— Él y yo solo somos amigos... Y esa barrera no se va a cruzar —le aclaró a todos con una sonrisa, y al final todos le creyeron, sin dejar de lamentarse por el chico en cuestión quien al parecer fue dejado en la temida "zona de amigos".

— Oh, Ren, lo siento... Ni si quiera disfrazado tuviste avance... Estás en la "zona de amigos", amigo... —Yashiro le daba palmadas a Ren, y él sonreía resignado.

— Pero regresando a tu problema —Kyoko mira a la cámara—, un beso, aunque solo haya experimentado uno en la vida —se sonrojó— Nace del corazón, no es algo que se fuerza o se haga conscientemente y no tienes porque apresurarte, todo a su tiempo... No tienes que ir al ritmo de los demás, anda a tu propio ritmo y... Si él te quiere, te aceptará...

Todos se quedaron embelesados por la inesperada dulzura de Kyoko, y hasta Hana empezó a sentirse celosa de que alguien pueda ser más "kawaii" que ella, así que decidió volver a llamar la atención.

— Bueno... Es el momento de... ¡Recibir al primer invitado sorpresa! —anunció Hana muy entusiasta.

— En este sobre tenemos el nombre del invitado misterioso del que ni si quiera nosotras conocemos su identidad —Kanae dio un coqueto guiño, embobando al público masculino— ¿Nos harías el favor, Kyoko-san? —le sonrió extendiéndole dicho sobre.

— De acuerdo —respondió con una sonrisa tierna que despertó un grito "moe" interior en los presentes, y causando otra vez celos en Hana— ¡El invitado sorpresa de esta mañana es...!—abre el sobre, lee el nombre, y se quedó helada.

"No... ¡No es posible! ¡No!"

— ¿Y bien, Kyoko-san?

Kyoko tomó un respiro y, usando todas sus habilidades de actuación para no mostrar su desagrado, lo anunció.

— Fuwa Sho.

— ¡Fuwa-kun, es tu hora! —decía un miembro del staff.

— De acuerdo. —Sho se preparaba para aparecer, con una sonrisa de esas peligrosas.

— ¡Sho! —Shoko lo jaló del brazo para darle una última advertencia— Por favor, te lo pido encarecidamente, no hagas una locura.

Sho la miraba con sorna, ya tenía puesta las cuerdas para bajar al escenario.

— No prometo nada.

Al instante desde el techo descendía en un traje negro, formal, con el ego por los cielos, posando con su mirada hacia el suelo, supuestamente pues en realidad se la dirigía a Kyoko, y rayos, vientos y truenos comenzaron a sonar acompañado de los gritos del público enloquecido y las luces parpadeaban dando ilusión de tormenta en el estudio. Pero eso solo fue hasta que sus pies llegaron por fin a tocar el suelo, pues en ese entonces todo se quedó en silencio, las fans se quedaron calladas, y todas las luces se apagaron de pronto dejando todo en oscuridad, a excepción de una tenue luz que comenzaba a intensificarse sobre él.

— Ok, ok —fue lo que dijo y la música empezó a sonar.

Esa melodía era de su último éxito, la canción que le dio su gran entrada a la música coreana. Y es que se estaba esforzando en hacerse más grande para enseñarle a Kyoko de lo que era capaz. Esa canción era para ella... Claro que no quiso admitir esto en voz alta y quizás jamás lo haría. Por ese propósito aprendió coreano y, con uñas y dientes, se metió al mercado internacional. Todo el público femenino comenzó clamar su nombre, y Kyoko se tensaba cada vez más.

Ya terminó

Voy olvidar

De mi mente te estoy borrando

Fue tan largo y tan difícil

Pero diré adiós al fin

"Demonios... ¡¿Por qué?! ¡¿Por qué demonios estás aquí?! ¡Shotaro!"

Kyoko estaba nerviosa y miró a Kanae pidiendo auxilio, con un pequeño toque de reclamo. A esto Kanae solo le respondía con una miraba sorprendida e irritada, obviamente ni Kanae ni su compañera, porque Hana tampoco parecía estar muy tranquila, sabían que Sho era el invitado sorpresa... Y era de esperarse porque eso era algo que solo los productores del programa sabían.

Mas los recuerdos

Tu recuerdo

Me está volviendo a rodear

Incluso si doy un paso para andar

De ti me vuelvo a llenar

Sho miraba afligido a la cámara mientras cantaba y hacia ligeros movimientos al ritmo de la música. Lentamente se acercaba a las chicas, a sus asientos, se paseaba alrededor de ellos, y entonces se acercaba al de ella, haciendo que dé un respingo al sentirlo cada vez más cerca. Sho sonreía para sus adentros pues notó la incomodidad y nerviosismo en ella, lo que infló más su seguridad y ego.

"La tengo"

Y es que luego de esa inconclusa despedida

Mi destino y mi luz es incierta

Intenté alejarme de ti

Intenté escaparme de ti

Pero en el fondo no me quiero ir

Mientras Sho cantaba esto, la había tomado de la mano y la había besado, ella se quedó tiesa, totalmente impactada, y antes de que pueda reaccionar él al instante la jaló, levantándola, haciendo que queden parados frente a frente, con sus cuerpos juntos; él abrazándola por la cintura y mirándola fijamente, logrando un grito en el público y que ambas conductoras queden con la quijada colgando y una mirada feroz, por distintos motivos.

Y a pesar del tiempo

Mi jaula es tu mirar

Kyoko reaccionó y lo empujó, provocando exclamaciones de asombro en el público. Luego comenzó a caminar firmemente, pero con estilo, para salir del plató. Frustrando sus planes, los trabajadores no la dejaron y la situación empeoró cuando aparecieron bailarines y prácticamente la alzaron y la llevaron de nuevo al centro del lugar, donde la esperaba él.

Kyoko pedía socorro a Kanae con la mirada, y ella no sabía qué hacer hasta que le llegó una idea y con los labios, esperando a que a pesar de la oscuridad Kyoko pueda leerlos, le decía que baile... Seguramente para disimular.

"¡¿Bailar?! ¡¿Qué?! ¡No tengo ni la menor idea de cómo hacerlo?!"

Entonces Sho daba vueltas a su alrededor mientras seguía cantando, le ofreció una rosa que sacó del bolsillo, ella la tiró y lo miraba fulminante, intentó volver a escapar, él le sonrió ladinamente y la jaló para sí, y era casi como un tango, casi como si lo hubiesen planeado, pues los intentos de Kyoko por escapar y el cómo Sho se aferraba y no la dejaba escapar, el cómo se miraban, iba muy a juego con la canción, y para colmo sus movimientos eran rítmicos... ¡Estaban bailando!

O eso parecía pues Kyoko, a pesar de que quería escapar, no quería un escándalo. Entonces como podía, seguía el consejo de Kanae y con mucho esfuerzo recordaba sus poses de modelo como referencia para, al ritmo de la música, usarlas con gracia. Así empezó a moverse y finalmente todo comenzaba a parecer parte de una actuación, como si lo hubieran ensayado.

Yashiro estaba con la quijada abajo, totalmente nervioso. Intentaba decir algo que exprese su sorpresa y descontento, pero no salían palabras, miraba de reojo a Ren, quien felizmente estaba filmando y se fue justo antes de que anuncien al invitado sorpresa.

"Me cuentas lo que sigue..."

Le dijo con una sonrisa, pero...

¡¿Y ahora?!

¡¿Qué iba a decir?!

¡¿Qué rayos iba a decirle ahora?!

¿Que Fuwa estaba bailando muy coquetamente con Kyoko en televisión?

¡Ni que fuese un suicida!

Solo había una cosa que Yashiro sabía en ese momento y era que Ren no iba a tomar bien esa noticia y que por eso mismo no quería ser el que se la dé.

¡Temía por su vida!

Yashiro miraba sin poder creerlo, tampoco quería creerlo.

Kyoko meneaba el cuerpo sensualmente mientras empujaba a Sho e intentaba salir de ahí, pero en su último intento Sho le dio vuelta, la cargó, y, como típico final de una danza romántica, ella terminó colgando en sus brazos, con los rostros a una mínima distancia... Así terminó la canción, siendo la música reemplazada por gritos y aplausos.

— ¿Y que sucedió, Yashiro-san?

Yashiro al escuchar esa voz venir de su espalda, escupió, como acto reflejo, toda la bebida que tomaba para calmarse un poco de lo que estaba viendo en... ¡Su propia laptop!

Al instante la pantalla quedó en negro y algunas chispas salieron.

— ¡Mi laptop!

Yashiro se lamentaba y Ren lo miraba totalmente asombrado y preocupado, pero no precisamente por la máquina de Yashiro. No, él no sabía si había sido su imaginación o no, solo fue un periquete, de seguro menos de un segundo.

Pero lo vio.

No, se decidió no preocuparse, no por el momento.

No, tal vez solo está demasiado preocupado, tal vez muy nervioso con alejarse tanto de Kyoko.

Sí, tal vez era eso, pero si de algo estaba totalmente convencido era de que no debía dejar a Kyoko más tiempo "sola" respirando el mismo aire que "ese chico".

— Yashiro...

La voz de Ren era terrorífica, casi como un rugido, y Yashiro se giró lentamente.

"¡¿Lo vio?! ¡No! ¡No puede ser! ¡No!"

— ¿Sí, Ren...? —le respondió nerviosamente, con los parpados apretados, como si estuviese a punto de recibir un golpe.

— Si para pasado mañana no terminamos la filmación aquí, por favor, adelántate a Tokio.

Fue lo único que dijo, dio media vuelta, tomó un trago de agua embotellada y con fuerza la dejó sobre una mesa de golpe, causando en esta un pequeño temblor que asustó más a Yashiro, mientras que él, suspirando, miraba como su representado se alejaba.

— Ren... Ya ni si quiera te preocupas en intentar guardar las apariencias...

Ren caminaba por el estudio y se detuvo en uno de los pasillos, estaba vacío, vio un pequeño asiento y se sentó ahí. No quería hacerlo, sinceramente no, pues quería probar. Una pequeña prueba, si tal vez ella, por su propia voluntad, lo llame primero y que no sea por trabajo ni por preocupaciones alimenticias, que sea solo porque quiera hablarle, solo por escuchar su voz, solo porque sí... Pero fracasó, sin darse cuenta ya la estaba llamando. Timbraba y timbraba pero ella no respondía, su celular estaba encendido, pero no respondía. Y claro, lo pensó, seguro seguía en la entrevista, así que decidió esperar, sin duda ella le devolvería la llamada en los cortes comerciales. Esperó y esperó, pero aunque en realidad no fue mucho tiempo, para él pasaron siglos, milenios, una eternidad, por lo que luego de un suspiro frustrado volvió a marcar. En ese momento en el que estaba por cortar para volver a marcar, de pronto escuchó una risita.

— Parece que hasta para Tsuruga Ren hay momentos difíciles —Ren se giró y se encontró con una persona inesperada, que sonriendo caminaba hacia él lentamente con dos botellas de bebida helada en las manos, curiosamente era la favorita de Kuon— Esto al menos aliviara el calor —le extendía una de las botellas, mirándolo fijamente.

Y volviendo con Kyoko, sí, Ren no se equivocó, estaba en medio de una batalla de miradas y palabras, es decir, en medio de una entrevista. Pero ya no sola. No, no, Shotaro estaba metiéndola en un problema más grande que el anterior.

— ¡Vaya! ¡Esa actuación fue fantástica! —Hana aplaudía, pero claro que en realidad no pensaba lo mismo que decía— ¡¿Será que para Kyoko-san el invitado no era sorpresa?!

"¡Sho-kun! ¡Qué barbaridad! ¡¿Cómo puedes hacerle esto a Mimi-chan?! Mimi-chan, lo siento, ojalá hubiese sabido que Sho iba a venir aquí, así hubieses venido tú y no... ¡Esa malvada bruja!... Ay... Seguro Kanae-san también era parte de todo esto... ¡Seguro todo fue un plan!"

— Pues... — Kyoko iba a hablar, pero Sho la interrumpió.

— La verdad sí fue una sorpresa, no le dije nada a Kyoko... Tal vez simplemente nos dejamos llevar...

Kyoko y Kanae pusieron los ojos en blanco internamente, pero entonces se dieron cuenta... ¡Sho le dijo por su nombre!

¡Por su nombre!

Al instante todos quedaron sorprendidos, y el público comenzó a murmurar.

— Oh, así que ya se conocían —Hana decía con malicia, aunque extrañamente sonaba muy dulce, pues quería vengar a su amiga y ya se le había ocurrido cómo—... Debí suponerlo... Parece que se tienen mucha confianza... .

Kanae la miró desafiante y entonces decidió que iba a salvar a la suya.

— ¡Oh! ¡Claro que sí, Hana-chan! ¡¿Acaso olvidaste Prisioner...?! Kyoko-san apareció en el PV, trabajaron juntos...

— La verdad —sonríe, se cruza de piernas y le agarra la mano a Kyoko, haciendo que ella se gire a verlo por completo pasmada— Nos conocemos de más tiempo —la mira fijamente—... ¿Cierto, Kyoko?

"¡Ay! ¡Niño! ¡Niño! ¡Niño! ¡No! ¡¿Por qué haces justamente lo que te digo que no hagas?! ¡¿Por qué?!"

Shoko ya se golpeaba la cabeza con sus puños desesperada. Estaba con migraña por culpa de ese "niño", al tanto que a Kyoko... Literalmente a Kyoko se le salió el alma del cuerpo, tenía unas ganas de darle una bofetada, pero todos estaban mirando y no tenía ni la menor idea de que hacer o decir.

— ¡Cielos! —se cubrió la boca con ambas manos y luego miró a la cámara sobre-actuando— ¡¿Esto será cierto?! ¿Es así? Oh... ¿Es verdad? ¿Podría ser? —Hana actuaba como si estuviese sorprendida, y luego miró con seriedad a Sho y a Kyoko, quien a través de sus ojos le conjuraba mil maldiciones al primero— Un pajarito me acaba de decir que ustedes dos... ¡¿Salían en el pasado?!

"No... ¡No! ¡No! ¡No! ¡Sho! ¡Más te vale no hacer lo que creo que estás por hacer! ¡Más te vale!"

Hubo un silencio, Sho estaba por hacer justamente la locura que Shoko más se temía, mientras la pobre mujer se mordía las uñas en el backstage.

"Qué... ¡Qué imbécil! Kyoko... ¡Kyoko maldita sea di algo que ya no te puedo salvar!"

Kanae sonreía, pero por sus adentros estaba en tensión absoluta, y de repente Hana hizo como que su móvil sonaba, lo sacó de su bolsillo y actuó como sorprendida.

"Interesante... Bueno, siempre es bueno aclarar los rumores..."

Sho lo iba a hacer, estaba por hablar, pero entonces unas risas resonaron por todo el set. Era Kyoko, y todos se quedaron viéndola confundidos y algo pasmados.

— ¡No! ¡Basta! —reía cada vez más escandalosamente— ¡Nunca me había reído tanto en mi vida! —volvió a carcajear— ¡¿Yo...?! ¡¿Yo y este tipo?! —le dio una fuerte palmada a Sho en el hombro, tan fuerte que casi hace que se caiga de cara, mientras seguía en risas— ¡¿De dónde salió eso, Hana-chan?! —volvió a casi morir de la risa, y cuando se recuperó continuó— Ay... Ay... Bueno, tengo que admitir que es cierto que nos conocemos de antes —suspira—... Pero... ¡Créanme! Solo asistimos a la misma escuela... Y ni me imaginaba en esos tiempos que ese niño se convertiría en... "Fuwa Sho"...

Esa respuesta dejó tranquilos a los espectadores, y tanto Kyoko como Kanae quedaron aliviadas por ese hecho y pensaron que ya habían superado lo peor.

Vaya que se equivocaron.

Esa respuesta de Kyoko para nada dejó tranquila a Hana, mucho menos a Sho. No, claro que no, y Kanae observaba a ambos mencionados atentamente. Sho, mientras más resonaban las palabras de Kyoko en su cabeza, más irritado y algo dolido se sentía. Tal vez esperaba otra cosa, algo demasiado grande quizás. A Hana no le gustó procesar lo que escuchó, pues cuando eso sucedió su pequeña mente lo relacionó con la historia que poco antes contó sobre su primer beso con "un viejo amigo" hace tan solo unos meses. Eso claramente no le gustó nada, así que tuvo que confirmarlo.

— ¿Puede ser que...? —Hana decía esto sorprendida y preocupada—¿Sean algo así como amigos de la infancia?

Kanae esperaba la respuesta de Kyoko y a la vez no apartaba la vista de Sho, quien luego de la pregunta soltó una pequeña risa... Iba a hacer algo.

— Sí, sí... Algo así... —respondió Kyoko desinteresadamente.

"¡Mimi-chan! ¡Lo siento! ¡Esta bruja ya lo besó!"

Hana estaba abatida por Mimori, y le lanzaba sonrisas con unas disimuladas miradas asesinas a Kyoko y a Sho.

"¡¿Cómo pudiste hacerle eso a Mimi-chan, Sho-kun?!"

Kanae, al ver las expresión de su compañera y la de Sho, se dio cuenta de la conclusión a la cual llegaron y a la cual cualquiera que no conozca bien la historia, al igual que esos dos, llegaría.

"¡Kyoko! ¡No! ¡Tonta! ¡Por dios!"

Kanae quería darse de cabeza con la mesa, pero seguía con su sonrisa a la cámara, como si nada. No le gustaba nada la dirección que estaba tomando el asunto y menos la sonrisa de Sho pues sabía que él estaba por hablar, seguramente para insinuar cosas a diestra y siniestra como lo anduvo haciendo, y Kyoko... ¡Kyoko sin darse cuenta del todo!

Bueno, Kanae la iba a salvar, así que antes de que la gente se dé cuenta de lo que esa afirmación podría dar pie y empiece a especular, cambió el tema con una impresionante habilidad.