Porque Simplemente Sucedió ETERNAL
Ella siempre había odiado a aquel que se llevó a su hermano, al culpable de que regresase muerto a la aldea y el culpable de que la vieja Chiyo entregara su vida para recuperarle. En su interior siempre había guardado odio hacia alguien del cual sólo sabía nombre y apariencia, no sabía nada más sobre él.
De nuevo tenía una misión y en su interior se producía un miedo de que nuevamente al regresar su hermano se hallase en la villa, había pedido a Kankurô que se mantuviese con Gaara cuando ella no estuviese, realizándose lo mismo pero a la inversa cuando el castaño debía de ausentarse.
En la misión algo le ocurrió, pero cuando quiso darse cuenta no recordaba nada, simplemente vagaba con sus ropas destrozadas. Alcanzó aquel bosque limitante entre el país del Viento y el país del Fuego, al menos ahí podía estar a la sombra y el aire era refrescante, todo lo contrario al que había en mitad de esas arenas.
En su trayecto por ese bosque encontró una libreta, había varios dibujos del paisaje que desde allí se observaba, realmente el dueño de aquel cuaderno era un gran artista, sin darse cuenta cedió a un cansancio que no sabía de donde procedía para despertarse encontrándose al dueño del cuaderno.
Era extraño como alguien como él la cuidaba, no sabía nada de ella y la ayudaba de un modo tan sincero, tan amable… Poco a poco la joven fue notando que algo empezaba a sentir por el joven que la cuidaba. Con pequeños actos "inocentes" trataba de transmitírselo y él no se dio cuenta.
Tanto tiempo desde todo aquello, ahora ella lloraba de noche, algo que hacia por primera vez en su vida, su alma estaba destrozada por amar a alguien que jamás iba a recordarla, ella lo amaba tanto, no quería que perdiese sus recuerdos por ella y sin embargo él lo hizo de igual forma, todo por ella, por la mujer que amaba.
Cada día era un nuevo dolor, el dolor de ver a quien amas, de que tu corazón se encienda porque te mira, porque cruzo una ligera sonrisa contigo y al instante la desesperación de que él hace eso sin saber que tú lo amas, de que una vez se amaron.
Te duele sentir en tu interior un amor tan grande, de estar en contacto con aquel que amas y saber que no te ama, que eres una simple compañera en el trabajo, una simple habitante más de aquel lugar, que sólo eres para él la hermana mayor de su amigo y jefe.
Eso te destroza cada vez más, sentir que sigues tan enamorada de él, que lo que tu no recordabas y ahora recuerdas que todo ese odio era un amor que ahora debe esforzarse por retener, que debe Sauri a su lado comportándose como si todo fuese rutina, como si fuese una compañera más y en tu interior te mueres por encontrarte entre sus brazos, por sentir sus labios sobre los tuyos y de que te mire con una mirada llena de amor.