Dejando todo… (NaruHina)
Capítulo 1: "Un castigo de la vida".
"Esto sin duda es una completa locura"
-Hinata-chan-
Hay veces que pienso sinceramente que la vida es un fraude, siempre pasan estas cosas malas a las personas de buen corazón, siempre es así, y por el fin de los tiempos ese es el destino inequívoco de los seres puros…
Aldea de la Hoja 26 de Diciembre, 23:23 horas –Complejo Hyuuga-
Dos sombras se aprecian en este del territorio Hyuuga, la penumbra de la fría noche de invierno se hace presente. El frio carcome los huesos, la piel se eriza al igual que los cabellos del cuerpo.
Hasta el más fuerte sucumbe ante el inmenso clima desatado por la furia de la madre naturaleza.
En aquel pequeño claro situado a la derecha del más antiguo roble de la zona se encuentra una joven mujer de tez clara, blanquecina como la nieve, de una altura aproximada a 1.68 metros que denotan la frágil y delicadeza de la misma. Su cabello lacio cae por la curvatura de la espalda, largo y espeso sin duda le propicia de una belleza única oculta tras su vestimenta color lila por parte de su sudadera y acompañado por sus pantalones azul-marino holgados, ropa holgada y fresca es la que usa escondiendo así la hermosura de su perfecto cuerpo, simplemente para sí y su amado.
Aquel sujeto que le acompaña le besa suavemente su hermoso y angelical rostro, postra su mano izquierda por la mejilla derecha, la otra se enreda por su cabello negro-azulado el cual cae libremente hasta su cintura.
La joven se apega más a su acompañante de cabellos dorados, entrelaza sus manos para aprisionarle en un cálido abrazo. Sus manos suben hasta el cuello del joven que fácilmente le sobrepasa por unos 10 cm, aquel joven de una vestimenta peculiarmente basada en el naranja y negro, aquel joven.
La ventisca fría separa a ambos de sus pensamientos destruyendo así aquel perfecto momento, el último de sus vidas, simplemente lo único.
-Hinata-chan-
-Dime estás completamente segura, ¿dejarías todo… por mí? –me pregunta al verme fijamente a los ojos, levantado mi mirada.
-Yo… yo… -es…-
-¿Sabes? –comentas-
Sin más gira su cabeza, lo más difícil ocurre en estos momentos tristes de mi infeliz vida.
Me agarra de la mano y nos sentamos sobre la sombra del viejo y olvidado roble, de Ichimi-san como le decía hace años…
Me siento a su lado, toma mis frías manos y entrelaza sus dedos con los míos, ligeramente me apeno, él baja la mirada,
Es difícil para que negarlo… transcurren los segundos y finalmente levanta la mirada, yo le sigo, se arma de valor, yo le imito, tiembla y titubea, yo entristezco…
-¿Sabes Hinata?... –simplemente me armo de valor y le miro- ¿Sabes que te amo verdad?-
Asisto- Hai- le dedico una sonrisa y se recupera.
-¿Recuerdas lo que te prometí?-
Es duro, pero aun así lo sé, simplemente esto es doloroso
-Mi sueño es ser reconocido, -dirige la mirada hacia la tenue luna- siempre he querido ser Hokage –lo sé- ¿Te lo había dicho verdad?-
No necesitas decirlo, simplemente se todo de ti, simplemente…
-Siempre lo he sabido Naruto…-
-¿Dime, cuál es tu sueño? –Me preguntas y una traicionera lágrima resbala por mis opalinos ojos-
-Dímelo por favor… -me suplicas y me haces más difícil las cosas-
-¿No confías en mí? –plenamente lo hago y lo sabes…-
-¿Dejaras todo… dejaras tu vida… y lo único que realmente vale? –no tengo opción, así son las cosas, por ello es más duro lo que me haces…
-No llores por favor, no llores, no lo aguanto… -me limpias con tu áspero dedo mis lágrimas apretando con la otra mano la mía.-
-No lo hagas más difícil, por favor, no lo hagas….-
No aguanto más, simplemente lloro, lloro por ser tan débil, por no poder defender lo único que deseo, por no poder estar contigo, simplemente por ser una Hyuuga…
-¿Recuerdas lo que te prometí, verdad?-
-Sí, sí Naruto- Al fin te contesto-
-Dime que fue… -te miro confundida, duele tanto- solo dímelo por favor… -mi triste corazón se destroza…-
-Me… me…. Prometiste estar… con… conmigo por siempre…-
Tu cara es indiferente….
-Estar con migo para amarme y….-
Me silencias con un dedo, y sin más me agarras con tus manos el rostro para darme un dulce beso, cálido y lleno de amor, cosa que necesitare, algo que ya no tendré, nunca más y lo sabes…
-Por favor Naruto no lo hagas más difícil… no lo hagas…-
Y el silencio nos invade, deseo irme de una vez y esperar el inminente destino.
-Sabes Hina –solo te escucho, no puedo verte, no más- Siempre cumplo con lo que digo, siempre, pero…-
-Esta vez no podrás, me casaré con ese… -marco un odio y desprecio- no tengo opción, no, yo no, el….-
-Déjame terminar –tu voz cambia, autoritario y decepción- y no hables de ese despreciable maldito…-
Tienes razón, no sé cómo pude decirle hermano alguna vez, simplemente no lo sé.
-Yo te amo, ¡TE AMO HYUUGA HINATA! Y por ello te pregunto…-
-Naru… -comprendo-
-¿Estarías dispuesta a dejar todo por mí, tu vida, tu familia, todo?-
Sabes que lo haría pero no puedo.
-Naruto yo…-
-¿Me amas? –siempre te he amado y nunca te olvidare-
-Yo… yo…. Sí, pero no puedo, no más y…
-Con eso me basta –sonríes como me gusta, dándome la única sonrisa real que pocas veces muestras.-
-Pero…-
De nueva cuenta me callas con tu delicioso y único beso, con nuestro amor.
-¿Contéstame lo harías?-
-No quiero que pierdas tus sueños, no quiero que sufras más, por eso lo hago…-
-¿No lo comprendes acaso?, eres todo lo que me importa, eres todo… -tu voz se apaga-
-Pero… ¿Qué hay de tus sacrificios, lo que has obtenido lo perderías, estás dispuesto a cederlo? –desiste solamente hazlo es lo mejor-
-Sí pero –no- ¿Qué hay de ti, no importa tu felicidad? –Tienes razón-
-Yo quiero, pero…
-¿Por una vez podríamos ser felices, acaso deseas perderlo? –yo no quiero-
-Se egoísta por una vez, se feliz, se mía, por favor…-
-Sí, sí Naruto…-
La penumbra de la noche se intensifica, los minutos pasan y se escuchan algunas campanadas, la media noche ha llegado y el comienzo de un nuevo día se da.
Para algunos les es indiferente esta fecha, otros no. Hoy es el cumpleaños número 18 de la Heredera del Byakugan de Hinata Hyuuga, aquella pobre chica condenada a un futuro incierto y lleno de tristezas.
Pero por el poco tiempo que tiene lo aprovecha al máximo con su amor, con su vida, con su todo. Se siente feliz al lado de aquel joven, junto a Uzumaki Naruto desahoga sus penas con tiernas caricias y delicados besos asiéndola suspirar por cada uno robado de esos perfectos rosáceos y carnosos labios.
-Naruto-kun-
-Estas lista mi niña hermosa-
Te sonrojas, eso es fantástico. Aunque no te lo haya dicho nunca eso es lo que me vuelve loco por ti, ese único sonrojo lleno de pureza y amor.
-Sí, pero…-
-No te preocupes tengo todo arreglado…-
Realmente lo he hecho, nunca echaría a perder esto, nunca, nunca.
-Necesito mis cosas, yo… -no Hina, no todo eso no importa…-
-Hime –te sonrojas más- nos iremos de una vez, y…-
-Pero Naruto para esto es necesario mis cosas, mi equipo y…-
Te callo, pongo mi dedo medio en tus hermosos labios, son únicos.
-No Hina, huiremos pero no es necesario nada, solamente los dos, solo eso…-
Tu cara es de una incertidumbre completa.
-No comprendo- lo supongo-
-Te mostrare la forma -saco de mi porta-kunais uno muy extraño de tres puntas.- Eres la primera que ve este Jutsu.-
-En serio-
-Je, je, si y no-
-No comprendo-
-Veras esta técnica es de mi padre y-
-De Yoindaime, De Minato-san-
Siempre tan lista y atenta.
-Sí, es el Hiraishin no Jutsu, con ello nos iremos y nadie en 18 años le ha visto, únicamente serás tú.-
-Gracias-
-A ti, a ti Hinata, a ti-
-Pero, ¿A dónde iremos?-
-No te preocupes tengo todo arreglado amor-
-Amor, amor, eso suena tan bien-
-Más de tus labios, más con tu suave y dulce voz-
Me besas dulcemente, este es diferente, es tan lleno de amor como si fuese el último de nuestras vidas, y así será el último aquí, esta vida acaba y comienza otra…
-Por cierto –busco entre mi chaqueta una cajita de madera y me miras expectante- ¡Feliz cumpleaños Hime!-
-Gracias Naruto, gracias amor –me abrasas y lloras pero de felicidad-
-Déjame ponértelo-
Agarro el hermoso juego, un collar de plata que resalta con tur ojos y un par de aretes que me recuerdan a ti.
-¿Cómo me veo?-
-Más hermosa que nunca-
Nos besamos de nuevo, y el tiempo pasa dando así la 1:03 de la mañana del 27 de Diciembre.
-Ya es hora-
-Está bien, aquí acaba nuestra antigua vida-
Cuánta razón tienes.
-¿Pero adonde iremos amor?-
-Importa eso-
-No, no si estás conmigo pero… y si nos encuentran…-
-No lo harán ya tengo un plan, hare lo que piensan que haga…-
-Pero…-
-Es una estrategia desapareceremos del mundo shinobi, estaremos donde nadie nos encuentre y lo haremos de un tajo…-
No pierdo tiempo y hago un clon mío y otro tuyo.
-¿Tienes lo que te pedí?-
-Claro –y me das tu perfume el cual le pongo tu aroma a mi clon que hizo un Henge tuyo obteniendo tu apariencia-
-Ellos amor –señalo a las copias- serán la cuartada y nosotros aquí nos vamos-
-Gracias-
-De nada amor-
De nuevo nos besamos pero hay que apurarnos, no perder tiempo, es muy valioso.
-Lista-
-Hai-
-Hiraishin no Jutsu –digo esto y desaparecemos de la aldea, del mundo.
Simplemente me tomas con fuerza y yo te sostengo, nuestra vida esta entrelazada, al fin juntos y nada ni nadie nos separara.
-.-
De dicha forma ambos jóvenes desaparecen en una pequeña estela, un destello producto del humo y ya no están solo quedan sus copias las cuales inician su acometido.
-.
Bueno amigo espero que les haya gustado mi nueva historia este es mi segunda entrega.
Puse estas lineas para separar las ideas y parrafos espero sea entendible, si no hacermelo llegar.
Bueno nos vemos.
