TRINIDAD
CAPITULO I: A UN PASO DEL PODER ABSOLUTO.
La semana pasada, había resultado ser la mejor que tuviera la escuadra del Coronel Mustang incluido él, en mucho tiempo. Y mas que para Havoc, Falman y demás militares, había resultado ser la mejor semana en la vida del Coronel Mustang; y como no serlo si esos cinco días habían sido el resultado de años de esfuerzo, dedicación, planeación meticulosa; por nombrar lo menos; con el único y exclusivo ideal de alcanzar un solo propósito, y que ahora finalmente después de varios años su sueño inalcanzable se había hecho realidad.
Cuando recibió la noticia, apenas iniciando la semana, no pudo esconder una sonrisa de satisfacción, por mas que trato de contenerla, sus labios maliciosamente mezclados con la emoción, se curvaron sin importarle la presencia de un oficial de mayor rango. Mientras que sus fieles compañeros Havoc a la izquierda y Hawkeye a la derecha, ambos detrás de él siempre, intercambiaron mirados de regocijo y que a diferencia de Roy supieron mantener sus rostros seremos.
Esa mañana, no hacia mucho que había llegado cuando ya todos sus compañeros estaban ocupándose de sus labores. Solo 15 minutos después de saludarlos y comenzar a hojear los primeros papeles, se escucho por detrás de la puerta unos golpes secos, cuando se le autorizo el paso; una de las secretarias que laboraban en los pisos superiores se acerco a Roy y después de hablar ambos en voz baja. Al principio los cinco militares creyeron que eran malas noticias, pues ver como susurraban tanto hombre como mujer los inquieto, pero en el instante en que el rostro de Roy se relajaba, supieron que eran nuevas buenas. Cuando la mujer salió nadie hizo ningún comentario por mas ansiosos que estuvieran, y Roy continuo trabajando como si nada; no fue hasta que su reloj atado a la cadena de plata, marco las nueve en punto que se puso de pie, y hablo por primera vez.
-"Teniente Hawkeye y Teniente Havoc, síganme".- en cuanto escucharon sus nombre, se levantaron, hicieron a un lado sus labores y salieron por la puerta que atravesara delante de ellos Roy.
-"hoy"- hablo mientras subían las escaleras. "será el día en que todos nuestros esfuerzos serán recompensados, si no saben aun de lo que les estoy hablando, escuchen atentos las palabras de él"- en cuanto termino de hablar, golpeo con su mano ligeramente cerrada la gran puerta de roble que se cernía frente a ellos.
Fue la secretaria del actual Fuhrer la que les brindo el acceso, mientras que el hombre los esperaba de espaldas a ellos, con sus brazos detrás de su espalda y su vista frente al gran ventanal. Roy le dirigió una mirada de agradecimiento a la mujer y entro con paso firme, seguido de sus dos hombres. Se detuvo justo frente al escritorio vacío, hizo sonar sus botas para llamar la atención del hombre al tiempo que se ponía firme y llevaba su brazo a la altura de su frente, hablo con voz estable.
-" Coronel Roy Mustang, a su servicio, señor"
En cuanto el hombre escucho la voz del alquimista, se giro y camino hasta su escritorio. No hablo sino hasta que estuvo parado justo detrás, del escritorio; su voz como el la mayoría de las ocasiones se mostraba apacible.
-"Coronel. Usted no cambia cierto?. Déjese de formalidades y tome asiento"decía mientras que con la mano lo invitaba sentarse frente a él.
-Mustang sabía bien el significado de esas primeras palabras, pero prefirió callar. Con un rápido ademán de manos, les indico que Riza y Havoc que permanecieran de pie detrás de él. Tomo asiento en el gran sillón de piel, que estaba frente al escritorio, cruzo las piernas en tanto que descansaba los brazos en el respaldo. Imitando al militar King Bradley tomo asiento.
-"Supongo que la secretaria que envié por la mañana ya te abra adelantado algo."
-"Solo cruce algunas palabras con ella, nada concreto."
-"Eres cauteloso Mustang, eso me agrada. Es una de las tantas cualidades necesarias para ocupar mi puesto. Crees contar con todas ellas"
-"Desde luego y me atreveré a decir que cuento con muchas." –respondió, poniendo especial cuidado en remarcar sus últimas palabras.
Riza apenas y pudo contener la compostura al escuchar hablar de esa manera a Roy. Ni en el peor de los casos hubiera esperado tal respuesta de su superior hacia el fuhrer. Havoc por su parte considero una respuesta poco prudente por parte del alquimista. Al contrario de ambos King Bradley amplio aun mas su sonrisa, aunque no dejaba en claro si aquella respuesta lo había molestado o ya se la esperaba.
-"Te abras enterado que la semana pasada, los altos rangos nos reunimos para tratar un asunto importante".- Ahora fue el turno de él en dejar claro quienes eran los importantes dentro de la milicia, cosa que molesto a Mustang, pero no lo dejo ver.
-" Como no estarlo, si esos días todos estaban mas preocupados en agradarles que en sus labores, sin mencionar, claro; que la mayoría de ellos charlo conmigo".- esbozo una sonrisa socarrona, al ver el rostro del hombre.
-"El tema que tratamos, fue tu posible y ahora seguro asenso. Nos enteramos que te gustaría llegar a ser fuhrer, y yo estoy próximo a retirarme."
-"Es una pena que piense retirarse tan pronto, cuando su trabajo aun no ha dado frutos." – fue todo lo que respondió, no desmintió pero tampoco aseguro querer obtener ese puesto.
-"debería alegrarte, porque todos acordaron en que tu ocupes mi lugar. En otras palabras Coronel Mustang, usted será el próximo furher.
El encuentro de miradas por parte de los hombres que aguardaban a su espalda no se hizo esperar, así como la sonrisa de Roy, frente el rostro de Bradley.
-"Veo que no hay ninguna objeción por su parte, Coronel".
-"Como haberla, si según sus propias palabras, esto es algo que he deseado por mucho tiempo."- respondió de manera pedante.
-" la confirmación y transferencia, no creo que tarde mas de dos semanas, hasta entonces lo veré, o quizás antes, de cualquier modo eso es todo, puede retirarse. – y ahí se encontraba nuevamente ese gesto de superioridad con burla, en el rostro de Bradley.
En todo ese tiempo ningún hombre había dejado de mirarse a los ojos, ninguno de los dos bajo la vista, ni titubeo ante la acechante mirada del otro. Y es que pareciera que se estaba librando una batalla solo con la vista, y en la cual no se declaro victoria alguna. Roy se puso de pie, se despidió levantando el brazo, por puro formalismo y salió seguido por Riza y Jean.
-"Así se hace Mustang, ahora no hay nada, mas que pueda preocuparte. Por fin será tu el que de ordenes y no quien las siga."- fue el primero que hablo de los tres, mientras caminaban por el pasillo cercano a su oficina.
-"Gracias Havoc, ahora finalmente, mi sueño se podrá hacer realidad. Dentro de poco todo el personal femenino vestirá minifalda, y eso la incluye a usted teniente Hawkeye."
-"Nisiquiera lo piense, Coronel"
-"Esta bien, tal vez haga una excepción con usted".- no hizo falta que volteara, para saber que el sonido que escucho, era el seguro del arma de Riza frente su nuca, razón por la cual cambio de parecer.
Tan pronto abrió la puerta de su oficina, Havoc les dio la noticia los tres hombres que esperaban ansiosos su llegada.
-"Señores, ante ustedes les presento, al futuro jefe de toda central, al hombre, al próximo fuhrer."- hablaba emocionado Havoc, mientras que Roy sonreía y Riza lo miraba con vergüenza. Se hubiera esperado, que todos estallaran en gritos en cuanto se cayo Havoc, pero solo lo observaron sin comprender aún a que se refería, con su discurso. Se saco su cigarrillo de la boca, y les aclaro desesperado, por la ineptitud de los tres militares.
-"El próximo furhrer, Roy Mustang, el Coronel, pronto dejara ese título para ser llamado fuhrer, jefe de toda la milicia".- mientras hablaba, o mejor dicho gritaba, movía sus manos señalando a Roy, él cual ahora realizaba una pose de triunfo, y Riza ya no solo pensaba que Havoc era el único que hacía el ridículo, pues se le sumaron Breda, Fuery, Framan.
Antes de que llamaran mas la atención y enteraran a todo el edificio, la joven militar apago con dos simples tiros, los ovaciones de sus colegas, obligándolos a regresar a la oficina y trabajo. Resignados los hombres, pues ninguno de los tres era capaz de competir con un arma y mucho con manos tan diestras como las de Riza, retomaron sus deberes.
Mustang se había adelantado y ya se encontraba detrás de su escritorio cuando Riza entro. Mecía entre sus dedos el portarretratos que mostraba una imagen de él al lado de su mejor amigo Maes.
-"Coronel, le ocurre algo, no se nota muy contento con la noticia." .- pregunto, después de cerrar la puerta, tratando de amortiguar la platica de los cuatro hombre.
-"Es extraño no lo cree, teniente. Después de mucho, tome la decisión de quedarme en la milicia, para alcanzar un único objetivo".
-"Y debería de alegrarle, lo acaba de conseguir".-aseguro tímidamente la mujer
-"Ojala las cosas fueran así de fáciles. Pero usted también lo noto¿cierto?."
-"Si, así es, y en realidad lo lamento Coronel."- Su voz aunque trataba de sonar firme, no pudo ocultar del todo la preocupación, al igual que bajar la cabeza, como signo de lamentar lo sucedido. Y es que ella al igual que Roy, pudo ver la farsa de todo eso.
-"No lo lamente. Aun no se bien por donde nos va llegar el golpe. Pero si actuamos de manera inteligente, este cargo puede resultarles contraproducente. Y nosotros estaremos finalmente en la cima."
Riza alzo de nuevo el rostro, solo para encontrarse con los oscuros ojos de Mustang y un rostro totalmente sereno, gélido y calculador. Al verlo tan decidido, Riza exhalo una gran bocanada de aire, produciendo que su pecho se elevara, y solo pronunciara "Bien".
-"Teniente, una cosa mas, ni una palabra a los demás, por lo menos no aún". Agrego al ver que la joven, iba a reprocharle. Con todo solo le dirigió una rápida sonrisa, antes de comenzar a trabajar.
CONTINUARA...
Diganme lo que en verdad piensan. Buena, mala, regular...He tenido infinidad de ideas para esta historia, por eso creo que se me esta complicando escribirla. Por eso les pido que me digan como quieren que sea la relacion de Roy&Riza, seria como usualmente pasa o romantica. "por favor diganme, que ni yo misma se"
Y una última petición para publicar el prox, cap, necesito como minimo 1,000 review, si no, no hay trato. (jejeje), no mentira, de ante mano gracias por su apoyo, solo no estoy muy segura de que tan rápido podre avanzarla, por lo pronto si me contestan mi preg, escribire el seg, cap. mas pronto de lo creen, Y si me atoro e algo, nuevamente espero contar con su ayuda. OK.
TAO JUN SHINOMORI.
