La serie de Saint Seiya y sus personajes, son propiedad de su autor, Masami Kurumada


- Maestro... ¿Y si las puertas ceden... qué haremos?

Un trueno, mas fuerte de lo normal, hizo temblar el suelo y las paredes, como una amenaza ante las palabras del delgaducho hombre que tembló de pies a cabeza. Súbitamente, el silencio volvió a llenar la sala y solo permitía que la lluvia de fuera lo rompiera.

- Maestro... - volvió a murmurar retorciéndose las manos presa del nerviosismo

Un rayo le hizo saltar otra vez de miedo e ilumino el rostro de un hombre anciano sentado sobre un viejo trono de piedra cincelado hacia mucho tiempo por expertas manos. Su rostro estaba cubierto de profundas arrugas, y su pelo, blanco, caía suavemente sobre sus hombros anchos que delataban que durante su juventud había gozado de un vigoroso cuerpo que resistía firmemente al paso de los años

- ¿Qué ha sido de nuestros caballeros?

Su voz, en contraste con su constitución, fue un susurro débil y quebradizo

- Señor... Los caballeros hace años que duermen en sus tumbas... ¿Acaso no lo recordáis?- la duda y el asombro tiñeron las palabras del hombre. ¿Era posible que el maestro hubiera comenzado a caminar hacia su declive?

La lluvia contra las paredes volvió a hacerse dueña de la enorme sala donde departían los dos hombres, ahora sumido en tinieblas solo iluminados por pequeños ventanales cerca del alto techo.

- Entiendo... El gran sabio también partió hacia mucho tiempo... razono consiguiendo que los temores del hombre sobre la perdida de sus facultades aumentaran- Jamas vivimos tiempos tan oscuros... - el anciano movió la cabeza antes de ponerse en pie acompañado por el quedo susurro de su túnica blanca. El hombre se encogió de nuevo, pero en esta ocasión de respeto hacia el anciano de largos cabellos y barba cuando este tomo con gesto cansado el bastón de madera, lleno de nudos, que había permanecido junto a su silla.

- Si las puertas terminan por romperse, pediremos ayuda al Santuario- a medida que hablaba su voz había ganado fuerza y confianza. Un rayo volvió a iluminar el lugar, haciendo brillar de seguridad los ojos del anciano de un color difícil de describir.

El hombre frunció el gesto cuando llego el trueno pero permaneció donde estaba

- Y rogar a los dioses porque aun recuerden la Antigua Alianza...- continuo el anciano

- Así se hará, Gran Druida...

La frente del hombre estuvo a punto de rozar el suelo con la reverencia que le dedico al maestro. Tras esta, se dio la vuelta y se dirigió hacia las grandes puertas de salida.

Cuando escucho el sonido de esta al cerrar y supo que por fin estaba solo, sin mas compañía que la incesante lluvia, inclinó la cabeza. Parecía mas el hombre vencido por los años, que el ser, alto y fuerte, que instantes antes había sido.

- Pero temo que sea ya demasiado tarde...

Una lagrima resbalo por su mejilla hasta morir en su blanca barba.


Aqui empieza otro fic mio Este fic es algo totalmente alternativo al manga o el anime. Tampoco puedo determinar despues de que saga es U supongo que iria despues de la del santuario... El fic gira un poco entorno a la figura de Shunrei, por si este personaje no os cae especialmente bien... UU

Y despues de esto pasamos al primer capitulo o