¿UN VIAJE COMO OTROS?
capitulo 1
Un joven caminaba sin rumbo fijo ya que el muchacho como en muchas ocasiones anteriores se encontraba perdido hace muchos días, pero a el parecía no importarle demasiado, ya que como toda su vida le pasaba lo mismo aprendió a vivir con ello. Su falta de orientación mas su maldición, con la cual se convertía en un pequeño cerdito negro, hacían sentirse la mayor parte del tiempo deprimido y depresivo. Su nombre: Ryoga Hibiki, un joven artista marcial de cabello negro sujetado con su inseparable pañoleta amarilla con dibujos negros, ojos color verde-miel y unos notables colmillos caninos que relucían cuando hablaba o sonreía. Algunas de sus metas era derrotar a Ranma Saotome, su eterno rival, al igual que el, un joven artista marcial de cabello negro atado en una trenza y de ojos azul-grisáceos, ya que por la culpa de el sufria la maldición del cerdo, y lo peor de todo era que el estaba prometido con la chica de sus sueños, Akane Tendo, una chica hermosa de cortos cabellos azulados y sus ojos de color café como el chocolate, Ryoga quería vengarse de Ranma por su maldición y a la vez demostrarle a Akane que el era mas fuerte para ganarse su corazón. El chico perdido pudo salir de ese bosque al haber pasado por muchos problemas
-Vaya, parece que al fin llegue al mar- dijo mirando el océano y a mucha gente que se encontraba en la playa
Decidió caminar por la playa para poder refrescarse con la brisa, ya que si tocaba el agua fría se transformaría. Luego de caminar un par de metros su estomago gruño de una forma colosal y la gente lo miro muy sorprendido en ese momento
-Solo tengo mil yens y tengo mucha hambre- decía mientras contaba las monedas que tenia en su mano. En ese momento olfatear un agradable aroma al mismo tiempo que alguien le hablaba. Un "chico" de largos cabellos castaños tomados en una cola y unos ojos azul claro
-Hey!, amigo, gustas un okonomiyaki?- dijo el joven que tenia un pequeño puesto de panes japoneses en la playa
-Esta bien, al menos me alcanza para uno- pensaba mientras caminaba hacia el puesto
-De que lo vas a querer? De verduras? De pulpo? De cerdo?- Al oír este ultimo, Ryoga se puso pálido lo cual sorprendió al cocinero
-Que ocurre?- Dijo al ver la cara del chico de la pañoleta
-Nada, nada- dijo volviendo en si –Uno de pulpo
-Ok- mientras sacaba sus ingredientes
Al momento de que se cocinaba el okonomiyaki Ryoga vio la gran pala que el chico tenia en su espalda pero prefirió no preguntar nada…por ahora
-Aquí tienes- Dijo el cocinero dándole el platillo
-Gracias- Dijo recibiéndolo y se dispuso a probarlo –Esta delicioso
-Muchas gracias- Dijo con una hermosa sonrisa con lo cual Ryoga extrañamente se sonrojo´
-Pero…..que ...me pasa, no lo creo…NO PUEDE SER QUE...- El pensamiento de Ryoga se vio interrumpido al escuchar la voz del cocinero
-Me llamo Ukyo Kuonji, y tu?- Dijo amenamente
-Oh… lo siento… soy Ryoga, Ryoga Hibiki, mucho gusto- Dijo dándole la mano e intentando no pensar en aquello –Y esa cosa?- pregunto el chico señalando la pala que el cocinero traía en su espalda
-Esto? Es mi espátula de combate- mientras se la enseñaba
-Practicas artes marciales?- Le dijo un poco entusiasta
-Claro que si, desde muy pequeño- dijo el cocinero mientras sus ojos se cargaban con un poco de furia
-Y por que pones esa mirada?- Dijo con un poco de sorpresa
-No, por nada-Dijo con un tono un poco distante para cambiar el tema –Y que hay de ti?
-Yo? Bueno, también practico artes marciales- Dijo el chico de la pañoleta
-En verdad? Porque no practicamos juntos?- Dijo el cocinero con emoción
-Esta bien, te parece mañana temprano, a las 8 AM-dijo recibiendo un si de respuesta, y dos segundos después terminando con su comida –Bueno, aquí tienes el dinero y nos vemos mañana- vociferó levantándose de su asiento
-Quieres otro?- Le dijo el cocinero
-No tengo mas dinero- Dijo el chico de la pañoleta rascándose la nuca
-Este lo invito yo, se nota que sigues con hambre y no quiero que llegues sin energía a la práctica de mañana. Además veo que eres un chico bueno y noble, vale la pena darte una mano- Le decía mientras le preparaba otro okonomiyaki
-Gra…Gracias- Dijo un poco sonrojado por la vergüenza y la sonrisa de aquel chico
Al llegar la noche Ryoga se encontraba en su tienda pensando en lo que paso en el puesto de aquel joven
-Oh Dios! Que me pasa? ¿No será que Ukyo me?...NO…NO PUEDE SER…NO ES POSIBLE ¡ES UN CHICO!-Decía muy ofuscado al recordar esa sonrisa y no poder encontrar respuestas claras a sus interrogantes. Pasaron muchas horas hasta que el sueño lo fue venciendo
Al otro día en el bosque se ve a Ukyo sentada sobre una gigantesca roca con una expresión muy molesta en su rostro
-Ese Ryoga, se suponía que llegaría a las 8 AM…Y YA SON MAS DE LAS 12 PM ¿DONDE ESTARA?- Dijo cruzando sus brazos, pero unos minutos después se ve una silueta a lo lejos, tras unos pasos se ve a Ryoga un poco polvoriento y ayudado de un palo para no caer
-Al fin llegas ¿Dónde estabas?- Decía mientras se acercaba al chico de la pañoleta
-Lo siento, pero me perdí- Dijo avergonzado -Pero empecemos con la practica
-Estas seguro?, no te veo muy bien- Dijo Ukyo mientras lo ayudaba a no caer
-Si, siempre me pasan esto- Dijo aun mas avergonzado
-Esta bien, ataca con todo lo que tengas y que sea enserio como una batalla real- dijo el chico de la espátula
-Eso pensaba hacer- Dijo con una sonrisa
Ukyo tomo su espátula y Ryoga su paraguas, ambos en posición de combate
-Aquí voy- dijo Ryoga
Ryoga se lanzo al ataque con su paraguas, Ukyo detuvo el impacto con su espátula la cual sufrió una pequeña abolladura, entonces se dio cuenta de la brutal fuerza de Ryoga deduciendo que no le convenía luchar con el en un cuerpo a cuerpo, luego Ukyo da un gran salto hacia atrás arrojándole sus miniespatulas a Ryoga las cuales evadió sin mucha dificultad, cuando el chico levanta la vista ve que se le vienen encima mas miniespatulas por lo cual arranca de su frente muchas pañoletas y las lanza para desviar de su trayecto original a las espátulas. Ukyo quedo impresionado con ese movimiento, pero no desistió de su ataque, lanzándole una bomba de harina y mas miniespatulas, la bomba exploto enfrente de Ryoga pero este noto la espátulas y dio un gran salto. Al disiparse el polvo de la harina Ukyo no veía al chico perdido y lo busco con su mirada, pero nada, fue cuando miro hacia arriba y vio a Ryoga lanzándose con una patada la cual impacto en el vientre de Ukyo quien cayo al suelo
-Te rindes?- pregunto Ryoga
Ukyo se levanto y dijo –Jamás me rendiré-
Entonces Ukyo sintió la fuerza del golpe y se tambaleo caminando hacia atrás quedando acorralado con la gran roca en la cual esperaba a Ryoga, este se lanzo nuevamente al ataque…-Bakusai Tenketsu- grito el chico de la pañoleta. Ukyo alcanzo a escapar del ataque y se fijo como Ryoga solamente enterrándole un dedo a aquella roca la hacia explotar en mil pedazos. Una nube de polvo cubría a Ryoga por lo cual Ukyo no podía ver si el chico perdido lanzaría otro ataque o no, pero sólo un segundo basto para que Ukyo pudiera ver como un gran numero de pañoletas se le acercaban a gran velocidad, sin darle tiempo de reacción y solo atinó a cerrar los ojos. Las pañoletas parecían cuchillas, dándole un corte leve en el brazo y cortando varias partes de la ropa de Ukyo. Al disiparse el polvo Ukyo levanta la mirada y logra ver a Ryoga, con una expresión boba en su cara y un hilillo de sangre en su nariz, entonces aprovecha ese momento donde Ryoga tiene su guardia muy baja y le da con su espátula gigante en la cabeza, dejándolo fuera de combate.
Luego de la practica(la cual paso a ser una seria pelea)Ukyo se preguntaba-Que diablos fue eso?¿Como hizo explotar aquella roca? Pero no encontró ninguna respuesta y luego se pregunto ¿Por qué se distrajo en la pelea si la tenia casi ganada?¿Acaso se hizo daño el la explosión? Y luego de pensarlo por un minuto noto que su ropa estaba deshecha y tenia a simple vista sus senos, parte de su vientre y casi en su totalidad sus piernas al descubierto, acto seguido le dio un ataque de pánico y atino a buscar en la mochila de Ryoga algo para cubrirse. Solo encontró ropas similares a la que el chico perdido traía puesta y sin pensarlo dos veces se la puso, vestía exactamente igual al chico de la pañoleta
Luego de unos minutos Ukyo regreso con Ryoga y este seguía inconsciente, asi que ella puso la cabeza de Ryoga en sus piernas y lo contemplo mientras el seguía inconsciente
-Ahora que lo veo bien, Ryoga es un chico muy apuesto- Pensaba mientras se sonrojaba al mirarlo –En verdad se ve muy lindo cuando duerme…Pero que, NO, prometí no volver a fijarme en hombres nunca más…pero Ryoga es un buen chico. Pero que me pasa, acaso el me…- Los pensamientos de la chica se ve interrumpidos por unos quejidos de Ryoga, el cual comienza a despertar
-Umm…ummm…ehhh
-Ryoga ¿Estas bien?-dijo la chica con una cara preocupada
-Uh…Uk…UKYO!- Gritó algo asustado
-Que te pasa?¿Te duele la cabeza?- Decía con temor a haberle hecho daño con el golpe
-Eres…eres…UNA CHICA!?
FIN CAPITULO 1
