1.- Disclaimer: Todo el universo de Canción de fuego y hielo pertenece a G.R.
2.- Nota: Este fic participa del reto #46 "Nunca Doblegado, Nunca Roto" del Foro Alas Negras, Palabras Negras
"Las reinas de Dorne"
Doran lo supo desde el día en que la tuvo en sus brazos, era tan pequeña y tan frágil como Elia. Cuando su hermana nació él ya era lo suficientemente mayor y sabio, tal vez demasiado, para saber que ella no sobreviviría al calor del desierto, al frio del invierno, a la sangre del dragón y sobretodo que nunca vería los sueños de primavera.
Nunca doblegado, nunca roto.
Elia había nacido rota, dispuesta a obedecer. Una serpiente sin colmillos y sin veneno. Pero aun así la quería, como quería a la niña que Mellario le entregó.
Nunca doblegado, nunca roto.
La quería y al igual que con Elia sabía que llegaría el momento de vengarla, era su hija, la heredera de lanza del sol, pero aquello no cambiaba la historia. Elia se hizo reina por un dragón y murió.
Con Arianne nada sería diferente.
Rhaegar o Aegon, nada sería diferente.
En Dorne nunca tendrían reinas.
Nota de autor: 155 palabritas exactitas :)
