Capitulo 1
Asistir a fiestas elitistas no es divertido cuando tienes 10 años y no conoces a nadie más que a tus propios hermanos…
Pero eso no justifica la cara de pocos amigos que llevaba Christian.
-hijo, por favor. Compórtate – rogo su madre. El chico la volteo a ver y sonrió de mala gana, eso pareció hacer feliz a Grace, una sonrisa fingida es mejor que nada. La Doctora suspiro resignada llevando a sus tres hijos a la mesa correspondiente, junto con los demás miembros de la sociedad, ya venía siendo hora de que sus hijos se comenzaran a relacionar con los hijos de los amigos de la familia.
Levanto una plegaria al cielo para que su hijo más rebelde se adaptara.
Dejándolos solos fue con su marido a saludar, cuatro parejas ya los estaban llamando, felices de volver a ver a sus amigos después da tanto tiempo.
Los chicos se quedaron solos, viendo con espanto a los nueve chiquillos que los veían fijamente, como si ellos también estuvieran incómodos.
Las hermanas Kavanagh, los Steel, los Cullen y los Hale.
Todos no mayores de once años, y organizados como si estuvieran a punto de ser premiados, nadie hablaba… hasta que Elliot rompió el silencio.
-Soy Elliot Gray… ustedes son? –la chica rubia sonrió.
-Rosalie Kavanagh, y esta es mi hermana Kate – Kate le sonrió ruborizándose, la niña no podía tener menos de seis. – Ellos son los Steel – siguió la rubia señalando a los tres hermanos pelioscuro – Emmett y las gemelas Anastasia e Isabella – ambas parecían asustadas, escondiéndose detrás de su corpulento hermano mayor. – Ellos son los Cullen – dijo Rosalie señalándolos – Edward y Alice – Alice sonrió llegando al lado de las gemelas y Kate se les unió después, sonriéndoles como permiso a unirse, las chicas sonrieron también – y los Hale, Ethan y Jasper…
Elliot fue con los chicos de su edad, no es como si hubiera mucha variedad de edades ya que pareciera que sus padres se habían puesto de acuerdo para tenerlos a todos juntos.
Las niñas giraban entre los seis y siete años, mientras que Rosalie, Emmett, Elliot y Ethan oscilaban entre los once, Edward, Jasper y Christian solo diez. Después de esa cena, se hicieron inseparables.
Justo como sus padres lo habían hecho hace no muchos años…
Preparándose para ser los amos del mundo
16 años después.
-Señor Gray – llamo Taylor desde el intercomunicador, haciendo que Christian dejara a Laila sentada en el sofá esperando por él.
-si? – respondió seco y apresurado.
- la señorita Kavanagh desea verlo… dice que no acepta un no por respuesta – Christian rodo los ojos, estaba a punto darle indicaciones para que la corrieran a como diera lugar cuando su celular vibró, dejando un claro mensaje en la pantalla. "no puedes seguir escapando Christian, o me dejas pasar o…" ni siquiera termino de leer el mensaje, bloqueo la pantalla y suspiro resignado, a veces Rose era más que molesta.
-déjala pasar Taylor – ordeno sobándose la sien. Apenas y lo dijo los pasos entaconados fueron audibles por los pasillos, y él un golpe seco la puerta de su departamento se abrió dejando ver a una alta y demasiado bien proporcionada chica rubia.
-buena decisión Gray! – dijo Rose en forma de saludo – ahora, me vas a decir el porqué de tu ignorancia hacia tus amigos? – parecía enojada, luego volteo a ver a Laila y le sonrió. – hola Laila. – la chica sin atreverse a hablar saludo también.
-yo no…
-mañana es el aniversario de mis padres, y como sabes, cada año se festeja igual. Quiero que estés ahí! – exigió la rubia.
-estoy ocupado – dijo Christian sentándose en su piano de cola.
-esa excusa ya la usaste por más de seis años…
-una empresa no se maneja sola, Rose – respondió a la defensiva. La chica sonrió.
-ay, vamos! Nadie se va a morir por una semana que estés lejos. Además… te extrañamos! Las llamadas telefónicas no son lo mismo y lo sabes. – el chico la vio por un largo tiempo.
-eh estado ocupado – repitió.
- lo sé, ya lo mencionaste. – Rose suspiro – no me importa cómo le hagas, vas a estar allí quieras o no! Vendré yo misma por ti si es necesario! – amenazo la rubia antes de salir a taconazos de ahí. Despidiéndose de Laila y de Taylor.
Cristian suspiro volviéndose a sentar cerca de una sonriente Laila, quien después de sentirlo cerca borro su sonrisa.
– en que estábamos? – pregunto este con su típica voz de negocios.
-te decía… - Laila dudo, sin encontrar las palabras correctas para dejar a su aventura desde hace dos años – que…
-no tengo todo el día – amenazo este.
- quiero acabar… encontré a alguien de la que no soy solo un juguete sexual… y yo… ya no puedo Chistian! – chillo la chica tapando su cara. El moreno se acerco a ella haciéndola levantar su cara.
-está bien… te lo mereces – dijo, sin alguna despedida… pero es que ellos no eran novios! Ella solo había sido una diversión mas para él, como muchas más antes que ella. La chica suspiro resignada, tomando aire para tranquilizarse, sin saber a donde había querido llegar con eso… solo cansada de haber sido su sumisa por tanto tiempo, sin reconocimiento, sin nada!
-nos vemos Christian – dijo como despedida. Dejándose llevar por sus pies, saliendo del edificio en el que había pasado innumerables noches inolvidables…
Christian se quedo quieto por unos segundos, sin sentir en cierta forma el abandono… Se levanto de golpe yendo a su habitación para tomar una larga ducha. No sin antes llamar a Ella.
-Sr, Gray? – pregunto esta. Como siempre disponible.
-cánsela todas mis citas en esta semana, reorganízame. Y quiero a Charlie Tango listo para partir en media hora – dijo antes de colgar el teléfono y darse un regaderazo rápido. Ir a Forks no le traía los mejores recuerdos del mundo. Pero sabía que no podía huir más…
hola!
dada mi reciente racha "lo borro porque se me da la gana" les prometo con una sola persona que me diga que le gusta esto, lo continuo no importa como!
también me estaba fijando que no había de estos crossover en español, lo cual se me hace triste! que nos pasa hablaespaña! debo recordarles que somos el idioma con mas fic de crepusculo? espero que no!
como sea. espero que les guste. me lo dejarian saber en un bonito (o feo) review?
los seguimos leyendo?
xoxo
