Disclaimer: D. Gray-man pertenece a Katsura Hoshino, si fuera mió pues… sería horrible xDD
Cofre de situaciones.
OoOoOoO
Virginidad.
Definitivamente, Allen podía decir que ya lo había visto todo. Podía ver las almas de los Akuma, presuntamente era un Noah, había descubierto que Lavi podía ser algo… gay a veces, pero eso, eso se ganaba el premio.
Todos se quedaron paralizados mientras el unicornio rozaba con su hocico la mejilla de Kanda Yuu, el cual estaba dividido entre la incredulidad y la vergüenza. Lavi se llevó una mano a la boca, mordiéndose el labio mientras su piel se tornaba de un leve morado.
Estaba aguantando la risa, al igual que Allen y Lenalee, los cuales estaban en el mismo equipo que el japonés en ese momento, el cual solo atinó a lanzarles una mirada matadora mientras se daba vuelta para que no observaran su cara, ligeramente coloreada en rosa.
Los unicornios solo se acercaban a personas puras, a personas vírgenes.
Eso, y que Kanda no podía simplemente hacerle daño a una de las criaturas mas puras del universo.
Aunque esta parecía amarlo.
OoOoOoOoO
Notas de la autora: ¡Esto fue culpa de un fanart! Me lo paso mi querida Yin-Riench y termino convirtiéndose en este fic xD ¡Espero que les haya gustado!