¡Hola! Aquí vengo con una nueva traducción, el fic es de "obsessivecompulsivereadr" ( u/3635066/) autor que creo que es más conocido por el fic Kurtbastian "Of Bear Cubs, Meerkats, and Hobbits" (se los recomiendo, es muy bueno.)
Este fic no es ni muy conocido ni muy recomendado, por alguna extraña razón que no conozco, ya que a mí me encanta. Consta con 5 capítulos de alrededor 4.000 palabras cada uno.
El fic se puede encontrar en AO3: /works/442615/chapters/756249 (fanfiction es muy malo con esto de los links, si quieren leerlo en inglés, díganme que se los paso por PM)
Debo acotar que es un fic que, a diferencia de mi anterior traducción, es bastante Anti-Blaine/Klaine, o mejor dicho, no es Blaine/Klaine friendly. Por lo tanto, si no pueden tolerar a un Blaine necesitado de atención (osea, al Blaine actual en la serie, jaja) les aconsejo que no lean esto. Si les gusta Blaine pero entienden que esto es fanfiction y no les importa que este esté retractado de esta manera, no creo que tengan problemas. Y bueno, si odias a Blaine, léelo, que te va a encantar.
El fanart no tiene nada que ver con el fic, es un Kurtbastian Random, y por eso no he pedido autorización para colocarlo.
Dicho esto, los dejo con el primer capítulo del fic, muchísimas gracias por leer :)
"Me voy," anunció Kurt mientras entraba en el living. Había hecho todo lo que pudo para prepararse para el ataque que imaginaba que podría venir tras esa declaración.
Había tomado respiraciones profundas, y se había cubierto a sí mismo con muchas capas de costosa ropa de diseñadores como armadura simbólica contra sus dos novios. El se había, en cierto modo, apretado bien los cinturones para la lucha.
Lo que no había esperado era una completa falta de reacción en lo absoluto ante la declaración.
Sebastian ni siquiera levantó la vista de su libro, y Blaine no se molestó en levantarse del piano, en donde estaba escribiendo letras y melodías una vez más. Ni siquiera lo habían escuchado, lo cual, aunque fuese frustrante, también era adecuado, considerando que no habían estado escuchándolo en lo absoluto desde hace semanas.
"¿Qué, bebé?" Sebastian no se molestó en levantar la vista mientras hacía la pregunta. "¿Qué dijiste?"
"Dije que me voy," repitió Kurt.
Él había estado empacando a lo largo de los últimos tres días, siempre cuando los dos estaban afuera. Si hubiesen notado que sus pertenencias fueron desapareciendo de a poco, no lo hubiesen mencionado. No habían preguntado.
Ahora, estaba completamente cargado con las pocas cosas que había dejado. Él había movido las otras cosas, especialmente su ropa, a su nuevo departamento, en el cuál compartiría con Finn ahora que él y Rachel habían roto. Tanto él como su hermanastro estaban simplemente hartos de sus relaciones. Ambos estaban hartos de sentirse como la segunda opción.
"Okay, ¿a qué hora estarás de regreso?" preguntó Blaine, todavía sin hacer contacto visual con Kurt.
"No lo estaré," dijo Kurt en voz baja, pero lo suficientemente alta para que lo escuchasen, si estaban interesados en escucharlo.
Kurt se dio vuelta y se alejó de su relación de un año que jamás quiso en primer lugar. Había sido idea de Blaine y Sebastian. En el fondo, Kurt siempre había sabido que era la forma en que Blaine tuviese lo que quería sin perder a Kurt.
La forma en que Blaine tuviese a Sebastian sin dejar a Kurt. La forma en que Sebastian tuviese a Blaine mientras toleraba la presencia de Kurt. La forma en que todos menos Kurt tuviesen lo que querían.
Kurt no era suficiente para Blaine, y nunca había sido lo que Sebastian había querido en primer lugar. Y después de la discusión de anoche, Kurt había sabido que la decisión de hace tres días atrás había sido la correcta.
Él había estado incluso más convencido cuando había despertado y ninguno de ellos había estado en la habitación con él, rogándole que se quedase. Diciéndole que lo amaban. Asegurándose que se sintiera mejor después de la locura de la noche pasada.
No, estaban ahí sentados en el living, ignorando las consecuencias de lo que probablemente hubiesen llamado algo así como, Kurt teniendo otro "momento." Como Kurt enloqueciendo nuevamente.
Cuando escuchó el grito de Sebastian, se dio cuenta que las palabras de despedida finalmente se habían hundido en la consciencia de Sebastian. Kurt había abierto la puerta del frente cuando Sebastian cruzó la habitación, deslizándose por el suelo con sus calcetines.
"¿A qué te refieres? Pensé que habíamos hablado de esto." El rostro de Sebastian estaba en pánico. "¡Blaine!"
"No es difícil de entender, Bas. Creo que estoy siendo muy claro en esto," Kurt vio a Sebastian encogerse ante sus propias palabras utilizadas durante la pelea de anoche siendo utilizadas en su contra. "Me voy. Y no voy a volver."
Blaine cruzó la habitación y se quedo parado, viendo la maleta de Kurt. "¿Qué demonios? ¿A dónde te vas?"
"A mi nuevo departamento. Estaré viviendo con Finn desde que él y Rachel rompieron. Él no está dispuesto en renunciar a su futuro solo porque New York era el sueño de Rachel."
"¿Qué tiene que ver eso contigo?" Sebastian se acercó lentamente, con las manos arriba en señal de rendición, y Kurt se hubiese reído de su obvio intento de no "asustar" a Kurt si hubiese estado de mejor humor en este momento.
Era la postura que Sebastian tomaba cuando hacía enojar a Kurt por algo y quería acercarse lo suficiente para seducir a Kurt y que este lo perdonara. Él la había usado la noche anterior para convencer a Kurt de calmarse lo suficiente para lograr dormir.
"La noche pasada me pasó lo mismo. Estoy harto de esto. Todo lo que hace esta relación es lastimarme, y ya no voy a seguir así," contestó Kurt en voz baja.
Sebastian llegó a agarrar su maleta, pero Kurt la sostuvo bruscamente.
"Kurt, por favor." La voz de Sebastian era baja y ronca.
"No lo entiendo," dijo Blaine, y Kurt se dio vuelta hacia el hombre que había sido su primer amor.
Kurt buscó en su rostro, y le tomo un momento, pero lo encontró. Kurt encontró al confundido e inconsciente Blaine del que se había enamorado hace unos años. Blaine realmente no entendía a Kurt, y eso siempre había sido parte del problema. No lo hacía intencionalmente. Kurt lo había conocido durante suficiente tiempo para saber eso, al menos. Blaine realmente era despistado la mayor parte del tiempo. Él era adorable, a cierto punto, había amado mucho a Kurt. El simplemente parecía querer a Sebastian, y amar a Sebastian, más.
"Sé que no lo haces. Ninguno de ustedes ven las cosas en la forma en que yo las veo," Kurt se encogió de hombros y dio un paso hacia la puerta. "Y no espero que lo hagan." Kurt dio otro paso hacia el pasillo.
"¡Espera!" Sebastian lo siguió y se paro en frente de él "Por favor, bebé. ¿Qué es lo que hicimos?"
"Bas, muévete. Necesito irme," Kurt se obligó a sí mismo a no llorar, pero pudo sentir las lágrimas empezar a caer nuevamente.
"No hasta que me digas que pasó. ¿Esto es por lo de anoche? Lo siento, fui un idiota. No quise decir nada de lo que dije," Sebastian agarró el rostro de Kurt con sus manos.
"Por favor, detente," Kurt cerró sus ojos. Una pequeña voz le había dicho que debería haberse ido cuando ellos estaban en el living. Pero había querido que ellos supieran que se estaba yendo.
"No," susurró Sebastian. "No hasta que me digas por qué."
"¿Siquiera notaste como todas mis pertenencias han estado desapareciendo en los últimos días?" susurró Kurt. "¿Cómo me he alejado silenciosamente de sus vidas?"
Esto sería más fácil si no se hubiese enamorado de Sebastian. También sería más fácil si no se hubiese desenamorado de Blaine. Y ya no iba a hacer esto.
Era tan doloroso ver a Sebastian amar a Blaine, y ver a Blaine amar a Sebastian y saber que ninguno de ellos lo amaba a él.
Sebastian miró a Blaine, y Kurt abrió sus ojos para ver la silenciosa comunicación entre ellos. Podía decir que, por sus expresiones, no habían notado su sutil retirada de su mísero y pequeño trío.
Kurt puso su mano en la mejilla de Sebastian. "Notaste cuando Blaine se retiro y no nos dijo por qué. ¿Recuerdas? ¿Hace unos meses?"
Sebastian asintió, apretando sus ojos cerrados cuando parecía haberse dado cuenta de su error. Él siempre notaba a Blaine.
"¿De qué estás hablando, Kurt?" Blaine miró entre ellos sucesivamente.
Kurt lo ignoró y se concentró en Sebastian. "Lo sé. A veces es el trabajo. Tú siempre estás tan ocupado. Pero la cosa es que nunca estás demasiado ocupado para Blaine. Y él nunca está demasiado ocupado para ti. Pero es una historia diferente conmigo, ¿no?"
Las manos de Sebastian bajaron y miró de Blaine a Kurt. "No," negó Sebastian silenciosamente.
"Al menos sé honesto conmigo, Bas. Merezco eso." Declaró Kurt.
Kurt se dio vuelta hacia Blaine. "¿Recuerdas cuando fuiste el que asistió a la fiesta de trabajo de Bas?"
Blaine asintió. Habían tenido un acuerdo de que la relación se quedaría detrás de las puertas cerradas. Nunca asistieron a ningún lado juntos, como un trío, especialmente si era algo de trabajo. Habría demasiados preguntas para eso.
Los dos, Blaine y Sebastian, habían discutido sobre quien acompañaría a Bas para ser presentado como su novio a todos sus contactos del trabajo. Luego, ese novio asistiría a todas las fiestas de trabajo para mostrar consistencia en los hechos.
"Nadie preguntó siquiera. Ambos decidieron que sería Blaine el que iría. Y no creas que no sé que es porque él es más adecuado," La voz de Kurt bajó mientras se daba vuelta hacia Sebastian. "Está bien, Bas. Entiendo que soy demasiado llamativo como para acompañarte. ¿Pero sabes que es lo que más duele?"
"¿Qué?" susurró Sebastian. Blaine continuaba luciendo como si estuviera completamente desinformado.
"Mi primer show. Era mi primer show, Bas. Y a pesar de que sé que tienes un completo desprecio por lo que hago, me gané mi propio show en la Semana de la Moda. ¿Y dónde estaban ustedes dos?"
"¿Cuándo fue la Semana de la Moda?" preguntó Blaine, desconcertado.
Kurt se dio vuelta hacia él y se río irónicamente. "Esto es de lo que estoy hablando. Te dije muchas veces cuando iba a ser mi show. Me ignoraste. Está bien, Blaine, no te preocupes sobre eso ahora porque ambos se lo perdieron."
Sebastian asintió en silencio, con lágrimas cayendo, y Kurt quería consolarlo. Finalmente algo había hecho click en Sebastian, y Kurt podía decir que él de repente había recordado cuando había sido el show. Y a pesar de que era Kurt quien había sido herido, este seguía teniendo el deseo de consolar a Sebastian sobre ello.
Toda la experiencia de enamorarse de Sebastian Smythe fue dolorosa. No importaba que hubiera pasado entre ellos dos, las peleas, las bromas sarcásticas, la constante irritación, Kurt lo amaba, y amar a Sebastian dolía como el infierno. Porque, para desgracia de Kurt, Sebastian era dueño de una mayor parte del corazón de Kurt de lo que Blaine jamás había sido.
El problema era, que Sebastian no quería el corazón de Kurt. Quería el de Blaine.
Kurt se dio vuelta hacia Sebastian y limpió sus ojos con una manga. "Así que ya no tienes que preocuparte por fingir interés por mis diseños."
"No estaba fingiendo interés, Kurt," negó Sebastian.
Kurt río y le dirigió lo que Sebastian llamaba 'bitch face'.
"Por favor. Lo entiendo, Bas. La música de Blaine es diferente. Te gusta su música, y odias todo lo relacionado a mi trabajo. Todo lo que te pedí es que por una noche dejaras todo eso de lado." Kurt acarició una mejilla de Sebastian y le limpió una lágrima. "Les rogué por una noche en donde pudieran apoyarme incondicionalmente. Una noche en donde estuvieran allí solo para mí."
"¿Qué noche? ¿Cuándo fue esto?" Blaine se levantó, rebotando sobre las puntas de sus pies, su cabeza retrocedió y miró entre ellos sucesivamente como si estuviera viendo un partido de tenis.
Kurt se giró hacia Blaine y sonrió tristemente. "Fue anoche. Estoy seguro que recuerdas en dónde estabas anoche, ¿no, Blaine?"
Blaine palideció y Sebastian se movió con culpa en frente de Kurt.
"Estábamos bebiendo anoche," contestó Blaine.
"Kurt, lo siento tanto. Lo olvidé," dijo Sebastian en voz baja. "Y él tiene razón. Estábamos bebiendo."
"Lo sé. Tú siempre te olvidas. Ambos hacen eso cuando el tema tiene que ver conmigo. Pero lo que pasó cuando llegué a casa anoche fue la última gota."
Después de docenas de textos sin respuestas y llamadas, Kurt finalmente había aceptado que ellos no iban a venir, y se había ido a través de los movimientos del show. La empresa de diseño para la que trabajaba había hecho su pequeña contribución a la Semana de la Moda con una competencia este año. Y como Kurt había ganado, sus diseños fueron escogidos para el show. Y aunque no había sido un show que había recibido tanta cobertura mediática como las principales casas de diseño, había sido su show. Había sido un comienzo para él, y eso era lo que había importado.
Había vuelto a su casa después de la fiesta, y había seguido el rastro de ropa que Sebastian y Blaine habían esparcido por todo el departamento. Había, por supuesto, conducido hacia la habitación que compartían.
Y había encontrado a Sebastian y a Blaine adormecidos, tirados y obviamente recuperándose de una maratón de sexo que Kurt no había sido incluido. Inmediatamente se había preguntado cuántas veces esto había pasado mientras él estaba fuera del departamento.
Se había puesto de pie, mirando a Sebastian mientras este dormía junto a Blaine, y la ira lo había golpeado, viniendo de la nada. Y cuando la ira llegó, las lágrimas la siguieron.
Había caminado de vuelta hacia la puerta de la habitación y la cerró con toda la frustración y la fuerza que había tenido en él. Sebastian había disparado de la cama, arrugado y confundido, y Kurt había tenido que luchar contra la ola de deseo por él. Bas siempre lucía sexy después del sexo.
Sebastian lo había mirado, entrecerrando los ojos, luego había cometido el error de despertar a Blaine. Kurt ni siquiera los había dejado despertarse completamente antes de disparar contra ellos, con meses de dolor e ira que sentía hacia ambos.
"Ustedes fueron quienes me rogaron darle a esto una oportunidad," Kurt había acusado entre lágrimas que no paraban de caer. "Ustedes dos. Ambos sabían que yo no quería esto. Nunca quise esto, pero ustedes dos no se rindieron. Tenían que tener esta relación de mierda e incluirme en ella. Me prometieron que no saldría lastimado. Me lo prometieron," Kurt había mirado a Sebastian mientras hablaba.
Blaine se había frotado los ojos, "¿Qué demonios, Kurt? ¿Qué pasa contigo?"
Pero Kurt, quien hace tiempo se había rendido a sentir algo por Blaine, había mirado a Sebastian todo el tiempo.
"Sea lo que sea, lo siento," Blaine había declarado ausentemente, intentando arreglarlo pero no tenía absoluta idea de que se estaba disculpando.
Se suponía que había reglas. Se suponía tenían que saber cuando los otros dos estaban teniendo sexo. Abiertos y comprensivos era como deberían haber estado. Pero en esencia, no solo no habían estado ahí para él, sino que también, pasaban ese tiempo follando entre ellos. Y para Kurt, había sido como si los hubiera atrapado engañándolo.
Sebastian simplemente lo había mirado, adormilado pero preocupado.
Encontrarlos de esta forma había sido la última gota para Kurt. Ni siquiera habían tenido la decencia de decirle en su rostro que él ya no era necesario. Hubiese sido diferente si ellos hubiesen proclamado amor eterno el uno a otro en cada respiración. Si simplemente salían y decían que ya no necesitaban a Kurt.
"Kurt," Sebastian había dicho en voz baja mientras salía de la cama. "Cálmate."
Kurt se había dado vuelta hacia él, y su enojo había llegado a tal punto que ni siquiera le importaba lo que decía.
"Cállate. Esta fue tu idea, y lo sabes. Para que pudieses tener a Blaine todo para ti. ¿Cuántas veces me dijiste que me amabas? ¿Cuántas malditas veces, Sebastian? Ustedes dos ni siquiera tienen la decencia de decirme que quieren ser exclusivos el uno al otro. Porque ya no soy necesario. Dios, porque uno de ustedes me querría cuando se tienen el uno al otro, ¿cierto?"
"¡Contrólate, Kurt!" gritó Blaine. "¿Qué pasa contigo?"
Sebastian se dio vuelta hacia él, "No estás ayudando."
Blaine salió de la cama, completamente desnudo, y se volvió hacia Kurt, "¿Por qué nos estás gritando? Perdón por no esperar a que llegues a casa, si eso es lo que te enojó." Blaine se acercó a agarrar su brazo.
Kurt lo miró furiosamente. "No. Me. Toques."
"Kurt," Blaine frunció el ceño, llevando hacia atrás su mano como si hubiese sido mordido.
Kurt se dio vuelta hacia Sebastian. "Sé que quiere él acerca de esto, pero, ¿Qué es lo que tú quieres? Necesito saberlo, Sebastian. Solo dime una cosa. Todas esas veces cuando estábamos en la cama, y me susurrabas una y otra vez lo mucho que me amabas. ¿Era verdad? En cualquier punto de todo esto, ¿alguna vez fue verdad?"
Sebastian lo miró pero no le respondió a Kurt. "Vete, Blaine."
"¿Por qué?" Blaine lo miró con incredulidad.
"Esto es entre Kurt y yo en este momento. Vete por un rato."
Blaine había vacilado, pero dejó la habitación.
"¿Era verdad? Eso es todo lo que necesito saber, Sebastian. Porque ahora mismo, se siente como si ustedes dos no se preocuparan por nadie además de ustedes mismos."
Sebastian había levantado sus manos, y se había acercado a Kurt lentamente, como si Kurt se volviese en su contra en cualquier momento. "Si, bebé, te amo."
"¿Entonces por qué haces esto? ¿Por qué siempre es él?" Kurt había sentido sus rodillas ligeramente dobladas, y se alejó antes de caer en el irresistible deseo de caerse en el piso. "Siempre es él y siempre será él. Y estoy tan malditamente cansado de eso."
Estaba cansado de que Blaine vaya siempre primero. De que Blaine siempre obtuviese lo que quería. De que Blaine siempre sea el novio que Sebastian se dignara a reconocer en público. De que Blaine siempre fuese el que Sebastian quería.
Kurt necesitaba salir de esto. Necesitaba estar en algún lugar en el cuál no podría verlos todos los días y no tuviese que ver como lo arrojaban lentamente de sus vidas.
Kurt se había tensado al sentir el brazo de Sebastian a su alrededor.
"¿Qué pasa, bebé?" Sebastian había acariciado su espalda. "¿Estás molesto porque tuvimos sexo sin ti?"
"Por supuesto que eso es lo que ves," Kurt se había alejado. "Siempre soy yo haciendo un berrinche, ¿no? Yo exagerando de nuevo. Nunca puede ser que sea porque estoy cansado de ser tratado como que no importase en esta relación."
Podía admitir, para sí mismo, que estaba celoso. Pero también estaba increíblemente herido. Ambos siempre estaban tan ocupados entre ellos que dejaban a Kurt a la deriva.
"Jesús, Kurt. Solo dime que anda mal." Sebastian había demandado.
Así que Kurt había decidido que la única cosa que los forzaría a dejarlo ir necesitaba ser dicha.
"Ya no estoy enamorado de él," Kurt había susurrado. "Pero estoy enamorado de ti, y necesito irme."
Él se iría, y les dejaría tener lo que ellos querían. A ellos mismos. Sin un Kurt para ignorar o evitar, y sin los "berrinches" de Kurt con los que lidiar.
"Espera," Sebastian se había levantado y parado entre Kurt y la puerta. "Dame un poco de tiempo para pensar aquí. No puedes solo decir eso y esperar que yo sepa que hacer inmediatamente."
"No hay nada que tengas que hacer, Bas. Estoy cansado de las señales mixtas. Estoy cansado que me digas una cosa con tus palabras y que me muestres otra con tu comportamiento."
"No estoy enviando señales mixtas. Creo que estoy siendo muy claro en esto. Y no voy a elegir si eso es lo que quieres," Sebastian había disparado con ira.
Las palabras se habían sentido como un puñetazo en el estómago de Kurt. Por supuesto que Sebastian no lo elegiría a él. Lo había dejado claro una y otra vez con su obsesión con Blaine Anderson. Pero escuchar a Sebastian decir aquellas palabras se sentía peor de lo que había esperado.
"No recuerdo haberte pedido que elijas, Smythe. Me limite a decir que necesito irme," Kurt había dicho y trató de rodearlo para alcanzar la puerta de la habitación.
"No, no te vas a ir. No de esta forma. Estás demasiado enojado. Podemos hablar de ello en la mañana."
Kurt había permitido que lo envolviese en un abrazo, no importase lo mucho que había dolido. Había querido sentir los brazos de Sebastian a su alrededor y había tratado de ignorar que esos brazos habían estado envolviendo a Blaine unas pocas horas antes.
Kurt se había dejado a sí mismo ser puesto en la cama. Había estado allí, llorando, mientras Sebastian salía de la habitación. Probablemente había salido para decirle a Blaine que Kurt estaba teniendo otro "ataque."
Había sentido otro cuerpo pensado en la cama detrás de él, y sintió a Sebastian colocar sus brazos alrededor de él.
"Blaine va a dormir en otra habitación," Sebastian había susurrado en su oído mientras hacía cucharita con Kurt.
"Como sea," Kurt había contestado. "No cambiara nada, Bas. Ya no puedo hacer esto."
"Okay, lidiaremos con el asunto de Blaine. Pero sigo sin saber que fue lo que hicimos, y necesitamos hablarlo en la mañana." Sebastian lo había puesto más cerca.
"¿Por qué estás aquí conmigo? No vas a elegir, ¿recuerdas?" Kurt había escupido la palabra elegir y Sebastian se había endurecido detrás de él.
"Estoy aquí porque me necesitas más en este momento," Sebastian había respondido en voz baja. "Ahora, duerme."
Kurt se empujó a sí mismo lejos del recuerdo de la discusión. "Me voy, Sebastian."
"Bas, solo déjalo superar esto. Volverá pronto," dijo Blaine hacia Kurt con irritación. "Solo está siendo dramático." Blaine cerró la puerta del apartamento con un golpe y dejó a Sebastian afuera con Kurt.
"No quiso decir eso," dijo Sebastian en voz baja.
"Si, si lo hizo. Y tú lo has dicho antes acerca de mí. He perdido la cuenta del número de veces que ustedes dos me llamaron dramático por estar molesto con ambos. Simplemente ya no puedo hacer esto," contestó Kurt.
"¿Qué es lo quieres de mí, Kurt?"
"Algo que no puedes darme. Realmente es así de simple, Bas," Kurt acarició su mejilla nuevamente. "Te amo tanto. Pero no solo amas más a Blaine, a veces se siente como que no me amas en lo absoluto. Como que estoy aquí solo porque tú, con el objetivo de tener a Blaine, tenías que involucrarte con Kurt también. Estoy cansado de ser la segunda opción, y siempre he sido la segunda opción en tu corazón. Y a pesar que fui la primera en el de Blaine por un tiempo, eso cambió cuando esto pasó," Kurt hizo un círculo para describir al trío.
"Kurt," Sebastian se inclino para agarrar la mano de Kurt y cerró sus ojos.
"No estoy pidiendo que elijas, Bas. Estoy tomando la decisión por ti. Me desenamore de Blaine hace mucho tiempo, y me estaba quedando para estar contigo. Pero ya no puedo hacer esto. Hay demasiadas cosas que han pasado. Demasiados momentos en donde Blaine no solo fue primero, sino que también sus sentimientos fueron los únicos considerados. Duele. Duele ver que lo amas en la forma en que quiero que me ames a mí. Y saber que eso nunca pasara es demasiado como para seguir aguantándolo."
"Por favor, no te vayas," susurró Sebastian.
"Tengo que hacerlo. Aprecio que estés peleando por mí. No lo espero de Blaine, porque él espera que alguien más pelee por él. Y él y yo ya no nos sentimos de la misma forma. Él te ama, y tú lo amas. Y soy el único que pierde aquí. He aceptado eso, Bas. Pero eso no significa que deba ser masoquista al respecto."
Kurt maniobró a alrededor de él, y Sebastian agarró su brazo una vez más. "¿Podemos hablar más de esto, por favor?"
"Tal vez. Pero no ahora mismo. Nunca me has dejado duda sobre que querías de esta relación. Fue mi culpa enamorarme de ti. Así que estoy eliminando el origen del problema. A mí. Él ya no me quiere, y realmente no creo que alguna vez me haya querido en la forma en que te quiere. Y tú lo quieres a él. Ese nunca ha sido el problema."
"No eres el origen del problema," contestó Sebastian. "Te amo."
"Tal vez. Pero a esta altura, eso no es suficiente para mí. Y yo no debería quedarme en esta relación con ambos solo para obtener las migajas, de afecto que le das a él."
Sebastian se quedó sin aliento. "Lo siento. No me di cuenta que estaba haciendo eso."
"Ya no importa. Nunca seré él, y he aceptado eso."
"No espero que seas él."
Kurt río irónicamente. "Lo sé. No podría ser él por más que lo intentara. Eso me ha perseguido por años, desde antes que nos convirtiéramos en un trío, y eso no tiene nada que ver contigo.
"Por favor," dijo Sebastian en voz baja.
"Por favor deja de decirme que me quede. No tienes idea lo mucho que quiero quedarme para ti. Contigo. Pero tengo que tener un poco de auto-protección aquí. No es que ya no quiera hacer esto. Es que no puedo. Mi corazón se rompe un poco casa día cuando te veo con él. Porque sé que cuando te das vuelta, la mirada en tu rostro cambiará. La forma en que lo miras me lastima. Y eso ni siquiera es algo de lo que pueda culparte, porque lo amas. Pero cuando te das vuelta hacia mí, esa expresión cambia a algo que ni siquiera soy capaz de reconocer. Dices que me amas. Pero no siento eso de ti. Pero el amor que le muestras a él, te irradia. Y ya no voy a ver eso."
Sebastian miró para otro lado, con lágrimas en los ojos. "¿Puedo llamarte a lo de Finn?"
"¿Por qué? ¿Quieres tener una especie de aventura conmigo mientras te quedas comprometido con él?"
"No sé qué es lo que quiero. Necesito tiempo para pensar. De alguna forma me emboscaste con esto."
"Si hubieras estado escuchándome durante los últimos meses, esto no sería una emboscada en lo absoluto. He estado tratando de decirte como me siento. Lo mucho que te necesito. No me molesté en decirle a él, pero te lo he dicho a ti. Una y otra vez. Pero no escuchabas porque no puedes oír nada además de la voz de Blaine."
"Eso no es cierto."
"¿De verdad? Piensa en ello antes de negarlo." Kurt se dio vuelta y caminó por el pasillo.
"Te amo," le dijo Sebastian.
Kurt se congeló por un momento. "También te amo," le dijo de vuelta pero siguió caminando y no se dio vuelta.
Él lo hizo. Esto simplemente, ya no era suficiente.
Espero que les haya gustado :) Nos vemos!
