BELLA

Prefacio

Cada hora, cada minuto, cada segundo apartada de él era como estar de vacaciones en mi infierno personal, como el peor de los castigos y yo jamás lograré ser lo suficientemente fuerte como para tolerarlo… Aunque estar a su lado signifique la destrucción de quienes han dado todo por mí.

Es egoísta, claro. No podría sentirme peor por lo que he hecho y por lo que haré pero, ¿no es mejor decir la verdad de una vez por todas? ¿Evitar prolongar la ilusión? A mí me parecía que sí.

Y es que comenzaba a sentirme irritada: ¿acaso jamás podría ser feliz? Había hecho de todo y todos mis recursos se habían agotado en mis intentos… y ahora no podía permitir que la felicidad se me escapara de las manos de nuevo, no era justo para nadie y esta vez yo no le daría la bienvenida a las injusticias.

Era momento de que todos fuésemos felices al fin, y para lograrlo las cosas tenían que regresar a su estado inicial: sólo siete Cullen.