Mi primer James-Lily, con un toque Sirius, espero que os guste...Agradecer a mi Beta Masako Uchiha...que tiene la paciencia de leerlo antes xD..auqneu se que lo disfruta

Declaimer: Los personajes de J. K no me pertenecen, ya sabéis ;)

Prólogo

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El humo de la estación de King Cross se levantaba calmadamente sobre el edificio. Los trenes amanecían con su habitual actividad dónde miles de pasajeros iban y venían de anden a anden, con prisas, casi sin mirar, y es que los humanos normales, los no mágicos, los muggles, nunca han sido capaces de ver más allá de sus narices. El andén 9 y ¾ se muestra bullicioso, gente va y viene, y entre tanta multitud, muchos jóvenes y no tan jóvenes miran expectantes, antes de desaparecer a través de una columna, la tercera de cuatro sin dejar rastro. ¿Cómo?...ya he dicho que los muggles no son capaces de ver lo que no quieren ver…y mucho menos los que les da miedo ver.

─Cornamenta, ¿a qué tanta prisa amigo?

─ ¿Tú qué crees? ─ responde como si fuera evidente un joven de unos 17 años; alto, moreno de pelo revuelto, ojos castaños almendrados escondidos tras unas gafas redondas que le proporcionan un aspecto masculino e intelectual sin perder un pequeño toque pícaro en su fez. Cuerpo fornido, deportista; mira intensamente a su amigo, parado a su lado, apoyado en la pared mientras envía sonrisas y guiños a toda hembra que pasa por delante suya, y que por ende, suspira ante el halago de ese perfecto galán.

Sirius Black lo sabe, es consciente de que con solo una sonrisa, es capaz de tener lo que quiera de cualquier mujer... u hombre. Que su físico, su galantería, su porte e incluso su aliento, son un sueño erótico e la mente de casi toda hembra, joven o mayor, e incluso de algún que otro hombre. Conoce su poder sobre los demás, porque es la máscara que el mismo se ha creado, y le encanta…

─ James, tío… ¿lo vas a volver a intentar otra vez?- inquiere con hastío dejando escapar un suspiro de desgana. Su amigo le mira, con reproche, porque Sirius sabe, y de hecho, está harto de saber que su mejor amigo, su hermano, su mano derecha, vive y respira por una sola persona, una mujer que le trae de cabeza, que le hace ser débil cuando le rechaza aunque se la note que no quiere. Porque Sirius Black lo ve, lo huele y la estudia.

Sabe que James, el hombre más valiente que ha conocido, y el único, junto a su otro amigo, que podrían superarle en muchas cosas, vive perdidamente enamorado de una mujer…lo sabe…Y por eso suspira, odia que los que quiere sufran por algo a lo que él no puede poner remedio.

─La esperanza es lo último que se pierde…lo último. Bueno, eso y un partido de quidditch contra Slytherin- dijo el moreno totalmente convencido con una sonrisa en sus labios - además, Canuto, tú sabes lo que es para mí…necesito demostrarla que no soy como ella quiere ver.

─ Está bien Jamie, está bien, sabes que te apoyo en todo tío-replica palmeando su espalda cariñosamente.

Traspasan la pared llegando a su destino, anden 9 y ¾, donde el tren de Howarts, colegio de magia y hechicería, espera pacientemente a llenarse con los futuros y jóvenes magos, aquellos que harían un mundo peor o mejor, aquellos que aun tienen una oportunidad de elegir…Ambos chicos, rápidamente se nota observados, no por nada eran los Merodeadores, unos de los mejores estudiantes y además los mas apuestos de todos, y eso que aún faltan otros dos integrantes…

─ ¿Dónde se habrá metido Remsie?

─ Canuto, el día que te oiga que le dices así, sin importante quien haya, me apuesto el cuello que nuestro buen y querido Lunático te muerde eso que traes entre las piernas en una de nuestras escapadas ─ suelta mordazmente James Potter, viendo palidecer a su amigo.

─ -Joder James… tú sí que sabes joderme la fiesta.

─ ¡¡Chicos!!- oyen el grito de una voz masculina, y potente ─ ¡EH! Par de truhanes… ─ vuelve a gritar un rubio desde unos metros más allá, al lado de la puerta del tren, apremiándoles a entrar ─ ¿queréis dejar de babear y venir aquí?

─ Oh Remus, cariño, sabes que James solo babea por una personita pelirroja, y yo no babeo, babean por mi─ exclama Sirius consiguiendo sacar una mueca entre asqueada, gruñona y divertida a sus dos amigos.

─ Claro Sirius, tendría que hacerme gay para completar el círculo ─ dijo irónicamente Remus.

─ Serías una gran contribución a mi lista de trofeos y cosas inimaginables que el gran Sirius Black es capaz de conseguir ─ sonríe con una mueca torcida y seductora el moreno de pelo lacio…consiguiendo que el rubio, que tampoco le tenía que envidiar tanto, rodara los ojos y suspirara con un "incorregible" a su amigo.

─ Ya, dejaros de ligar, que me entra repelús, además, luego a ver quien aguanta los lloros de las tías estas que te persiguen Canuto…─ dijo James, mientras su mirada se centraba en una pelirroja, que no estaba muy allá, he intentaba, enfurruñada, subir su baúl al tren ─ discúlpenme, un momento caballeros-les espeto a sus amigos con gesto solemne para luego dirigirse hacia ella.

─ Ahí vamos de nuevo ─ suspiraron Sirius y Remus a la vez.

Más adelante, Lily Evans, también conocida como la Prefecta perfecta, lidiaba con su equipaje que no quería subir al compartimento, viendo como nadie la ayudaba, y enfadándose aun más. Era una chica ni muy alta ni muy baja, de constitución delgada, con un increíble pelo rojo como el fuego y unos ojos verde esmeralda, que mostraban, según el momento y la circunstancia, una alegría y ternura sin igual, o un homicidio a punto de cometerse…sin duda, Lily era una mujer de armas tomar.

─ ¡Maldito baúl de los demonios! ¡Sube ya! ─ exclamaba exasperada, cuando notó como unas fuertes manos rodearon las suyas ayudándola a empujar, a la vez que su espalda se hacía más liviana ya que alguien le había agarrado la mochila repleta de pergaminos y libros que solía portar y la había colocado encima del dichoso marmotreto…Un perfume inconfundible arrasó sus fosas nasales, pero la esencia era un pelín distinta, más masculina, más madura…Habría reconocido esa esencia en cualquier lugar, y por unos pocos segundos se dejo arrullar por ella, porque secretamente amaba olerla…

─ Evans, ¿Por qué no pides antes ayuda? ─ sugirió el moreno, mirándola intensamente, admirándola, notando como el corazón se le iba a escapar de la garganta si ella no le reconocía aunque fuera solo para insultarle.

Se dio la vuelta, perdiéndose en él, notó sus rasgos más marcados, cuadrados. Ya no era el chiquillo desquiciante lo que tenía ante sí. Si no un hombre de los pies a la cabeza, con una mirada que por dentro la derretía, que la hacía sentirse débil, que la hacía clamar por sus brazos y pedirle un poco más de su tiempo…pero Lily era una mujer orgullosa y su propia arrogancia no la dejarían caer…nunca…o eso creía ella.

─ Potter, no hacía falta tu ayuda, pero aun así gracias ─ le escupió intentando sonar fría ─ me alegra que hayas aprendido un poco de modales, ya era hora ─ -exageró con un grácil movimiento de manos

─ Vaya Evans ─ le dijo duramente el chico, a lo cual ella se dio cuenta. James jamás la hablaba así a la primera arremetida ─ empezamos el año bien. Pues que sepas, que te he ayudado porque tú, la prefecta ─ subrayo su tono de voz ─ , estabas interrumpiendo el paso al vagón, que debe estar lleno en diez minutos. Simplemente Evans, he cumplido mi labor…

─ ¿Tu labor?...¿desde cuando tienes oficio y beneficio Potter?

James disfrutó lentamente, las palabras que iban a salir de su boca, este año era Su año, esa mujer iba a conocerle quisiera o no, no le quedaba más remedio, e iba a disfrutar siendo el primero que le diera la noticia. ¡Oh si!...pondría el grito en el cielo, pero en el fondo el sabia que notaria cierto atisbo de orgullo en sus ojos, que tan bien conocía, a través de los cuales veía más de lo que ella a veces quería mostrar…Sin duda, James Potter era un hombre increíble en muchos aspectos , que esa pelirroja aun no conocía o no quería conocer.

─ Veras, es tarea de los Premio Anuales, Evans , que en el tren reine la calma y el orden, y tú tendrías que saberlo- sonrió internamente cuando los ojos de la chica se abrieron de golpe, incrédulos, y ¿con orgullo? "Lo sabía, Lily…te conozco"

─ ¿¡Cómo?!...pero no puede ser, yo soy Premio Anual, y tú…. ¡Potter eres tú! ─ exclamaba incrédula

─ Si Evans soy yo, así que empieza a moverte porque estás estorbando ─ recalcó duramente James ─ por cierto…Lily Felicidades.

EL muchacho se volvió a dirigir a sus amigos sonriendo satisfecho, sabía que había ganado una batalla, y sabia también, que en el fondo ella estaría rabiosa, pero feliz. Miro a ambos amigos, intentando no caer en la tentación de observarla…de no mostrarse interesado en la actuación de ella…porque si lo hubiera hecho tal como Remus lo hizo, hubiera visto a una pelirroja sonriendo con suficiencia, rabia y una dulzura inauditas, orgullosa de que ese hombre, su hombre, empezase a mostrarse tal y cual era…aunque Remus supo que eso no se iba a quedar así…"Pobre Cornamenta…Lily, no te pases mucho" pensó Lunático a la vez que se subía al tren…

─ Vaya, vaya ─ ronroneo Sirius Black ─ el año empieza potente, si señor ─ ensancho su sonrisa, mostrando la perfecta dentadura de la que era dueño. Lanzó un beso al aire a una rubia explosiva que pasaba pavoneándose delante de él, la cual trastabillo con sus tacones al notarlo, y subió a su compartimento…Sirius Black sabia que ese año iba a ser memorable, porque Sirius cree saberlo todo.

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Gracias por leer...¿reviews?

Intentare subir los capitulos lo mas pronto posible, pero por incidencias tecnicas, espero tenerlos cada dos o tres semanas...espero que lo disfruteis tanto como yo disfruto escribiendolos