-Te espero afuera- dijo Rachel, cerrando la puerta
Suspiro tratando de bajar un poco la calentura que le dio ver a su esposa en esa situación y fue por un vaso de agua.
En la habitación, Quinn tomo la almohada para gritar su frustración y se levantó para tomar algo de ropa.
Rachel tomaba su segundo vaso de agua cuando vio salir a la ojiverde de la habitación con una bata puesta.
-Hola, siento mucho la interrupción, olvidaste tu celular, subí a regresártelo, encontré la puerta mal cerrada y me asuste, lo siento mucho –
-No pasa nada, fui descuidada al no cerrar bien la puerta – dijo sin mirar a la morena
-Oye, ¿tengo que preocuparme porque Santana te vaya visto igual que yo?-
-No quieres escuchar la respuesta – dijo sirviéndose un vaso de agua
Rachel no quiso averiguar más, esa respuesta le daba una idea
-Santana es muy inoportuna, tiene el toque de llegar a interrumpir…creo que huele cuando tengo sexo, sabe en qué momento arruinarlo–
-Lo recuerdo, nos cortó el rollo varias veces – dijo recordando, la ojiverde asintió – Si quieres puedes venir al departamento –
-¿Al departamento? –
-Sí, ahí puedes ir y…sacarte las ganas sin interrupciones, yo no estaría en casa… –
La ojiverde sonrió
-La verdad, sólo espero que sea una etapa…porque no sé cómo manejarlo – camino hasta sentarse en el sofá – Hoy estaba a punto de…meterme mano en la oficina, sólo que llegaron unas chicas…Dios, jamás me había pasado esto- dijo frustrada
-¿Qué hacías en tu adolescencia? – pregunto la morena sentándose a su lado
-Nunca pensé en sexo hasta que comencé a salir con Adam, y prácticamente lo hacíamos cuando él quería…cuando me separé de él fue que Santana me regalo unos juguetes que poco o nada use hasta ahora –
-Vale, pero si bien recuerdo, muchas veces lo hacíamos porque tu querías…a veces no me dejabas ni salir de la cama – le dijo la morena
La ojiverde se tapó el rostro avergonzada
-Algo me pasa contigo que no puedo sacarte las manos de encima, simplemente no me canso – dijo mirándola a los ojos
Rachel sonrió y esquivo la mirada para evitar que mirara su sonrojo.
-Sé que quedamos en que íbamos a ir poco a poco, pero si la estás pasando mal con…toda esa calentura podemos hacer una excepción – propuso
Quinn la estudio unos segundos
-No sé si sea lo correcto…-
-No estamos haciendo nada malo, estamos casadas, somos conscientes que tenemos que trabajar en nuestra relación y créeme que si no estuvieras en esa situación no lo propondría, pero a mí me ha pasado el estar siempre caliente y no es del todo agradable, e imagino que con todas las hormonas y cambios lo tuyo debe de ser peor…-
-Creo que puedo con ella, pero yo te aviso – dijo levantándose del sofá - ¿Quieres quedarte a cenar? –
-Si, por cierto, San me dijo que no llegaría a dormir –
-Bueno, por lo menos una si se quita las ganas como debe de ser – dijo suave
Rachel alcanzo a escuchar, y rio suave.
Las chicas pidieron comida italiana para cenar. Al terminar fueron a la sala a mirar una película.
-¿Cuál quieres mirar? – pregunto Quinn sentada
-Elige tú, la otra vez fui yo, toma- se inclinó frente a ella para entregarle su vaso
Los ojos verdes se perdieron en los pechos de su esposa gracias al movimiento
-Vale – trago saliva
Propuso ver una película de suspenso y misterio. Rachel tenía su lata de soda en la mano, en un movimiento brusco de la rubia hizo que se le cayera un poco del susto.
-Lo siento, lo siento – repetía la ojiverde
-No pasa nada – dijo dejando la lata en la mesa del centro, se levantó y comenzó a desabotonar su camisa, inconsciente de la mirada de su esposa – sólo me prestas una playera…-
Lo próximo que supo Rachel, es que de nuevo estaba sentada en el sofá con la ojiverde arriba de ella.
Quinn tomo su rostro y la beso. Rachel sorprendida se dejó besar.
Los besos iban subiendo de intensidad, las manos de la monera acariciaban su espalda.
-Dios, que bien se siente – dijo bajo la ojiverde, Rachel no pudo evitar soltar una pequeña carcajada
Quinn la miro a los ojos mientras desataba su bata. Cuando Rachel vio caer la prenda de los hombros de su esposa, su vista viajo a su torso.
-Ahora no te ríes – dijo burlona
Rachel le sonrió y fue directa a su cuello, el cual besaba y mordía.
-Vamos al cuarto – dijo con la respiración entre cortada la rubia
Se levantó, tomo la mano de su esposa y caminaron a la habitación.
Rachel entro y se sentó en la cama, observo los movimientos de la rubia
Cuando Quinn se aseguró que la puerta estaba cerrada, dejo caer la bata dejando a la vista su desnudez
-Tienes demasiada ropa – le señalo la ojiverde
Rachel, como resorte, se levantó para quitarse el pantalón junto a su ropa interior.
Quinn la miro mientras se lamia los labios.
La habitación se encontraba oscura, dos cuerpos abrazados se encontraban desnudos en la cama. El sonido de una alarma hizo que se moviera uno de los cuerpos.
-Tu alarma – dijo la rubia girando, quedando boca bajo
La morena se levantó, se incorporó para apagar la alarma
-Me tengo que ir – dijo con la voz ronca
-Es temprano aún – se volvió a girar para mirar a su esposa
-Tengo que ir a casa por unos papeles e ir a la oficina –
-¿Segura que no te puedes quedar más? –
-No, debo irme – bostezo mientras se levantaba
-Hey, despídete en forma – dijo con los ojos cerrados
Rachel sonrió, se inclinó para besar sus labios
-Los quiero –
Santana entraba al departamento y se encontró a una recién bañada rubia
-Buenos días – saludo la latina
-Buenos días, ¿quieres desayunar? -
-Tu tuviste sexo, y del bueno – la miro con los ojos entrecerrados
- ¿Yo? No – se hizo la desentendida
-Joder, tuviste sexo real–
- Pero que cosas dices, sólo dormí muy bien – la latina negó – A ver ¿Por qué asumes eso? – miro a su amiga
-Soy la detectora de sexo López, nada se escapa de mi – la rubia negó divertida
-Veamos esas grandes habilidades detective, sorpréndeme – la miro con los brazos cruzados
-Primera prueba...ayer cierta morena contesto tu celular…-
-Sí, vino a entregármelo, nada nuevo –
-Segunda prueba…cenaron juntas hay loza para dos personas – señalo el escurridor – y hay empaques de comida italiana – señalo el bote de basura
-Una cena no significa nada –
Santana camino por el lugar con los brazos detrás de la espalda, analizando
-Eso es cierto, ahora me dirás que esta camisa que claramente no es tuya en el sofá no significa nada y aún tiene el olor de la morena antes mencionada –
Quinn se quitó la camisa de las manos
-Y para cerrar esta investigación con broche de oro…tienes un gran chupetón en el cuello – señalo con una sonrisa de victoria
La ojiverde se tocó el cuello y maldiciendo fue al baño
Santana regreso a la cocina con una gran sonrisa en el rostro.
El sábado por la tarde, Quinn decidió visitar a la morena en su departamento.
-Hola, adelante – la saludo Rachel – Mamá y Maddie vinieron a visitar –
-Hola –saludo la ojiverde
-Que gusto verte Quinn, tenía tiempo sin verte-
-Lo mismo digo – saludo a su familia política
Durante la cena que compartieron, Shelby invito a Quinn al festejo de cumpleaños de su mamá
-Mamá, no sé si es lo mejor, ya sabes papá…-hizo una mueca
-Nada de eso cariño, Quinn es de la familia, tu familia y si tu padre no quiere aceptarlo es asunto de él, no voy a permitir hacerla menos porque no esté de acuerdo, para mi primero está la felicidad de mis hijas –
-Eso es muy lindo mamá – dijo Maddie
Rachel miro a Quinn esperando una respuesta
-Por mí no hay problema, mañana iremos al cumpleaños de tu abuela juntas – dijo con una sonrisa que contagio toda la mesa
El domingo llego, Rachel fue al departamento de Quinn para recogerla, como aún no estaba lista entro y se encontró con Santana y Britt
-Hola Rach, quiero agradecerte por lo que hiciste con mi amiga, es una persona nueva desde entonces – dijo fingiendo demasiado agradecimiento
-Sólo le devolví el celular Santana, eso lo habría hecho hasta por ti –
-Cuando quieras – dijo coqueta
-¡Hey no! Tú no le vas a "devolver el celular" a mi novia – salió a la defensa Britt
Rachel se les quedo mirando sin entender nada
-No te preocupes Britt, a mí me van las rubias de piernas de infarto – beso sus labios
-Lo siento, ya estoy lista – salió la ojiverde de su habitación - ¿Todo bien? – pregunto al ver a las chicas
-Si, eso creo…vamos que se nos hará más tarde –
-Chicas, diviértanse y espero que de nuevo "le devuelvas el celular" – dijo Santana desde la puerta del departamento
Una vez en el auto de la morena
-¿Qué le pasa a Santana? Hoy actuaba muy raro hasta Britt me dijo que no le devolviera el celular a su novia -
Quinn no pudo evitar soltar una pequeña carcajada
-Lo siento, es que San sabe que nos acostamos, me descubrió por un chupetón que me dejaste – le recrimino, la morena regreso su vista a la carreta con una pequeña sonrisa – y no sé, supongo que el "devolver el celular" es tener sexo, por eso la reacción de Britt –
-Ahora es más claro, pensó que quería tener sexo con Santana… ¡Dios no, eso jamás! – negó moviendo su cabeza
La fiesta de cumpleaños de la abuela de la morena, era en un jardín y estaban gran parte de su familia y amigos.
La familia Berry, ya se encontraba en el lugar.
-Tengo una duda ¿diremos que soy tu esposa? No lo tomes a mal, pero no sé cómo presentarme – dijo nerviosa
Era la primera vez que convivía con la familia de la morena
-Si te soy sincera, yo tampoco lo sé…digo no me molesta decirle, pero si lo decimos y nos convertimos en el centro de atención, que estoy segura lo haremos, no me sentiré cómoda, por lo que sólo pensé en presentar como Quinn Fabray y listo, que lo demás lo resuelvan ellos – la ojiverde asintió.
Al entrar primero buscaron a la festejada, Rachel se acercó para abrazar a su abuela
-Felicidades abuela, espero que cumplas muchos años más – dijo abrazándola
-Gracias cariño, espero estar aquí cuando me hagas bisabuela – dijo entre divertida y siendo directa su abuela - ¿Quién es esta hermosa chica? –
-Abue, ella es Quinn Fabray –
Quinn se acercó para saludar
-Hola señora, mucho gusto y felicidades – dijo tímida
-Nada de señora, puedes llamarme Emma…por fin te conozco, me habían dicho que eras muy linda-
Quinn miro nerviosa a su esposa
-Le conté sobre mi heroína en las alturas – explico la morena
- Lo hizo, me estuvo toda una tarde contando los eventos, pero las palabras se quedan cortas con tu belleza además tienes una luz especial en la mirada – dijo analizándola
-Vale abuela, no queremos acapararte más tiempo, hay fila para saludarte, nos estamos viendo – dijo tomando la mano de la ojiverde que apenas alcanzo a despedirse con la mano
-No me dejaste despedirme de ella – se quejó la ojiverde
-Lo siento, pero mi abuela tiene un sexto sentido con los embarazos, un segundo más y nos descubre –
-¿Quién y que les descubren? – dijo Maddie llegando a su lado
-Nada, sólo que tu hermana quiero robarme alguno que otro beso – dijo la rubia con una sonrisa
-Claro que no…- la ojiverde levanto una ceja – bueno si, pero no aquí, no ahora…vamos a nuestra mesa que muero de hambre -
Llegaron a la mesa y se encontraron con Jake, que las saludo siendo educado. Shelby sonrió a su nuera e hija para que estuvieran tranquila.
En su mesa se sentaron unos amigos de la familia, que poco toleraban porque presumían hasta el aire que respiraban. Por lo que a la primera oportunidad Shelby y Maddie se levantaron y desaparecieron, dejando a Jake y a las chicas a la merced del señor Collman.
La plática de los señores comienza a tornarse meramente laboral, el señor Collman, como su buena costumbre, presume que su empresa es mejor que en la que trabaja Jake.
Quinn sin decir mucho, prestaba atención, pues del tema del que hablaban tenía conocimiento.
-Te digo Jake que sólo es cuestión de unos meses para que mi compañía absorba a la tuya, todas las grandes empresas buscan nuestros servicios por ser los mejores – fanfarroneo
Rachel hace un sonido de frustración, la ojiverde la mira.
-Lo siento, es que ese tipo siempre quiere hacer menos a mi papá por cualquier cosa, y me desespera – susurro por lo bajo
Quinn miro a su suegro y noto que estaba realmente incomodo
-Disculpen que me meta en su plática, pero ¿Cuál es el nombre de su empresa? – pregunto educada la ojiverde
-Se llama Transportes Collman – dijo altanero y con una gran sonrisa – somos los mejores en nuestro rubro –
-Sí, bueno…no lo creo – la ojiverde hizo una mueca
Los 3 pares de ojos que estaban en la mesa la miraron
-Pero tú que sabrás sobre negocios, eres una irrespetuosa – se quejo
-Se equivoca, se perfectamente de lo que hablan porque es mi trabajo –
-Ja…¿y quién eres tú? – el señor Collman trababa de hacerla menos
-Soy Quinn Fabray, de las empresas Fabray, y sé que no son los mejores porque buscamos recomendaciones y la mayoría de nuestros colegas nos dijeron que la empresa Collman ha caído mucho en cuanto a servicio y estaban pensando en cambiarse. Por si quiere mi consejo trate de mejorar su servicio sino quiere quedarse sin clientes –
El señor Collman se levantó sin decir nada bastante molesto
-Por Dios, jamás pensé vivir este momento, le has dado en el ego a ese señor – celebro la morena
-Lo siento – miro a Jake – no tenía que haberme metido, pero ese tipo de personas no las trago y más sabiendo que estaba diciendo mentiras, es cierto todo lo que dije y, de hecho, el lunes le iban a marcar de la empresa para ver si podemos trabajar juntos, así que le hago la invitación de una vez, ¿está disponible? – pregunto
-Eh claro…el lunes por la mañana me queda perfecto –
-Entonces tenemos una cita de negocios, yo me encargo de avisar –
-Gracias – dijo Jake sincero
-Vamos cariño, te estaba buscando – llego Shelby para llevarse a su esposo
-Gracias por "salvar" a mi papá del mal momento – dijo una vez que estuvieron a solas
-La verdad vi muy incómodo a tu papá, quise ayudar un poco y salió genial – dijo con una sonrisa
-Gracias – la morena beso su mejilla
El lunes en la mañana por la oficina, Rachel se encontraba nerviosa por la junta que tendría su padre en la oficina, era importante para el trabajo de él.
Quinn estaba en su oficina cuando la secretaria le informo de la llegaba del señor Berry, fue a recibirlo.
-Hola Sr. Berry, gracias por venir, acompáñeme a la sala de juntas –
-Gracias – dijo muy profesional
Llegaron a una sala preparada para la junta
-No tarda nada en llegar mi padre – dijo la ojiverde
-¿No estarás en la junta? –
-No, mi padre toma esas decisiones –
-Buenos días, espero no haberlo hecho esperar mucho – llego saludando Russell
-No, acabamos de llegar papá, y los dejo tengo que varios pendientes que terminar – dijo despidiéndose de los hombres
-Es un honor conocerlo por fin Sr. Berry, es increíble que, aunque somos familia no nos habíamos visto – dijo alegre
Jake saludo incómodo.
La junta fue todo un éxito para Jake, la empresa contrataría su servicio de transporte y lo recomendaría con amigos.
-Ahora que hemos dejado atrás las cuestiones laborales, quiero felicitarlo por la increíble hija que tiene, Rachel ha sido una incorporación a la empresa alucinante, es muy inteligente, analítica, creativa…los adjetivos no me alcanzarían – dijo riendo al final
-Es cierto, no es porque sea mi hija, pero es muy bueno en lo que hace – dijo orgulloso
-Pero más allá de lo laboral, como persona es aún mejor, a mi esposa y a mí nos tiene enamorados con su personalidad y el hecho de que haga tan feliz a mi hija me hace estar muy agradecido con ella-
-Si bueno…- respondió sin saber que decir
-Igual yo sé que eso de casarse a escondidas estuvo muy mal, yo como padre sueño el momento de entregarla al altar, y me lo jodio, nos lo jodieron– dijo bromeando – Y qué decir del mal momento que vivieron con la separación, a mí que me tocó verlas a ambas eran como fantasmas, me dolió mucho verlas de ese modo, pero ahora que ya están en camino a arreglarse espero que nos veamos más seguido –
-Claro, ya sabe, el trabajo siempre consume mucho tiempo – se excuso
-Su esposa siempre nos decía que estaba muy ocupado, pero es saludable darse un tiempo para convivir con la familia, tiene una familia hermosa –
-Lo sé, y gracias, creo que me tomare más tiempo para pasarla con mi familia –
-Deberíamos armar algún asado, cena en los próximos días –
-Me parece muy buena idea – contesto Jake
-Perfecto, le diremos a las chicas que lo coordines, por ahora me despido que tengo que revisar unos pendientes, un gusto Sr. Berry –
Afuera de la oficina, Quinn y Rachel revisaban unos papeles
-Tranquila, te prometo que mi papá, aunque sea un personaje de Games of Throne, entre vikingo, leñador y guerrero tratará bien a tu papá –
-Joder, ¿nunca se te va a olvidar eso? – pregunto la morena
-Obvio no, es la mejor descripción que me han dado de mi padre- dijo soltando una carcajada
Rachel golpeo su brazo suave para que se callará
-Auch, sabes que todo lo que siento, lo siente nuestro hijo – dijo muy suave acercándose a ella
En ese momento dieron la puerta abrirse y en automático la morena se alejó de su esposa.
Jake simplemente les sonrió y asintió en forma de despedida.
Feliz día de San Valentín :D
Y gracias por seguir leyendo
