Esto es un regalo para las que querían que mi anterior historia continuara. :) .Sois mas majas que las pesetas. Así da gusto escribir fics!

besitos!


Abrió los ojos, la luz de las farolas del puerto de Marte se filtraba por la ventana. La única ventana de la nave era la de su cuarto. Sonrió agradeciendo el momento en que había elegido esa habitación.

Ella le daba la espalda, su cuerpo desnudo emitía un agradable calor. Su cabello oscuro caía en cascada sobre sus hombros, su silueta era como un valle, un valle en el que perderse por toda la eternidad.

Alargó su mano para tocarla pero se detuvo. Se revolvió en sueños, se dio la vuelta, soñando algo que la atormentaba. No se atrevió a moverse, ella apoyaba la cara en sus propias manos con un gesto de preocupación.

Era tan hermosa, incluso dormida, dormida era pacifica, incluso bajo aquella luz, que ni siquiera era luz. Volvió a revolverse en sueños, acercándose a él, apoyando la cabeza en su pecho. Parpadeó en sueños y Spike sintió que se le erizaba la piel. El verde intenso de sus ojos le paralizó. Verde profundo, verde musgo, llenos de fuego, de rabia, llenos de tristeza. Murmuró algo dormida, tiritó y se acurrucó contra él. Spike subió la sabana para cubrirla y dejó reposar la mano sobre su cadera. Su respiración se agitó e hizo una mueca de dolor. Spike le pasó la mano por el pelo. Faye abrió los ojos y le miró llena de pánico, como si aún no hubiese despertado.

- Eh -susurró él acariciando sus mejillas. - ¿Una pesadilla?

-Si – murmuró ella acurrucándose contra su pecho.

-Solo es un sueño – dijo él pasando la mano por su cabeza.

- Si- volvió a decir en un sollozo.

- Faye...- Spike le pasó el brazo por la espalda.

- Siempre sueño lo mismo- dijo en un tono de voz inaudible . - Pensé que... - casi no podía oírla. - Spike... - Ella besó su pecho, enredando con los dedos en su pelo, deslizando con cuidado las manos por su cuello, tocando sus hombros, sus brazos, acariciando su espalda – Te necesito mas cerca. - susurró.

Una corriente de electricidad atravesó su columna vertebral cuando ella le empujó suavemente con las manos y se colocó sobre él. Se quedó quieta con la cara contra su cuello. Su respiración suave y cálida le hacia cosquillas, puso los labios en el lugar en el que finalizaba su mandíbula, dándole un beso húmedo. Spike acarició sus muslos y la agarró de la cintura.

Faye se puso a horcajadas sobre él sonriendo, moviéndose muy despacio, marcando el ritmo, dejó reposar las manos sobre su pecho y él contuvo un gruñido de placer, deslizó sus manos hacía su cuello y las colocó sobre la cama. El pelo le caía a ambos lado de la cara. Spike sostuvo su rostro con las manos.

- Bésame – suplicó entre gemidos.

Ella se inclinó muy despacio, manteniendo el ritmo de las caderas sobre la pelvis de Spike. Sonrió a escasos milimetros de sus labios y volvió a enderezarse, aumentando el ritmo de su movimiento.

-Joder Faye. - murmuró este sujetando con fuerza su cintura.

Ella dejó escapar un gemido y Spike se incorporó, abrazándola, agarrando su cara con ambas manos, besándola con lujuria, mordiendo su cuello. Faye volvió a gemir y él enterró la cara en su pecho, jadeando.

Le agarró del pelo mientras se sacudía en su interior. No podía dejar de moverse. Spike cayó sobre la cama mientras ella cabalgaba sobre él de manera salvaje. Faye cerró los ojos sintiendo una oleada de placer que recorría su cuerpo, se dejó caer rendida sobre él, que se detuvo un momento a coger aire y le dio la vuelta colocándose sobre ella, moviéndose muy despacio.

- Ooh dios – susurró Faye cuando el pasó las manos sobre sus pecho con delicadeza.

Recorrió sus brazos y entrelazó los dedos con los de ella, colocando las manos sobre su cabeza. Spike comenzó a ir mas deprisa, jadeando, con la respiración cada vez mas agitada, con la cabeza escondida junto a la suya. Cada vez mas rápido, llenando sus oídos de gemidos de placer. Faye gritó ahogada mientras el gruñía aumentando la velocidad de sus movimientos. Sintió una sacudida feroz dentro de ella y Spike cayó sobre su cuerpo.

Desenlazó una de sus manos y le tocó la cara, le acarició la nuca, jugueteó con sus rizos. Abrió los ojos, Spike estaba apoyado en la almohada a escasos milímetros de su rostro, recuperando el aliento, con una sonrisa dulce en los labios.

- Quédate ahí - susurró Faye. - Me gusta sentirte sobre mi.

El murmuró algo que no llego a entender, pero no se movió del sitio. Con la mano aún entrelazada a la suya. La beso con suavidad y volvió a cerrar los ojos.

Podía sentir la respiración de Spike en sus mejillas, su olor, su transpiración, la forma en la que su pecho subía y bajaba, su piel tostada. Recorrió con su mano la espalda de Spike dibujando con sus dedos los huesos de su columna. Repasó con sus yemas cada una de las cicatrices que blanqueaban su piel, tenia cicatrices sobre cicatrices. Se le encogió el corazón, cada una de ellas era un recuerdo dolorosos para él. ¿Como se puede sobrevivir a tantas heridas?

Se fijó en la linea de su mandíbula, que dibujaba su rostro. Era increíblemente guapo, tan guapo que le daban ganas de llorar.

El sudor había pegado su pelo contra la frente, lo apartó con cuidado acariciándole la cara.

Tenía un brazo sobre ella, se le marcaban los músculos como si estuviese en tensión. Se acurrucó contra él y se sintió pequeñita, sentía su respiración fuerte contra ella y oía los latidos de su corazón, le resultaba agradable, acogedor, aquel latido, aquella respiración, eran su hogar.

Spike dejó escapar un ronquido contra su oído y Faye no pudo evitar reírse.

- ¿De que demonios te ríes, bruja? - murmuró somnoliento.

Ella se dio la vuelta, dándole la espalda y Spike la atrapó con el brazo.

- Estabas roncando – contestó cubriendo su cara con una mano sin poder evitar reírse. - ¿El gran Spike Spiegel no resiste el sexo mañanero?

- Mmmm- murmuró el mientras la mordisqueaba el cuello. - No estaba dormido.

- Si que lo estabas. - susurró ella. - Si no resistes, no pasa nada - dijo dando unas suaves palmaditas en su brazo.

Él volvió a morder su cuello y ella se rió. Se colocó sobre ella con una sonrisa enorme en el rostro.

- Vamos a ver si resisto o no -


Espero que os haya gustado. He de confesar que me da vergüenza escribir estas cosas.. jajajaja. Es broma, aunque un poco si, yo que se. XD

No me hagáis mucho caso. :))