Los personajes no son míos, pertenecen a Masami Kurumada...
POR UN BESO
Poco a poco su cuerpo había recuperado el calor. Un cosmos cálido lo invadía, un cosmos cálido y hermoso. Su cuerpo iba recuperando la vida.
Había respirado hondamente y abierto lentamente los ojos y se encontró a sí mismo sentado en el suelo de la casa de Libra y a su lado, envolviéndolo con su cosmos y su cuerpo, yacía un muy debilitado Shun, que al verlo despertar le dio una dulce sonrisa para luego desmayarse en sus brazos.
Había mirado a aquel noble caballero que le había dado vida nuevamente, aquel hermoso muchacho que le había dado su calor, aquel divino ángel que había ofrecido su vida para salvarlo, había llevado calor a su corazón, derritiendo el hielo que lo oprimía.
Recordaba aquel momento mientras miraba el agua cristalina del lago en el bosque de la mansión. Desde aquel día (o tal vez antes, o ¿después? No podía precisarlo) sentía un profundo cariño por Shun, había un lazo muy especial entre ellos. Shun le era muy querido, pero últimamente, ese sentimiento había cambiado, era mas que amistad lo que sentía por él, ¿acaso lo amaba? No, no podía ser eso, se decía a sí mismo Hyoga y sacudió la cabeza, como si así pudiera alejar la idea.
Entonces, recortando el horizonte, lo vio, ese ángel de cabellos y ojos esmeralda. ¿Acaso estaba soñando? La divina figura avanzaba hacia él con una dulce sonrisa.
- Hyoga, al fin te encuentro.
- ¿Sucede algo, Shun?
- Te estamos esperando para cenar- Shun le tendió la mano para ayudarlo a levantarse, luego caminaron juntos a la mansión.
- ¡Aleluya!- exclamó Seiya al verlos entrar- ¿Ahora ya podemos comer?
Todos comieron ante la señal afirmativa de Saori, quien se encontraba sentada en la cabecera, a su derecha Seiya, Shiryu y June, frente a ellos Ikki, Shun y Hyoga y en la otra cabecera, Camus.
- ¿Y que te tenía tan ocupado que no te dejaba venir a cenar, Hyoga? –preguntó Camus
Pero el cisne, no se dio por aludido, absorto en sus pensamientos como estaba.
- Lo encontré mirando la laguna –dijo Shun ante el silencio del otro
Entonces todos miraron a Hyoga quien revolvía la comida con los palillos ajeno a todo.
- Hyoga- dijo Camus- ¿sucede algo?
No hubo respuesta.
- ¡Despiertaaaaaaaaaaaa!- el grito de Seiya dejo a todos los presentes aturdidos, pero Hyoga no reaccionó.
Shun sujetó el brazo del Cisne y lo sacudió mientras lo llamaba. Al escuchar la voz del caballero de Andrómeda y sentir sus suaves manes que lo sacudían, Hyoga salió de su ensimismamiento.- Perdona, ¿me decías?
Todos se miraron confundidos ¿Qué demonios sucedía con él?
- ¿Hay algún problema Hyoga?- intervino Saori
El negó con la cabeza y volvió a sus pensamientos.
La cena concluyó con elativa normalidad. Después Saori volvió a su oficina, Camus hablaba por teléfono, Ikki, Shiryu y Seiya miraban la TV, June y Shun paseaban por los jardines y Hyoga, sentado en el techo, los veía reír y charlar.
-Ven Shun, sentémonos aquí- dijo June.
Se sentaron uno junto al otro, mirando el firmamento.
- Me da mucho gusto que hallas venido June, hacía- pero Shun no pudo terminar su frase, pues June lo beso en los labios, él de tan sorprendido que estaba no respondió el beso. Entonces ella se alejó, lo miró y con lágrimas en los ojos, regreso a la mansión.
- June ¿qué sucede?- dijo Seiya al verla entrar llorando, pero ella subió corriendo a su alcoba.
Shiryu e Ikki cruzaron la mirada y como si lo hubieran acordado, Shiryu subió tras June, mientras que Ikki iba a buscar a Shun pero este último entro entonces, con la mirada confundida buscando a June. Ikki lo sujeto por los hombros.- ¿Qué ha sucedido?- le dijo.
Shun noto la presencia de Seiya y Camus en la sala por lo que tomando a su hermano de la mano lo condujo a su habitación.
Caminaba Hyoga a su habitación, quería estar solo para aclarar su mente. Al pasar junto a la puerta de Shun escuchó la voz de Ikki preguntando:- ¿Y por qué no le respondiste el beso?- El corazón de Hyoga latió fuertemente, June había besado a Shun y este ¡no le había correspondido! Se acerco más a la puerta.
-No se, no se- decía Shun- La quiero mucho, ya te lo dije, pero no se si solo como amiga o como algo mas, nii-san ¿Qué hago?
Hyoga escuchó que alguien subía las escaleras por lo que corrió a su alcoba, donde no dejó de pensar, que talvez si tendría alguna oportunidad con Shun.
Shiryu salía de la habitación de June y se topó con Shun que se dirigía ahí.
-Está dolida- dijo el dragón- pero creo que podrán superarlo.
Shun llamó a la puerta cuando se hubo retirado Shiryu– June ¿puedo pasar?
-No, vete- respondió entre sollozos.
-OK, solo escucha, ¿si?- se acercó lo más posible a la puerta y prosiguió- lo que sucedió hace un momento me tomó por sorpresa y... yo... yo- la puerta se abrió. Shun miró a June, ya no lloraba pero en sus mejillas quedaba el rastro de su llanto.
- June- dijo acariciando su mejilla- eres mi mejor amiga y nunca había pensado en ti de otra forma- Ella agachó su rostro- Hasta ahora- concluyó él, tomando su rostro para que lo viera a los ojos.
-Entonces...- dijo ella con un nuevo brillo en la mirada.
- No lo sé, no estoy seguro de lo que siento, no quisiera herirte o darte falsas esperanzas.
-Está bien- le dio un beso en la frente- sabré esperar.
-Buenas noches June.
-Buenas noches niño lindo.
------------------------------------------------------------------------ Es mi primer fic, ojalá les guste. Dejen reviewers x fa
POR UN BESO
Poco a poco su cuerpo había recuperado el calor. Un cosmos cálido lo invadía, un cosmos cálido y hermoso. Su cuerpo iba recuperando la vida.
Había respirado hondamente y abierto lentamente los ojos y se encontró a sí mismo sentado en el suelo de la casa de Libra y a su lado, envolviéndolo con su cosmos y su cuerpo, yacía un muy debilitado Shun, que al verlo despertar le dio una dulce sonrisa para luego desmayarse en sus brazos.
Había mirado a aquel noble caballero que le había dado vida nuevamente, aquel hermoso muchacho que le había dado su calor, aquel divino ángel que había ofrecido su vida para salvarlo, había llevado calor a su corazón, derritiendo el hielo que lo oprimía.
Recordaba aquel momento mientras miraba el agua cristalina del lago en el bosque de la mansión. Desde aquel día (o tal vez antes, o ¿después? No podía precisarlo) sentía un profundo cariño por Shun, había un lazo muy especial entre ellos. Shun le era muy querido, pero últimamente, ese sentimiento había cambiado, era mas que amistad lo que sentía por él, ¿acaso lo amaba? No, no podía ser eso, se decía a sí mismo Hyoga y sacudió la cabeza, como si así pudiera alejar la idea.
Entonces, recortando el horizonte, lo vio, ese ángel de cabellos y ojos esmeralda. ¿Acaso estaba soñando? La divina figura avanzaba hacia él con una dulce sonrisa.
- Hyoga, al fin te encuentro.
- ¿Sucede algo, Shun?
- Te estamos esperando para cenar- Shun le tendió la mano para ayudarlo a levantarse, luego caminaron juntos a la mansión.
- ¡Aleluya!- exclamó Seiya al verlos entrar- ¿Ahora ya podemos comer?
Todos comieron ante la señal afirmativa de Saori, quien se encontraba sentada en la cabecera, a su derecha Seiya, Shiryu y June, frente a ellos Ikki, Shun y Hyoga y en la otra cabecera, Camus.
- ¿Y que te tenía tan ocupado que no te dejaba venir a cenar, Hyoga? –preguntó Camus
Pero el cisne, no se dio por aludido, absorto en sus pensamientos como estaba.
- Lo encontré mirando la laguna –dijo Shun ante el silencio del otro
Entonces todos miraron a Hyoga quien revolvía la comida con los palillos ajeno a todo.
- Hyoga- dijo Camus- ¿sucede algo?
No hubo respuesta.
- ¡Despiertaaaaaaaaaaaa!- el grito de Seiya dejo a todos los presentes aturdidos, pero Hyoga no reaccionó.
Shun sujetó el brazo del Cisne y lo sacudió mientras lo llamaba. Al escuchar la voz del caballero de Andrómeda y sentir sus suaves manes que lo sacudían, Hyoga salió de su ensimismamiento.- Perdona, ¿me decías?
Todos se miraron confundidos ¿Qué demonios sucedía con él?
- ¿Hay algún problema Hyoga?- intervino Saori
El negó con la cabeza y volvió a sus pensamientos.
La cena concluyó con elativa normalidad. Después Saori volvió a su oficina, Camus hablaba por teléfono, Ikki, Shiryu y Seiya miraban la TV, June y Shun paseaban por los jardines y Hyoga, sentado en el techo, los veía reír y charlar.
-Ven Shun, sentémonos aquí- dijo June.
Se sentaron uno junto al otro, mirando el firmamento.
- Me da mucho gusto que hallas venido June, hacía- pero Shun no pudo terminar su frase, pues June lo beso en los labios, él de tan sorprendido que estaba no respondió el beso. Entonces ella se alejó, lo miró y con lágrimas en los ojos, regreso a la mansión.
- June ¿qué sucede?- dijo Seiya al verla entrar llorando, pero ella subió corriendo a su alcoba.
Shiryu e Ikki cruzaron la mirada y como si lo hubieran acordado, Shiryu subió tras June, mientras que Ikki iba a buscar a Shun pero este último entro entonces, con la mirada confundida buscando a June. Ikki lo sujeto por los hombros.- ¿Qué ha sucedido?- le dijo.
Shun noto la presencia de Seiya y Camus en la sala por lo que tomando a su hermano de la mano lo condujo a su habitación.
Caminaba Hyoga a su habitación, quería estar solo para aclarar su mente. Al pasar junto a la puerta de Shun escuchó la voz de Ikki preguntando:- ¿Y por qué no le respondiste el beso?- El corazón de Hyoga latió fuertemente, June había besado a Shun y este ¡no le había correspondido! Se acerco más a la puerta.
-No se, no se- decía Shun- La quiero mucho, ya te lo dije, pero no se si solo como amiga o como algo mas, nii-san ¿Qué hago?
Hyoga escuchó que alguien subía las escaleras por lo que corrió a su alcoba, donde no dejó de pensar, que talvez si tendría alguna oportunidad con Shun.
Shiryu salía de la habitación de June y se topó con Shun que se dirigía ahí.
-Está dolida- dijo el dragón- pero creo que podrán superarlo.
Shun llamó a la puerta cuando se hubo retirado Shiryu– June ¿puedo pasar?
-No, vete- respondió entre sollozos.
-OK, solo escucha, ¿si?- se acercó lo más posible a la puerta y prosiguió- lo que sucedió hace un momento me tomó por sorpresa y... yo... yo- la puerta se abrió. Shun miró a June, ya no lloraba pero en sus mejillas quedaba el rastro de su llanto.
- June- dijo acariciando su mejilla- eres mi mejor amiga y nunca había pensado en ti de otra forma- Ella agachó su rostro- Hasta ahora- concluyó él, tomando su rostro para que lo viera a los ojos.
-Entonces...- dijo ella con un nuevo brillo en la mirada.
- No lo sé, no estoy seguro de lo que siento, no quisiera herirte o darte falsas esperanzas.
-Está bien- le dio un beso en la frente- sabré esperar.
-Buenas noches June.
-Buenas noches niño lindo.
------------------------------------------------------------------------ Es mi primer fic, ojalá les guste. Dejen reviewers x fa
