Disclaimer: Todo, absolutamente todo, pertenece a Rowling.
Este fic participa en el reto especial "Homenaje a los caídos" del foro Amor de Tercera Generación.
"And the cry goes out; they lose their minds for us. And how it plays out, now we're in the ring, and we're coming for blood." Glory and Gore, Lorde.
La noche es oscura, sin luna. Las nubes parecen haberla engullido sin piedad. Una noche perfecta.
El taconeo de sus zapatos produce eco sobre el piso de mármol de la mansión. La Marca le produce el clásico escozor que significa que el Señor Tenebroso los necesita, y más les vale no hacerle esperar.
Lord Voldemort no está dotado de mucha paciencia, por lo que ella decide partir en ese mismo momento. Rodolphus puede alcanzarla después.
Quiere ser una de las primeras personas en llegar, para demostrarle a su Señor lo comprometida que está con su deber para con él. Bellatrix se ha esforzado constantemente para que con el tiempo sea señalada como uno de los más fieles seguidores de él. Porque lo es, sin importar que otros intenten arrebatarle su lugar.
Es completamente suyo.
Porque ella es más habilidades que suerte. Es la sangre pura que corre por sus venas la que le brinda tal poder.
Es un treinta por ciento de habilidades. Un cinco por ciento de suerte. Diez por ciento de concentración. Un quince por ciento de placer. Y un veinte por ciento de dolor. Del dolor que sufren sus víctimas es el que le produce tal regocijo y mucha más determinación para con la intención que traen consigo los mortífagos.
Porque la recompensa es enorme, y trae con ellos la gloria de poder haber recuperado el legado que se había ido perdiendo con el tiempo.
Y ningún ejército puede detenerla. Los hará caer a todos.
Porque nunca se sintió más joven y llena de vida. De algo que consigue llenar su motivación para vivir y continuar. De permanecer luchando por una causa que le devolverá el orden al mundo mágico.
Un lugar sin sangre sucias o traidores a la sangre, los cuales manchan el legado mágico y limpio que los sangre pura han construido durante muchos siglos. Y le parece injusto que tanto esfuerzo se vea corrompido por sus sucias manos y sus repugnantes intenciones.
Nunca estuvo tan emocionada. Su Señor les promete recuperar el orden perdido y la tranquilidad de que aquellas pequeñas manchas desaparecerán por siempre del mundo mágico.
Además de que ninguno de aquellos impuros o traidores a la sangre pueden contra ella. Ellos no pueden matarle. No son rival digno para ella.
Los gritos ahora son música para sus oídos. Una melodía aguda y elegante. Un presagio de muerte. Los individuos pierden la cabeza cuando los ven acercarse, y es una sensación increíble ver como su sola presencia produce tanto… respeto.
Es el final para ellos, y casi el comienzo para ella.
Y en lo más oscuro de la noche… allí la encontrarán.
NOTA.
Esto está ambientado más o menos durante la juventud de Bellatrix, antes de ir a Azkaban. Y espero haber logrado captar como esa especie de grandeza y magnificencia que estoy segura de que ella poseía antes de que la cárcel le quitara algo más que sólo la cordura.
Espero les guste.
