Resumen: aria/ ezra… aria es una chica no muy segura de si misma pero al encontrarse con ese amor tantas veces anhelado aprenderá no solo el color de sus ojos.
Los personajes no son mios sino de la querida Sarah shepard pero la historia si.
"Porque son niña tus ojos"
Gustavo Adolfo Bécquer
El regreso de Aria de Islandia no fue una sorpresa para ella, sus padres lo habían planeados desde hace semanas y estaba más que contenta por terminar su ultimo año el Rosewood junto con sus antiguas amigas Emily, Hanna y Spencer, lo había esperado tanto que en último momento sintió un desanimo y todo se echo a perder.
Cogió el coche de la entrada y salió sin decir nada, necesitaba un café uno como el de Spencer que te da tantos escalofríos como te exaltas, pero no iría a su casa porque le haría tantas preguntas que no querría responder, mejor la vería mañana cuando este de mejor humor, paso por las tiendas de aquella ciudad donde los secretos no duran mucho y recorrió con la vista a aquellas personas que aun se mantenían vagas por su memoria, dejo el carro en el estacionamiento de la cafetería donde recordaba ir con sus amigas y salió del auto, con su vestido color morado arriba de las rodillas y unas botas marrones que combinaban perfectamente ese día, con su mirada clavada en el interior de aquella cafetería que en unos minutos se había llenado hasta más no poder "me tardare más de lo que esperaba" pensó, pero en verdad no le importaba no quería regresar, no quería que llegara el mañana, tenía miedo.
Caminó con lentitud pero con decisión hacia la multitud que aun no salía hasta afuera del recinto y se estableció en la cola del cajero, y se quedo como si nada esperando su pedido, eran dos colas y a su costado estaba un chico cuyos hermosos cabellos negros en rulos le llamaron la atención y los miraba con precaución para que no se dé cuenta, pero lo que Aria no se había dado cuenta era que el chico hacia lo mismo con ella, tal vez fue su cara inquietante que la hizo admirable, ella estaba de perfil por eso que no la podía ver completamente como lo hubiera deseado, la cola de ella se adelanto y la perdió de vista y ella a él también, sus corazones se entristecieron.
Aria termino su pedido, que ya se llevarían a su mesa; toda la gente se quejaba, como no había espacio tenían que compartir mesa con desconocidos; una señorita la llevo a la suya, por fortuna era una de a dos y con vista a la ventana, solo faltaba esperar a esa persona que se sentaría a su lado, pero por su mente vago el rostro de niño que apenas pudo ver de aquel chico de los cabellos negros.
Ella estaba tan adelante que ni siquiera la podía ver solo su cabello negro ondeante, la cola en la que estaba avanzaba lento y era porque una señora de edad se demoraba en contar su vuelto, cuando esto paso ella salió de la fila y se volteo hacia él, por un momento sintió como si toda su vida no hubiera tenido significado, cuando vio esos hermosos ojos chocolate grandes como almendras impregnarse de su alma y aquella muchacha de la que solo recordaría el color de sus ojos siguió su camino.
