Summary: AU/Gakuen Uk/Spain . Antonio no imagino encontrar semejante escena al entrar en su nueva habitación, y menos aún se imagino que cierto inglés malhumorado seria su nuevo compañero de cuarto…
Disclaimer: Hetalia es propiedad de Hidekaz Himaruya-san
Pareja: Uk/Spain
El primer capitulo será algo mas corto, pero prometo que los demás serán mas extensos. Planeo escribir por lo menos unos cinco capis.
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Oh, mierda. Aquello era lo único que pasaba por la mente de Antonio en aquel incomodo momento. El castaño seguía mirándolos, con una mueca mezcla de sorpresa, vergüenza y confusión. Y, era de esperarse, en realidad… No todos los días abres la puerta de tu nueva habitación y te encuentras a un chico, que, seguramente es tu compañero de cuarto, sobre una chica a punto de hacer cosas no aptas para menores de dieciocho años…
Y es que justamente tenia que haber abierto esa puta puerta en ese mismo puto momento… ¡Y una mierda! La suerte no estaba de su lado hoy, eso bien podía adivinarlo.
No sabia realmente como reaccionar, nunca había estado antes en una situación tan jodidamente incomoda y parecía que su mente se había quedado en blanco. Observó que la chica estaba sonrojada como los mil demonios, al igual que el rubio que se levantaba y se sentaba en el borde de la cama. La chica se levanto rápidamente, le dijo algo al oído al que seguramente sería su novio y luego camino, a paso rápido, hasta donde estaba Antonio, le hecho una fugaz mirada y corrió veloz por el pasillo, desapareciendo. Huyendo. Dejando ese vergonzoso momento a los dos chicos que ahora se miraban directamente, no sabiendo que decir, como empezar…
-Y-yo…- trató de decir el castaño- .
Por si no lo sabias deberías tocar antes de entrar… No me sorprende que te enviaran conmigo, es obvio que necesitas aprender modales-. Le interrumpió cortante el rubio, estaba enojado, y ¡vaya! Como no estarlo… El estúpido castaño había interrumpido algo que estaba planeando hacer hace ya algún tiempo, y que claro, involucraba a su novia de hace ya tres meses, Seychelles. Hace algunas semanas el francés idiota y el estúpido americano lo estaban presionando para que lo hiciera, y finalmente planeo el momento perfecto para que pudiera cumplir el plan, que, realmente, no sabía si quería cumplir.
No necesitas tratarme así…-. Le respondió algo enfadado el castaño, ¡Y es que no era su culpa que no le advirtieran que su compañero de cuarto estaría haciendo cosas sucias con una chica!-
¡Y como quieres que te trate, stupid bastard! ¡Estuve esperando mucho para que esta tonta idea funcionara!-. Gritó alterado el rubio-.
Ese rubio si que estaba sacando de sus casillas a Antonio, ¿Cómo alguien podía ganarse el odio de otra persona tan rápido? Verdaderamente le gustaría saberlo. Quería tirársele encima y golpearlo tan fuerte para que se tragara sus palabras, pero… no podía ganarse la expulsión en su primer día… Eso si seria hacer algo realmente estúpido e innecesario, además…ya se le había ocurrido una perfecta solución que resolvería todo…
Bueno… esbozo una pequeña sonrisa de satisfacción-. Cuando charlé con el director, en ningún momento me dijo que estaba permitido traer chicas a la habitación de los chicos… Y menos aun si es para tener sexo…
You…Bastard… ingles se tragó su furia contenida, no podía descontrolarse y perder los estribos, no con un tipo como el que estaba demostrando ser aquel castaño parado a un lado de la puerta.
No le diré nada, a cambio de…hum…. una graciosa mueca de fingida duda-. A cambio de que seas amable conmigo, no me insultes en ese molesto idioma tuyo, y que me enseñes todos los rincones de la academia ¡Ah, y que me presentes a los demás, claro!
Vaya que estaba disfrutando de la expresión de furia contenida que mostraba el inglés, no sabia por qué pero estaba disfrutando ser el ganador de aquella burda discusión. Y eso que nunca le había gustado discutir, es mas, se consideraba a si mismo la persona menos conflictiva del mundo.
Tú ganas…-. Se rindió al fin el rubio, sintiendo como su orgullo le abofeteaba por dentro. Y si que le abofeteaba fuerte…
Bien…creo que por lo menos deberías decirme tu nombre, cejón-. El rubio hizo un gesto de molestia ante el ofensivo comentario del pelicastaño-. No es que me interese saberlo, pero solo porque lamentablemente eres mi compañero de habitación, creo que es necesario que me lo digas. Bueno…yo soy Antonio Fernández Carriedo, y no viajé desde España para que un inglés malhumorado me ponga esas caras solo por el hecho de estar presentándome amablemente.
Arthur Kirkland…-. Dijo sin gana alguna el rubio, solo por educación se estaba presentando a esa molesta persona frente a el…Y esa sonrisa… estaba decidido, no sabia como, pero le borraría esa burlona y tonta sonrisa del rostro.
Vaya, que gracioso nombre tienes, Arthur-. Dijo pronunciando marcadamente la última palabra, molestando aun más al ya muy molesto inglés-. ¿Me ayudarías a desempacar?, si no te molesta, claro…Aunque mas te molestaría que alguien le dijera algunas malas conductas que tienes al director… ¿No lo crees,Kirkland?.
Ese español de mierda… realmente se estaba metiendo con el… y nadie que se atreviera a hacer semejante cosa salía bien parado…No si te atrevías a enfrentar a Arthur Kirkland.
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¡Juro por Ore-sama que el próximo capitulo será mas largo! Pero es que ahora no me ha quedado tiempo de alargarlo, y si no lo subo hoy, no será nunca…
Aclaraciones: Dentro de un dia subiré la continuación, pero el tercero lo subiré en una semana, pues por el colegio y los exámenes, no puedo escribir durante la semana…
Como no sé el nombre oficial de Seychelles, la nombro con el nombre del país, y es que, si no les molesta, la seguiré llamando así.
Este fanfic no contendrá Inglaterra x Seychelles, por si alguien dudaba, solo la utilizo como novia de Arthur porque es la chica mas cercana a él.
Luego aparecerán los demás personajes, hablese de Francis, Alfred, Kiku, Feliciano, etc…
Bueno, creo que esto es todo, y sin más que decir al respecto, me despido.
Sayonara-.