Todo el mundo actúa como si se me fuera a pasar en un tiempo. Castiel dice que todavía siente que no encaja aquí, pero que yo encajo perfectamente. Dean dice que sólo necesito tiempo. Sam quiere hablar conmigo.

Yo intento seguir sus consejos, aferrarme a ellos pero por más que lo intento, sólo es algo temporal. Es como si nos separaran kilómetros, como si nunca pudiera llegar a mi destino. Desde que volví de la muerte sentí si hubiera algo mal en mi. Se supone que una madre lo daría todo por sus hijos, todo, pero yo no puedo. Tan sólo imagino un día y otro mil maneras de morir, sólo no soy capaz de hacerlo yo misma y recurro a la caza esperando desesperadamente que algún monstruo me mate.

No puedo decírselo. Se preocuparían más e intentarían que me aferrara más a la vida. Por más que trato de hacerlo por mi cuenta, ese deseo no tarda en volver. Mi récord fue seis días sintiéndome bien, disfrutando de la vida simplemente pero simplemente ese sentimiento volvió.

No pasó nada que me hiciera sentir preocupada o triste, no más de lo normal en nuestra vida, tan sólo... ya lo considero parte de mi. Mi mente es una propia trampa para mi pensando nuevas mejoras en planes para matarme, incluso algunos pareciendo accidentes sin que puedan culparme.

No estoy preparada para que me recriminen nada. Tan sólo quiero... paz. Quiero poder contarle esto a alguien y no tener consecuencias. Quiero tan sólo ser comprendida, comprendida de verdad, que esa persona que ha pasado por lo mismo no intente de cualquier medio que siga viviendo, sino que tan sólo me entienda, con eso podré seguir viviendo más. Quiero poder gritar "¡quiero morir!" y la otra persona incluso se ría, no de manera cruel ni burlándose, tan sólo se ría porque gritaría "¡yo también!" y haría alguna broma como que nadie nos cazaría de esa manera o que toda la vida cazando demonios sin alma y ahora seríamos nosotros los que parece que no la tendríamos. Cualquier cosa así.

En cierto modo, encontré algo así en el otro universo. Estaban en guerra y no había tiempo para sentimentalismos estúpidos, sólo mera supervivencia. Me vino muy bien y tomé más cariño a esa gente que a mis propios hijos.

Nunca quise darle la razón a Ketch pero realmente la tenía. Siempre digo que la familia es lo primero, pero no lo siento de verdad, sólo me obligo a sentirlo porque no quiero hacerles sufrir, porque quiero protegerlos pero... mi verdadero deseo sigue siendo la muerte. Siempre.

Quizás es porque ya no debería estar aquí y de esa forma lo noto, aunque Castiel, Sam y Dean también han muerto pero yo fui la que más duró tiempo muerta. No es que haya mucha información de personas resucitadas, nadie ha publicado una especie de diario de cómo lidiar con ello. ¿Quién haría una cosa así?

A veces pienso que no estoy sola en ese sentido y eso me consuela.