Disclaimer: El Potterverso no me pertenece, es de Jotaká.
Este fic participa en el minirreto de octubre para El Torneo de los Tres Magos del foro La Noble y Ancestral Casa de los Black.
Debo decir que fui muy afortunada en este sorteo, porque me tocó Benjy Fenwick, al que adoro. El 90% de mi headcanon viene de la fabulosa Cris Snape, que lo pone como el padre de Dean Thomas (para más detalles de eso, ver mi long fic El largo camino a casa) y como aamigo de Evan Rosier (una idea estupenda). Así que no he podido evitar usarlas para parte de mi Benjy. Lean sus historias, son amor.
La muerte de la luz
Do not go gentle into that good night.
Rage, rage against the dying of the light.
-Dylan Thomas, "Do Not Go Gentle into that Good Night"
Al menos no te has ido.
Te has quedado conmigo, Evan. A pesar de todo lo que pasado entre nosotros, no te has ido. En cualquier momento llegarán los demás de la Orden y tendrás que huir. Pero hasta que llegue ese momento, te quedarás conmigo. Lo sé, porque eres tú. No importan los años que pasen, sigues siendo el mismo. O eso quiero creer.
Hubiera sido genial que las cosas fueran diferentes. Habernos tomado un último whisky de fuego, una última charla. Me hubiera gustado poder contarte acerca de Dean. ¿Recuerdas cuando nos reíamos al pensar en nosotros como adultos? Ahora soy padre. Suena absurdo, ¿no? Pero lo soy.
O lo era.
Ojalá hubiera tenido un momento más para decirte todo eso. Para pedirte que fueras a casa de Danielle y decirle lo que pasó. Y a donde mis padres y Robbie. Tienen que saber que Dean existe, que tiene un nieto, un sobrino. No quiero que Danielle tenga que pasar por todo esto sola. Pero no puedo pedírtelo.
En cualquier momento tengo que irme.
Tal vez debería ir yo, pero no sé si puedo.
Siempre dicen que al morir uno ve una luz. O algo a dónde dirigirse. Pero ahora no veo nada en absoluto. Nada aparte de este callejón oscuro y lúgubre. Tú, con tu capa negra y tu máscara plateada. Y algo que me cuesta reconocer como mi cuerpo. Una maldición acabó con todo. Ni siquiera fue una muerte limpia y rápida.
Dolía, dolía mucho. Pero tú estabas ahí, conmigo. Creo que incluso lloraste un poco. ¿Cuándo fue la última vez que derramaste una lágrima por alguien, Evan? También me pediste perdón. Sabías que era la última oportunidad.
Y de repente, dejó de doler. Y tú seguías ahí, sin decir nada.
Yo sólo podía pensar en Dean y Danielle. En mis padres, en Robbie. Y en ti. A pesar de todo, me alegro de haberte visto antes del final. Ni siquiera pude decirte que te perdonaba, que las cosas iban a estar bien. ¿Tendré que ir a dónde mis padres a decirles lo que pasó? Por absurdo que suene, no soy capaz de hacerlo. No puedo hacerles esto. Ni a ellos, ni a Danielle.
No tenía que terminar así. No.
¿Recuerdas cuándo nos reíamos del peligro? ¿Cuándo desafiábamos al mundo y nos daba igual? Aunque una cosa es romper las reglas del Colegio y otra muy diferente es enfrentarse a un montón de asesinos. O convertirse en uno, como tú lo hiciste. ¿Quién lo hubiera dicho?
Pero no es como que hubiéramos tenido muchas opciones, ¿no crees? Nunca pudimos elegir, ni tú ni yo. Era superior a nosotros, por mucho que creyéramos que no era así. Parece que la muerte te hace sabio. O algo así. A lo mejor sólo te permite ver lo idiota que eras antes. Por cierto, tú eres mucho más idiota de lo que yo nunca fui. Aun así, te merecías algo mejor.
Porque sigues aquí.
Y yo también, por lo visto.
Se supone que de Benjy sólo encontraron pedacitos, pero me lo he tomado como una licencia poética de Moody. No estaba hecho pedazos literalmente, pero sí casi irreconocible. Espero haber mostrado la enorme cantidad de las Benjy se arrepiente, todo lo que lo podría dejar como un fantasma. En realidad, no estoy segura de que efectivamente se haya quedado (porque jode mi headcanon para El largo camino a casa). Pero vamos, que razones tendría.
¡Saludos y hasta la próxima historia!
Muselina
