Antes que nada quiero que sepan que ya comenzare con mis proyectos inconclusos, este es un pequeño one shot que se me ocurrió mientras trabajaba, espero sea de su agrado, esta vez me salí de lo habitual y me aventure en lo que resulto a continuación. Sin más que decir les dejo leer.
Si no te hubieras ido.Dentro del enorme castillo del Shichibukai Doflamingo Donquixote, el tétrico escenario presentado era digno de una espectacular película de terror.
En la sala principal donde se encontraban las sillas de sus subordinados mayores; el silencio y la tenue luz del sol del atardecer daban la mejor vista de la enorme y aterradora sonrisa del rubio shichibukai. De las cuatro sillas en la sala, había dos siendo ocupadas: la de corazón y la de diamante.
Los cuerpos ensangrentados y maltrechos de sus ocupantes empapaban las finas sillas con el fluido rojo, emanante de ellos. La luz del sol, daba el perfecto tono carmesí a los fluidos en toda la habitación, así como a la sangre que escurría de las manos del hombre de anteojos.
-Law, espero que ya estés satisfecho.- menciono el rubio, sin dejar su sonrisa de lado.
Comenzó a caminar por media sala, de un lado a otro, frente a las sillas de sus subordinados; el pelinegro no respondió.
-Si tan solo hubieras dejado de lado tus estúpidas ideas, estabas perfectamente bien a mi lado; tu lugar era aquí.- señalo la silla de corazón.- Pero tenías que seguirlo a él.- esta vez señalo la silla de diamante. De dos pasos llego al lado de la silla señalada; acaricio la roja cabellera de su ocupante.
-¿Tenias que alejarlo de mí?- cuestiono al pelirrojo.- Si no te hubieras enfocado en "mi" Law, ahora no estarías en esta situación.- levanto el rostro del joven sentado en la silla, sus ojos inexpresivos no reflejaban nada.
El silencio fue la única respuesta que obtuvo, y, era la única que esperaba obtener, dejo de lado al hombre de cabellera roja para centrarse de nuevo en el pelinegro.
-Law, yo te quería mucho, te di todo cuanto pediste, todo cuanto deseabas, pero no fue suficiente para ti.- se puso a la altura de los ojos grises del joven médico. Esos ojos grises que ahora no tenían brillo, inertes de emoción alguna.
-Si no te hubieras ido, todo esto se habría evitado.- levanto su cuerpo, y sus brazos al aire señalando el escenario; ese lugar, que ahora estaba repleto de manchas de sangre por doquier.
-Ambos son culpables de todo.- su sonrisa se ensancho aun mas si era posible, tomo con su mano derecha el cabello negro de Law, levantando la cabeza de este con fuerza, esa parte que había sido cercenada de su cuerpo horas antes; camino hacia Kid, haciendo el mismo procedimiento que con el moreno.
-¡ESTO!- acerco ambas cabezas, una frente a la otra.- ¡Es lo que merecen!- al terminar la oración estampo ambos rostros contra si e inmediatamente las dejo caer al piso.
-Si no te hubieras ido…- dio una última mirada al rostro de Law. –…aun estarían vivos.- El sol termino de ocultarse; un último rayo de luz ilumino la sangre en la sonrisa del shichibukai: Doflamingo.
Bueno, esto salió de mi retorcida mente, sé que no tiene nada que ver con la serie y no sé ni cómo llamarle, pero espero que les haya gustado, con este fic doy re-inicio a mis proyectos anteriores. Gracias por leer y por su paciencia.
