Bienvenidos a el perfil de quien ha matado a La Muerte. Bienvenidos a mi perfil. He aquí una persona que ha matado a La Muerte sin pensar en las posibles consecuencias. He aquí una persona que cegada por su estupidez, gracias a su condición de humana, ha matado a La Muerte, condenando a todos aquellos de su especie. Condenándolos con la inmortalidad. Condenándolos con la eternidad. ¿Qué ha de ser peor que eso? La respuesta se limita a cuatro letras que apuesto que ya son obvias: NADA.

Entonces, ¿Por qué ha hecho esto? Estupidez, codicia e impulsividad. Tres pequeños detalles dispuestos a destruir a una persona en algunos casos, en otros, a la humanidad. Tras la estupidez de esta persona, yo, os he condenado a vivir para siempre. En un momento de la vida de un humano, este busca un camino hacia un descanso infinito. El humano es guiado por alguien que no podía librarse de su trabajo como guía: La Muerte. Es bien sabido que sin ella no hay humano que pueda descansar en paz, pero jamás a alguien le había pasado. Hasta ahora, que he cometido un error fatal.

Ahora os he quitado a esta poderosísima ayuda. Jamás había lamentado algo de un modo semejante, y deseo disculparme, sabiendo que es una estupidez. Ya he cometido el error irreparable y he arruinado todo.

Preparaos para el sufrimiento eterno. Para no necesitar absolutamente nada y a la vez necesitar todo. Para la sobrepoblación. Para millones de idiotas inmortales cometiendo estupideces infinitas. Ahora todos viviréis para siempre. Os deseo suerte. Eso que yo he tenido al matar a La Muerte.

Espero que la cordura jamás los abandone como lo ha hecho conmigo, porque es en verdad horrible. Cometes errores fatales ¿y luego? NADA. Vives con la conciencia destruida por ti misma.

Debéis atar a vuestra cordura a vosotros mismos. Con nudos imposibles de desatar. Así tal vez podéis vivir bien. Hasta que os aburráis y todo sea sufrimiento y NADA. NADA, y luego más de eso.

Gracias por molestaros en leer un pequeño perfil que ya a terminado, si gustáis podéis pasaros por mis historias.