1. 1er PASO: EL PLAN
- Magnus… ¡Ah! - los dedos de Alec se encajaban en la espalda del brujo mientras él lo embestía de nuevo, provocando que derramara su semen en parte de su abdomen.
Las piernas del cazador de sombras estaban a cada lado de la cadera de Bane, sus manos se aferraban a sus hombros, mientras las del brujo le sujetaban de la cadera, marcando el ritmo de las penetraciones, cada vez más rápidas y profundas, provocando que la espalda del mayor de los Ligthwood se arqueara más, despegándose de la cama, dejando solo sus hombros en contacto con el colchón, con un tirón el brujo lo levanto de la cama, lo atrajo hacia el justo en el momento en que terminaba con un sordo gruñido en el oído de Alec.
Se sentó en la cama aun con el chico encima suyo, dejándose caer hasta quedar recostados sobre la cama, estiro su brazo en busca de los pañuelos para limpiarlos a ambos después de la intensa sesión que acaban de tener. Un par de besos más tarde a Alec lo venció el cansancio. Momento, que Magnus aprovecho para tomar el celular del nefilim, desbloqueo la pantalla con un chasquido de sus dedos y busco el número del parabatai de su novio, guardo el contacto en su teléfono y dejo todo en su lugar tal y como lo había dejado el cazador de sombras.
Durante esa noche Magnus casi no pudo dormir, quería despertar antes que Alec, así que técnicamente paso la noche en duerme vela.
_o_o_o_o_o_o_o_o_o_o_o_o_o_o_
Bzzzzzzz – vibro el celular de Jace, quien miro la pantalla y no reconoció el número, pero noto la hora 7.35 am – bzzzzz – repaso los números nuevamente pero aun seguía sin reconocerlo, decidió contestar de todas maneras.
- ¿diga?
- Jace, soy Magnus
- ¿Magnus? – pregunto extrañado - ¿Esta… Alec está bien?
- Si, él está bien, tome tu número de su celular, necesito hablar contigo de algo importante – hizo una breve pausa, como si se estuviera decidiendo a decirle algo – necesito pedirte un favor.
- bien, dime donde y cuando nos vemos – Magnus escucho al fondo la voz de Clary llamando a Jace quien le respondió con un "ya voy" - tengo que irme – dijo al brujo - Adiós.
Bloqueo el teléfono y lo metió en uno de los bolsillos de sus pantalones de mezclilla de cadera baja. - Magnus… - la voz adormilada de Alec se oyó en el pasillo que conectaba su habitación con el resto del departamento.
- Por aquí cariño – dijo terminando servir dos tazas de café recién hecho, cuando el nefilim apareció con solo unos pantalones de pijama color marrón deslavado, algo sueltos que le caían en la cederá, dejando ver su bien formado abdomen – buenos días – dijo Magnus con una sonrisa, mientras le acercaba la taza y le daba un suave beso en la mejilla.
Alexander bebió el café mientras acariciaba al minino del brujo, perdiéndose en sus pensamientos, mientras veía al hombre que amaba aparecer un par de sillones nuevos en la sala, llevaban casi 5 años de estar juntos, su relación ya no era un secreto para nadie y con eso se sentía más libre, desde que estaba con Magnus no solo su vida había cambiado, también él; ya no era el chico inseguro que había aparecido en su puerta hace poco menos de 5 años pidiéndole que saliera con él.
- Alec… ¿Aaalec? – por el tono de voz que usaba el brujo, sabía que no era la primera vez que estaba hablándole
- Perdón – dijo, saliendo de sus pensamientos
- Cariño ¿que estabas pensando?
- Nada… solo… recordaba – dijo sonriéndole al hombre de los ojos felinos y empinando la taza para tomar el último trago de su café – Iré a darme un baño
Se levantó de la mesa, depositando al gato en el suelo, puso la taza en el fregadero y entro en el pasillo que lo llevaba a la habitación. Los ojos de Magnus lo siguieron hasta que se perdió de vista y escucho el click de la puerta, saco el celular de nuevo y escribió a Jace y otro igual para Isabelle, ambos describían la dirección de un pequeño bar de Brooklyn cerca de su departamento, así como la hora de la reunión. Recibió un "ok" de su cuñada, no sabía si Jace era de las personas que acostumbraban a responder para confirmar o simplemente debía dar por hecho que lo había recibido y que se presentaría a la cita.
Más tarde el cazador estaba listo para ir al Instituto, vestido con su clásico equipo de combate todo en negro, le dio un beso a su novio y salió del loft con la promesa e volver después de la cena.
- Buenos días – saludo Alec cuando entro a la cocina del Instituto, recibiendo una respuesta muy a la manera de cada uno de los ahí presentes, Jace con la cabeza e Izzy con una sonrisa mientras bebía café.
- Buenos días - escucho a sus espaldas la voz de Clary
- ¿Y bien?
- Pues papa y mama están de nuevo en Idris – empezó Isabelle
- Igualmente, los míos – dijo la pelirroja, recargándose a un lado de Jace en el mueble de la estufa
- Así que tenemos que hacer la rotación de guardias de esta semana – finalizo Jace
- Bien, pido la de hoy – dijo Alec, pensando que así tendría el resto de la semana libre a estar con Magnus
- Hay actividad de hadas cerca de Central Park, algunos mundanos parecen empezar a ser adictos al polvo de hadas, no sabemos cómo lo consiguen, así que supongo que alguien de la Corte de Seelie debe estar detrás de esto – dijo Jace –
- Bien, iremos todos, supongo
- Ah no, lo siento quede en una cita con Simón, así que tendrán que ir sin nosotros – se adelantó rápidamente a decir Isabelle.
- Yo tengo que ir a conseguir algunas cosas para el Instituto – dijo Jace y antes de que su parabatai pudiera formular alguna pregunta, añadió - Clary ¿te importaría hacer la guardia con Alec esta noche en el parque?
- Por supuesto que no ¿a qué hora salimos?
- Bien, salimos a las 7 – dijo Alec
Todos salieron de la cocina dejando al mayor de los Ligthwood algo confundido, miro la hora en su teléfono móvil, era casi medio día, pensó en volver a casa de Magnus, pero eso implicaba casi 45 minutos de viaje con el tráfico de la hora pico. Así que mejor se encamino a su habitación, se recostaría un rato para descansar un poco de la noche anterior y prepararse para desvelarse un poco esta noche con sus deberes de cazador de sombras.
_o_o_o_o_o_o_o_o_o_o_o_o_o_o_
Jace se encerró en la biblioteca, técnicamente era su oficina ahora, había empezado a llevar las riendas del Instituto en lugar de Robert y Marisse Ligthwood, esto era porque, aunque bien la Clave estaba siendo más flexible en cuanto a las relaciones entre Nefilims y submundos después de que la relación de Magnus y Alec se hiciera saber, aun había cosas que no podrían cambiar de la noche a la mañana, una de esas cosas era que el Instituto debía ser dirigido únicamente por Cazadores de Sombras, normalmente una pareja, y la única pareja que reunía esas condiciones, eran él y Clary.
- Bien Jace, ya estoy aquí – dijo Isabelle entrando en la habitación - ¿Que está pasando con Magnus?
- No lo sé, dijo que tenía un favor que pedirme, eso no es normal en él.
- De hecho, aún falta para que sea el cumpleaños de mi hermano, así que eso no puede ser y no creo que tengan problemas, cuando es así, se nota a leguas en el comportamiento de Alec.
Ambos se quedaron callados por un instante, tratando de embonar las piezas…
- ¿En serio crees que lo logremos despistar lo suficiente para poder ir en la noche con Magnus? – pregunto finalmente Izzy
- Espero que sí.
_o_o_o_o_o_o_o_o_o_o_o_o_o_o_
7.30 pm, No Name Bar.
Ese era el lugar en que el gran brujo de Brooklyn los había convocado, dos figuras vestidas completamente de negro entraron con algo de confusión al bar, no sabían que esperar dentro, buscaron rápidamente con la mirada hasta encontrarlo, sentado en una mesa para 4, casi al fondo, del lugar, con uno de los conjuntos más sencillos que le habían visto desde que lo conocían, jeans de mezclilla oscura, camisa negra sin abotonar hasta el final, una ligera capa de sombra marrón en los ojos y el cabello en picos sin rastro de brillantina, Magnus Bane, lucia inquieto, algo difícil de ver en él.
- Bien, aquí nos tienes - dijo Jace con una sonrisa
- Gracias a ambos – incorporándose en el sofá.
- Magnus… - Isabelle extendió su mano hasta alcanzar la enjoyada mano del brujo.
- Izzy… Jace…quiero – aclaro su garganta - necesito que me ayuden – ambos chicos cruzaron una mirada de preocupación – quiero pedirle matrimonio a Alec - un gritillo ahogado escapo de la garganta de la chica, que inmediatamente llevo la mano que tenía libre en sus piernas a su boca, mientras que el rubio solo contuvo el aliento ante la confesión del brujo.
- Vaya – dijo Jace recuperando finalmente el habla – me da gusto oír eso, por increíble que parezca, no sé qué decir, felicidades, supongo – dijo encogiéndose de hombros - pero no entiendo ¿qué tenemos que ver en esto?
- Verán, ustedes son la familia de Alec, más tarde les hare saber esto mismo a sus padres, pero antes quiero saber la respuesta de él y quisiera un poco de ayuda para hacerle la propuesta, sé ha habido posibilidad de casarnos ante las reglas mundanas, Alec siempre va a preferir una boda en dorado, una ceremonia nefilim – ante el silencio de ambos cazadores de sombras añadió – saben que pedir ayuda no es mi estilo y de no ser necesario no lo haría.
- Lo entiendo – dijo finalmente isabelle - que necesitas que hagamos.
_o_o_o_o_o_o_o_o_o_o_o_o_o_o_
Alec se levantó de golpe eran cerca de las 8.30 cuando vio la hora en el reloj, salto de la cama y corrió a la puerta de la habitación a un lado de la de Jace, sabía que Clary usaba esa habitación como suya mientras estaba en el instituto cuando no tenía que quedarse por muy prolongados, llamo a la puerta y la voz de la peliroja le respondió mientras la puerta se abría de golpe.
- ¡Oh! Alec, creí que ya te habrías ido, me quede dormida, lo siento
- No te preocupes, yo también estaba dormido ¿nos vamos?
- Claro – ella regreso dentro de la habitación para tomar su chamarra y se reunió con Alec en el pasillo.
Salieron del instituto y se dirigieron a Central Park, últimamente todo estaba muy tranquilo, era rara la noche que se topaban con algún demonio, tampoco eran comunes los comunicados de la clave al joven Lightwood le extrañaba que tuvieran que buscar pistas sobre este asunto de las hadas del que aparentemente ni si quiera Magnus estaba enterado. "Magnus" suspiro el chico de los ojos azules mientras recordaba al brujo, tenía tiempo pensando que quería hacer algo especial para el ahora que cumplieran un año más de estar juntos.
- Clary…
- Dime
- ¿Oye crees…crees que sería buena idea darle algo especial a Magnus ahora que cumplimos 5 años?
- 5 años, creo que, si sería lindo, pero que podrías darle a Magnus que no pueda conseguir por el mismo, ya sabes con magia, debe ser algo muy original y creativo… - la chica enmudeció cuando noto como se tensaba su acompañante
- Supongo que entonces si es una mala idea – dijo Alec con algo de tristeza en su voz.
- Alec, lo siento, puedo ayudarte a buscar algo o…
- Gracias Clary
Caminaron hasta el parque, adentrándose, se sentía más fresco el ahí dentro, para ser inicio de semana aún tenía mucha gente, quizá sería la hora, decidieron buscar en la sección e que los mundanos con problemas de drogadicción solían acudir a conseguir su dosis de suplementos, buscaron una buena posición no querían llamar la atención de quien fuera que fuera del pueblo de las hadas que estuviera involucrada en esto.
Las horas pasaban, nada fuera de lo normal ocurría en Central Park, la mente de Alec pasaba de ese pensamiento al del raro comportamiento de todos esa mañana, luego al comentario de Clary sobre el regalo para su novio, sobretodo en esto último, quería encontrar algo especial para él, pero ¿qué?
Ropa o calzado eran claramente descartados; música, el brujo amaba la música, pero tenía demasiada en su reproductor y en algunos discos antiguos…
- ¿Alec? – no obtuvo respuesta – Alec
- ¿Qué pasa?
- Llevamos tiempo aquí y ni siquiera la gente común - Alec recordó que ella no se refería a los mundanos, como mundanos - ha venido por aquí.
- Cierto además ya está haciendo frio y tengo un poco de hambre
- También yo
Ambos chicos salieron de su escondite y caminaron por el sendero de asfalto del parque, todo estaba muy tranquilo, el cielo particularmente despejado y el sonido de los automóviles era casi bloqueado por los densos arboles del lugar. Buscaron la puerta por la que habían entrado, cerca de ahí estaba no solo la entrada del metro, también algunos locales de comida que esa hora aún se encontrarían abiertos, no tardaron tanto en salir y recorrer algunas cuadras, cuando el vibrador del celular de Clary los hizo detenerse, la chica saco el aparato de su pantalón y contesto de inmediato, debía ser Jace pensó el ojiazul, que miro alrededor en busca de algo rápido para comer, a escasos 5 pasos de ellos vio un local aparentemente de empeños, con algunas partes de la vitrina iluminando su contenido, computadoras, consolas, celulares, miro el otro escaparate, collares, pulseras, aretes y anillos…. Su vista volvió a esa sección, "anillos" pensó, recordando las manos enjoyadas de Magnus, últimamente había dejado de usar tantos anillos en los dedos, así que eso sería un buen regalo, "si pudiera pagar alguno" se dijo a sí mismo, mientras posaba su mano sobre el vidrio, el sonido del metal sobre este, lo hizo mirar su mano, el anillo de los Ligthwood, miro el símbolo de la llama y la L impresas en el metal, quizá ese sería la solución, se supone que estos anillos pasan de generación en generación y se dan para promesas de matrimonio… su mente volaba, siempre ha querido casarse con el brujo, pero las leyes de los cazadores de sombras no lo permiten, "el dorado resaltaría muy bien en la piel Magnus", nuevamente pensó.
- Jace dice que volvamos – dijo la peliroja, Alec la miro y empezó a caminar.
- Bien.
