-¡MAMÁ¿DONDE ESTA SALEM?!!...
La pelirroja buscaba con desespero a su gato en un cuarto extremadamente organizado, y es que Lily Evans se podía caracterizar por ser así, una persona extremadamente organizada.
-Esta aquí abajo, Lily- se escucho desde el primer piso- Baja ya niña, tus amigas ya van a llegar por ti…
Lily se relajo, vio su cuarto por ultima vez ese año y bajo encontrando a su madre con su gato negro en los brazos.
-Gracias Mamá…-Dijo mientras recibía el gato, y le daba un beso en la mejilla a su madre- te voy a extrañar mucho
-¿Ya te vas cariño?- pregunto el padre de Lily, mientras asomaba su cabeza por la puerta de la cocina. Al verlo, se acerco y le dio un abrazo y un beso, al tiempo que la bocina de un auto sonaba en la entrada de la casa.
-Esas deben ser Kaitlyn y Claire… y Steven…- dijo esto ultimo en un susurro casi inaudible.
-¿Que dijiste Liliane?- dijo el Sr. Evans mirándola de una forma curiosa.
-Eh… que llegaron mis amigos y no podré despedirme de Petunia- dijo con un aire melancólico- A veces pienso que ella no me quiere…
-No digas mentiras Lily, le diré que te escriba- su madre volvió a abrazarla- Tu encárgate de cuidarte y escríbenos apenas llegues…- La bocina del auto volvió a sonar
Lily miro a su madre con cariño, la abrazo de nuevo y salio con su padre, quien metió las maletas en la parte trasera del auto, para luego entrar a el.
-¡Hola Lily!- la saludo una de sus amigas abrazándola fuertemente- Te extrañe mucho amiga, no sabes lo aburrida que pase este verano con ese de ahí…- dijo señalando al chico que conducía, mientras seguía apachurrando a Lily…
-Si, yo también te extrañe Nicky pero ya suéltame, me vas a asfixiar.
-Jeje, lo siento…
Nicole Cawell era una chica de piel trigueña, de ojos cafés y cabello castaño y con ondas. Su familia era muy reconocida por su pureza de sangre y por ser una de las mas ricas del mundo mágico, pero ella solo creció junto a su hermano y su abuela, pro los viajes constantes de sus padres que los impedían mantener una relación familiar estable.
-Descuida- dijo la pelirroja- ya estoy acostumbrada a tus abrazos de oso…
-¿Abrazos de que?... ¡No me digas que los osos abrazan!- dijo Nicole con una mirada confusa.
-No me hagas caso es solo un dicho Muggles…
Nicky hizo un gesto de entender, y al llegar a un semáforo el conductor se volteo hacia Lily.
-Hola Liliane- dijo Steven hermano de Claire- Estas preciosa, como siempre- dijo esto ultimo guiñándole un ojo para luego volver a su función de conductor.
-Hola Stev, Gracias…- dijo un poco sonrojada, y es que era difícil no hacerlo al hablar con Steven, uno de los chicos mas guapos que habían pasado por Hogwarts (según el criterio de Lily). El hermano de Nicky tenia el cabello negro, que hacían resaltar aun mas sus ojos verdes, que según decían cambiaban de color según sus emociones; era un hombre acuerpado y apenas el año pasado, se había graduado de Hogwarts.
-Y a mi¿no me piensas saludar?- Dijo una chica desde el puesto de copiloto, con un falso tono de rabia- Claro, a mi que me parta un rayo, que se me caiga el cielo encima…
-¡Aw! Claro que no Claire- Lily se acomodo como pudo y le dio un beso en la mejilla a su amiga.
Claire Maloy era rubia, con unos hermosos ojos azules grisáceos y una piel muy blanca, era una de las chicas más atractivas de Hogwarts y la envidia de todo el sector femenino, pero aun así no se había dejado afectar por eso.
-Si claro, ahora me saludas, porque si yo no digo nada, ni te fijas que estaba aquí, hasta te hubieras sentado encima mió, pero claro como te vas a dar cuenta de que estoy aquí si desde que saliste de tu casa nada mas has tenido ojos para S…- Claire no puedo terminar su frase porque una pelirroja se abalanzo sobre ella evitando que dijera la estupidez, que según ella iba a cometer su amiga.
-¿Qué ibas a decir?- pregunto Steven de forma divertida.
-Nada, nada, no le hagas caso- contesto rápidamente Lily, Mientras nicky la miraba con cara de "aquí va todo de nuevo"- ella solo esta diciendo incoherencias, tu sabes que ella esta un poco loca… ¡Auch!...-Se quejo Lily cuando claire le pego en el brazo mirándola de manera fulminante.
-¿Qué?- Chillo Claire- ¿No son esas las cosas que hacen las personas locas?
Nicky rodó los ojos al ver lo infantil que podían llegar a hacer sus amigas, pro que a pesar de que ella solo tenia 17 años, era una chica muy madura, aunque eso no le prohibía divertirse con las peleas comunes de Lily y Clair.
-Muy bien niñas, suficiente, Lily siéntate bien, Claire tu también, Stev no te entretengas- dijo Nicky- ya Kaitlyn debe estar esperándonos…
En Grimauld Place los gritos y las peleas ya eran comunes, pero ese día algo estaba diferente. Sirius Black entro con afán a su cuarto, cerro la puerta y el sello con un hechizo simple, busco con rapidez lo que necesitaba y lo lanzaba a su baúl.
Sirius Black era un joven de dieciséis años, alto, con un cabello negro y largo, siempre bien peinado, sus ojos eran azul grisáceos, era muy atractivo y popular entre las chicas y además de todo eso, un merodeador, pertenecía a una de las familias con sangres mas puras en la comunidad mágica, y a pesar de eso odiaba a su familia ya que también era una de las familias mas oscuras, por eso se iba, ya no quería estar atado a esa familia de asesinos.
Mientras guardaba todo lo necesario para no tener que volver a aparecerse en ese lugar escucho el ruido de una puerta abriéndose y unos pasos que se acercaban hasta donde el estaba.
-Con que te vas…- dio la persona que acaba de aparecer a su lado
-Si- dijo cerrando fuertemente su baúl- es lo mejor, ya no soporto los estupidos ideales de esta familia, si es que ha esto se le puede llamar familia, y se que tu tampoco soportas mas esta situación- dijo ahora mirando fijamente a su hermano.
-No- dijo Regulus muy serio- no, pero no puedo decepcionar a nuestros padres
-Que padres?, esos que están allá abajo gritando¿Esos que disfrutan matando a la gente inocente y disfrutando cada momento en el que se retuercen de dolor mientras los torturan?¿ esos?¿ esos son padres?
-Si, esos- dijo regulus mientras bajaba la cabeza mirando al suelo.
-Ven conmigo- soltó de repente Sirius- vamos
-No puedo, no me voy a ir…- contesto el chico con voz triste pero segura- tal vez pueda ayudar…
-Desde aquí?- le interrumpió Sirius- eres tan iluso que crees que vas a poder hacer algo desde aquí…?
-Si, estoy seguro
Sirius se quedo pensando un momento en lo que acababa de decir su hermano, pero no podía quedarse, aunque le dolía dejar a su hermano en esa cárcel donde lo castigaban a diario y que sus padres llamaban casa, tenia que irse, no podía permanecer ni un minuto mas en ese lugar, sabia que Regulus estaría bien allí pero el no. La última vez que sus padres lo habían castigado permaneció inconsciente tres dias, tenia que salir como sea.
Tomo su baúl y lo encogió guardándolo en su bolsillo y después tomo su escoba, cuando estaba a punto de salir volando por la ventana algo lo detuvo, una mano, la de su hermano, estaba tomándolo por el hombro
-No pensaras salir volando por la ventana, cierto, en serio creías que podías escapar tan fácil de aquí- le dijo Regulus con un deje de sarcasmo en su voz.
-Lo se, pero debo intentarlo, debo huir de esta casa infernal, es que no lo entiendes, si sigo aqui me van a matar!!!- le grito Sirius exasperado.
-Si, lo se, por eso voy a ayudarte a salir
-Y como podrías tu ayudarme?- pregunto el moreno mirándolo con desconfianza
-Solo sígueme…- dijo Regulus avanzando hacia la puerta y al no escuchar pasos siguiéndolo dio media vuelta- confía en mi
"Al cruzar el río, el príncipe encantado no podía ver bien lo que hacia, pronto el dragón se desper…"
-Kaitlyn!- el grito de su hermana pequeña al oído no fue nada placentero, y ni hablar porque había perdido el hilo de la historia de su libro- mama dice que si ya tienes todo listo…
- Por décimo cuarta vez, dile que si- Kaitlyn se levanto de su cama, guardando su libro en su bolso de mano y mirándose al espejo. Era un achica de piel blanca, cabello negro y liso y los ojos del mismo color que su cabello.
- Kaitlyn!!!- grito la niña de nuevo, lo que provoco que la joven mirara a su hermana pequeña con una cara interrogante- no te vas a olvidar de mi?
- No, Luna- dijo mientras se agachaba para darle un abrazo- además prometo mandarte dulces y escribirte todas las semanas
En ese momento la bocina del auto que una vez se había escuchado en la casa de Lily, ahora se escuchaba en la casa de Kaitlyn.
-Llegaaroooon!!- grito Luna con entusiasmo mientras salía corriendo a bajar las escaleras. Kaitlyn la siguió, riéndose al ver lo grande que estaba su hermana, que pronto cumpliría siete años.
Al llegar al primer piso salio corriendo a darle un abrazo a sus amigas
- Vaya, creí que ya se habían olvidado de mi, porque tardaron tanto?
- Porque nuestras queridas amigas se quedaron discutiendo- dijo Nicky con cara malhumorada- y además de todo tuve que escuchar toda su discusión durante el viaje, a veces son tan infantiles que pienso que son niñas de siete años que se tomaron una poción multijugos.
- Pues, yo no creo eso de nuestras amigas- dijo la morena con cara de comprensión hacia sus amigas- estoy completamente segura de eso, por Merlín Nicky, como puedes dudarlo, es que siempre actúan como…¡Auch!, porque me golpean.
- Te parece poco después de todo lo que has dicho querida "amiga"- se quejaron Lily y Claire al tiempo.
- Bueno ya, ya, lo siento- se disculpo Kaitlyn- solo estaba bromeando, ahora cambiando de tema, como esta el guapo de tu hermano Nicky.
- Bien, gracias
Kaitlyn se giro y vio tras ella a Steven con una de sus sonrisas que volvían locas a todas las chicas.
- Ho...ho...hola- contesto la chica notablemente sonrojada.
Las risas no se esperaron y estallaron por toda la sala
- jajaja, Kaitlyn pareces un tomate- se burlo Lily
-Si, te pareces a Lily cuando tiene a James Potter a menos de diez metros de ella- bromeo Claire.
-O como Claire cuando habla con Peter- dijo Nicky.
- Ja! Pues mira quien habla la que se queda congelada solo con ver a Lupin- chillo Lily.
-¿Lupin?¿ Remus Lupin?- le pregunto Steven con el ceño fruncido- el mismo que fue elegido prefecto de tu casa
- ehhmmmm, noooooo!!!- dijo Nicky, mientras fulminaba a sus amigas con la mirada.
- Nicole Cowell, te gusta ese chico que esta en el grupo de la merodeadores!- le grito su hermano.
- No, claro que no, solo estábamos bromeando- dijo Lily- Nicky no tiene tan malos gustos para fijarse en Lupin, ni siquiera es de su tipo.
- Si, es cierto, porque mejor no me acompañas y me ayudas a guardar mis cosas en el auto- dijo Kaitlyn, tomando a Steven por el brazo llevándolo hacia fuera.
-Gracias niñas, yo también las quiero- dijo Nicky con evidente sarcasmo, luego de que su hermano se hubiera ido hecho una furia.
-Lo siento- dijo Lily con una cara de niña regañada- pero eso les pasa por andar burlándose de Kaitlyn, es mas Nicky deberías estar preocupada porque Kaitlyn se fue solita con tu hermano…
-Deja la locura Lily!!!- dijo Claire lanzándole un cojín de uno de los sillones de la sala antes de salir de la casa de los Armstrong, mientras Kaitlyn se devolvía para despedirse de sus padres y su hermana.
DING- DONG
El timbre sonó justo al tiempo que terminaba de revisar si todas las cosas necesarias para comenzar el año estaban en su baúl. Bajo con tranquilidad y abrió la puerta.
-Puedes darle un techo a un amigo, compañero fiel, casi hermano y casi sangre de tu sangre que acabo de huir de su casa para nunca volver?- dijo el visitante.
-No señor, aquí no le damos asilo a nadie- respondió el chico que había abierto la puerta segundos antes, fingiendo un tono muy serio.
- ah… bueno, que lastima, me tocara ir a pedirle refugio a cierta pelirroja, pensándolo bien, tal vez me deje dormir en su cama, con ella- termino de decir el visitante al ver que el chico abría la boca para decir algo.
James le lanzo una mirada asesina a su amigo antes de abrazarlo.
-Claro que eres bienvenido Sirius- le dijo el chico de gafas- con tal de que no vayas a molestar a mi pelirroja.
-Créeme amigo, no me metería con tu linda pelirroja, será para que me mates, y soy muy joven y sexy para morir, además no puedo privar de mi presencia, carisma y belleza a todas las chicas que esperan que salga con ellas.
-Jajaja, por supuesto- dijo James riéndose de las ocurrencias del moreno- como podríamos privarlas de Sirius Black
-Exacto, ese es el punto, bueno será que me puedes dejar pasar James ya me estoy cansando de estar de pie y me muero de hambre.
Después de eso, James dejo pasar a su amigo, casi hermano, como había dicho Sirius, pidiendo a su elfo que les preparara algo de comer, mientras el acomodaba a Sirius en su habitación, luego, se dirigieron a la sala donde el chico estaba esperando escuchar la historia de su compañero merodeador y mejor amigo.
Después de muchas peleas en el carro, paradas a comer o ir al baño, por fin llegaron a la casa de Nicky. La casa, o más bien, la mansión eran grande, rodeada de jardines hermosos, llenos de flores vistosas especialmente rosas de distintos colores, numerosas fuentes y algunas esculturas helenísticas. Las chicas y Stev bajaron del auto, para luego ser recibidos por los elfos quienes recibieron sus baúles.
Cuando entraron a la casa, todos se sorprendieron exceptuando obviamente a los dos hermanos, que ya estaban acostumbrados al lujo de esta.
-Vaya, esto si que es vivir bien- exclamo Lily impresionada y con la boca medio abierta.
-No creas, vivir en un lugar tan grande se puede volver aburrido, sobretodo con un hermano que no hace sino sobreprotegerte…
-¡Oye! No hables así de tu hermano, si el es un amor- dijo Claire con aire soñador- es mas si tuviera que escoger a alguien para tener una aventura romántica seria a el.
-Nicky, creo que deberías considerar alejar a tu hermano de esta- dijo Kaitlyn señalando a Claire.
-Es cierto- dijo Lily simulando una preocupación- con lo loca q es Claire capaz de secuestrarlo- dijo esto ultimo en un susurro casi inaudible.
-¿Puede superar a mi hermano? Vamos a mi cuarto y organizamos lo de mañana, no pienso llegar tarde…- dijo Nicky mientras subía las escaleras en dirección a las habitaciones.
-¿Piensas hablar o no?- dijo James mientras se sentaba en un viejo sillón.
-Bueno todo empezó con…-nick-nick-¿que es ese sonido?...- James se volteo, abrió la ventana que tenia detrás y entro una lechuza con porte elegante.- Moony escribo… es su lechuza…
James abrió rápidamente la carta que tenia la lechuza en la pata y leyó…
¡Hola Prongs!
Imagino que Padfoot ya esta contigo
-¿Cómo lo supo?- dijo Sirius interrumpiendo la lectura de la carta.
-No se, siempre sabe todo o nos conoce muy bien… ahora como iba diciendo…
Y se acabara de preguntar como supe
Que estaba ahí, bueno, es que los
Conozco muy bien
-¡Por que hace eso!- dijo Sirius- bueno esta bien me callo…
No olviden el mapa y la capa
Dudo que lo hagan
Más bien no olviden
El libro de encantamientos
-Ya se me había olvidado- dijo James- bueno sigo…
Espero que la pasen muy bien
Y ya nos veremos mañana
¡Cuídense!
Moony
-¿Ya?
-Ya, eso es todo- dijo James mientras metía la carta de nuevo en el sobre.- Ahora vamos a dormir… muero de sueño…
-Awww...- dijo Sirius simulando emoción- voy a dormir contigo, mi sueño hecho realidad…
-Jajaja… Ya quisieras, tu te vas para tu cuarto yo para el mió…- dijo James guiándolo a su habitación mientras se reía…
-Me has roto el corazón… si no fuera tan guapo, caería en una depresión sin recuperación…
-Otro día será, Padfoot, este es, Buenas noches amigo…
-Buenas Noches Prongs…
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Y se termino…
Este fic se ha hecho entre dos personas: Potter y Brown
Esperamos sus reviews, por que ellos nos animaran a seguir escribiendo, esperamos que les haya gustado.
¡Cuídense!
Brown-Potter
