23/07
Hoy me parece que es ese día. Sí, creo que sí. Ya no me importa. Es una de las muchas cosas que han dejado de importarme. De todas formas no hay lugar para esas tonterías en este sitio: la guarida de Orochimaru. Sería ridículo celebrar un cumpleaños aquí, entre la oscuridad y los gritos de las victimas de esa serpiente retorcida y su ayudante. Es ridículo el sólo darle importancia, el dedicarle siquiera un pensamiento.
¿Cuántos?: dieciséis. Aunque aquí los días transcurren iguales uno tras otro y sea difícil llevar la cuenta exacta de ellos; sí , dieciséis años, estoy seguro. Mi mente sigue siendo muy aguda, de hecho lo es cada vez más. Ya tengo 16 años. Demasiados. Hace mucho que debería haber cumplido mi venganza. No obstante, ese tipo es realmente poderoso, es imposible que sea fácil acabar con él. Pero pronto , muy pronto obtendré el poder suficiente para que pague por lo que le hizo al clan, a nuestra familia...a mí.
Antes tendré que ocuparme de esa víbora. Durante estos últimos meses me he dado cuenta de que ya no puede enseñarme nada más. Sus entrenamientos ya no son un desafío. Es débil y cobarde, indigno de obtener el poder de los Uchiha, pues no tiene nada que hacer contra el sharingan. Ya no me es útil y por lo tanto sus días están contados. Sólo necesito una última cosa de él.
Dieciséis años y aquí estoy, descansando en el sobrio camastro de una habitación subterránea en la que no hay nada. No hay nada porque no me hace falta nada. No extraño nada. Nada.
Naruto. ¿Por qué todavía me viene tu recuerdo algunas veces? Seguirás en Konoha, débil y blando como siempre has sido.
Ja ja ja ,con el daño que te hice -en todos los sentidos- la última vez que nos vimos no creo que te hayan quedado ganas de pensar en mí. Seguramente habrás hecho todo lo posible para olvidarme, igual que Sakura. Probablemente ahora seáis novios, unidos por vuestro despecho y odio hacia mí.
Naruto, la verdad es que me cuesta creer esto. Con lo testarudo que eres es posible que... No. Tienes un sueño bastante difícil de alcanzar. Hokage, nada menos. Una meta muy alta para un perdedor como tú. Con esa cara de idiota, tan infantil como tus ideas.
¿Cómo serás ahora? No falta mucho para que cumplas también los dieciséis, si no me equivoco. Sí, puede que aún pienses en mí aunque me esforzara para cortar nuestro lazo, como tú lo llamaste.
Si es así, espero que reconozcas que estás vivo porque yo quise. Que por las noches, cuando te vallas a dormir con tu tonto gorro y pijama, sepas que cada bocanada de aire que respiras, que cada roce que siente tu suave y cálida piel contra las mantas, se lo debes a mi indulgencia... a mí.
Me he tenido que volver así, Naruto. No te mate porque no quería ser como él. Pero eso no significa que yo no vaya a darlo todo con tal de cumplir mi objetivo. Espero que lo entiendas, más te vale no encontrarte conmigo de nuevo. Tú continua con tu sueño, yo seguiré con mi venganza.
Sin embargo hay en mí sentimientos que debo eliminar de una vez, pues el momento se acerca y no me puedo permitir ninguna debilidad. Y esta nostalgia que no quiero confesar que siento pero que es real es sin ninguna duda la peor que tengo. Nostalgia de ti, Naruto.
Pues si un día como hoy me encontrase en Konoha contigo, estarías pegado a mí, insultándome por mi prepotencia, por mi arrogancia y al mismo tiempo felicitándome. Teme, féliz cumpleaños, dattebayo -¿era eso lo que decías continuamente¿no?, teme y dattebayo-, me harías algún regalo a aparentemente a regañadientes para luego colgarte de mi cuello, haciéndome sentir incómodo y al mismo tiempo feliz de verdad. Sé de alguna manera que no has cambiado.
Sí todo esto no hubiese pasado, si no hubiese intentado matarte, si estuviese en Konoha contigo un día como hoy, mi cumpleaños no sería triste y rabioso.
10/10
¡Hoy es un gran día! Hoy cumplo dieciséis. Estoy tan nervioso, ¿Qué me habrá regalo Sakura?, ¿y Kakashi? y... No puedo esperar a que nos reunamos ¡Si no fuese tan temprano iría a buscarlos!
Pero tengo que aguantar las ganas. Aguanta Naruto.
Tengo ganas de salir de la cama de una vez y recorrer la villa. Dieciséis años, ya soy todo un shinobi. Y cada día soy más apuesto je je je. Pronto las chicas empezarán a decirme: Naruto se mi novio. Naruto, cásate conmigo. Naruto, ¿Me quieres a mí?.Naruto, ¿A quién quieres?.
Creo que estoy tan ansioso por celebrar este cumpleaños en Konoha con mis amigos debido a que en los anteriores no he podido hacerlo por haber estado entrenando con Jiraiya. Pero al fin he regresado. Una gran fiesta sería apropiado, con mucho ramen, competiciones, y claro, una gran tarta. Kakashi llegará tarde-como siempre-, Tsunade beberá demasiado, Kiba me molestará con sus tonterías, Choji querrá comerse todo y puede que shikamaru venga acompañado de esa chica rubia... si lo hace intentaré avergonzarlo para divertirme un poco. No sé si invitar al nuevo compañero de equipo, es un poco rarito pero ...sí, lo invitaré y así estaremos todos, dattebayo.
No , todos no.
Sasuke, como cada mañana al levantarme pienso en ti, en qué harás, si estás bien, que te pasará por la mente... Y hoy no es una excepción. No se lo confesaría nunca a nadie, pero estos años sin ti han sido... no sé explicarlo. Te echo de menos, dattebayo.
Sólo se que me encantaría volver a verte, sobretodo en este día. Probablemente te olvidarías de felicitarme , no vendrías a la fiesta diciendo que es una tontería infantil. Ha pasado tanto tiempo desde que te fuiste, puede que hayas cambiado de forma de ser, aunque hay algo dentro de mí que me dice que no, que eres el mismo de siempre.¿Cómo te verás ahora?, seguramente a ti las chicas te acosan de verdad, como antes, en la academia.
Maldito sea ese día, en el que fui demasiado débil para detenerte. Maldita sea tu necesidad de venganza que te aparta de aquí, de mí lado.¿En qué estoy pesando?
Te perdono lo que hiciste ese día, tú lo sabes ¿verdad?, pero tienes que regresar, tengo que traerte de vuelta como sea...Si estuvieses hoy aquí conmigo.
Si estuvieses no necesitaría nada más, todo sería perfecto. No podría haber mejor regalo de cumpleaños que verte aparecer de repente en mi celebración.
Teme: Mi rival..mi mejor amigo...mi
¿A quién quiero?
Mi corazón no me engaña: Nuestro lazo sigue existiendo, no quisiste cortarlo por alguna razón, no me mataste porque nos une demasiado.
Tú cumpleaños ya fue . Me sé de memoria el día, aunque eso tampoco pienso admitirlo. Ahora yo también tengo dieciséis años.
Si todo esto no hubiese ocurrido, si no te hubieses marchado...Me hubiese gustado estar contigo ese día, felicitarte; y que tú estuvieses en el mio. Hoy, solamente hoy.
Así tú dejarías de sentirte tan solo. Y yo también.
