" Sabía que su mundo se movía demasiado rápido, y quemaba demasiado. Pero simplemente pensé, ¿cómo puede el diablo empujarte a alguien que se parece...tanto a un ángel cuando te sonríe? Supongo que simplemente perdí el equilibrio. " 18. Daryl Dixon y tu.

" Me obsesionaban sus ojos. Me obsesionaba su manera de cantar y de moverse en el escenario, casi como si le hiciese el amor. Me obsesionaba esa chica, y no pararía hasta que fuese mía. Costase el precio que costase. "

Había pasado ya mucho tiempo desde que los Digimons volvieron al mundo Digital,y todos los tamers prosiguieron con sus vidas.Takato estaba estudiando dibujo,Henry una carrera de medicina,y Rika,sorprendiendo a todo el mundo,decidio aceptar una oferta de unas amigas de su madre para trabajar de modelo.

"Toqué las cadenas que me ataban los tobillos, aferrándome al único indicio de que me encontraba en el mundo real. Solo podía escuchar los latidos de mi corazón y mi propia respiración, sin poder ver más que una densa oscuridad. Pero sabía que estaba en el mundo real, aquellas cadenas eran reales. El dolor de mis tobillos por tener las argollas tan ajustadas era real. Quizá..."

-Nada es fácil... -susurré mientras el me acariciaba cada una de las cicatrices de mi muñeca- Sobre todo si quieren casarte con el estúpido de Malfoy... -¿Por que iban a hacer semejante tontería? -Verás, mi familia sigue con esa estúpida idea de querer casarnos entre sangre pura-sonreí amargamente- Nada es fácil cuando eres la hija de Sirius Black.

" ¿Dime que es lo que sigue? Sexo. Voy a desnudarte, después voy a probarte. Date cuenta que te he secuestrado, así que sigue mis órdenes. "

Ash había salido, y el profesor Oak se encontraba totalmente solo en su habitación. Oak nunca imaginaría que la profesora Encina llamaría a su puerta, con los botones de la blusa sensualmente desabrochados, buscando algo más que hablar con el.

Sintió la descarga de electricidad que le provocaba estar cerca de él. En un ágil movimiento, el espadachín la tumbo sobre el suelo, sujetando sus muñecas. La respiración de ella empezaba a descontrolarse. El, que también se relamía ahora, la miraba con ojos oscuros.-Deja...De...Provocarme...-jadeó el, cuando vio que el cuerpo de la chica estaba totalmente a su merced.