No me pude resistir :D , otra historia Byakuya x Hisana (ya que estamos escasas de fics sobre ellos) Conste, esta trama no es igual que la de Bleach, varía un poco...hay van a ver xD. Espero que les guste ;)
Disclaimer: Bleach no me pertenece.
Que tengan buena lectura :)
Cambio Radical
Prólogo
El viento frío era increíblemente desastroso que hostigara todo a quién estuviera en su camino, no importando que daño le pudiera causar. Era tan cruel que quemaba sin piedad con los copos de nieves que desprendía al azar. No había vegetación alrededor; tan sólo nieve que cubría todo el lugar que alguna vez fue belleza. Hisana no sabría cuánto tiempo más aguantaría ese invierno infernal. Sus ropas ostentaron ser de colores pero por el desgaste y por lo añejo se fue convirtiendo en un inservible harapo que no le hacía entrar en calor. Ella jadeaba fuertemente y con dificultad respiraba, su quijada temblaba al igual que todo su cuerpo. Hisana no le importaba que le pudiera pasar, lo único que le importaba era esa bebé que llevaba atrás amarrada con un manto igual de inservible.
—"Sólo un poco más…y saldré del Rukongai"—pensó con la esperanza que su pensamiento se volviera realidad; entrecerrando los ojos evitando que la nieve nublara su vista.
Quería una mejor vida para ella y principalmente para su hermanita bebé y el Seireitei les ofrecía muchas alternativas para un nuevo y beneficioso estilo de vida que el Inuzuri. Por eso no debía parar de caminar aún si estaba en contra de la ventisca desoladora que trataba de corromper su camino. Podía oír a Rukia llorar a todo pulmón por la nieve que cubría su cuerpecito entero, no le gustaba. Hisana apresuró el paso, no hay ningún refugio que pudiera ocupar ni materiales para que ella pudiese elaborar uno. No debía parar, no había opción, debía seguir por el bien de las dos. Caminando por mucho tiempo descalza sobre el suelo helado Hisana sintió un tremendo dolor. No los sentía, de seguro ya estaban azules al estar desnudos ante el frío. La pelinegra dio un gran gemido. Sus piernas se tensaron inmediatamente. ¿Qué había ocurrido? ¿Por qué se detuvo repentinamente? Al estar parada, la ventisca la golpeaba con su viento desgarrador que era incapaz de hacer algo para controlarlo. De repente, sin percatarse cómo pasó, cayó de boca al suelo helado; la voz chillante de Rukia se escuchaba de fondo causando que el corazón de Hisana se partiera en dos. No podía hacer nada para cesar esos llantos tan sensibles para su alma. Su hermanita tenía frío, se congelaba, si seguía a este ritmo ella podía…morir.
¡No! ¡Todo menos eso! Hisana empezó arrastrarse con sus brazos contra las grandes capas de nieve con toda la fuerza existente que poseía. Varios copos de nieve cubría a Rukia totalmente, y el manto que la sostenía no era lo suficiente esponjado como para calentarla. La pelinegra cada vez se sentía muy débil, ¿qué demonios pasaba ahora? Poco a poco, Hisana con lentitud giró su cabeza hacia atrás con sus ojos entrecerrados. A consecuencia de todo lo que estaba pasando ella no se percató que llegó a su límite. Los ojos violeta se dilataban cada segundo que pasaba con cierto miedo hasta a llegar su punto máximo. ¿Cómo no notó que sus pies también estaban heridos? Con cortadas profundas a causa del frío, por su sobreesfuerzo, sus pies empezaron a sangrar tiñendo la nieve blanca a color carmesí. Tras ver esto, toda la esperanza que tenía se esfumó. No podía caminar, y fuerzas ya no habían. Esto era el fin de su existencia…y lamentablemente el de Rukia también. Hisana somató su rostro contra la nieve con un fuerte sollozo. Sentía que se ahogaba entre la nieve pero no le importó. Sus esfuerzos a una mejor vida fueron en vano. No había nadie quien la socorra, o quien la mire. Estaba sola con su hermana bebé, ambas indefensas, con un destino trágico.
Hisana sentía como su ser perdía el conocimiento y como los gritos de Rukia disminuían poco a poco. Sólo era cuestión de tiempo para morir. Tenía miedo, pero lo aceptaba, por ser inútil. De repente, la pelinegra se percató que Rukia ya no estaba sobre su espalda. Eso la atormentó por unos segundos. ¿Se habrá caído? ¡Cayó sobre la espantosa nieve! A Hisana, de una manera espontanea, recobró pocas fuerzas para levantar su mirada. Pudo ver pisadas enfrente de ella. No cabía duda…había alguien ahí. ¡Quién era! No podía apreciarlo bien, su vista estaba nublosa, pero si podía identificar que él tenía a Rukia entre sus brazos. La estaba cubriendo con algo, parecía suave y larga. No era una manta… ¿una bufanda? No sabría que decir, pero sea lo que sea, Rukia empezó a gorjear. Hisana notó que esa persona la tomó hacia sus brazos. Se sentía tan cálido y cómodo en su cuerpo frío. El calor que necesitaba. Sin pensar más, Hisana perdió el conocimiento al momento de recibir esa tibieza.
No sabía quién era ese tipo que cuidaba de ella y de su hermana bebé en ese momento. No obstante sí sabía qué era: un salvador.
Creo que ya saben de quién se trata xD. No sé que tan larga será la historia. Todo depende de cómo me abunde mi inspiración para este fic.
Cualquier duda, comentario, o críticas de cualquier tipo xD diganlas por medio de un lindo review :D
Nos vemos hasta la próxima :)
PD: Si leen mi otra historia "You are important" no os preocupeís...! ya pronto vendrá el otro capítulo xD.
