y tendrá un poco de todo. Espero les guste.
Descargo de responsabilidad: Five Nights at Freddy's y sus personajes le pertenecen a Scott Cawthon; yo sólo los utilizo para el entretenimiento de ustedes, sin ánimos de lucro. Las ocurrencias y demás, así como la historia, sí son producto de mi descabellada imaginación.
~Primera Noche en Fazbear's Fright: The Horror Attraction.
I
Sobre una mesa redonda y gastada, se hallaban varias cartas. Cada una del mismo remitente y trataban de básicamente lo mismo.
Una mujer algo mayor leía atentamente una de ellas. Su cabello negro se encontraba perfectamente amarrado en una coleta alta, su tez era demasiado blanca y su tamaño promedio. Su expresión era casi enfermiza.
Ella era mi madre. Yo la observaba desde el umbral de la puerta de la cocina, la cual estaba algo descuidada.
—Hi-hija, ven. Échale un vistazo a esto...
Ella me entregó un papel arrugado y yo comencé a leerlo. Mis ojos se ampliaban con cada palabra escrita.
—Van a embargarnos...
—No puedo creerlo.
No había razón para sorprenderse.
—Esta sería la tercera vez en el mes.
La mujer se lamentó mientras cubría su cara con sus manos. Suspiré.
Estábamos en bancarrota. Mi madre enfermó poco después de que mi padre murió. Ella estuvo ausentándose en el trabajo sin un previo aviso y la despidieron. Por su estado actual mi madre no puede conseguir uno nuevo.
Yo, actualmente, estaba en busca de un empleo que pudiera mantenernos. Por supuesto que era difícil al ser menor de edad.
—Amy, no sé qué vamos a hacer...
—No te preocupes mamá, yo estoy buscando empleo, así que..
Ella pronto me interrumpió.
—¡¿Y qué pasará con tus estudios?!
Suspiré de nuevo. Por supuesto.
—No pasará nada, te lo aseguro. Además, ¿qué tal un empleo en un local de comida rápida? Sus horarios son flexibles y la paga está bastante bien...
Ella me miró algo molesta pero luego se resignó.
—Muy bien, pero quiero que sepas que estoy muy orgullosa de ti.
Ella sonrió, de esa forma amable que siempre hacía. Yo no pude evitar devolverle el gesto.
—Gracias mamá.
Permítanme que me presente. Soy Amy Anderson. Me gusta leer, los dulces y el rock. Mi cabello es largo y castaño claro, al igual que mis ojos. Mi tez es blanca, un poco pálida, y mi altura mucho menor de la promedio. Mi edad, 17 años.
Soy algo tímida y asustadiza, y a veces hasta imprudente. Tomo decisiones sin pensarlas dos veces, lo cual me trajo problemas en más de una ocasión.
Me encontraba en mi habitación, sobre mi cama y leyendo el periódico. Debía encontrar un empleo que no me robara tantas horas importantes. Por ejemplo, las de la escuela.
Como imaginé, un trabajo en un local de hamburguesas y chatarra no contaba con los horarios que necesitaba. En su mayoría eran por la mañana y el resto de la tarde.
Necesitaba uno que fuera más tarde. Aquellos horarios no eran convenientes.
Continué hojeando y deslicé mi dedo índice sobre el papel, tratando de localizar algún nombre oculto o algo. ¿Qué nadie necesitaba un empleado? Vaya porquería.
Mi dedo se detuvo en una noticia. Las letras eran poco llamativas y pequeñas, como si realmente no quisieran que alguien las leyera.
Entre cerré los ojos hasta que finalmente pude entenderlas.
"Se busca guardia nocturno..."
—¿Huh? Interesante...
"... Fazbear's Fright: The Horror Attraction."
Eso sonaba aterrador, como su nombre bien dice. Sin embargo, sus horarios me parecieron accesibles.
"12 a 6:00 a.m"
No se consiguen empleos con esos horarios tan a menudo. A pesar de que debido a ellos no podría dormir por la noche, no debía dejar pasar esta oportunidad.
Tomé una tijera y recorté ese sector de la página, luego miré la hora: 01:27 p.m.
Perfecto, no era muy tarde. Podría ir hasta allí para cerciorarme de que el puesto aún esté disponible.
—Espero que nadie lo haya tomado, no sabría qué hacer si eso ocurriese.
En realidad, yo no iba a culpar a quien lo tomase. Muchas personas podrían estar en mi misma situación, pero... digamos que era más como una carrera. Sí, el primero en llegar se queda con el puesto, sin rencores.
Me dirigí a la salida. No había rastros de mi mamá, quizás estaba tomando una siesta. Suspiré y salí por la puerta sin avisar, rumbo a aquel local.
El viaje fue un poco largo, casi una hora. Bajé del autobús y caminé una manzana.
Me detuve frente a un edificio, no muy grande pero sí lo suficientemente aterrador.
—No es necesario que de miedo también el exterior...
Pensé insegura.
Negué con la cabeza. No podía quedarme parada en la puerta todo el día; quizás piensen que estoy loca y no me contraten.
Puse una mano temblorosa sobre la puerta e hice fuerza para empujarla. Las bisagras rechinaron estrepitosamente. Fruncí el ceño, ¿podría ser que el lugar estaba abandonado?
Entré y caminé cautelosamente por el lugar. Parecía un poco sucio... ¿sería parte de la atracción?
Vi entonces una puerta que ponía "Gerencia" escrito sobre un cartel torcido.
Me acerqué y le di ligeros golpes hasta oír un "adelante" Sin demasiado entusiasmo.
Entré asomando primero la cabeza. Tras un escritorio se encontraba un hombre, un poco mayor de cuarenta años. Este me miró con poco interés.
—Bienvenida a Fazbear's Fright: The Horror Attraction... ¿qué se le ofrece?
Preguntó. No parecía importarle realmente.
Me puse algo nerviosa y entré a la oficina mientras cerraba la puerta. Luego de unos minutos dije:
—Yo... estoy interesada en el puesto... de guardia nocturno.
—¿Qué?
Me miró sorprendido, como si no quisiese creerlo. ¿Cuál era el problema?
—¿Estás segura de ello?
—Por supuesto. ¿Por qué lo preguntas?
El sujeto se rascó la nuca, un poco incómodo
—Verás... este lugar es una atracción del terror. ¿Aún así te interesa?
Hizo énfasis en la palabra "terror". La verdad es que yo no era precisamente fanática del miedo, y suelo asustarme con facilidad. ¿Pero qué otra opción tenía?
—Sí, estoy interesada.
Quizás de nuevo había tomado una mala decisión.
El hombre suspiró.
—Pues bien, contratada.
—¿Eh? ¿Así nada más? ¿Sin contratos o entrevistas?
Estaba sorprendida. Eso sin duda no me lo esperaba.
El hombre me miró fastidiado.
—No, no es necesario —respondió.
—Pero...
—Óyeme, ¿quieres el trabajo o no?
Asentí lentamente. Aún así pensaba que a aquel lugar le faltaba algo de profesionalidad. El hombre tomó una libreta de uno de los cajones del escritorio.
—Sólo necesitaré tu nombre y algunos datos personales.
Dijo.
—Ya sabes, por si ocurre alguna emergencia.
Aclaró luego. La verdad no me parecía algo extraño que se requieran mis datos personales, sinceramente estaba aliviada.
—No hay problema... —dije con una pequeña sonrisa. El hombre entonces asintió.
—Pues bien. ¿Cuál es tu nombre?
—Amy Anderson —respondí.
Él lo anotó en su libreta.
—¿Edad?
—Diecisiete años.
El gerente me envió una breve mirada.
—Aún eres muy joven para...
—¡Por favor! ¡Necesito el trabajo!
Le interrumpí, golpeando ambas manos en el escritorio del gerente. Él pareció sobresaltarse por ello, pero luego suspiró mientras cerraba la libreta.
—La empresa no se hará responsable -advirtió, cruzándose de brazos.
—Por supuesto.
—Pues bien. Te espero esta noche, quince minutos antes de las 12 para darte algunas indicaciones. ¡Y no llegues tarde!
—S-sí...
Me sorprendió todo esto, ya que no comprendía por qué tantas precauciones. Yo sólo me limitaba a asentir y obedecer.
El gerente me entregó una gorra de un tono medio azulado, que llevaba bordado "Seguridad". Luego deslizó sobre el escritorio una pequeña placa plateada que llevaba escrito lo mismo.
—Hasta que tengamos listo tu uniforme, deberás usar esto.
Asentí, tomando la placa mientras le echaba un vistazo. Le faltaba brillo y estaba vieja y gastada, probablemente porque ya se ha usado antes.
—Muchas gracias.
Él sólo suspiró e hizo señas para que me retirarse, aunque no sin antes advertirme, nuevamente, de mi puntualidad de esta noche.
Abrí la puerta de mi casa lentamente. Mi madre pronto me miró desde el sofá de la pequeña y maltrecha sala. Su expresión era de preocupación.
—¿Dónde has estado?
—Salí a buscar trabajo.
Respondí mientras me sentaba a su lado.
—¿Y bien? —preguntó con curiosidad. Yo sonreí victoriosa.
—Guardia Nocturna. ¿Qué te parece?
Mamá se quedó en silencio, como si estuviera debatiéndose por algo.
—Eso suena... peligroso...
Respondió al cabo de un tiempo. Su tono era de desagrado.
Debí suponerlo.
—No te preocupes, no pasará nada. Además, mi turno es de seis horas, podré volver a casa a tiempo para ir a la escuela.
Pensé que eso iba a convencerla. Ella exhaló contrariada y luego negó con la cabeza.
—¿Cuando comienzas...?
—Esta noche —sonreí algo nerviosa, pues sabía que lo siguiente no le gustaría- En Fazbear's Fright: The Horror Attraction...
Los ojos de mi madre se ampliaron.
—¡¿"Fazbear's"?! Hija, ¿en qué estabas pensando?
—Eh...
Es cierto. Debido a los constantes accidentes que implicaban la desaparición de niños y la misteriosa muerte de empleados nocturnos, la reputación del establecimiento, Freddy Fazbear's Pizza, fue decayendo. No obstante, este no era el mismo Fazbear's.
—Ese lugar está maldito...
Mi madre me tomó de los hombros, afectada. Quizás trabajar en aquél lugar era egoísta, pero era todo lo que podía hacer
—No te preocupes, en serio. Juro que no hay animatronicos en ese lugar. Al parecer es sólo una "Atracción del Terror" basada en los sucesos de la pizzeria.
—¿Es así?
No se veía convencida, y no es que lo que haya dicho ayudara mucho. ¿Basada en sucesos extraños y morbosos? Fazbear's Fright sin duda debe lograr su cometido, aunque parecía un poco de mal gusto.
—Por favor. Cualquier cosa que suceda, dímelo. Renuncia si es necesario en caso de que algo malo pase.
—Sí, te lo prometo.
Ella asintió, aparentemente satisfecha y se levantó del sofá.
—Entonces deberías descansar, o te quedarás dormida en el trabajo.
Cierto. Sonreí y me despedi de ella mientras me dirigía a mi cuarto. En verdad no quería echar a perder todo y ser despedida la primera noche.
Eso sería sin duda vergonzoso.
Me puse la gorra y abroché la placa en mi remera, de un azul parecido al de la gorra.
Ya estaba lista. Miré la hora: 22:47.
¡Debía marcharme pronto!
—Diablos...
Maldije el local que quedaba tan lejos. Por supuesto que también había sido mi culpa por distraerme, pero es que no podía marcharme sin hacerle la cena a mi madre. No quería que estuviera enfadada conmigo por haber escogido ese trabajo.
Salí prácticamente corriendo de mi casa. Por suerte el bus no tardó mucho en llegar, por lo que pude llegar a Fazbear's Fright sin problemas. Me sorprendí al ver la hora: 23:42. Llegué temprano, ¡vaya!
Entré al local. Por supuesto, la puerta rechinó con el mismo ruido estrepitoso que pronto me delató. El gerente salió de su oficina y me miró sorprendido.
—Bienvenida, no creí que en verdad ibas a venir.
—¿Por qué? —pregunté confundida.
—Nadie lo hace. ¿Es que no conoces este lugar?
Puse mala cara; ¿de qué hablaba ese sujeto? Esta era una simple "Atracción del terror" basada en los desafortunados sucesos en Fazbear's Pizza. No había nada extraño, además de que no había animatrónicos...
El gerente me miró y luego negó con la cabeza, restándole importancia.
—Bien, ya no importa. Sígueme, te enseñaré tu oficina.
Comenzó a caminar. Yo lo seguí; aunque estaba algo dudosa por lo que había dicho, yo sólo sonreí ya que estaba feliz de haber encontrado un trabajo y con este horario.
La oficina era grande pero estaba algo sucia. El gerente comenzó a darme indicaciones.
—Escúchame, esto es importante. Deberás vigilar las cámaras y reparar los distintos errores que estos puedan sufrir a lo largo de la noche —me mostró una pantalla táctil, como una tableta, pero estaba agarrada a la pared—. Desde aquí podrás revisar las cámaras.
Asentí. Él se acercó a una computadora sobre el escritorio, un poco alejada de la pantalla táctil, sobre un amplio escritorio.
—En esta computadora podrás reiniciar los sistemas para repararlos. Es importante que prestes atención a estas cosas...
Asentí de nuevo.
—Pase lo que pase, NO salgas de la oficina. Recuerda escuchar con atención las diversas llamadas que recibirás de un tipo desconocido pero que podrían ayudarte.
—E-está bien...
No entendía por qué tantas precauciones. Sólo era revisar cámaras, ¿no había ningún peligro, no?
Sin embargo, ¿qué era en realidad lo que tenia que vigilar en este lugar? ¿Ladrones?
—Son cinco noches, pero tú decides si quieres seguir trabajando en este lugar una vez cumplidas. Nadie lo hace, sin embargo...
—¿Uh...?
Cuando estaba a punto de preguntar por qué, él miró la hora rápidamente y agitado exclamó: -Oh, vaya, ¡mira la hora! Debo irme, buena suerte.
Prácticamente huyó, antes de que siquiera pudiera decir nada. ¿Qué diablos?
—Bueno pues...
Me senté en la silla. Era giratoria por lo que di una vuelta con un alegre "wiii", como si hubiese vuelto a mi infancia. Qué tiempos, no había preocupaciones ni obligaciones. Aunque no era precisamente "adulta", no podía evitar extrañar aquella edad en que hacías y actuabas a tu manera, sin importar lo que los demás piensen. Podías estar horas tirada en el césped, jugando con muñecos mientras dejabas volar tu imaginación de mil formas, y luego dormir y despertar tarde para repetirlo. No era tan estresante, pero tampoco odiaba mi edad, a pesar de que comenzaba a ver las cosas diferentes, dándome cuenta que el mundo no era como yo creía, notando lo decepcionante que era. Pero, a su vez, sentimientos incomprensibles para aquella edad poco a poco podía entenderlos.
Revisé las cámaras. Todo parecía en orden, aunque juré que vi algo moverse. Aún así le resté importancia.
Justo entonces el teléfono sonó:
"Hey, hey. Me alegro que hayas regresado por otra noche. Te aseguro que será mucho más interesante esta vez. Dejamos unas nuevas reliquias durante este fin de semana y estamos rastreando una más en este mismo momento, así que déjame ponerte al día rápidamente y puedas ponerte a trabajar.
La atracción abre como en una semana, así que debemos asegurarnos de que todo funcione y nada se prenda en llamas. Cuando el lugar abra, la gente entrará por el lado opuesto del edificio y caminarán hacia ti, y pasarte donde estará la salida. Sí, oficialmente te has vuelto parte de la atracción y tomarás el papel de... ¡el guardia de seguridad!. Así que no solo monitorearás las cámaras y personas que van pasando, ya sabes, asegurarte que nadie robe nada o se pongan a besuquear en una esquina, pero también serás parte del show, hará que se sienta realmente auténtico o eso pienso."
—Qué loco, jeje.
"Ahora déjame decirte sobre las novedades. Tenemos un nuevo set de dibujos, siempre es bueno, ¡y una cabeza de Foxy! que pensamos que puede ser auténtica, pero también puede ser otro disfraz falso... y encontramos un ventilador de escritorio, muy anticuado y de metal, cuida tus dedos."
Miré el ventilador sobre el amplio escritorio y entre cerré los ojos.
"Por ahora el lugar es... ya sabes, luces bonitas, artículos para asustar. Honestamente creí que tendríamos más para ahora, así que si no tenemos algo realmente genial para la próxima semana, tal vez debamos meterte en un traje peludo, y caminar haciendo buuu, jeje. Pero como ya te dije, estamos en la siga de una muy buena pista. Uh... un tipo que ayudó a diseñar uno de los edificios, dice que hay un cuarto extra, detrás de una pared o algo así, así que echaremos un vistazo y veremos que podemos encontrar. Uh, Por ahora solo ponte cómodo con el nuevo arreglo. Uh, puedes ver las cámaras de seguridad, a tu derecha y presionar el botón azul. Puedes ver las cámaras de los pasillos, ventilaciones... y hacia tu izquierda, puedes presionar sobre el panel del sistema principal. Ya sabes, usa esto para reiniciar cualquier sistema que pueda dejar de funcionar. Uh... je, al tratar de hacerlo lo más autentico posible nos excedimos un poco, jeje... Algunos de estos equipos apenas funcionan. No estaba bromeando sobre las llamas, es un riesgo real. Y lo más importante sobre lo que debes vigilar es la ventilación. Mira, este lugar te hará la desconocida, y si dejas esa ventilación por si sola, comenzarás a ver cosas realmente locas, amigo. Mantén ese aire fluyendo."
—¿Cosas locas? Con escucharte a ti es suficiente, amigo.
"Ok, mantén un ojo en las cosas y tendremos algo nuevo para ti mañana por la noche."
—Uh...
No comprendí nada. Esa llamada parecía algo antigua, pero bueno. Miré la hora, eran 04:20. Vaya que el tiempo pasó demasiado rápido, todo por oír la llamada.
Eché un vistazo a las opciones en la pantalla táctil: "Play Audio".
Toqué ese sector y pude oír un extraño sonido.
—Hi...
—¡Hyaaaaa!
Grité ya que creí que había alguien más aquí. Miré hacia todos lados agitada; la voz parecía la de un niño.
—Espera, ese botón provocó ese ruido. ¿Por qué estaba gritando entonces?
Suspiré por mi estupidez y presioné el botón de nuevo.
—Hello...
—Hola!
Respondí a la voz, aunque me sentí estúpida. Pensé entonces para qué servía aquél audio. ¿Ayuda a la soledad? No, esperen, aquél sujeto del teléfono también ayudaba para ello. Era deprimente en cierta forma.
Sonó una alarma que anunciaba las 6 a.m.
—Eso fue fácil...
Pensé en voz alta, sonriendo alegremente.
El gerente apareció en la puerta, sobresaltándome un poco.
—Hey, bien hecho...
—¿Por qué huiste de esa forma antes de que comenzara mi turno? -pregunté, ignorando las felicitaciones de antes.
El hombre se rascó la nuca con nerviosismo. No pude evitar entre cerrar los ojos.
—E-es que tenía algo importante que hacer.
Respondió. Yo suspiré.
—Bien, bien. Y oye, no fue tan difícil...
El gerente levantó una ceja.
—Eh... umm... me alegra que no haya sido la gran cosa... uh... pero no te confíes mucho en las siguientes noches, podrías lamentarlo. Ya sabes...
Bueno, este tipo era más raro que el audio del niño. Decidí asentir e ignorar su actitud, pues se lo veía asustado.
Me despedí del gerente y regresé a mi casa, dispuesta a contarle todo a mi madre.
N/A: Mm... ¡Hey! ¿Qué tal? Saben, esta es mi primera historia de Five Nights at Freddy's y estaba algo nerviosa, jeje. La idea la he estado guardando por mucho tiempo, pues me daba algo de miedo publicarlo, ¿por qué? No lo sé :v pero uno no logra nada si no se arriesga jeje. Este era en realidad un prólogo, pero me quedó muy largo, jaja, ¿pero qué les pareció? Es una idea loca, lo sé, pero denle una oportunidad plis :)
Este fic lo había publicado en Wattpad pero decidí quitarlo (?
Cualquier idea por favor háganmela saber en los comentarios nwn
Si les ha gustado díganmelo por favor y con mucho gusto subiré más capítulos (trataré de que sea semanal). Y si no, pos dejaré la historia ahí ya que tengo muchas por actualizar y no puedo perder el tiempo en una historia que nadie va leer, ya saben :'v
Muchos saludos!
MH99~
