Este fic participa en el minirreto de marzo para La Copa de la Casa 20/21 del foro La Noble y Ancestral Casa de los Black

Objeto sorteado: árbol cantor (de la Historia del pájaro que habla, el árbol que canta y el agua de oro de las Mil y una noches)

Utilicé mi extra de palabras.

Mil gracias a Nea por betearme la historia

Did you finally get the chance

To dance along the light of day

And head back to the Milky Way?

And tell me, did Venus blow your mind?

Drops of Jupiter (Train)

El baile

Pandora Lovegood siempre decía que cuando uno actuaba sin pensar, la magia era la que tomaba el mando del cuerpo. Por eso le gustaba tanto bailar, perderse en el sonido parando su mente por unos segundos. Luna la recuerda dando vueltas en su taller al son de la música más caótica que encontraba, arrastrándola a ella y a su padre a esa danza infinita.

—La magia ya está dentro de ti, Luna —solía decir cuando Luna le pedía una varita—. No necesitas nada para convocarla, solo dejarte llevar.

Fue esta magia la que le hizo coger la pequeña maceta que ahora tiene en su habitación, del taller de su madre. La pequeña cabaña, que de pequeña le había parecido la entrada a un mundo de fantasía que tenía que ir descubriendo poco a poco, sin su madre parecía desmoronarse poco a poco. Lo que antes se mantenía en un equilibrio mágico, se doblaba hacia los lados y todo lo que parecía brillar, había terminado absorbiendo toda la luz de la estancia. Finalmente, su padre había decidido donar todos los artilugios y dejar la cabaña vacía.

—Ya no queda nada de ella en estos objetos, Luna. No tiene sentido buscarlo.

El estómago de Luna protestaba cada vez que entraba en la cabaña, como si quisiese protegerla del lugar, así que lo entendía. Su madre ya no estaba allí. Pero aún así le parecía una traición deshacerse de todo por lo que su madre había trabajado tanto, así que le pidió a su padre quedarse algo. Xenophilius aceptó, pero cuando Luna se encontró en medio del taller, no supo qué escoger. Había tantas cosas de las que guardaba recuerdos, tantas que parecían de otro mundo, que era imposible elegir. Así que, como su madre decía, se dejó llevar por la magia y acabó delante de la maceta del árbol cantor.

Su madre le había hablado de una princesa, cuyo nombre nunca recordaba así que la llamaba Luna porque decía que se parecía a ella, que había logrado llegar al árbol cantor solo con su inteligencia y siendo capaz de pensar más allá de los límites. Era uno de los mil cuentos que le contaba su madre y ni siquiera era de sus favoritos, pero ese día, el árbol la llamó y su música le pareció más melódica que nunca.

Y ya no puede dormir sin esa melodía. La canción del árbol no tiene letra, pero Luna siente que le está contando cosas: historias sobre lugares que nunca había visto; el árbol tiene muchos más años que ella, historias sobre su madre y acerca de cómo consiguió hacerse con una rama del árbol original para plantarla en esa maceta y sobre otras personas que habían llegado hasta él. También entona cantos de soledad, sobre gente que se ha ido y que no volverá nunca y en esos momentos, a Luna se le agarra el corazón, pero sabe que es un dolor bueno, uno que en algún momento tiene que soltar y que el árbol la está ayudando.

Pero sin duda sus momentos favoritos son cuando su cuerpo empieza a moverse solo, siguiendo el ritmo de la canción sin ella pretenderlo. Y cada vez va a más y a más. Al principio solo mueve la cabeza al son de la melodía, pero de repente sus hombros le siguen y sus piernas, empezando por sus pies, empiezan a pedirle que salte, que gire por toda la habitación hasta caer rendida. Y ella, porque es digna hija de su madre y siente la magia pidiendo permiso para entrar, acepta y comienza a bailar.

Nota de autora: el árbol cantor me trajo por el camino de la amargura al principio, pero la verdad es que me ha terminado gustando mucho (y la historia de la que viene también, la recomiendo mucho). De la princesa de la que se habla es de la protagonista del cuento original, que va a buscar el árbol cuando sus hermanos fracasan (y terminan convertidos en piedra, una larga historia) y consigue llegar y salvar a sus hermanos. El resto de detalles dejaré que los descubráis buscando la historia.

El compositor de la canción que he puesto se la dedicó a su madre después de que esta falleciese y la canción habla de ella viajando por todo el universo tras su fallecimiento y bueno, creo que es algo muy Pandora. Me ha gustado mucho escribir sobre Luna, que no es un personaje sobre el que suela escribir, y bueno, a Pandora la adoro, aunque no llegue a salir en la historia (más o menos).

¡Mil gracias por leer!