EDIT: EL FIC SERÁ TOTALMENTE REESCRITO Y CONTINUADO ALGÚN DÍA (?)


Pairing: USAxUK, tal vez en alguna ocasión UKxUSA leve.

Summary: "—Arthur y yo nos vamos a casar. —Le había dicho Matthew. Había sido el primero en saberlo, el primero en felicitarlos y aún así el último en disfrutarlo." Cuando amar se convierte en desesperación, y pierdes toda esperanza, la vida te sonríe. ¿Qué oportunidad le dará la vida a Alfred unos días antes de la boda de su amado? (Fail summary)

Advertencia: Nada por ahora.

Buenas. Este es el primer fic que subo a ff. Está inspirado en el manga "La flor que florece en ti".

En este AU Matthew no es invisible, raro si, pero ta. (?)

La idea era hacerlo UsxScotland, pero pensándolo bien, las características no quedarían, así que decidí hacerlo UsUk y bueno, eso.

Tendrá aproximadamente unos 9 o 10 chapters.

Disclaimer: Hetalia Axis Powers no me pertenece, su respectivo dueño es Himaruya Hidekaz. Si fuera obra mía, la serie sería yaoi puro.


—Mira ese, ¿no es lindo? —La voz del hermoso ser a su lado lo distrajo de sus pensamientos. Dirigió la mirada a través del cristal de sus gafas hasta enfocarla a donde este le señalaba; un anillo brillante de color plateado con un diamante reluciente en la cima.

—¡Claro! De seguro a Matt le encantará.

Ya había perdido la cuenta de todas las veces que había fingido aquella sonrisita estúpida y el tono de alegría en su voz.

La persona que amaba se iba a casar con su hermano, y no podía hacer nada al respecto.

El otro joven asintió con una enorme sonrisa en el rostro y se encaminó hasta una de las encargadas de la joyería, que le sonrió atendiendo su pedido enseguida. Alfred observaba como Arthur tenía un pequeño sonrojo en sus pómulos y una expresión de infinita felicidad mientras le entregaban el paquete con los anillos y pagaba. Dejó que su mente divagara unos segundos.

Él y Matthew eran hermanos, ambos usaban gafas y tenían el cabello semi-corto, aunque el suyo era rubio cobrizo y lacio, con un mechón anti-gravedad en la partidura del flequillo, mientras que el de Matt era un rubio mas ceniza y algo ondulado, con un mechón rizado. Su altura era la misma, sin importar que Alfred fuese un año mayor. Otra diferencia notable eran sus ojos: Los de Alfred eran celestes, como el cielo, mientras que los de Matthew eran de un encantador violeta. Aún así era muy difícil diferenciarlos con los ojos cerrados; los dos poseían el mismo tono de voz.

Alfred se había enamorado de Arthur cuando estaban en la escuela, junto con su hermano. Asistían juntos a las actividades del club de música, ya que los tres estaban inscriptos en él, junto con un austriaco y un awesome alemán, viejos amigos de la infancia.

Y ahora se encontraba ayudándolo a elegir el anillo que reafirmaría el compromiso con alguien que no era el, y que tampoco podía odiar.

—Vamos. —Volvió en sí cuando vio al inglés dedicarle una hermosa sonrisa, esperándolo en la entrada del local. Le devolvió la sonrisa algo mas ligera y caminó a su lado, aparentando felicidad, cuando en realidad solo quería llorar, deshacerse de su dolor; el cual aumentó al ver el pequeño paquete que el otro llevaba en su mano cariñosamente. Era una cajita de color amarillo muy suave, con un lazo azul en forma de moña.

El anillo de su interior nunca sería para él.

Durante el resto del día se dedicaron a elegir todo para la boda. Flores, manteles, adornos, inclusive probaron los distintos postres y sabores del pastel a elección. Ese era el favor que le había pedido su hermano, quería sorprenderse el día de su casamiento. Así fue como Alfred terminó organizando la boda de Arthur, su único amor, y Matthew, su adorado hermano.

"Soy el hermano del novio, soy un hero. Debo dejar mis tontos sentimientos de lado para que Matthie sea muy feliz. Además, él siempre ha sido el mejor en todo, cocina, artes, canto; estoy seguro que junto a Arthur serían la pareja perfecta. Alguien como yo junto con él... simplemente lo decepcionaría. Sí, es mejor que ellos dos tengan su happy ending juntos."

No guardaba rencores, intentaba alegrarse. Sabía que ellos habían estado saliendo hace un tiempo, y de hecho había sido el primero en enterarse de su compromiso, el primero en felicitarlos y aún así el último en disfrutarlo.

—Espero que hagas feliz a mi hermano. —Arthur volteó su rostro hacia Alfred sonriendo con sinceridad

—Dalo por hecho; quiero hacer feliz a Matthew por el resto de mi vida. —Su expresión se tornó seria— Por eso mismo pronto finalizaré mis estudios y seré un excitoso abogado, ayudaré a quienes lo necesiten y trataré a Matt como mi rey. —Volvió la mirada al frente, siguiendo su camino junto con Alfred.

—Estoy seguro de que lo harás.

Siempre sintió una gran admiración por el mayor, sumado al amor que le tenía. Y pensar que en unos días el se apartaría de su vida...

Se hacía llamar héroe, pero no podía ni salvarse a si mismo de su dolor.

Ambos siguieron caminando, absortos en sus pensamientos. Arthur en su futuro con Matthew y Alfred en su futuro sin Arthur.

Tan metidos en mundo, ajenos a su alrededor, que no captaron lo que ocurría hasta que sintieron el grito ahogado de una mujer y la voz de un hombre gritándoles palabras de advertencia. El de ojos verdes miró a su derecha y en un segundo Alfred recibió un empujón tan fuerte que lo lanzo uno metros mas adelante.

Un frenazo.

Sintió enseguida como unos brazos masculinos lo levantaban, escuchando palabras en lo que parecía ser alemán y alguien pidiendo una ambulancia. Aún mareado y con un pequeño rastro de sangre corriendo por un corte en la ceja y otros raspones, levantó la vista a donde había estado Arthur y lo que vio lo horrorizó tanto que lo llevó a soltarse de los fuertes brazos que lo tomaban e intentar correr a su lado. Nuevamente volvieron a tomarlo con mas fuerza, ignorando sus gritos.

Arthur se encontraba tirado en medio de la calle, con una evidente perdida de sangre y a unos metros un auto con una abolladura y los vidrios rotos. Había sido atropellado. Observo como entre los paramédicos tomaban su frágil cuerpo y lo llevaban hasta la ambulancia. Les rogó para ir a su lado.

Le dolía ver al amor de su vida comprometido con su hermano, pero más le dolería no volverlo a ver jamás.


No se si alguien llego hasta acá, pero...

¿Review?

*Reescrito el 6 de febrero de 2014 porque si c: corregí las rayas de diálogo y ciertos fallos que no noté antes.