Nota de la autora: Hola a todas y todos, esta historia está editada (muchos plot holes) más o menos de cero, pero la idea central se mantiene. Eso, los amo.
Desde que tenía memoria tuvo todo, exactamente todo lo que deseaba, los mejores juguetes, los mejores autos, los chicos querían ser él y ellas estás con él. Frívolo y un poco descortés, lo cuál fue suficiente como para crear un personaje que le permitió entrar al mundo de la fama y aún mayor fortuna en Japón. Uzumaki Naruto comenzó a salir en portadas de revistas y entrevistas en cualquier medio que le diera la gana, su representante era su antiguo profesor, la única figura paterna que tenía, a pesar de ser huérfano no le faltó cariño por parte de Jiraya.
Camino a una audición se sentía más molesto que de costumbre, no se sentía bien siendo cuestionado por su calidad de actor, era bueno y punto. Entrando en el set pasó a llevar a una chica, quien terminó con unos papeles en el piso, no se molestó en mirarla siquiera, no le gustaban morenas, pero Jiraya se detuvo a ayudarla.
- Es muy amable - le dijo con una voz suave.
- No es nada, ¿vienes por la audición? - le preguntó haciendo algo de conversación.
- Sí, no podía concentrarme adentro, quería tomar algo de aire - respondió con cortesía.
- Pues te deseo suerte - le dijo antes de marcharse.
- ¿Acaso eres idiota? - le soltó el rubio.
- Es necesario entablar buenas relaciones, además, estaba buenísima - le dijo riendo con fuerza.
- No me interesa, tú piensas que todas están buenísimas - Naruto era más selecto, pensando que si filtraba lograría llenar una especie de vacío que sentía.
- Hinata-chan - gritó una rubia pasando a buscar a la chica en cuestión - no hemos terminado de ver el guión - le dijo tomando la mano de la chica morena.
- Ya voy, sólo quería algo de aire - corrieron a la esquina y volvieron a repetir las líneas.
Luego de unos minutos el director llamó al rubio a que dijera unas líneas, ni siquiera se molestaba en estudiar mucho los personajes, sabía que por su atractivo no le podrían decir que no, además de que era famoso a tal punto que rechazarlo era una especie de fin de la carrera de un director.
- Soy Uzumaki Naruto y quiero el papel principal - espetó con sus manos en los bolsillos.
- Bien, muestra lo que tienes - espetó el director.
- "No estoy dispuesto a compartir dirección con una chica como tú, voy a hacer todo por ser el único aquí y destruirte" - era la única línea que le interesó y se la aprendió minutos antes de siquiera audicionar.
- Me agradas, te avisaremos cuando tengas que volver al set - le dijo un poco molesto, si bien era un cretino interpretaba los papeles que elegía - siguiente, ¡Hyuga! ¿quién es ella? nunca había escuchado de ella - le susurró al asistente, quien sólo encogió los hombros.
- Ho-Hola, soy Hinata Hyuga y quisiera audicionar para el papel protagónico - estaba más que nervioso, el rubio la miraba con lástima y un poco de sadismo.
- Algo ambiciosa, bien, adelante - le dijo una de las asistentes.
- "No he pedido esto, jamás lo hice y dejaría todo de lado por hacerte feliz, ¿es que no ves que te amo? desde el momento que te vi" - soltó un par de lágrimas para luego sollozar un poco - "lo eres todo para mí y si quieres todo para ti te lo daré" - el director botó su lápiz y la rodeó.
- No necesitas seguir, ¿qué edad tienes? ¿de dónde vienes? ¿has actuado antes? - la sujetó del mentón.
- Tengo 19, soy de Kioto, esta es mi primera actuación - juntó sus manos un poco asustada.
- Podría darte el papel si es que - le susurró algo en el oído que la hizo saltar, para Naruto era más que obvio que debía intervenir.
- Le darás el papel, no te acercarás a ella y la lanzarás a la fama, o yo mismo me encargaré de hacer mierda tu carrera - la puso tras de sí, el hombre, un poco mayor se rió de él.
- Puedo apostar que ella lo haría si fuera por fama - Hinata se había aferrado a su espalda buscando protección.
- No quiere, ¿acaso necesitas chantajear niñas para poder cojerte a alguien? - el hombre parecía realmente molesto.
- Guarda silencio y yo no te destruiré a ti - Naruto bufó.
- ¿A mí? Bien, Jiraya, llama a "Vogue" y que quiero dar una entrevista sobre el acoso que he presenciado hoy, seguro estarán disponibles para mí - el pobre director sabía que no tenía las de ganar en absoluto.
- Vale, haré lo que pides - se marchó furioso quedando ellos dos solos, dando por finalizada la audición para los demás.
- ¿Estás bien? - Hinata se sentía como una niña pequeña.
- S-Sí, gracias - el semblante del hombre cambió drásticamente.
- Pues te pasas de estúpida si llegaste a considerarlo, en este mundo debes cuidarte, no siempre habrá alguien como yo con la capacidad de detener estos casos - Naruto le pasó una pequeña lata de bebida - ten, puedes estar segura al menos en esta producción, debes estar un poco nerviosa - ella asintió.
- Gracias - la abrió con cuidado y mientras bebía se puso a llorar.
- ¿Qué tienes? - le decía limpiando sus lágrimas con un pañuelo blanco.
- La podre chica debe estar conmocionada - el rubio la sentó en una silla para que se calmara.
- Estas cosas no deben afectarte, sé consciente de este mundo, todas querrán derrocarte y todos tenerte en su cama, eres convencionalmente bonita - le decía colocando su manos sobre su cabeza.
- Yo sólo quiero trabajar en esto - sus lágrimas cesaban mientras veía a ese hombre ser cálido con ella, muy a pesar de su fama.
- Hinata, ven, tienes que firmar el contrato - decía la chica rubia de hacía un rato, parecía ser su amiga, Naruto las detuvo con un gesto.
- No lo harás, me darás ese contrato y mi abogado lo revisará para ti y lo negociará también, no firmes nada ahora, lo harás cuando mi abogado te diga que lo hagas - la morena se sorprendió de lo ejecutivo que era.
- ¿Acaso quieres controlarla? - soltó la rubia ofendida.
- Esta velando por sus intereses - intervino Jiraya - deberías agradecerlo, contamos con el mejor equipo jurídico - Naruto ni siquiera movía un músculo.
- E-Está bien, firmaré el contrato que me entregue Uzumaki-san - dijo la chica un poco tímida.
Pasaron los días y llegó el momento del rodaje, era un típico drama con Naruto y Hinata como protagonistas, para ella era algo tan nuevo que no sabía exactamente qué hacer en lo que se refería a procedimientos, así que seguía las órdenes del director ejecutivo. Mientras estaba en el vestidor estudiando sus líneas cuando llamaron a su puerta.
- ¿Hyuga-san? - le llamó una voz masculina.
- ¿Uzumaki-san? - le llamó mientras abría la puerta, pero era un chico más bajo.
- Hola - la chica lo examinó, de ojos azules, piel pálida y cabello blanco.
- Buenos días - respondió un poco sorprendida - ¿puedo ayudarte en algo? - preguntó al ver que no hablaba.
- Soy Toneri Otsutsuki, tengo el papel de antagonista, sé que nos conoceríamos hoy, pero había escuchado mucho de ti en el set, se dice que eres la aprendiz de Uzumaki - su nombre parecía irritarlo en cierta medida.
- No exactamente, sólo me prestó una ayuda circunstancial, sería pretencioso decir que soy su aprendiz - le explicó dejando que entrara a su habitación.
- Hinata-chan - le llamó Jiraya cariñosamente.
-Ah, Jiraya-sama - se le acercó, era una especie de persona que tenía preferencia por ella de una manera paternalista.
- Naruto me dijo que te pasara estos escritos, te dejó unas notas, sabes que no le gusta que le hagan perder el tiempo - la chica asintió un poco angustiada.
- Sé que es impaciente, pudo haberme llamado, no tenía que tomarse la molestia en venir - el hombre le acarició su cabeza con ternura.
- Eres ciertamente un personaje - le dijo antes del irse.
- Lo siento, pero debo revisar sus notas - Toneri parecía bastante cómodo en el sillón de la chica.
- Pues a mí me parece que Uzumaki tiene demasiado interés en ti - cruzado de brazos y piernas la miraba desafiante.
- ¿Y por qué me cuestionas la relación que tenga con él? - Hinata parecía más molesta de lo usual.
- Llevo en este negocio más tiempo del que puedo recordar, sé que eres el futuro, al menos en lo que respecta a actuación femenina cuando te vi en la audición, por eso quería pedirte una cita - Hinata no podía creer lo que le decía ese chico, sabía que era uno de los solteros más codiciados, a pesar de tener 18 años.
- ¿Eh? - trataba de salir de su sorpresa, aunque le era difícil.
- Sí, quiero salir contigo - se le había acercado con sigilo, tanto fue su acercamiento que llegó a acorralarla entre su escritorio y él.
- N-No puedo aceptar - le soltó en la cara.
- ¿Qué? - sus ojos parecían incrédulos a su respuesta.
- E-Estamos a punto de empezar el rodaje, no podemos perder el tiempo en salidas, no sería profesional, es mi primera actuación, debo hacerlo bien - le dijo colocando su libreto entre ella y él.
- Ya veo - se alejó aliviando a la chica - pues esperaré a que termine el rodaje para preguntarte de nuevo, espero me digas que sí - salió de su vestidor sin decir nada más.
Al llegar a la primera escena estaba ella llorando a un hombre fallecido.
- Papá, no puedo creer que me dejes en un momento así - le sollozaba a los pies de la cama, mientras que Naruto, vestido de traje entraba sin expresión alguna.
- Vaya, pensé que duraría menos ese viejo - Hinata lo miraba sorprendida.
- ¿Cómo puedes decir eso? - Naruto bufó.
- La única molestia que queda eres tú - Hinata le miraba horrorizada.
- S-Sé que de niña era una molestia, pero ¿no puedes olvidar eso? yo aún te quiero - Narutó soltó una risa totalmente exagerada.
- Nunca fuiste mi hermana, lo único que hice fue ganarme el amor de tu padre, por eso estoy en el testamento. De ahora en adelante sólo me queda administrar sus bienes contigo, pero estoy dispuesto a todo para sacarte de mi camino, mocosa insoportable - esa última parte no estaba en el guión pero le pareció apropiada.
- CORTEN - gritó el director.
- ¿Cómo te sientes hoy? - Naruto parecía verdaderamente preocupado por ella, revisaba sus ojos para ver que no tuviera signos de cansancio.
- Bien, no tiene que preocuparse - el rubio se apartó un poco incómodo.
- No quiero que detengas el rodaje - le confesó sin mirarla a los ojos.
- No lo haré, sé que no le agrada esperar - le sonrió un poco atontada, desde que lo había conocido le habían agradado sus ojos azules.
- Debes aprender a odiarme en este maldito drama, te va a costar entrar en personaje si me miras así - Hinata despertó y negó con la cabeza.
- No miraba de ninguna forma especial - le decía sin dejar de negar con la cabeza.
- ¡Hinata! - le llamó Toneri llevando una botella de agua para ella.
- Ah, Toneri-kun - le saludó un poco más alegre.
- Ten - le dijo ofreciendo la botella - vas de maravilla - Naruto bufó.
- Es una maldita escena, no es nada sorprendente - Hinata bajó la cabeza.
- Tiene razón, no es nada especial - Toneri la alzó por su mentón.
- Tienes unos ojos preciosos y tu cara de santa es capaz de conmover a cualquiera, podría jurar que eres la niña con la cara más perfecta que he visto - Naruto tomó la mano del albino.
- ¿Crees que por ser un mocoso dulce que sólo halaga a una chica se va a acostar con él? - Hinata enrojeció instantáneamente.
- N-No es el momento para hablar de estas cosas - le susurró mirando hacia el suelo.
- ¿Lo harías? - por un segundo la ira se enfocó en la chica, hasta que negó con la cabeza.
- Esas no son sus intenciones, Toneri-kun no es una mala persona, no asuma cosas que no son reales - le dijo tomando su mano con dulzura, tímidamente alzó la mirada para encontrar sus zafiros suavizados.
Toneri apenas dijo algo más, quedaron los dos solos, Naruto aprovechó de llevarla a su vestidor para hablar tranquilamente, se sentía ofuscado, ni siquiera notó que había tomado su muñeca tan fuerte que le dejaría marcas a la mañana siguiente.
- No puedes dejar que ese mocoso logre lo que quiere - le dijo cerrando la puerta.
- S-Sólo me había invitado a salir, no es algo grave - le dijo tratando de salir del lugar.
- No he terminado de hablar contigo - sabía más que bien imponer su poder, sobretodo con una chica tan joven.
- Entiendo que se preocupe por mí, pero, creo que puedo decidir con quien salir - Naruto se dio la vuelta incrédulo de su respuesta.
- ¿No ves que él sólo quiere acostarse contigo? - la tomó de sus hombros y la sacudió - te usará y luego te abandonará - casi estaba gritando, su desesperación estaba a flor de piel.
- ¿Y si yo quiero sólo acostarme con él? - estaba más que desconcertado - es un hombre atractivo, joven - se mordió levemente su labio inferior de sólo imaginar que ese jovencito podía ser una bestia en la cama.
- Tu sexualidad no me compete, pero no te conviene que la prensa te considere fácil, se te condenará, aunque a mí me da igual - Hinata lo miró extrañada.
- ¿Entonces por qué se preocupa de lo que haga o no? Somos apenas colegas - Naruto encendió la mirada furioso.
- ¿¡Crees que haría por ti lo que haría por cualquiera!? - Hinata abrió sus ojos más que incómoda.
¿Qué deseaba proteger? Cuando la conoció le tenía sin cuidado, pero cuando vio su inocencia ante un posible abuso, vio una criatura frágil y muy bonita, aunque a todos dijera lo contrario. Era un chica de una palidez que era casi angelical, deseó que permaneciera así, pura, de pronto la solución llegó a su cabeza, si quería que algo fuera como él quería, sólo debía reclamarla para sí, Hinata sería suya, como una preciosa muñeca.
