POV Hatori
"Nunca te has preguntado donde estarías sino fuera por un momento especial en tu vida?? Algunas personas ven como algo insignificante un acto sincero y amable, o conocer a alguien especial, o la muerte de un ser querido. Todos los momentos de nuestras vidas conllevan una marca que de alguna forma se manifiesta en cómo actuamos y en cómo somos. Piensa seriamente en estos momentos..."
"Y tú? Qué momento en tu vida marcó quién eres???"
Hatori leía con detenimiento el artículo que salía en su revista mensual. Era una estupidez ya que ni siquiera leía ese tipo de literatura. Solo estaba subscrito a la revista porque a Yoshino le gustaba y le daba pereza pagarlo. Pero a Hatori nunca le parecía tedioso convivir con las particularidades de su amigo de la infancia.
Hatori Yoshiyuki conoció a Yoshino cuando eran niños. Prácticamente crecieron juntos. Hatori no tenía un solo recuerdo de su infancia que no incluyera a Yoshino.
Desde muy joven, Hatori reconoció que estaba enamorado de su mejor amigo. Su calidez y alegría llenaban sus días con totalidad. Yoshino era una persona algo egoísta y obstinada, pero era la persona más importante en la vida de Hatori.
Luego de su descubrimiento, Hatori decidió que apoyaría el sueño de su mejor amigo como fuera. Estudió todo lo que pudo para convertirse en editor y pidió que le pusieran específicamente a cargo de un joven Yoshino, apenas comenzando su carrera como mangaka. Aún en estos días no podía arrepentirse de su decisión.
De algo que si se arrepentía, y se arrepentiría toda su vida, fue la forma en la que enfrentó a Yoshino el día que le besó dormido. Nunca quiso hacerle daño de esa manera. Solo sintió que si no lograba tenerlo ese día, nunca tendría la oportunidad de nuevo. Solo que en su propia miseria no pensó en lo que estaría pasando Yoshino bajo sus cuidados. A pesar de que se disculpó profundamente, Yoshino nunca se lo tuvo en cuenta.
Definitivamente no merecía la felicidad que tenía ahora.
- Qué lees?? - preguntó Yoshino desde el otro lado del sofá.
Había tomado un día libre (cosa rara en él), y la habían pasado tirados en el sofá todo el día, solo sintiéndose el uno al otro.
- La revista que pediste que me anotara.
- Yo te pedí que te anotaras a una revista? - un confundido Yoshino preguntó.
Era normal entre ellos que cosas como estas pasaran. Yoshino hacía alguna petición irracional, y luego olvidaba todo detalle de ello cuando Hatori se lo comentaba. Pero a Hatori nunca le importó cuidar de él. De hecho, lo disfrutaba.
- Nada, no te preocupes.
- Oh... y que dice la revista?
- Habla de reconocer un momento en tu vida que cambiara tu forma de ser - comentó de forma estoica Hatori, volviendo a su revista.
- Y qué momento eliges tú? - preguntó curioso Yoshino.
- Eh? - Hatori no se esperaba el interés de Yoshino en el tema.
- Qué momento en tu vida te cambió?
Esa era una pregunta muy fácil de responder.
Hatori dejó a un lado la revista que estaba leyendo, se levantó de su lado del sofá hasta llegar a sentarse al lado de Yoshino.
- Cómo quieres que responda a esa pregunta? - preguntó Hatori tomando la barbilla de Yoshino entre sus dedos, haciendo que le mirara a los ojos.
- Eh? - dijo algo distraído Yoshino.
- Qué respuesta estás esperando?
- Yo? Nada era simple curiosidad - dijo algo ofuscado el pelicastaño más pequeño.
- Ya... - murmuró Hatori algo pensativo y luego de una pausa dijo - Tú.
- Eh?
- Tú fuiste el momento en mi vida que me cambió a lo que soy ahora.
Y era cierto. Si no hubiese conocido a Yoshino, era posible que con su personalidad y actitud, nada le hubiese causado exitación y alegría. Se hubiese casado, posiblemente con alguien que su madre hubiese decidido, tenido hijos, sin conocer lo que es amar a alguien tan profunda y apasionadamente. No hubiese sido editor, lo cual sería una pena porque le gustaba mucho su trabajo. No tendría los amigos que tiene ahora y nunca hubiera conocido la dicha de ser correspondido.
- Por qué dices algo como eso? - dijo Yoshino completamente rojo.
- Tú fuiste el que preguntó... - dijo Hatori susurrando mientras acercaba sus labios a los de su novio.
- Pero... no... esperaba...
Sus labios se encontraron, y la misma chispa que siempre sentía cada vez que le besaba voló por sus sentidos. Nada se sentía tan bien en su vida como besar a Yoshino. Sus lengas se encontraron y Yoshino soltó un ligero gemido. Separándose Hatori dijo:
- Qué es esto? Tanto te gustó?
- No digas cosas así! - Yoshino comentó algo molesto.
- Eso quiere decir que no quieres seguir?
Hatori conocía a su pareja. Trataba de dar siempre la imagen de que no quería sus avances para luego ser el que iniciaba el contacto.
Y esta vez no fue la excepción.
- Yo no dije eso - dijo mientras colocaba sus brazos alrededor de Hatori y le besaba nuevamente.
Hatori estaba convencido, que volvería a pasar todos esos años de amor no correspondido, solo para volver a este exacto momento en su vida donde no querría cambiar ni una sola cosa...
