¡Buenas noches!

Me uní a un reto del foro Mar de Joyas Escondidas y aquí está el resultado. Algunos drabbles me surgieron solos pero otros me costaron un poquito más. Estoy casi al límite, casi, casi, realmente no me lo esperaba pero una sucesión de eventos locos pero beneficiosos para mí se sucedieron de un día a otro y eso me trajo mucho movimiento burocrático.

Total, que ya terminada puedo respirar tranquila sin contar los días que me quedan para subir la historia, aunque dado el tiempo que he tardado ese conteo ha sido infructuoso.

¡Disfrutad de la historia!

-Drabbles: es un conjunto de cuatro drabbles de no más de 500 palabras cada uno.

- Rated: T (únicamente por el segundo y cuarto drabble)

- Disclaimer foro: Este fic participa en el Mes de apreciación Septiembre-2017: Elizabeth Liones del foro "Mar de Joyas Escondidas".

- Disclaimer autor: la maravillosa obra Nanatsu no Taizai y sus personajes pertenecen únicamente a Nakaba Suzuki.

-Sorteo: acción- Tomar alcohol.


Drabble 1: Beber no siempre es bueno.

-No creo que sea bueno.

-No te preocupes ¡No pasará nada!

Las felices palabras de Diane, distrajeron a King… bueno más bien el movimiento de sus pechos al inclinarse.

Estaban celebrando… algo. En el Boar Hat siempre se celebraba algo. Sobre todo desde que Ban estaba con ellos. Hoy tocaba una simple fiesta donde se tomaban algunas copas y recordaban eventos graciosos de su pasado. La cosa era que Elizabeth siempre era quien les preparaba y ofrecía la comida y bebida pero Diane había decidido que hoy Elizabeth también bebería y se divertiría con ellos sin serviles. Así, las dos chicas del grupo habían empezado a beber. Sin imaginar lo que pasaría.

-Y en-en-entonces Verónica me pe-pego...

-Sí, si…

Diane le había dado un pequeño vaso de cerveza a Elizabeth, el primero y único. Pero quién iba a imaginarse que la princesa, ni toleraba el alcohol ni sabía comportarse. Era una borracha emotiva que pasaba por distintas emociones. En el fondo todos, excepto Meliodas, se sorprendieron.

En menos de una hora había pasado de agredir a un lloroso y asustado King por intentar quitarle el vaso a regañar a voces y agresivamente a una sorprendida Diane que quiso mediar entre ambos. Le había tirado comida a Gowther en la cabeza, él no reaccionó de otro modo que no fuera parpadeando y hablando tonterías sobre las posibilidades de que el alcohol afectara de diferentes maneras a una u otra persona, fue Hawk quien no tardó ni un segundo en aparecer y dejar el suelo reluciente… incluso lo intentó con la cabeza de Gowther.

Luego la princesa reto a Ban a una competición de alcohol, el pecado del zorro se puso contento y empezó a llenar las jarras más grandes que había en el bar con cerveza. Fue cuando Meliodas apareció, destrozando a Ban de un golpe, y llevando de la mano a Elizabeth a una silla como si fuera una niña castigada. Ella había empezado a llorar mientras Meliodas aprovechaba para sentarse encima y acariciar todo lo que podía del cuerpo de la princesa.

-... mi padre se asustó peeero...

Elizabeth seguía hablando sobre algo de su pasado, hipando y gruñendo. Estaba soltando frases inconexas y sueltas.

-¿Estará bien?-King se tocaba la mejilla roja e hinchada. Aunque no lo parecía, la princesa podía tener fuerza.

-¡Claro!- King suspiro mientras veía a Diane, ahora también borracha, reírse de la situación.

Todos dirigieron su vista a la pareja. Una muy borracha Elizabeth abrazaba a un excitado Meliodas. Nadie sabía de qué hablaba, o balbuceaba mejor. Pero todos decidieron en ese mismo momento que Elizabeth jamás volvería a probar alcohol.