Capítulo 31

Distraer

La ciudad de Katorea había recibido una visita de su Rey, quien decidió admitir que en realidad si era responsable del cargamento de Dance powder y que por eso mismo eliminaría la ciudad.

El caos se desato sobre la ciudad que había estado en duda sobre las acciones del ejército rebelde, los civiles sentía por primera vez una ira que quema en los huesos hacia ese vil monstruo, las acciones del ejército rebelde por fin les parecieron adecuadas tenían que destruir el sistema, tenían que ir en contra de sus dioses porque definitivamente Nefertari Cobra no era digno.

Koza pensó que estaba en lo correcto al ir atacar y destruir la monarquía, solo le basto ver al pequeño niño, que le había pedido unirse momentos antes al ejército rebelde, herido por las acciones del estúpido y desgraciado Rey. Antes podía escuchar en cada acción contra Cobra las palabras de lealtad de su padre frenarlo después de esto nada lo haría cambiar. Ellos hacían esto por ellos, los niños, el futuro, ellos morirían de ser necesario para que las futuras generaciones pudiera existir.

Rainbase es una ciudad muy activa en la que la gente no se preocupa por el asunto de la escasez de agua de otra zonas, es la zona turística que tiene suficiente comida y casino para que los extranjeros se atrevan a venir, aparte mantiene la protección 24/7 del gran Crocodile, también es una ciudad llena de Millón que no saben para quien trabajan en realidad y que su brillante jefe esta tan cerca de ellos.

Los Millón que hacían de civiles habían recibido las imágenes y dibujos de la banda de los mugiwaras y de la princesa, lo que dio pie a la situación de que los mugiwaras presente fueran perseguido y tuviera que separarse.

Sin que los Millón los supiera también había "civiles" que en realidad era marine disfrazados, presente viendo toda la situación de cerca. El único marine que no fue tan discreto, al percatarse de la presencia de mugiwara Luffy fue el Capitán Smoker, que termino persiguiendo a Mugiwara solo para ser detenido de nuevo por Puño de fuego que le corto el paso.

–Tienes que intervenir –dijo con el ceño profundo Smoker mientras soplaba sus dos puros profundamente.

–Ya te lo dije, no voy a dejar, que te acerques a mi hermano pequeño –dijo Ace resoplando de forma hartada, –comienzo a pensar que todos nuestros encuentro van a ser así –hizo una pausa resoplando más brusco, antes de sonreír de modo sarcástico –que enorme fastidio, humos.

–Pelear entre nosotros es inútil –dijo Smoker atacando a Ace. El marine sonrió, pues el pirata tuvo que retroceder hacia la izquierda, evitando el movimiento y creando una abertura que le permitió a Smoker perseguir a mugiwara.

Ace miro con pesadez a Smoker y lo persiguió antes de estallar en llamas. Lo había subestimado, el pecoso pensó que el marine lo cacería a él por tener un mayor valor, pero en serio que tenía este marine contra Lu casi parecía la relación que él e Isuka solían tener.

Lu sabía que Ace se había quedado a pelear con Smoker y aunque hubiera querido ver eso, no podía, tenía que parar a Crocodile, piensa, Viví dijo que tenía que ir al casino, buscar el símbolo de Cocodrilos o bananas y Cocodrilo, Viví dijo algo así.

Lu cargo con todos los Millón que vinieron a por ella, dejándolos heridos a su paso y acelero al notar que Smoker la perseguía de nuevo, la mugiwara admiro para sí misma la persistencia que el marine tenia al perseguirla, pero seguía siendo muy molesto, cual era el problema de humitos. En definitiva, el hombre tuvo que evadir a Ace, porque el no iba a ser vencido, y justo en ese momento Lu escucho los gritos de Ace con su característico toque de indignación, y sintió pena por Humitos, cuando Ace lo alcanzara.

En la entrada del casino, Lu se topó con la mayoría de sus nakamas, pero la mugiwara no paro, ella tenia que seguir cazando a Crocodile, entro al casino, siendo seguida por sus nakamas, el marine y Ace.

En el sitio de apuesta del apestoso Crocodile, Smoker siguió persiguiendo a mugiwara y su gente, el marine quería entender, el juego sucio de mugiwara, porque es tan payaso ese pirata, no para de repetir que Crocodile saliera, y le diera la cara. Mugiwara piensa que es capaz de vencer a Crocodile, solo busca fama…

Dos empleados del casino intentaron detener a Smoker por ser un marine, debido a su vestimenta de Capitán, el marine los mando al suelo sin miramientos, no era un hombre amable con escoria que se asociaba con piratas, y no se detendría, hasta obtener respuesta, Puño de fuego se acercaba peligrosamente, Smoker esquivaba sus ataques de fuego, ese mocoso no lo detendría.

El marine tenía la seguridad de que Puño de fuego estaba aquí solo como apoyo a su hermano menor, el pecoso dijo que mugiwara es idiota, y por lo poco que Smoker había visto podría estar de acuerdo, así que ese mocoso de Barbablanca probablemente solo intervendría si Crocodile lastimara a su bruto hermano, que quería fama, a lo mejor el idiota alucinaba con obtener el puesto de shishibukai… el rey pirata.

Smoker siguió a esos piratas que se metieron por un pasillo que les indicaron dos trabajadores del casino tirando pétalos dándoles la bienvenida, como si fuera una alegría atender a gente que quería romperle la cara a tu jefe. El marine escucho los gritos de la mujer pirata de esa tripulación y de su narizón compañero diciendo que diera vuelta en la sala de vip, cosa que mugiwara se negó dando vuelta hacia la derecha, mientras todos caían incluyendo a Puño de fuego que venía detrás de Smoker, el marine seguir evitando los ataque de fuego que el mocoso mayor le mandaba, ese joven también era un idiota el pudo evitar la trampa, pero Smoker noto que la mirada de Puño de fuego se concentraba solo en él, idiota, familia de idiotas.

La concentración de Ace por Smoker se rompió cuando escucho los gritos de la tripulación de Lu. El pecoso noto que estaban en aire y cayendo, se podía propulsar por el aire y salir… pero cerraron el piso de arriba, demasiado tarde, Ace podría quemarlo, pero no podía dejar a Lu al alcance de Humos, ni ella ni su tripulación estaban preparados para enfrentar usuarios Logias.

Los mugiwaras, Smoker y Ace terminaron en una enorme jaula que cerró su techo, antes de que los presente pudiera reaccionar impidiendo su escape.

–Tenías que dar vuelta donde indica piratas –recalco Nami dirigiendo su mirada a su estúpida capitán mientras la navegante se paraba y sobaba su espalda adolorida por culpa de la caída libre; algún día Lu, recibirá un golpe de haki de su parte pensó Nami, ese maldito entrenamiento de Sabo tendría que valer para eso.

–Mugiwara –dijo Smoker dirigiendo su arma hacia la garganta de Lu, Ace la paro con el brazo izquierdo, sintiéndose debilitado, pero sin retroceder, no volvería a subestimar al hombre, no lo perdería de vista, no con Lu a su alcance.

–Te dije que no te acercarías –dijo Ace frunciendo el ceño, y apartando a Smoker hacia un lado dándole un puñetazo(con fuego controlado) que hizo al marine retroceder y chocar su espalda con la pared trasera.

Smoker noto que la pared estaba combinada con kairoseki, se sintió debilitado más no lo demostró, en cambio coloco toda su fuerza en la pierna izquierda, preparándose para apartarse de lugar si puño de fuego atacaba, coloco por instinto su mano izquierda con su arma a la altura de su barbilla, para cubrir, cualquier ataque (viendo las intenciones del puño de fuego y el cazador de piratas), su mano derecha estaba lista para atacar si fuera necesario…

Zoro estaba apuntando a Smoker con Yubashiri, concentrándose en que su katana fuera capaz de cortar el humo, podría realizarlo con el entrenamiento extra de Sabo, o no. En el fondo de su mente podía escuchar casi un susurro o más bien una sensación de Kitetsu de querer cortar todo, la katana maldita tiene un enorme deseo de sangre, era demasiado pronto, cortaría a su enemigo, como en Whiskey Peak, Kitetsu trabajo muy bien, demasiado, tanto que se sobrepasó con los cortes, su voluntad no dominaba de todo a Kitetsu, y no podía asegurar, que nadie más aparte de él, fuera a salir ileso, así que no se permitía usarla en espacios tan cerrados, no apostaría por ahora, el bienestar de sus nakamas a Kitetsu.

Nami y Usopp se pusieron detrás de Lu, quien estaba mirando a su alrededor había un enorme habitación afuera de los barrotes también hay una gran mesa, platos cubiertos, un banquete, que habría debajo… concéntrate, concéntrate, carne delic… concéntrate… ahí estaba un tipo con cicatriz en la cara y un genial garfio –¡Cocodrilo!

–Vaya, vaya….

Los demás enjaulados dirigieron su mirada hacia la voz del perpetuador.

–Crocodile –dijo Smoker escupiendo su nombre con asco, pero no aparto su mirada del todo del comandante de la segunda división de Barbablanca, al igual que él pecoso tampoco dejaba de mirarlo por completo, el joven estaba determinado a no dejarse engañar por ningún enemigo.

–Capitán Smoker, Puño de fuego, que inespera…

–¡Maldito déjame salir para partirte la madre! –dijo Lu agarrando los barrotes, para luego sentirse muy débil.

–¡Luffy! –grito Usopp al mismo tiempo que Nami dijo –¡Lu!¡Que ocurre!

–Kairoseki –susurro Ace para sí mismo mientras observaba con una mirada aguda a las dos amenazas presentes, porque su hermana tenía que involucrarse con un shishibukai sin estar preparada y un marine con una logia se empeñó en perseguirla, solo la suerte de Lu –¡Lu suéltalo! –Ace miro a Zoro que todavía tenia la katana sobre el marine– yo me encargo.

Zoro enfundo su katana mientras Lu dio tres pasos hacia atrás tabaleándose, la mugiwara se apoyó por un momento en su nakamas más cercano, Usopp:

–Oye está bien Luffy –Usopp le coloco una mano en el hombro a Lu dándole soporte. La mugiwara en respuesta apoyo su cabeza por unos momentos en el hombro de Usopp, desde ahí miro a Crocodile con odio, ese infeliz le puso una trampa, es demasiado astuto. La mugiwara también se preguntó en cuánto tiempo Crocodile se daría cuenta de que no obtendría a Viví de ellos, y que estaría haciendo Sabo y Viví.

En medio del desierto el grupo de Viví, vivía un disturbio se podía ver al revolucionario discutir con uno de los guardias reales personales de Rey.

–¡Pell para! –grito Viví acercándose a los dos hombres que se estaban sujetando de la ropa mientras discutían como si fueran dos niños pequeños.

–Viví sama –exclamo Pell intentando sonar calmado mientras seguía sujetando al imbécil rubio por el cuello de su thawb– ¡cómo puede estar tan segura de que este hombre no trabaja con ellos! ¡es traición lo que sugiere!

–Confió en él, Pell lo voy a hacer –dijo Viví sonriendo un poco de forma melancólica– es mi responsabilidad.

–Viví sama, no puedo –dijo Pell con un rostro lleno de angustia, empujo al rubio, dándole una mirada llena de resentimiento–permitirlo ¡que pensara su padre!

–Es mi decisión en este momento –dijo Viví suspirando pesadamente, pero mostrando mucho temblé en su mirada.

La mirada de Viví hizo que Pell, dejara de ver por un momento a la niña que había cuidado y protegido desde pequeña para ver una mujer decidida.

–Viví sama –declaro Pell más como una súplica –¡no haga eso se lo ruego!

–Pell, está decidido, la sugerencia de Sabo es lo más factible en este momento, distraerá al pueblo lo suficiente –Viví tembló y cruzo los brazos abrazándose a sí misma– tengo que proteger a mi pueblo, aunque me destruya a mí y mi padre, ellos estarán a salvo, así que llévame al palacio Pell.

La princesa y Sabo compartieron una última mirada.

El joven y el camello vieron como la princesa marcho a salvo en la espalda del halcón que comenzó a volar.

En el aire Pell le dijo a su princesa–insisto en que su decisión podría desestabilizar más a este país, Viví sama.

Pell sintió que las manos de la princesa se ceñían en sus plumas.

Desde la arena Sabo sintió la pesada mirada del camello sobre su hombro.

–Se, que es demasiado arriesgado –miro al camello –pero al menos ella sabe lo que no debe decir –hizo una gran pausas recordando que Viví es muy torpe al hablar, soltando información que no debe decir, como la vez que Nami menciono que Viví le revelo a ella, Lu y Zoro la identidad de Mr. 0 por error, o sus omisiones sobre detalles importante en el desierto, como las aves ladronas, las arañas que parecen fresas, las tormentas de arena, o lo que la princesa le menciono hace un rato sobre a ver olvidado comentarle a su padre que había traidores en su ejército, entre los civiles y los rebeldes, Sabo hizo una mueca muy fea –o eso espero por el bien de Viví y Arabasta.

Pestaña siguió dándole una pesada mirada al rubio con risos, que le dio un puñetazo al camello.

–Además Pestaña, ella tiene que entender que, aunque desee proteger a todos, eso es– el revolucionario hizo una pausa ordenando sus palabras– sus palabras influirán, pero ella no elige lo que la gente creerá. Si es demasiado franca–Arabasta desaparecerá por orden del gobierno mundial –Sabo refunfuño y apretó los dientes– o al menos ella será señalada como una traidora, pero si no es muy franca posiblemente su gente no le crea o tal vez sí, la voluntad es compleja…

Ace le explico a Lu y a sus nakamas lo que era el Kairoseki mientras Smoker y Crocodile tenían una charla pasiva con miradas agresiva, gracias a la jaula.

Sir Crocodile aparto la mirada del hostil marine, terminando el dialogo con él hombre, poso su mirada en la única persona que realmente podría ser una amenaza en esta sala, si no estuviera en una jaula de kairoseki.

–Puño de fuego, un pirata de tu índole, –las palabras sonaron muy sarcásticas para todo los presentes, si mencionar que Ace podía captar la intención en las palabras de Crocodile– tan lejos del Nuevo Mundo –dijo Crocodile sonriendo con molestia.

Ace odio el tono de voz del perro del gobierno, pero no aparto su mirada por completo del Marine. Se acomodo cerca de una de las paredes de la jaula, asegurándose de estar lo suficientemente lejos para que el kairoseki no le afectara, el joven pecoso necesitaba poder observar a ambos hombres, sin ninguna dificultad, los dos parecía esperar a que hablara, sus miradas lo hacían sentir como si él fuera peligroso:

–Vaya, vaya –dijo Ace sonriendo con ironía –no lo sé tú dime, que crees que hago aquí Coco.

Crocodile rechino los dientes junto con su puro que de milagro no se partió.

El marine observo esto con un poco de satisfacción, los mugiwaras como Nami y Usopp se escondieron detrás de Lu de nuevo, pero ese par debería de saber que ese plan no les funcionaba muy bien a ellos, porque los tres comparte estatura similares, a diferencia de Chopper.

Zoro estaban también en silencio analizando la situación apoyado en la otra pared, con sus katana enfundadas, se pregunto que es eso de Nuevo Mundo.

–Al final no importa –respondió Crocodile ensanchando los hombros como un gesto de tranquilidad –de hecho, debería darte las gracias.

Ace hizo una mueca escuchando la fastidiosa risa de lagarto–no gracias.

–¡Que es tan gracioso! –dijo Lu entrecerrando los ojos, Usopp temblaba detrás de su capitán, mientras Nami pensaba porque me uní a esta tripulación.

–La ignorancia que poseen –respondió Crocodile sonriendo mientras se acercaba a la mesa–pero hablaremos de eso cuando llegue la invitada de honor.

Lu se rio mientras Ace y Zoro sonreía sutilmente; Nami se preocupaba con la mirada soportando las ganas de golpear a Lu, porque ella se tenía que reír de todo; y Usopp hacia algunos gesto para acallar a su capitán.

–Espero eso con ansias –dijo Lu quitándose las lágrimas de la risa– preferiría pelear contigo ahora pequeña lagartija.

Crocodile le dio una mirada severa a Lu, Usopp grito.

–Porque me molestaría en pelear con un don nadie –dijo el shishibukai dándole una mirada de completo desprecio al joven mugiwara, como si fuera una vil cucaracha en su zapato.

Lu se señaló luego sonrió ampliamente y se voltio hacia su tripulación, ignorando los gestos y palabras de Usopp que le decía que no hiciera enojar más al shishibukai, Nami estaba a lado del tirador cruzando los brazos en desacuerdo con su capitán, Lu sabía que la navegante se estaba frenando y que en realidad quería darle unos buenos puñetazos, por buscar más problemas de lo que supuestamente tenían, Zoro estaba tan tranquilo que se había sentado, solo esperaba la respuesta de Lu.

La mugiwara estiro sus manos hacia arriba y exclamo– ¡chicos juguemos a las imitaciones!

Nami y Usopp regañaron a Lu mientras ella solo sonreía y reía, eso fue suficiente, la navegante no se contuvo y golpeo en la cabeza a Lu, Usopp también lo hizo, en serio pensaron los dos mugiwaras al mismo tiempo, Lu/Luffy lo hace apropósito, ella se lo busco, lo tiene bien merecido.

Zoro bostezo y cerró los ojos, evitando reírse, se preguntó si sería capaz de sentir el peligro si se mantenía así.

Ace vio la situación y no pudo culpar a los nakamas de su hermana, si estuvieran en otra situación, él también la golpearía, Lu es experta en sacar de quicio a los demás. El pecoso noto que el gesto de los nakamas de Lu hizo que el marine y el shishibukai frunciera más el ceño, el perro del gobierno tenia la intención de mover su mano.

–Ni lo intentes, Crocodile –dijo Ace mirando con mayor recelo a shishibukai, dejando un poco al marine de lado.

El shishibukai detuvo el gesto y volvió a mirar al problemático miembro de la tripulación de Barbablanca ignorando a los demás inútiles de la jaula.

–Intentar que –repitió el pirata con un garfio por mano.

–Lastimar a mi pequeño y fastidioso hermano.

Crocodile levanto una ceja podía ver el parecido entre los jóvenes, ambos tienen rasgos físicos parecidos y se nota desde lejos que son bobos sentimentales, le sorprendió que Barbablanca… no en realidad es el tipo de personas con las que ese anciano maldito se rodea, personas estúpidamente sentimentales, podría aprovechar esa debilidad, si fuera necesario, hecho que dudaba profundamente el shishibukai que fuera a pasar.

Nami golpeó en la cabeza a Zoro–¡No te quedes dormido! ¡No es momento! ¡Idiota!

Sabo estaba acostumbrado a siempre ir en contra del reloj, pero esta era la primera vez que le invadía este tipo de angustia por separación, ahora que había recuperado sus recuerdos, que sabia que tenia dos hermanos, se preguntó si ellos sentiría lo mismo que él, esta era la primera vez que se separaba durante tantas horas de ellos luego de su recuentro y para nada se sentía tranquilo, aunque trato de darle esa impresión a Viví, dejar a sus dos hermanos enfrentar a un shishibukai no lo tranquilizaba, claro era seguro que Ace era capaz de enfrentarse al perro del gobierno, y también Lu ya no era esa niña incapaz, que los necesitaba todo el tiempo, pero el shishibukai se mostro astuto y las personas astutas debía ser un gran problema para sus dos descuidados, torpes y locos hermanos.

Hay demasiada variables que no podía predecir ni controlar, siempre es así pensó Sabo, cuando Viví se marchó, su fachada tranquila se resbalo, el revolucionario lo sabía, la princesa sin saberlo le daba una razón para seguir, e ignorar ese enorme nudo en la garganta que le hacía pensar que se estaba ahogando, un ataque de ansiedad se regañó Sabo a sí mismo, como podía dejar que esto le afectara, hasta llegar a ese punto, recordó la estrategia que Koala usaba para salir de sus ataques de ansiedad; insistiéndole a su mente que él puede respirar nada se lo impide, sus hermanos están bien, los demás también, él llegaría con los rebeldes, está montando a Pestaña, luego de sobornarlo con puros puñetazo, el camello galopa, se concentró en sentir sus manos por un rato… hasta que Sabo podía sentir de nuevo el control sobre sí mismo, ya podía respirar, controlar su haki, cuando viera a Koala de nuevo en definitiva la abrazaría.

Nico Robin entra a la oficina en el sótano secreto de Crocodile:

–Trajiste a la invitada de honor –dijo el shishibukai mirando a su subordinada, sin darse cuenta de que a su espalda Lu le sacaba la lengua junto con Usopp, mientras Nami suspiraba con cansancio y miraba de nuevo las cosas de valor de la habitación.

Robin encogió un poco los hombros –parece ser que la princesa, junto con su ultimo aliado en la tripulación mugiwara no pisaron esta ciudad, Mr. 0.

Los mugiwaras rieron sin poder evitarlo a igual que Ace, llevaba bastante rato esperando a que el hombre con cara molesta constantemente se diera cuenta de eso, esa cara ahora parece a ver olido mierda.

Crocodile sentía latir su corazón velozmente, y sin pensarlo mucho mando una ola de arena en dirección a la jaula, que se topó con el humo y el fuego junto con el tedioso kairoseki. Los tres usuarios se debilitaron por un momento, pero no flaquearon.

Crocodile escucho dos gritos, llenos de miedo, un ruido impertinente y una risa muy molesta, que para ese momento parecía conocer muy bien, y eso no le dio nada de satisfacción al shishibukai, como un grupo de don nadies se atrevía a intervenir en su operación Utopía, malditas cucarachas, aun no los había lastimado, debía de agradecerle al kairoseki por eso, y no se podía desquitar aún con Nico Robin por su inutilidad, esa mujer y su falta de iniciativa, pero ella era la única que podía guiarle a Plutón.

–Avise a los Millón entre los civiles y el ejército rebelde y real de asesinar a la princesa sin la ven –informo Robin con voz plana, lo que levanto la comisura de los labios de Crocodile un poco, tal vez no tenia tan poca falta de iniciativa.

Los mugiwaras y Ace gritaron indignados al igual que Smoker, quien acababa de procesar la relación existente entre la princesa de esta nación con los piratas mugiwaras, porque estos sucios piratas se preocupaban por la princesa si estaba muerta, ella no les pagaría dinero por protegerla, eso tenía que ser la razón, Smoker no quería pensar en otra posibilidad, la princesa no pudo confiar en la justicia, para ayudarla porque la basura que son los shishibukai tiene permiso del gobierno.

–Mr 0., debería adelantarme y encontrarse con su invitado de honor en la capital…

–Miss All Sunday, iremos los dos, aquí ya no queda nada –dijo Crocodile haciendo un gesto para que Nico se adelantara hacia la salida, nunca dejaría a esa mujer a solas con Cobra, era demasiado peligroso.

Crocodile miro a los condenados –mugiwara deben confiar mucho en ti –hizo una pausa antes de despotricar –confianza –soltó una risa fastidiosa –es lo más innecesario del…

La mugiwara lanzo un puñetazo entre la rendija que atravesó a Crocodile, el hombre de la cicatriz en la cara agarro el brazo de la mugiwara y lo deshidrato con la intención de terminar el trabajo, pero sintió algo amenazante, eso era… Crocodile soltó el puño, haki, el tembló, no, no podía ser, haki del Rey, ese inútil probablemente hubiera lastimado a su tripulación si así fuera, debía de ser Puño de fuego.

Los mugiwaras gritaron, Ace aparto a su hermana, colocándose en frente de ella, examino el brazo izquierdo de Lu que estaba inutilizado, todo el brazo se veía en un estado muy frágil.

El marine veía la escena con indiferencia pensando que mugiwara no era nada inteligente, pero la reacción del shishibukai lo dejo pensando porque no termino el trabajo, porque tembló, que hizo ese flacucho o fue Puño de Fuego.

–¡Que decía comandante de la segunda división de Barbablanca! –dijo Crocodile riendo, quitándose esa sensación molesta, si Puño de Fuego era el responsable, tenía poca importancia, su haki no era suficientemente fuerte para detenerlo y si el otro mocoso mugiwara era el responsable en definitiva no lo dominaba, y ni siquiera parecía consciente de eso.

–¡Estas muerto! –soltó Ace pegándose a los barrotes de kairoseki estirando los brazos con unas ganas de alcanzar al shishibukai, ignoro el cansancio, y deseo que los barrotes cambiara de aspecto a cualquier animal o flor. Nada paso, ridículo y estúpido poder. Se sintió realmente débil y se maldijo a sí mismo por no tener un mayor control de su haki del rey sin tan solo pudiera enviar una ola concentrada sin lastimar a lo que le rodean, lastima que no estaba a solas con el marine y el shishibukai.

–Ace apártate –dijo Zoro dando un paso hacia adelante desvainando sus tres katanas.

El joven comandante con la mirada le prometió una lenta muerte al shishibukai y se volvió hacia Lu de nuevo para seguir observando el brazo inutilizado, Ace se preguntó si era posible que el brazo de Lu se salvara por la habilidad de su hermana o inutilizando al hombre de arena.

–No puedes cortar el kairoseki Roronoa, es más duro que el diamante –menciono Smoker a ver la intención del espadachín.

Zoro miro al marine, gruño con fuerza, queriendo ignorarlo, pero un momento después las palabras de Ace le confirmaron ese hecho, así que el espadachín contuvo su propio deseo de sangre, no pudo evitar pensar en la reacción de cocinero y el médico, el primero le reclamaría como si el fuera el responsable de eso y el segundo junto con el ceja risada también no dejaría de llorar por el brazo de Lu y su capitán solo sería ella misma.

–¡Luffy vas a estar bien! –exclamo Usopp buscando algo en su bolsa de herramienta debía tener la cantimplora con agua si rociaba a Luffy su brazos se recuperaría, si eso debía suceder, sería muy sencillo, todas las frutas de diablo deben tener debilidades muy tontas.

–Lu recuéstate, idiota capitán –ordeno Nami con una mirada de preocupación.

Usopp encontró vacía la cantimplora y soltó un grito desesperado.

Lu miro a todos con cara de fastidio –¡es solo un estúpido brazo!

Ace vio a su hermana y no pudo evitar querer golpearla con una muy buena cantidad de haki infundida, porque tenía que menospreciar su integridad física, así como así. Esto seguramente era por el brazo de Shanks… le dieron gana de sacudir a Lu y decirle que no era su culpa, ella lo sabía… en dado caso si alguien tiene que cargar con esa culpa debe ser él, por no estar con ella ese año, por tener ese estúpido orgullo y no tragárselo como un buen hermano mayor, no la protegió, la dejo sola a diferencia de Sabo, si los tres hubieran estados juntos todos ese año, Lu nunca hubiera sido tomada por eso bandidos o por los piratas de Bluejam más tarde, porque él y Sabo los hubiera detenido… no te arrepientas de tu elecciones se regañó Ace mientras sacudía la cabeza de forma negativa.

–En verdad, me fastidian los piratas como ustedes –dijo Crocodile mirando con deliciosa crueldad a la tripulación–pero les daré, un poco de crédito –rio con una suavidad cruel –me han fastidiado por un momento, seré amable y le daré a la princesa de Arabasta la noticia de sus muertes –Crocodile saco una llave y la dejo caer en una trampilla en el suelo –esa era la llave de su jaula y con eso los he condenado–dándose la vuelta para marcharse de la habitación activo la autodestrucción de su sala secreta con un botón que saco de uno de sus bolsillo y el pirata se fue ignorando los gritos de los futuros muertos. Como deseaba Crocodile ver las miradas temerosas de los piratas cuando murieran, junto a sus gritos ahogados, seria música para sus oídos, pero su prioridad era deshacerse de la princesa, interrogar a Cobra y obtener Plutón.

En el pasillo Crocodile se topó con la tranquila Nico Robin que lo esperaba apoyada en una puerta. El malvado par se alejó, luego de una charla, en la que Nico indico que algunos de los Millón le comunicarían el cambio a los Numbers.

Paso un poco de tiempo y se abrió la puerta contraria en la que había estado recargada Robin, de ahí se asomaron Mr. Prince y el doctor Chopper; Sanji trataba de apartar de una de sus piernas al pequeño reno, diciéndole que se movieran porque necesitaba rescatar a Nami chan y Lu chan, los dos se miraron y agradecieron mentalmente a la extraña mujer o la bella dama, la oportunidad de salvar a sus nakamas. Para el cocinero era un gran honor que la bella dama le diera esa opción, más cuando él ya tenía un plan, fue una señal de un amor destinado, solo faltaba la aprobación de la hermosa Lu chan.