Two Perspectives as one:
Capítulo 1: Las Mijas.
Esta recién amaneciendo y me duelen los ojos, y no se porque, no hay ruido en la casa, imagino que la Mija esta durmiendo…
Bajando las escaleras llego al comedor central, puedo darme cuenta que la casa esta echa un asco, un desastre, un completo desastre, después de lo de anoche… que desgracia, tendré que limpiar todo esto, no quiero despertar a la Mija, prefiero que duerma bien, así después no anda enojada todo el santo día.
Mientras barría la casa, escuche unos camiones pasando fuera del vecindario, así que me asomé, pude distinguir que tendríamos vecinos nuevos, pero no pude identificarlos, solo podía ver a los hombres de la mudanza, en eso llega la Mija bajando las escaleras:
Mija? – me dice ella.
Que pasa Mija?, buenos días, menos mal que amaneciste.
Si, es que hay mucho ruido, ¿Qué pasa? – me pregunta.
Al parecer tenemos vecinos nuevos.
Ah, mas vale que no sean viejos aburridos como los de al lado.
No creo, no tenemos tanta mala suerte, jaja.
Tú menos que nadie deberías decir eso – me dice.
Ya déjalo, supongo que me vas a limpiar la casa…
No, la verdad es que venia a ver que pasa, ahora me voy a dormir, aun tengo sueño.
Ah, que eres floja, la casa es de las dos, deberías ayudar.
Bueno, te voy a ayudar, pero en dos horas más, ¿dale?
Pff, para eso lo hago yo sola, no te preocupes.
Como quieras – se da media vuelta y se va.
Supongo que esta clase de conversaciones se tienen las primeras semanas cuando recién vives con alguien, con la Mija llevamos una semana acá, y todo ha salido bien por ahora, la verdad es que ella se llama Camila, y yo también, lo cual resulta ser hasta estupido, y un día comenzamos a llamarnos mutuamente "Las Mijas", no se, pero es algo que mola. Yo vengo saliendo de una relación que me dejo mal, y ella me ha ayudado a superarlo, de lo cual estoy totalmente agradecida, pero por ahora busco nuevos horizontes e intento olvidarlo para dejarlo atrás y de esta manera poder seguir con mi vida. En cuanto a la Mija, ella es de relaciones cortas, cosas de una noche, y nada mas, rara vez le veo con alguien por mucho tiempo, pero es algo a lo que ya estamos acostumbradas.
Decidimos vivir juntas porque siempre nos hemos llevado bien, desde el colegio, es más, desde el colegio que queríamos vivir juntas, y ahora lo logramos, ella estudia, la Mija está muy enfocada en los estudios eso si, le queda un año para terminar, yo ya termine porque mi carrera era mas corta, por eso entiendo que a veces ella necesite descansar.
Cuando terminé de barrer toda la casa me tire en el sofá, estaba cansada, además no estoy acostumbrada a barrer tanto, mi departamento de antes era mas chico. En eso… tocan la puerta.
Hola – me dice el tipo que estaba al otro lado de la puerta. Le quedo mirando, estaba un poco asombrada con lo lindo que era el tipo.
Em, ¿Hola? – le digo.
Uhm, bueno, soy tu nuevo vecino.
Ah, tu eres el de la mudanza y el ruido.
Uhm, si, perdón por eso – me dice.
No te preocupes…
Soy Shawn, y viviré aquí al lado, solo quería venir a presentarme es algo que siempre hago, perdón si molesto, te veo ocupada.
No, no te preocupes, limpiaba la casa pero ya termine.
Ah… - me dice. Lo note un poco incomodo.
Y… vivirás en esa casota tan grande tu solo, ¿o no?
Uhm, si, la verdad si, me hará bien vivir solo después de todas las malas experiencias que he vivido últimamente.
Le suena el celular a Shawn. En la cual tiene una conversación que lo deja más o menos preocupado.
Disculpa tengo que irme – me dice, se da la vuelta y se va.
