Se lo dedico a Aída, porque fue ella quien me propuso el reto, espero que te guste.
A MiiR que me ayudó en la separación de capítulos y sus cosas. Además me ayudó con el título.
A Patry, que me recomendó que siguiera y por sus esperas ante todo Además me ayudó con el título.
A Aly, por lo mismo, que espera cual pasajero de autobús. Además me ayudó con el título.
A Eli, porque aunque no haya seguido al de los vitamínicos espero que les guste
A Mark Calaway, porque dudo que lea esto y que si lo lee, lo entienda
A Paul Levesque, porque no sé, pero me da la impresión de que si lee esto, se va ha partir el pecho…Otra cosa es que la entienda
Bueno, solo explicar el título: Playing with Hades
Hades es el dios de los infiernos griegos, y ya que Undertaker es "The Deadman"… ¿Lógico? Bueno, por fin, os dejo leer.
Shipper: Undertaker/Triple H
Mark estaba deprimido, salió de su casa y montó en el Tahoe para dirigirse al aeropuerto. No había podido tener una conversación normal con su ex mujer por teléfono, y al no tener la custodia de sus hijas, le fastidiaba demasiado.
Cogió el vuelo para dirigirse a San Francisco, donde allí sería el próximo show de SmackDown! Aparcó el coche en el gran aparcamiento del aeropuerto, cogió su maleta, la facturó y esperó a embarcarse.
Subió al avión, se quedó mirando al vacío, últimamente su vida amorosa, no es que hubiera sido la mejor de todas, hacía un año que se había divorciado, y, aunque le costaba admitirlo, había sido, porque había empezado a sentir algo por otra persona.
Otro luchador, y eso era lo que le costaba admitir, el nunca se había considerado homosexual, pero al ver a Paul Levesque, sentía lo mismo que sintió por su mujer la primera vez que se vieron. Solía soñar con él, y se sonrojaba un poco cuando estaba a su lado, cuando tan solo le tocaba el hombro para apoyarle o llamarle la atención. Le gustaba esa sensación.
Mark, estaba enamorado, vale, eso no lo iba a negar, pero dudaba de que Paul sintiera algo, por mínimo que fuera, y, aunque se fuera divorciado de Stephanie, seguía siendo demasiado heterosexual, para que Mark se arriesgara a dar el paso.
Subió al avión y siguió embarcado en sus pensamientos, de ellos, lo sacó aquella persona que los ocupaba.
-Hola Mark.-dijo Paul sentándose a su lado
-Hola.-dijo firmemente Mark, desechando sus pensamientos
-¿Cómo estás? Te noto bajo…-preguntó Paul atusándose el bigote
-Bien…Supongo…Sigo teniendo problemas con mi ex mujer.-respondió Mark, solo con él hablaba de eso.
-Vaya… ¿Y eso?-preguntó Paul.- ¿No había sido una separación "acordada"?-preguntó
-Sí, pero es sobre la custodia de mis hijas. Cuando puedo ir a verlas, ella no puede y viceversa, así que… Es como si no tuviera hijas…-comentó Mark y bajó la vista
Paul posó una mano en el hombro y le apretó suavemente.
-Tranquilo, todo se solucionará, a mi me pasaba lo mismo y tras conseguir un buen abogado, mi ex mujer está forzada a darme a Rose, cuando yo pueda verla.-explicó Paul.-Si quieres te lo busco, es buenísimo.
-Gracias.-dijo Mark y sonrió algo más animado
El resto del viaje, lo continuaron charlando sobre cosas varias.
Paul, con su ex mujer, vivía en Connecticut, pero al separarse, no quería vivir en el mismo sitio donde se pudiera encontrar frecuentemente a su suegro, así que se mudó a San Antonio, Texas. Allí, vivía Shawn con su mujer e hijos, y él había sido un gran apoyo. El aeropuerto se encontraba en Houston por eso se encontró a Mark allí, ya que vivía en aquella ciudad, Shawn no iba ya que el no participaba en ese PPV, y decidió quedarse con la familia.
Bajaron del avión y se dirigieron al hotel, donde tuvieron coger una habitación con una sola cama de matrimonio, ya que la selección inglesa y la francesa iban ha jugar un partido allí y estaban ocupadas todas las habitaciones con tan solo una cama.
"¡Oh! Perfecto. Voy ha dormir, pegado al hombre al que amo." Pensó Mark
Paul rió y le dio un golpe en la espalda a Mark, este lo miró y lo vio sonriendo.
-¡Oh venga! ¡Somos amigos! ¡No te voy ha violar!-le dijo Paul riendo
"Ya me gustaría a mí…" pensó Mark, y sacudió la cabeza para olvidarse de ese pensamiento, y siguió la risa contagiosa de Paul
-Pues venga, vamos suelta la maleta, que nos tenemos que presentar en el pabellón, para ensayar un poco el show, que la hostia que me voy a tener que dar por alcanzar a Chris va ha ser chica…-dijo Paul riendo
Mark asintió y dejando las maletas se presentaron en el pabellón. Marcharon allí y se separaron, Paul habló y ensayó los movimientos con Chris y Mark hizo lo mismo pero con Dalip, era un hombre bastante agradable y muy buena gente, pero al no hablar el mismo idioma, la gente apenas le conocía.
A las ocho, comenzó el show, todo iba como se ensayó, y en cuanto Mark terminó su combate, que era el evento principal, y se marchó al no ver a Paul, supuso que el ya lo había hecho. Entró en la habitación del hotel, y encontró a Paul en la cama, encogido y se le escuchaba llorar.
-Paul… ¿Estás bien?-preguntó Mark preocupado
Se oyó una aspiración fuerte, Paul se secó las lágrimas he intentó contestar con una voz clara.
-Sí…-dijo, sacó la cabeza de debajo del edredón y se sentó al borde del colchón
-Paul, cuéntame que te pasa.-pidió Mark.-Somos amigos, los amigos de cuentan sus problemas e intentan ayudar.
-Es por mi hija….-respondió Paul, y apretó los labios mientras las lágrimas caían.
-¿Por tu hija? ¿Está bien? ¿Rose está bien?-preguntó Mark colocándose frente a Paul
-Sí…Solo es que…Mcmahon quiere hacer una empresa de Wrestling en Australia, para capturar más fans y con ello, más luchadores. Y la directora de la empresa allí, será Stephanie, y se irá a vivir allí. El juez le ha dado permiso y no veré a mi hija.-contó Paul sin levantar la vista
-Pero… ¿Y lo que te dijo el abogado? Eso de que no podía prohibirte el no verla…-contó Mark
Paul rió de una forma amarga.
-Conociendo a Mcmahon, ha comprado al juez y a mi abogado, para conseguir esa custodia.-respondió Paul
Mark no comentó, abrazó a Paul y este respondió al abrazo, necesitaba apoyo de alguien.
-Venga, tranquilo, todo se arreglará-dijo Mark
Paul se apretó al abrazo y cogió aire. Se separó y agachó la cabeza, Mark le cogió de la barbilla y se la levantó, Paul se encontró con aquellos ojos verdes, y sintió un cosquilleo agradable, pero prefirió no darle importancia.
-Venga, dilo "Todo va ha salir bien"-pidió Mark sonriéndole a aquellos ojos miel
Paul no quería decir eso, no estaba seguro de que aquello se solucionara, pero la mirada intensa de Mark y su media sonrisa, consiguió que lo dijera. Mark, intentó convencer a Paul de que salieran a tomar una copa por ahí, pero este no quería, no tenía ánimos para ello, así que ambos se quedaron en la habitación. Mark intentó llamar a su ex mujer, pero no le cogía el teléfono y desistió.
-Ahora tendrías que decirlo tú.-dijo Paul con una sonrisa
-¿Eh?-dijo Mark volviendo a la realidad
-"Todo va ha salir bien"-dijo Paul
Mark rió y Paul sonrió. Tras bajar para comer algo, subieron y se fueron a la cama a dormir, estaban agotados. Mark se puso casi en el borde del colchón, no quería ponerse muy cerca de Paul, porque tenía la sensación de que su cuerpo, podría jugarle una mala pasada.
-Oh vamos, que no te voy a comer.-dijo Paul riendo-Ven más hacia aquí que si no te vas a caer
Mark le hizo caso, pero solo para que no sospechara.
-Bien. Buenas noches.-dijo Paul
-Buenas noches.
Apagaron las luces, y cada uno se centró en sus propios pensamientos para quedarse dormido.
Mark, no podía hacerlo, no podía dejar de pensar en que era Paul quien estaba allí con el. El hombre que deseaba, dormía plácidamente bajo las sábanas y sabía que si se volvía hacía él, podría sentir su respiración en la nuca.
Lo pensó y enseguida ocurrió. Paul se dio la vuelta en sueños, y Mark pudo sentir su respiración en el cuello, un aire caliente que le hacía cosquillas. "The Game" se pegó más a el, Mark estaba nervioso, podía sentir el calor de ese cuerpo a su lado, y le causaba un placer que intentaba rechazar. Mark, mandó a Paul una señal telepática inservible que quería que se alejara de él, como consecuencia, Paul le abrazó.
Mark se quedó inmóvil, bajó una mano e intentó deshacer el abrazo, pero Paul le apretaba fuerte, y le fue imposible hacerlo sin intentar levantarle. Paul inconscientemente le besó el cuello.
Los pelos de la nuca de Mark se erizaron, y un placer recorrió su cuerpo hasta los dedos de los pies.
-Steph…-dijo Paul en sueños
En parte, Mark se desilusionó un poco al oír eso, pues, en el fondo, esperaba oír su nombre.
"Por dios Mark, eso no va ha ocurrir, así que hazte a la idea" pensó Mark
Paul, volvió a besar su cuello, y bajó una mano, acariciando la pierna de Mark, soñando que lo hacía con su ex mujer. Mark suspiró de placer, Paul siguió con las caricias, sin oír aquellos suspiros que daba Mark.
Mark intentaba pensar en todas las cosas del mundo, desde la pobreza hasta en plantar lechugas, pero nada sirvió para que aquellas caricias, le provocaran una erección. Mark al aquél bulto, intentar levantarse inútilmente a través de sus calzoncillos.
Suspiró, pero esta vez un poco avergonzado, aquello ya le había pasado, pero siempre estaba solo cuando le ocurría. Con algo de delicadeza, se deshizo del abrazo de Paul y fue al baño.
Se masturbó para bajar la erección, sin poder evitarlo, se le escapó un gemido de satisfacción. Paul lo escuchó y se levantó, la puerta del baño estaba entornada, y la luz encendida.
-¿Mark?-preguntó Paul, sobresaltando al dueño del nombre.-¿Estás bien?
Mark tosió para hablar con más claridad.
-Eh… Sí estoy bien.-dijo
-Te he oído gemir.-afirmó Paul
-Estoy estreñido.-dijo Mark sin pensar.
Paul rió a carcajadas, y Mark se sonrojó levemente pero prefería que creyera eso a que contarle la verdad de por que estaba allí. Se oyó la cadena y Mark se lavó las manos. Salió del baño mirando el suelo. Se metió en la cama alejándose de un dormido Paul, se logró quedar dormido sin soñar nada raro.
