Capítulo Uno – In Old Howgarts
Ahora si voy a salir completamente de mi zona de confort, por solicitud de una amiga que hace ya algunas lunas me pidió un fic sobre Hermione y Draco, y aunque Harry Potter no es mi máximo, desde que hice Sueño de una Noche Eterna esta historia estuvo rondando en mi cabecita… y que mejor que el mundo mágico para situarla.
Solamente la trama es mía, algo que me ayuda a bajar el estrés de un mundo en el que la imaginación y la magia no tienen siempre cabida.
¿Me has llamado bella? Lo has de retirar.
Demetrio ama tu belleza. ¡Gran dicha!
Le guían tus ojos, y tu voz divina
le suena más dulce que al pastor la alondra
cuando el trigo es verde y el espino brota.
El mal se contagia. ¡Pero no un semblante!
El tuyo, mi Hermia, quisiera robarte.
Mi oído, tu voz; mis ojos anhelan
tus ojos; mi lengua, el son de tu lengua.
Fuera mío el mundo, menos a Demetrio,
por cambiarme en ti lo daría entero.
¡Ah, enséñame a ser bella, dime ya
cómo logras a Demetrio enamorar!
Un día más… una maldita mañana más observando como su mejor amiga atrae todas las miradas de la población masculina del colegio, nuevamente fingiendo que el asunto no le afecta en lo absoluto, que al ser una chica totalmente cerebral no le importaría en lo absoluto, pero ser amiga de una de las brujas más hermosas del mundo, no es nada fácil… no importa que ella sea catalogada como la más inteligente de su generación, muy en el fondo es una mujer que desea sentirse hermosa y deseada, y no por eso es menos brillante.
Ginny floreció, aún más de lo que ya lo había hecho en los últimos dos años, dejo atrás a la jovencita machorra que juega Quiditch, para transformarse en una sexy mujer, que además de despertar fantasías sucias en todo el colegio, es alguien con quien se puede platicar de deportes, la mujer perfecta. Su amiga sabe a la perfección del poder que tiene sobre los varones, uno que no utiliza, por que corazón no late por otro más que por Harry Potter.
Pero las miradas están ahí, la esperanza de que alguno de ellos pueda lograr que sus sentimientos cambien, que le demuestren que el amor de adolescentes no siempre se transforma en uno de adultos, entre esos pobres ilusos esta el único hombre por el que Hermione Granger esta total y completamente enamorada desde el primer día en que fijo su mirada en él hace casi ocho años.
Ocho años de estar mintiendo… No fue hasta el segundo séptimo año cuando regresaron a terminar sus estudios después de la guerra, cuando al fin se dio cuenta que sus sentimientos por uno de sus mejores amigo, con que él no puede pasar más de dos minutos sin discutir, no fue más que una pantalla para no confesarse a sí misma que está total y completamente enamorada de una aberración del averno como Draco Malfoy.
Efectivamente ahora ya puede ser sincera consigo misma y dejarse de mentir, desde la primera vez que lo vio se ha sentido terriblemente atraída por él. Lo vio en el Expreso y para ella fue como si un príncipe de Disney hubiera cobrado vida, una especie de Felipe combinado con el príncipe Erick, claro el idiota tuvo que abrir la bocota y mostrarle que era un idiota, uno muy atractivo.
Con el tiempo las cosas fueron empeorando, cuando sus hormonas atacaron con fuerza, su primer erótico no fue con un actor como las chicas muggle de su edad, no fue con el hurón albino… aun cuando pensó estar enamorada de Roy, no podía quitarse a Draco de la mente.
No supo como sucedió, pero a pesar de las palabras hirientes y miradas de asco, una parte de ella sabía que no era más que un acto elaborado para tener feliz a su padre… ese bastardo si era todo un aborto del infierno, y su hijo hacía todo lo posible para hacerlo sentir orgulloso. Draco jamás la insulto cuando coincidían solos en la biblioteca o se cruzaban por los pasillos y él iba sin su sequito, solamente la ignoraba, Malfoy guardaba siempre sus mejores insultos para cuando tenían público, sus gorilas o los amigos de ella.
La forma en que se dio cuenta de la elaborada fachada fue por sus ojos, para todos los demás eran fríos pero para ella eran una ventana a su alma, la primera vez que los vio fijamente fue cuando por unos segundos sus miradas se cruzaron en el baile de invierno de cuarto, ella iba del brazo de Victor Krum pero cuando lo vio observarla con la boca abierta deseo con todas sus fuerzas ir con él, sus miradas se cruzaron y pudo ver en ellos que pensaba que lucía hermosa, ella sonrió con timidez y él, aunque ocultó su sonrisa, la observo de una manera que la hizo sentir apreciada.
Su siguiente mirada especial fue cuando lo encontró en un pasillo oscuro toqueteándose con su noviecilla Pansy, las manos de él por todo su cuerpo acariciándola, ella no pudo moverse pero de repente el alzo la mirada y la fijo en Hermione, sonrió y continúo acariciando a la boba cara de cachorro, sin dejar de ver a la chica castaña de cabello rebelde. Cuando al fin pudo quitarse el embrujo de su mirada, regresó cabizbaja a su torre sin siquiera reportar el incidente, esa fue la primera vez que se tocó a sí misma, lo hizo imaginándose que eran los dedos largos y finos de Draco los que la acariciaban de manera demandante y sensual, su primer orgasmo y todos los siguientes han sido culminados con el nombre del maldito hurón dicho entre gemidos, como una oración.
La mirada que le rompió el alma fue la que le dirigió una noche antes del asesinato de Dumbledore, levantó la mirada durante la cena pues sintió que alguien la observaba con insistencia, nada la preparado para toparse con Draco Malfoy, delgado y decaído, supo que iba a hacer algo malo, que quería hablar con alguien para quitarse el peso de encima, que alguien lo detuviera porque estaba a punto de perder el alma, cuando supo lo que sucedió en la Torre de Astronomía quiso odiarlo, pero no pudo, Draco le pidió ayuda con su mirada y ella fue tan cobarde que no se la dio, aun así lo desprecio, y a ella misma, por su culpa su querido Director había muerto.
Draco Malfoy era un niño cobarde y egoísta que no por no perder todos sus malditos lujos estuvo a punto de quitar una vida, ayudo a mortifagos y hombres lobo a entrar a su amado colegio, y todo se fue más rápido a la mierda por su culpa… tuvo que madurar rápidamente y volverse una fugitiva por las consecuencias de los actos del hurón.
Comenzó a cambiar su opinión de Malfoy cuando su tía la torturo sobre la exquisita y cara alfombra de su sala, primero fingió demencia cuando sus padres y la loca de Bellatrix lo presionaron para identificarlos, claro que sabía que era Harry pero aun así mintió con frialdad, pero el punto decisivo fue cuando desvió su mirada para fijarla en cualquier cosa que la ayudara a no reventar, se encontró con los hermosos ojos grises de él, lo que vio en ellos no fue asco o placer, vaya ni siquiera curiosidad, lo que vio fue dolor, una infinita tristeza… fueron esos ojos que le gritaban sin palabras que fuera fuerte, que no le diera el placer a la perra de romperla.
Por lo que ella sintió fue toda una vida, fue la mirada de él lo que la mantuvo cuerda, los que evitaron que dijera la verdad, la lucha consigo mismo de intentar salvarla y ponerlos en riesgo a todos, o solamente devolverle ese valor que siempre supo tenía dentro de sí. Draco Malfoy le dio esperanza y la apoyo en el momento más oscuro de su vida, y lo hizo sin decir una sola palabra, su mirada significo mucho más que todos los discursos de superación de sus amigos o maestros.
Cuando volvió a verlo, durante la batalla de Howgarts, era de nueva cuenta la mierda hermosa que conocía a la perfección, inclusive cuando lo salvaron de la sala de los menesteres no dejo de ser el clon de Lucius; sin embargo cuando ella se sentía derrotada por ver lo que suponía era el cuerpo sin vida de su mejor amigo, el verlo unirse con sus padres en el lado de Valdermot, le terminó de romper el corazón, Draco volteo a verla y por una fracción de segundo con la mirada se disculpo por ser débil, ella pudo leer el asco que sintió por si mismo, por traicionarse al unirse a un bando en el que jamás creyó.
Antes del colegio lo vio una última vez, fue durante su juicio por crímenes de guerra, el fijo su mirada en ella cuando leyeron sus cargos, pidiéndole disculpas de cada uno de ellos, pero en el momento en que Hermione subió al estrado y hablo a su favor de como se rehusó a reconocerlos cuando fueron atrapados y llevados a su casa, él bajo la mirada y pudo verlo sollozar en silencio. Cuando dictaron su sentencia, ella le devolvió el favor de la peor noche de su vida, fijo su mirada en el y le dio fuerzas con ella, sonriéndole con timidez. Después no supo nada de él, ni siquiera era seguro que regresara al colegio, paso todo un verano sin leer ni media palabra de los Malfoy en el Profeta, y sin embargo ella no paso un solo día sin pensar en él, en esos ojos tristes y derrotados.
Nuevamente se odio por ser débil, como aquella noche en sexto, deseo tanto pararse a su lado y abrazarlo con fuerza cuando dictaron su sentencia, besarlo en los labios cuando suspiro con tranquilidad al escuchar el "No Culpable", pero tuvo miedo, de ser rechazada o ridiculizada por él, de ser amarrada y llevada a San Mungo por sus mejores amigos; todo el verano se golpeó en sentido figurado por ser tan cobarde.
Ella misma no pudo creerlo, pero cuando lo vio entrar al Gran Salón luciendo mucho más atractivo que nunca con esa cicatriz sobre su ceja derecha, su cabello largo y despeinado, dejando atrás el cuerpo delgado de un chico berrinchudo, sino presumiendo el cuerpo de un hombre, de inmediato su corazón, y otra parte de su anatomía, comenzó a latir con fuerza. Pero no fue la reacción física lo que le confirmo sus temores, fue la tranquilidad que el verlo bien le trajo a su alma, el saber que sus esfuerzos por mantenerlo fuera de Azkaban rindieron frutos, la sangre sucia, el mestizo y el traidor la sangre le regalaron una segunda oportunidad, quien lo diría.
Con el paso de los días se pudo dar cuenta que Draco haría todo posible por aprovechar esa oportunidad, su cambio no fue solamente externo sino más profundo… ya no era tan maquiavélico como solía ser, no la ha llamado sangre sucia ni una sola vez, aunque eso no ha evitado los apodos para dos amigos, inclusive en algunas ocasiones la ha llamado por su nombre de pila y bromearon durante la clase de pociones, donde son pareja de estudio.
A Hermione le sorprendió de sobremanera cuando se acercó a ella en la biblioteca, más o menos al mes de haber comenzado el curso, su insistente mirada la obligo a levantar su mirada del libro que devoraba con intereses, no supo leer lo que vio en ellos, a pesar de que se consideraba una experta en la mirada de Draco Malfoy, pero cuando abrió su boca para disculparse - "te admiro, siempre lo he hecho y no sabes cuando siento haber herido tus sentimientos con la sarta de basura que te dije en los últimos años, por no haber evitado que ella te lastimará como lo hizo, por dejarla marcar tu brazo, siento haber sido un cobarde" – ella solamente sonrió con dulzura mientras se levantaba de su lugar para tomar la mano que el ofrecía, comenzando una linda amistad para él, para ella la promesa de que tal vez en algún momento él compartiría sus sentimientos.
El joven que fue obligado literalmente a tomar la marca oscura por el bienestar de su madre, que tuvo el peso de la muerte de Dumbledore sobre sus hombros hasta que supo la verdad por los recuerdos del único hombre que realmente admiro, Severus Snape, tuvo el verano para madurar lejos de la sombra de su maniaco padre, comenzó a moldear su propia personalidad, un joven realmente brillante, divertido y sincero, a veces demasiado, aunque no por eso menos vanidoso, realmente la ha sorprendido con sus deseos de conocer sobre el mundo de los muggle, de una sed de conocimiento tan grande como la suya propia.
Para Hermione fue darse cuenta que el interior de Malfoy es tan atractivo como su exterior, que parecía imposible pero si existen personas perfectas, que tienen todo; belleza, inteligencia, sentido del humor y sex-apeale… maldito brujo.
Pero cupido, ese sádico que usa pañal no por ser un dulce querubín, sino por que se la vive cagándola, la había armado en grande con ella, la joven de cabello castaño está más que segura que si alguna vez lo llegará a ver lo agarraría a pedradas por cabrón y despistado. Cuando al fin después de ocho años Hermione Granger se había armado de valor para tratar de conquistar a su nuevo amigo, el bodoque alado decidió flechar al objeto de su afecto.
Flashback
- Que hay entre la pelirroja y cara rajada – pregunto de repente en clase de pociones, su aliento cálido en su oído le hizo preguntarse como se sentiría en su ombligo y más al sur de su anatomía
- En caso de que no lo recuerdes "hurón", ambos tienen nombres – respondió sin voltear a verlo, fingiendo la reacción que había logrado en su virginal entrepierna
- Bastante mierdas si me preguntas a mi
- Claro, como Draco es un maravilloso y poético nombre
- Pues aunque te rehúses a reconocerlo, es mucho mejor que Harry o Ginevra, el tuyo no esta tan jodido
- Gracias… para ti eso debió haber sido todo un reto
- Que
- Hacerme un cumplido
- No fue a ti, sino a tus padres por el nombre que decidieron darle al pequeño arbusto con piernas que les toco por hija, pero dime Ginny y Harry van en serio – volvió a preguntar recalcando sus nombres
- Tanto como podría uno a los dieciocho, ellos juran que es amor eterno, pero la vida da muchas vueltas
- Así que no hay nada escrito sobre piedra
- Has leído el libro que te di – le respondió sorprendida, unas semanas antes le había regalado un libro de dichos muggles
- Si, vamos no te vayas por la tangente
- No, aún no se han comprometido, los Wesleys piensan que es demasiado pronto y que deben esperar unos años… por que tanto interés
- Pienso que es una lástima que una mujer como ella termine con alguien como Potter, podría conseguir algo mucho mejor
- ¿Alguien como tú? – preguntó sarcástica, al fin volteando para verlo, su mirada y expresión facial le rompieron el corazón al instante – tú también – fue lo único que pudo preguntar
- No sé que tiene, pero me vuelve loco… creo que alguien como ella podría ayudarme a dar el último paso para volverme realmente una buena persona, a alcanzar el potencial que dices puedes ver en mi
- Y el hecho de que sea sangre limpia no es un factor de peso – preguntó con amargura fijando su mirada en la marmita frente a ella
- Irrelevante, es una de las pocas personas que conozco que es tan hermosa por dentro como por fuera
Desvió el tema de la conversación comentando sobre el estado de la poción que prepararan, mientras que luchaba con todas sus fuerzas para no romper en llanto… pero que demonios pensaba, como podría siquiera creer que alguien como Draco Malfoy, heredero de una de las más grandes fortunas de Inglaterra mágica y galán de primera, podría siquiera verla, menos cuando frente a él esta alguien como Ginevra Wesley, comparada a esa hermosa mujer quien podría dedicarle más de una mirada al arbusto con piernas, al ratón de biblioteca… a la chica común y ordinaría de cabello castaño y ojos marrones.
Así que ahora lo único que puede es fingir que el interés de Draco por su mejor amiga no le importa en lo absoluto, pero no puede evitar preguntarse como Helena, su heroína favorita de Shakespeare, no le arranco el cuero cabelludo a Hermia. Porque tenía que hechizar a Draco, cuando ella ya tenía a Harry.
Su suerte no podría ser peor, le había dado su corazón a un joven obsesionado con su amiga, al único hombre que podría tener una oportunidad en hacer que Ginny dejará a un lado a Harry, su amigo es atractivo y una hermosa persona, pero Draco además de esas características tiene ese aire de hombre misterioso y tortuoso, dispuesto a aprender a amar, sin mencionar los rumores del Dios del Sexo de Slytherin… digamos que es lo más parecido a Johnny Depp en el mundo mágico.
- Estas bien Mione – la voz de la mujer que sin querer le esta robando la oportunidad de una historia de amor – Hermoine!
- Que pasa – responde exaltada, no sabe cuanto tiempo ha estado con la mirada perdida, ya ni siquiera desea fingir que esta leyendo
- Estas en la luna o más allá, que sucede contigo
- Nada, estoy preocupada por la temporada de exámenes, después de las vacaciones de invierno comenzamos con ensayos y parciales, tu sabes como suelo ponerme con todo esto
- No se como alguien con tu cerebro se puede preocupar por eso, seguramente las universidades mágicas de Europa deben ya tener tu carta de admisión y preparando su estrategia para que las escojas
- Y eso le adiciona estrés, temo decepcionar a aquellos que han puesto demasiados esperanzas en mi y mi gran cerebrote, como le llaman todos últimamente
- Claro, yo creo que más bien es la cereza del pastel, o mejor dicho el dragón de tu cuento de hadas
- De que cuernos estás hablando
- De tus sentimientos por Draco – le responde la pelirroja con la voz más baja que es capaz para que los demás no la escuchen, aunque no sabe bien por que pues la biblioteca esta prácticamente desierta – vamos no finjas demencia, deberías ver los ojitos de borreguito que pones cuando estas con él, como sonríes y juegas con tu cabello
- Por favor dime que no soy tan obvia – la castaña sospecha que sus mejillas deben lucir un coqueto pero muy incomodo color magenta
- No lo eres, pero te conozco desde hace 7 años, has sido mi mejor amiga y confidente por más de seis, se a la perfección lo que sucede en tu corazón, ¿él lo sabe?
- Claro que no, ya me habría echado una maldición si se enterará – suspira para completar – Draco esta interesado en otra chica
- No me digas que Pansy
- Alguien más – "tu… maldita sea, esta loco por ti", completamente en su mente
- Vamos, tarde o temprano se dará cuenta de la mujer que eres y caerá rendido a tus pies
- Claro, a las raíces del arbusto de la sabiduría, Ginny se perfectamente como luzco y no puedo compararme con la chica que le roba el sueño a Draco
- Creo que no te das el merito que mereces, eres hermosa y muy inteligente, cualquier hombre estaría orgulloso de estar contigo, él día que decidas darte cuenta de quien es Hermione Jane Granger tu suerte con los hombres comenzará a cambiar
- No mientras tu estés a la vista – el rostro de su amiga le hace darse cuenta que ese pensamiento la traiciono y lo había soltado así como así – me lleva el diablo y sus cien mil demonios – lanza un bufido nada femenino para finalmente completar – el hurón desea meterse en tu falda y tu corazón
- Vamos… eso es imposible
- Claro que no lo es, digo eres hermosa, inteligente, divertida y sangre limpia; todo lo que yo no soy
- Antes que nada debemos terminar con la fiesta de autocompasión, ahora jamás le he dado pie para que sienta que tiene una oportunidad
- No tienes que hacerlo, él es un Malfoy… y si un Malfoy desea algo no descansa hasta lograrlo, no se dará por vencido, el tipo es necio como una maldita mula, además el esta seguro que tu podrás ayudarlo a seguir por el buen camino, realmente desea ser un buen chico
- Y me alegro por él, pero eso significa que yo tenga que ayudarlo… en ese departamento tu eres la indicada, yo soy berrinchuda y tengo un carácter del carajo, en cambio tu
- Si soy la mejor amiga, todos saben que pueden contar conmigo para resolver sus problemas, pero eso no significa que algún día Draco podrá dejar de verme como algo más que eso, él esta enamorado de ti
- Y yo de Harry, nada puede cambiar eso, con un poco de esfuerzo de tu parte podrías lograr que el hurón este loco por ti en unos cuantas semanas, tienen tanto en común sin mencionar que eres realmente bella
- Me has llamado bella, por dios Draco ama tu belleza, tus ojos y tu voz divina, daría lo que fuera por ser como tú, podría hacer tus deberes por el resto del año solamente para que me enseñes a ser bella como tú, para lograr que Draco se enamore de mí.
- Suenas como un personaje de esos libros viejos que tanto te gustan, solo recuerda que en esos libros el amor siempre triunfa
- Suficiente de mi , como van tu y Harry
- Mis padres continúan oponiéndose a nuestra boda, al menos por ahora… pero yo no quiero esperar, he sabido desde los 13 que mi vida no estará jamás completa sin Harry a mi lado
- Deberías salir y conocer el mundo, darte la oportunidad de tratar a otras personas, los romances de juventud rara vez terminan juntos, deberías planear irnos de mochila por Europa o tal vez a América, solo nosotras dos
- Eso me encantaría, pero realmente lo que Harry y yo sentimos no es un amor de juventud, no después de lo que hemos vivido – Hermione no puede más que darle la razón a su amiga, toda su generación maduro a pasos agigantados – si no desean darnos su bendición, tendremos que hacerlo a sus espaldas
- De que carajos hablas – la sonrisa ladina de su amiga confirma sus sospechas – vamos no estamos en una comedia romántica muggle, que van a hacer huir y casarse en las Vegas
- Claro que no, pero planeamos irnos a Paris donde el límite de edad para casarse sin necesitar el consentimiento de nuestros padres es menor
- Realmente piensan fugarse durante las vacaciones de invierno
- Mis padres vacacionaran en Bulgaria, Ron y George estarán demasiado ocupados con la tienda, Bill irá con Fleaur a Bordeaux, es la mejor oportunidad que tenemos para hacerlo
- Porque no esperar unos cuantos años, vamos todavía tienen toda su vida por delante, si realmente están enamorados sentirán lo mismo en uno o dos años más
- No quiero esperar, no puedo hacerlo… que tal si el conoce a alguien más, si lo envían lejos, si estamos casados no importa si lo asignan a América o Asia, podré acompañarlo
- En eso tienes algo de razón, amor de lejos felices los cuatro solía decir mi abuela
- Además el que yo ya no este en el mercado puede ayudar tu causa
La castaña suspira como tratando de arreglar sus ideas, sus amigos se aman y desean estar juntos, Ginny tiene algo de razón, si la pelirroja ya no esta disponible, Hermione podría tener una oportunidad con Draco, una minúscula casi inexistente pero al fin una oportunidad
- En que deseas que te ayude
Ambas amigas se enfrascan en hacer planes para que la pareja pudiera viajar a Paris y al fin cumplir su sueño de ser el Sr. y Sra. Potter, tan envueltas están en ello que no se dan cuenta que una joven de cabello oscuro y facciones aristócratas con un eterno gesto de desdén las observa entre los estantes.
- Te digo que las escuche, están planeando huir para que esos dos mugrosos puedan unir sus vidas
- Estas segura Pansy, no creo que ambos se arriesgarían a escapar del colegio y casarse a las espaldas de sus padres… son demasiado buenos – Zabini no puede creerlo, sabe perfectamente la tendencia de su amiga a exagerar
- Aburridos dirás, pero aunque te rehúses a creerlo la Wesley y Potter están planeando mandar a todos a la mierda, lo planeo todo con la sangre sucia de Granger – las últimas tres palabras suenan con un desdén impresionante, como si le dejaran un saber a podrido en la boca
- No vuelvas a llamarla de esa manera Parkinson – Draco había permanecido en silencio, no queriendo creer lo dicho por la morena, pero la manera en que llamo a su amiga, por un instante le hace olvidar que podría perder la oportunidad de cortejar a la Ginny – ella menos que nadie merece ser tratada de esa manera
- Desde cuando defiendes a esa porquería, no es más que una andrajosa sangre sucia que no tiene por qué estar entre nosotros, una aberración de la naturaleza
- Desde que encontré las bolas que no tuve en la mansión para defenderla de Bella, desde que me di cuenta que ella vale mucho más que cualquiera de nosotros sangre limpias… así que te lo advierto Parkinson no vuelvas a expresarte así de ella
- Pensé que la que te provocaba sueños húmedos era la Wesley – Blaise trata de bromear para suavizar la tensión – pero seguramente como te mando a la mierda como al resto de nosotros, te has conformado con Hermione
- El mago que escoja Granger como su pareja será uno de los bastardos con más suerte de este mundo, ahora dime que planearon las jóvenes para la unión de Potter con Ginny
- Ahora si necesitas mi ayuda… vete al carajo, pregúntale a tu amiguita Granger
- A diferencia de ti querida, ella no traiciona la confianza de sus amigos
- Puede ver el beneficio que tu podrías obtener pero yo que gano con todo esto
- Joderle la vida al prójimo, especialmente a la pelirroja y a Granger, y creo que son las dos personas que más odias en este mundo – Blaise sabe muy bien como manipular a la joven – pensé que ahora eras de los chicos buenos
- Claro que lo soy, pero para ser sinceros podré ser una mejor persona y superado las idioteces racistas del imbécil de mi padre, pero eso no significa que me daré por vencido tan fácilmente
- Ese es el Draco que estimo, hermano ya me habías asustado
- Una vez slytherin – responde el rubio con una sonrisa en el rostro
No haría nada demasiado extremo, pero era su última oportunidad para intentar ganar el corazón de Ginevra, así que jugará su última carta y si no funciona podrá aceptar su derrota y seguir adelante, al menos lo intento.