Nota Traductora: Leí este ff hace unos meses y me enamoré perdidamente de él. Tras pedir permiso a la Autora empecé a traducirlo. Sed pacientes porque una buena traducción requiere tiempo y los capítulos van aumentando de tamaño. Muchas gracias a mi beta Poketjud por su ayuda.
Disclamer: Teen Wolf pertenece a MTV y Jeff Davis
Warnings: Esta historia contiene relaciones chico/chico y una obscena cantidad de fluff. Por favor proceded con cautela.
Baking my way into your heart
Hitch
Derek Hale era el tipo de persona al que le gustaba lo organizado y predecible. Prefería mil veces irse de vacaciones con todo planeado al milímetro que hacer lo que fuera – Dios no lo quiera – de manera espontánea. Así que podéis imaginaros como se sintió cuando entró en su cafetería favorita encontrándose que su barista(1) habitual no estaba allí.
"¡Buenos días!" lo saludó la voz alegre del chico tras el mostrador.
"Dónde está Clara" Derek ni siquiera se molestó en responderle al saludo. Tampoco en enunciar las palabras a modo de pregunta. Era una orden, un 'Dime dónde está Clara ahora mismo o te arrancaré la cara de cuajo'.
Sin embargo, eso no pareció desalentar al muchacho. "Oh sí, Clara. Ha tenido que cambiar su horario, este semestre empieza las clases más pronto. ¡Pero no temas! Yo estoy aquí para ocupar su puesto. Soy Stiles", el chico sonrió, tendiéndole la mano a Derek.
Derek se limitó a mirar la mano ofrecida, optando por ignorarla. Esa no era la forma en la que quería empezar la mañana. "Mira, estoy seguro de que eres un barista decente y todo eso," el chico retiró la mano al escuchar la palabra 'decente', "es simplemente que soy muy exigente con la forma en la que tiene que ser preparado mi café para que me guste y Clara ya lo tenía dominado".
El chico pareció considerarlo por unos segundos antes de asentir. "Entiendo… ¿Y cómo es? Dime cómo lo pides, lo haré gratis por esta vez y si no te gusta, entonces yo mismo localizaré a Clara y la obligaré a enseñarme como hacerlo hasta que me quede perfecto. ¿Te parece?"
No, no le parecía. ¿Pero que otra opción tenía? Derek tenía una rutina muy específica y esa pequeña charla ya lo había retrasado dos minutos. Suspiró frustrado. "Bien, da igual. Un café grande, muy caliente, con dos gotas de sirope de avellana, sin crema, solo un chorrito de leche desnatada, sin caramelo y – Dios – no dibujes un corazón en la espuma por favor".
El chico – Stiles – lo meditó por un segundo, su expresión y la forma en la que sus labios se estaban moviendo le indicaron a Derek que estaba tratando de recordar todos los detalles de su pedido. Derek gimió internamente. 'Va a olvidarse de algo. Tendría que habérselo escrito según se lo decía. Maldición. Clara tendría que habérmelo dicho antes de marcharse. Así no estaría ahora mismo aguantando a este chico. Además, ¿Stiles? ¿Quién llama a su hijo Stiles?'.
Derek observó al crío moverse detrás de la barra. '¿Qué está haciendo? Clara no echa el café con tanta fuerza. ¡Arg! ¡Le dije dos gotas de sirope! ¡Han sido claramente dos y media! ¿Está usando leche desnatada? Por su bien espero que lo esté. Dios… ¿ahora que está haciendo?.
Stiles se dio la vuelta con el café solicitado en la mano. "Aquí tienes". Sonrió.
Derek miró al café e inmediatamente frunció el ceño. "Pensé que había dejado claro que nada de dibujos en la espuma".
"Ah, ah," Stiles sonrió con diversión, negando con el dedo. "Dijiste que no dibujara un corazón. Esto, buen señor, es una flor".
Derek lo fulminó con la mirada. "Monísimo," respondió con sarcasmo antes de coger una varilla revolviendo el café hasta hacer desaparecer la flor.
El chico no pareció desanimarse por dicha acción. Simplemente soltó una risita antes de mirar a Derek expectante. Fue entonces cuando se dio cuenta de que lo más probable es que estuviera esperando por su crítica, pero dado que Derek estaba de mal humor, se limitó a coger su café y dirigirse a su sitio de siempre, en la esquina más alejada. Su rutina diaria incluía llegar pronto a la cafetería, más concretamente a las seis de la mañana, pedir su café y pasarse la siguiente hora estudiando para cualquier clase que tuviera ese día. Era lo idóneo, sin duda, considerando que esa cafetería en particular no solía tener clientes hasta más tarde, cuando los estudiantes normales solían levantarse. Eso le proporcionaba a Derek la paz que necesitaba para estudiar. Sacó su portátil, listo para empezar con lo que había dejado a medias la noche anterior. Estiró la mano alcanzando su bebida y suspiró. "Ok… prepárate para la decepción…".
Derek dio un sorbo. Luego dio otro sorbo. Luego miró la taza en sus manos antes de darle un trago largo. Relamió sus labios. 'Esto está sorprendentemente bueno. Sabe a café incluso a pesar del sirope y la leche.' Miró al joven tras el mostrador, obviamente haciéndose el ocupado mientras lo observaba disimuladamente con le rabillo del ojo. Derek soltó un bufido, decidiéndose a ignorarlo y a seguir con su trabajo.
Media hora más tarde, el moreno estaba completamente absorto en la lectura cuando un pequeño plato invadió su espacio. Desconcentrado por la interrupción, Derek levantó la vista para encontrarse con el chico que lo miraba sonriente.
"Dado que parece que te gustó el café, pensé que podría interesarte también un muffin. Yo invito".
Derek pasó la vista del bollo al chico. "No suelo tomar muffins por la mañana".
"Este es un buen momento para romper la rutina," sonrió. "Yo mismo la hice. En realidad, me alegré mucho cuando escuché que el turno de mañana estaba libre, siempre había querido cocinar. Así que…" miró el muffin antes de volver la vista a Derek, "tachán." Levantó el plato, agitándolo como si quisiera hacer que el muffin bailara en él.
Derek se limitó a mirarlo con incredulidad. "¿Estás sugiriendo que sea tu conejillo de indias?"
"Bueno, técnicamente no. Ya he cocinado antes para mi padre y Scott pero nunca aquí. Así que supongo que de alguna manera, ¿sí y no?" Se encogió de hombros aun sonriendo.
Derek puso los ojos en blanco antes de retomar su trabajo. Por el rabillo del ojo, pudo ver al chico fruncir el ceño antes de volver a dejar el plato en la mesa frente a él. Se alejó, desapareciendo en la parte de atrás de la cafetería. Derek miró el muffin. Parecía estar cubierta de mantequilla y azúcar, con un remolino de canela coronándola. El olor que desprendía flotaba en el aire, demostrando que estaba recién hecha. Suspiró. Acercó el plato y partió un trozo metiéndoselo en la boca.
'Oh… Dios…' Sus ojos se abrieron por la sorpresa. Partió otro trozo, era imposible que el segundo mordisco fuera tan bueno como lo había sido el primero. Por supuesto, estaba equivocado. Patéticamente equivocado. Cerró los ojos, saboreando el bollo. Alcanzó su taza café, gruñendo porque se había acabado demasiado rápido, pero aun así satisfecho con el último trago cuyo sabor conjuntaba perfectamente con el del muffin. Era como una sinfonía en su boca. Tan bueno que estaba a punto de soltar un gemido.
Al escuchar al chico volver a la habitación, rápidamente empujó el plato hacia su posición inicial, fingiendo estar centrado en su ordenador. Trató de seguir leyendo pero por el rabillo del ojo pudo ver como el chico volvía a mirar en su dirección y como se ilusionaba al ver el muffin a medio comer además de la sonrisa de suficiencia antes de seguir trabajando.
Otra media hora más tarde, Derek guardó sus cosas, dispuesto a irse a clase. Dejando la taza y el plato vacíos sobre el mostrador frente al impaciente chico.
"Veo que te gustó el muffin" sonrió.
"Tenía hambre" mintió, aunque el chico pareció darse cuenta. Sacó la cartera cogiendo un billete de 10 dólares.
"Ey, ey" dijo extendiendo las manos para detenerlo. "Dije que te invitaba".
A Derek no le parecía justo, sobre todo si se tenía en cuenta que había tenido que contenerse de lamer el plato y la taza hasta dejarlos limpios. Frunció el ceño. "Está bien". Dejó los 10 dólares en el mostrador antes de alejarse.
"¡Espera!" gritó el chico "¡Esto es demasiado!"
"Propina" respondió Derek, sin molestarse en parar. Escuchó pasos apresurados y el crujido de una bolsa de papel a su espalda.
"¡Entonces al menos llévate otro bollo!"
Ante eso Derek se detuvo, con la boca hecha agua ante la idea. "Maldición…" murmuró para sí mismo. Se mordió el labio, tratando de contenerse y no girarse. Era una batalla perdida. Derek miró sobre su hombro. El chico seguía detrás de la barra, con una bolsa de papel en la mano extendida en su dirección. Gruñendo para sí mismo, y haciendo un particular esfuerzo en evitar el contacto visual, tomó la bolsa de la mano tendida antes de casi correr fuera de la cafetería. No se molestó en mirar hacia atrás, ni siquiera, cuando escuchó al muchacho gritar "¡Ten un buen día!".
No fue esta más tarde, en su clase de historia, cuando Derek por fin abrió la bolsa, sucumbiendo de inmediato ante el olor que ésta desprendía. No era un muffin si no una galleta, con almendra y una ligera capa de glaseado en la parte superior. Fue bueno que estuviera sentado en la parte de atrás de la habitación porque el gemido que emitió tras el primer mordisco hubiera atraído más atención de la que ya tenía. Después de unas cuantas miradas raras, Derek guardo la bolsa, decidiendo que lo mejor era comérselo en privado.
Nota Autora: Sabéis, esto podría ser perfectamente un one-shoot, pero no lo es. Yey! He leído un par de ffs con Derek trabajando de mecánico (son INCREÍBLES por cierto) y me preguntaba cómo sería si fuera Stiles el que sirviera a Derek (jaja omg, XD mi mente hace comentarios sucios incluso cuando no es mi intención.) Et voila! Oh y por favor disculpad el ridículo juego de palabras en el título (2), pensé que sería divertido. Probablemente algo que Stiles diría.
(1) Barista: podía haberlo traducido como camarero, pero tengo entendido que esta es la palabra correcta para referirse a la persona que hace el café.
(2) Baking my way into you heart: puede ser traducido como "Cocinando el camino hacia tu corazón", básicamente tratar de enamorarlo usando la comida de ahí el juego de palabras.
Nota traductora: Pues ahí queda el primer capítulo, los mensajes me animan a traducir más rápido y publicar antes. El ff original no está acabado pero podéis encontrar los links en mi perfil. Los siguientes capítulos son más largos. Un saludo!